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Gays, Heterosexual, Infidelidad

Los placeres del sexo entre hombres 1 (el inicio)

Y allí estaba Juan, sentado en sofa disfrutando de una deliciosa mamada de Oscar….
La siguiente es una historia de ficción basada en personajes reales.

Y allí estaba Juan, sentado en sofa disfrutando de una deliciosa mamada de Oscar…

Juan es un hombre de 36 años, alto de cuerpo atlético, tes morena, apuesto, es profesor en un bachillerato desde hace 10 años, es soltero y por ende vive solo en una hermosa residencia que mando construir en el pueblito al que llego a trabajar ubicada a las afueras, tiene alberca y un espacioso jardín, aunque su sueldo de profesor no le daría para vivir así, tiene algunos negocios extras que lo dejan vivir cómodamente.

Juan tuvo una alumna, Karla, una chica linda, morena, de 1.57 de estatura con un cuerpo lindo, bien formado, carita lida, es una chic atractiva. 4 años después de que Karla se graduó del bachiller contrajo matrimonio con Oscar, claro después de haber terminado su carrera de psicóloga, Oscar, el ahora esposo de Karla es dentista, moreno, de complexión media, rasgos un poco toscos, pero de cierta forma atractivo, de 38 años, 10 mayor que Karla.

El tiempo de Karla estudio el bachillerato, estableció una buena relación con su profesor Juan y continuaron en contacto, por esa razón Karla invito a su ex profesor Juan a su boda con Oscar. Allí Juan y Oscar se conocieron, cuando Karla los presento hubo algo, una chispa entre ellos. Platicaron un poco pero no pasó mucho más.

Un año después de la boda, Karla invito a Juan a una fiesta familiar, era el aniversario de bodas de sus padres, y lo celebraron en grande en un salón de eventos sociales con música, bebida y todo aquello. En aquel evento al que Juan asistió solo, él y Oscar tuvieron oportunidad de platicar más, hacia un año, desde que se conocieron en la boda que no se veían. Karla noto que su esposo y su ex profesor congeniaron muy bien, charlaban y reían. En cierto momento Juan se levanto de la mesa para ir al baño, mientras orinaba en el mingitorio, noto que Oscar entro también al baño y se puso en el mingitorio de al lado, y comenzó a orinar también.

Ambos se miraron y sonrieron, pero Juan noto que Oscar miraba de re ojo su verga. Ambos terminaron de orinar y salieron del baño regresando a la fiesta y continuaron pasándola bien. En cierto momento Karla saco a bailar a Juan, cosa que no le molesto para nada a Oscar quien desde la mesa los miraba mientras tomaba su copa.

Karla un poco entonada y pasada de copas reía y disfrutaba de bailar con su ex profesor y a causa de esa desinhibición, mientras bailaban Karla le confeso a su profesor que cuando fue su alumna le atraía, que se le hacia un hombre muy apuesto y que había sido el mejor profesor que habían tenido.

Karla: Ahora ya estoy casada profe, pero no quería quedarme con las ganas de confesarle eso jaja.

Juan: Jaja, pues me halaga lo que me has dicho Karlita

Karla: Espero no haberlo molestado.

Juan: No, para nada

Karla y Juan bailaron un rato hasta que regresaron a su mesa un poco cansados y tomaron algunas copas mas y Juan y Oscar siguieron charlando muy a gusto.

Ya cerca de las 3 de la madrugada Juan se retiro de la fiesta. Un par de días después, mientras se encontraba trabajando dando sus clases, recibió un mensaje de whatsapp de un numero desconocido, al abrir el mensaje vio que era Oscar.

Oscar: Hola Juan, soy Oscar, espero que no te moleste obtuve tu número del teléfono de Karla

Juan: ¡Hey! Hola Oscar, no me molesta para nada

Oscar: Pues que me has caído muy bien eres un gran tipo, a veces Karla me habla de ti, de lo bien que dabas tus clases y que fuiste un gran profesor para ella.

Juan: pues hago lo mejor que puedo…

Y bien, a partir de ese día comenzaron a hablar por whatsapp, se habían vuelto amigos por así decirlo. Dos semanas después ya había demasiada confianza entre ellos, bromeaban y platicaban de todo por mensajes, ambos sentían una conexión, una chispa entre ellos. Cierto día estaban mensajeando como de costumbre, habían pasado poco mas de dos semanas de la fiesta de la familia de Karla, con la confianza que ya se tenían, Oscar le mando un mensaje que a Juan le resulto algo extraño, pero que de ninguna manera lo incomodo.

Oscar: Oye Juan, sabes, quisiera decirte algo, espero no te moleste, pero jaja, bueno te lo diré, aquel día en la fiesta cuando entramos al baño no pude evitar notar que tienes una buena verga jaja, te repito espero no molestarte, pero entre hombres sabes que a veces nos comparamos.

Al leer ese mensaje Juan se extrañó, pero no se incomodó ni se molestó, se lo tomo con gracia y de cierta manera le provoco algo de morbo.

Juan: Jaja, vaya pues me has dejado un poco extrañado, pero no me molesta para nada, creo que me halaga que otro hombre reconozca que tengo un buen paquete.

Oscar: Tú sabes las mujeres son envidiosas entre ellas, se critican y se juzgan, pero entre hombres no hay por que ser así, lo que es verdad es verdad, y hay saber reconocer cuando otro hombre esta bien dotado jaja. Apuesto que debes hacer gozar como locas a las mujeres con es vergota que te cargas.

Juan: Pues no es porque yo lo diga, pero hasta ahora no tengo ninguna queja jaja…

Entre broma y broma continuaron platicando, pero aquello había roto el hielo por completo entre los dos, poco a poco Oscar comenzó a ser un poco mas atrevido. Dos días después de aquel mensaje hubo un acercamiento más, por la mañana mientras Juan se alistaba para irse a trabajar, recibió un mensaje de Oscar.

Oscar: Hola Juan! Que tengas un buen día como amaneciste?

Juan: Hola Oscar, gracias, pues todo bien jeje

Oscar: Que bueno, y que tal como amanecio tu vergota jaja

Juan: Pues bien parada jaja

Oscar: Uy! Me imagino jaja y no lo digo así por decirlo eh, en verdad me la imagino bien parada, si tranquila se te veía enorme no quiero ni pensar cuando se te para.

Juan: Jaja, pues no me gusta presumir, pero como te he dicho a las mujeres con las que he estado les ha encantado.

Aquellos mensajes aparentemente de broma iban despertando algo más entre ellos. Juan quedo un poco morboso por aquel mensaje de Oscar, y ese mismo día hizo algo un poco atrevido. Al llegara su casa después del trabajo pensaba en el mensaje de la mañana de Oscar sobre su verga y se sintió un poco excitado y aquella excitación lo hizo hacer algo. Aquel día hacía mucho calor y Juan se dio una ducha, al salir del baño se acostó en su cama con su bata de baño puesta, se la abrió dejando ver su atlético cuerpo desnudo, comenzó a acariciar su verga hasta que se le puso bien dura, entonces tomo su teléfono y saco una foto de su verga bien parada recostada sobre su abdomen, estaba depilada. Acto seguido sin pensarlo más le mando la foto a Oscar por WhatsApp.

Cuando Oscar abrió el chat y miro la foto se quedó perplejo, se quedó mirando la foto por un minuto hasta que le respondio a Juan:

Oscar: Wow, que cosota jaja

Juan: Como me dijiste en la mañana que te la imaginabas bien parada pues pensé, ¿Por qué no se la muestro? Jaja

Oscar respondió a la foto usando dos emojis, uno con la carita babeando y otro con la carita con ojos de corazón.

Oscar: Jaja, no me lo tomes a mal solamente admiro tu impresionante verga, como te había dicho antes, debo reconocer que estas muy bien equipado.

Juan: No para nada jaja, es como tu dijiste entre hombre también debemos reconocer nuestros atributos

Eso fue el preámbulo de todo.

Aquella misma semana Karla saldría el fin de semana a visitar a sus padres se iría a verlos desde el viernes por la tarde y se quedaría en su casa el sábado y regresaría el domingo por la tarde.  Ese día, el viernes por la mañana Juan y Oscar se mandaban mensajes y en uno de ellos Oscar le comento a Juan que Karla saldría el finde semana a visitar su padre pero que el no iría.

Juan: Entonces estará solo todo el fin de semana

Oscar: Si, podre pasar un rato a solas, no me mal intérpretes, quiero mucho a mi esposa, pero a veces se necesita un poco de soledad jaja, la vida de casado tiene sus altas y sus bajas. Qué bueno que tú eres soltero.

Juan: Ya ves, que viva la soltería jaja. Oye que te parece si vienes mañana a mi casa, podemos pasar un rato, compramos una cervezas y bueno aprovechas que no va a estar Karla, a veces las esposas ya no dejan salir a sus maridos a convivir con los amigos jaja.

Oscar: pues me parece una muy buena idea, hacemos una carne asada, yo llevo unas cervezas…

Los dos se pusieron de acuerdo y al siguiente día, es decir el sábado cerca de las 12 del día Oscar llego a la casa Juan, que como ya se había dicho era una muy agradable residencia. Oscar estaba encanto por la casa de Juan.

Oscar: Que buena casa tienes Juan, pero no te sientes solo en ella, digo para un hombre soltero como tú. ¿No te sientes solo?

Juan: No para nada, no siempre estoy solo, seguido traigo algunas zorritas, tú sabes jaja

Oscar: Jeje si me imagino debes pasar muy buenos ratos

Los dos hombres pasaron un rato platicando en la sala, mientras bebían una cerveza bien fría, después prepararon la carne asada y comieron mientras charlaban y la pasaban bien. Después de comer, se fueron a sentar al sofá de la sala con una cerveza en la mano y continuaron platicando, pero había algo raro en el aire, algo que los dos podían sentir. Hasta que después de un rato Oscar tomo la iniciativa.

Oscar: Oye debo decirte, no dejo de ver la foto que me mandaste jaja

Juan: ¿ah si?, pensé que la borrarías de inmediato, digo si Karla la viera qué pensaría jaja

Oscar: No ella no toma mi teléfono para nada, y pues como la iba a borrar si me encanto jaja que vergota, que buen paquete.

Juan: ¿Te gustaría verla en persona?

Oscar: Mmm me encantaría volverla a ver jaja

Ambos se quedaron mirando a los ojos con una sonrisa picara en el rostro, entonces sin decir más, Juan se desabrocho el pantalón y se lo bajo hasta las rodillas con todo y su bóxer, su verga depilada quedo al descubierto y Oscar de inmediato clavo su mirada en ella.

Oscar: Wow, que hermosa, que grande jaja, no me lo tomes a mal, pero me encanta tu verga, ya quisiera tenerla yo así.

Juan: Yame quedo claro jaja no es necesario que lo sigas diciendo, no hay nada de malo en admirarnos las vergas entre hombre.

Oscar: es que esta tranquila y se ve enorme, ¿te las has medido?

Juan: Si, jaja son 22 centímetros.

Oscar: No lo puedo creer, ¿es en serio?

Juan: Si claro, pero si no me crees podrías medirla tú mismo jaja

En ese momento estaba mas que claro lo que los dos hombres estaban deseando, sin inhibiciones, aquello comenzó a suceder.

Oscar: Bueno pues en ese caso…

Sin decir mas Oscar tomo con su mano derecha la verga de Juan y comenzó a acariciarla y jalarla lentamente, mientras se miraban sonriendo, no paso mucho tiempo cuando aquellaverga estaba ya bien dura, sin duda un ejemplar de campeonato, grande, 22 centímetros, venosa redonda, con la cabecita perfectamente redonda unos buenos huevos.

Juan y Oscar seguían mirándose sin decir nada, pero llenos de lujuria y morbo.

Oscar: Pero que vergota, en la foto se veía muy bien pero ahora en persona, uff, esta increíble, que hermosa es.

Sin decir más, Oscar no pudo resistirse, se inclinó y comenzó a besar la gran verga de Juan, la jalaba y la besaba por todo el tronco, Juan miraba excitado y lleno de morbo como otro hombre de besaba la verga. Oscar comenzó chuparla.

Oscar: Mmm madre mía que delicia, disculpa, pero tenía que probarla…

Juan: ¿Te gusta?

Oscar: me encanta…

Juan: Adelante, disfrútala…

Los dos comenzaron a gemir, Juan tomaba por la cabeza a Oscar para hacerlo devorar su verga. Unos minutos después Oscar se levantó y comenzó a besar con pasión a Juan mientras seguía jalándole la verga. Los dos hombres comenzaron dejarse llevar por el momento.

Entre gemidos y jadeos comenzaron a desnudarse hasta que toda su ropa quedo tirada en el suelo. Ya completamente desnudos Oscar se arrodillo y continúo devorando la gran verga de Juan mientras este sentado en sofá lo miraba, gozando, lleno de lujuria y morbo. Después de un rato, Oscar se puso de pie e hizo que Juan también se levantara del sofa, lo tomo de las manos y lo llevo a la mesa del comedor, parándose junto a la mesa se inclinó recargándose sobre sus manos y parando el culo.

Oscar: Frótamela en el culo…

Juan tomo su verga con su mano derecha y comenzó a frotarla en las nalgas de Oscar quien gemía y disfrutaba.

Oscar: Oh si que rico, que dura esta.

Juan: Tienes buen culo

Oscar: Gracias jaja

Juan se dejo llevar por el deseo y después de un rato de arrodillo y comenzó a besar el culo de Oscar, besaba sus redondas nalgas y con sus manos las abría para lamerle el ano, por supuesto, Oscar también tenia su verga bien parada, mucho mas pequeña que la de Juan, pero sin dejar de ser un buen ejemplar.

Juan se puso nuevamente de pie y puso su verga en las nalgas de Oscar mientas este comenzó a mover sus caderas sintiendo ese gran trozo de carne bien duro.

Juan: ¿Quieres que te la meta?

Oscar: Uy si por favor, rómpeme el culo con esa vergota hermosa.

Juan puso su verga en el ano de Oscar y poco a poco comenzó a introducirla, Oscar gemía y sentía un dolor muy rico mientras esa tremenda verga lo penetraba. Ya con toda la verga adentro, Juan comenzó a martillar el culo de Oscar quien levanto una pierna y la apoyo sobre la mesa. Mientras era martillado su verga también parada se sacudía. Los dos gemían de placer.

Oscar: Ay si, que rico dámela toda, méteme tu vergota que me encanta.

Juan: Si que rico culo oh si…

Después de un rato, Juan le saco la verga del culo a Oscar quien de inmediato se arrodillo y comenzó chuparla de nuevo. Juan había estado penetrando el culo de Oscar por cerca de 30 minutos sin parar, pasado otros 10 minutos, Oscar le saco la leche Juan quien dando un tremendo gemido de placer se descargo en la verga de su amigo.

Oscar: Ay pero que deliciosa lechita, mmm

Ya calmados, los dos amigos regresaron al sofá, desnudos, sudando, extasiados por lo que acababa de pasar, aunque era algo que ambos venían venir desde las semanas previas, aun había algunas cosas que aclarar, pero tenían tiempo de sobra, Karla no regresaría sino hasta el día siguiente, así que Juan y Oscar tenían mucho tiempo…

59 Lecturas/10 mayo, 2025/0 Comentarios/por karlitaxxx
Etiquetas: amigos, baño, culo, madre, mamada, mayor, padre, sexo
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