Los temores que tiene un nene al ir descubriendo su sexualidad. 3

En esta parte del relato David va solo a la playa para intentar dejase ver desnudo teniendo un encuentro sorpresivo con un nene..
Los que han leído mis relatos saben que no son reales, —– Nada es verdad nada es mentira todo depende del cristal con que se mira —- seguro muchos de los que lean en relato recordaran que tuvieron temores similares o parecidos a este nene, espero les guste.

Después de conseguir el permiso de mi papa para ir a la playa con mentiras, me sentía con temor de que se enterara que me fui solo o que dios me castigara por andar de caliente haciendo cosas de sexo, pero al pensar que iba andar de caliente me calmaba un poco.

Del lunes al miércoles anduve de caliente en casa con las bolas y pija de fuera del la bermuda, tocándome bajo la playera estando frente a mi mama y hermana, por las noche me metía el tubo caminando desnudó por la casa y entrando el cuarto de Sara imaginando que al miraba.
El jueves me desperté temprano para hacer la limpieza de mi cuarto, antes de bajar a desayunar en una mochila metí toalla, playera y short, la trusa bikini gris con estampado de balones de Samuel, una blanca mía y crema, saque un conjunto de short y playera azul claro con estampado de un velero que me llegaba a medio muslo, Sara ya había bajado a desayunar así que fui desnudo a su cuarto por una panti bikini rosa con los resortes en rojo y moño blanco al frente, me la puse y regrese a ponerme el short, playera y baje a desayunar.

Al terminas el desayuno me dijo mi papá si quería me llevaban a casa del amigo, pero le dije que no que me iba caminado que no estaba lejos, me dijo que me portará bien, me cuidada y me dio dinero para gastar, cuando se fue subí al cuarto por el tubo, me metí al baño a descargar las tripas, me limpie para meter crema al ano para introducir el tubo, regrese al cuarto quitándome el short y lo metí a la mochila.
Baje y fui a la cocina por un emparedado y termo con agua de limón que me preparo mi mamá, me despedí dándole un beso y después le di uno a Sara pensando que le decía —- hermana, tomé prestada una de tus pantis porque ando caliente —– antes de salir mi mamá me dijo que me cuidada, me portara bien y regresara entre las cinco y seis.
Al salir a la calle el corazón me latía rápido por lo excitado que estaba, respire profundo pensado — gracias Dios por dejar que me dejaran salir para tratar de que me vean desnudó y se me quité la vergüenza —– al caminar a la parada del autobús pensé que tenía que cuidarme para que al subir no dejará ver la panti.

Llegué al paradero y estaba una señora con sus dos hijos y una hija que también iban a la playa, al llegar el autobús deje que subieran primero, después yo y me fui a sentar en los asientos de atrás donde no había nadie, al sentarme entró el tubo al fondo del ano, subí la playera tocándome las bolas y pija, me fui así hasta que subió más gente y baje la playera porque un joven se fue a sentar a mi lado.

Desde que pensé ir a la playa decidí ir a una que estaba más alejada porque iba menos personas por ser entre semana, al llegar el autobús iba casi vacío porque la terminal estaba en el pueblo de la playa, espero a que bajara un señor y señora con unas cajas con cosas que vendían, una señora con tres nenas como de trece, diez y ocho años, otra señora con dos nenes de seis y cuatro años.
Baje del autobús y me colgué la mochila a la espalda cuidando que no se subiera la playera y se viera la panti, miré el reloj para ver la hora y eran las diez y media, camine por la arena pegado al mar hacia unas rocas grandes que dividían esa playa de otra playa más chica, como siempre al ser negro por curiosidad se me quedaba mirando la gente porque no veían a muchos negros.
No había mucha gente y podía andar de caliente esperando la oportunidad de que alguien me viera, al llegar a las rocas las subí lo quince metro que tenían, desde arriba se podían ver las dos playas, en la chica no había gente y nadie estaba pegada a las rocas por la que llegue, me quite la mochila, la playera y panti metiéndolo a mochila quedando desnudó, me colgué la mochila y baje a la playa chica con una mano en las nalgas para repujar el tubo para que no se saliera, fui a dejar la mochila en la sombra de una palmeara, me metí al mar a mojarme rempujando el tubo en el ano, cuando ya tenía las bolas pegadas al cuerpo subí las rocas con nervios y miedo que al llegar arriba me encontrará a alguien que subía por el otro lado y me viera de caliente, al estar ya arribar de las rocas las personas más cerca estaban a más de cincuenta metros, abrí un poco las piernas y empecé a sacar y meter el tubo mirando a los nenes y nenas en bañador jugar en la playa, lo hacía rápido sin importar el ruido que hacía la mano al pegar en las nalgas y los gemidos que se me salían al estar disfrutándolo y gozando, al sentir el orgasmo metí al fondo el tubo mientras la pija echaba fuera varios chorros de leche, la mayor parte cayó en el cuerpo por estar la pija apuntando al ombligo, al terminar sin dejar de ver a los nenes dos dedos los untaba de leche y me los chupaba hasta tragarme toda, me saque el tubo baje y me metí al mar para lavar el tubo y ano, al salir fui a la mochila a guardar el tubo y me puse la trusa bikini gris de Samuel acomodando la pija para un lado, agarré la mochila subí las rocas para pasar a la otra playa deje la mochila en la sombra de una palmera dos metros de las rocas, me metí al mar y fui caminado acercándome a un grupo de nenes y nenas que hacían un castillo de arena, en las sobras de las palmeras estaban dos señoras hablado que seguro eran las madres de los nenes y nenas, me quedé dentro del mar unos diez metros frente de ellos hasta donde el agua me llegaba a la cintura, con una mano baje la trusa y con la otra empecé a jalar la pija imaginando que les decía — vean como me jalo la pija para que me salga leche —- aunque me dio orgasmo continuaba muy excitado y quería que me vieran desnudó pero con las señoras no se podía.
Recordé que para hacer sexo tenía que quitarme la vergüenza y decidí arriesgarme saliendo con la trusa de Samuel que me quedaba chica, muy pegada y de atrás se me veía el inicio de las nalgas, subí la trusa metí la pija dura haciendo el lado derecho, camine dentro del mar unos veinte metros más adelante para salir y pasar caminando a lado de ellos, para calmar mis nervios respire profundo y salí a la playa, al estar la trusa mojada se marcaba más la pija camine lentamente hacia ellos mirando de reojo a las señoras, cuando llegue donde hacían el castillo me pare mirándolo y les dije.

—— les esta quedando muy bonito el castillo —-
Todos me miraron, contestado el que tenía unos diez años.
—- gracias —
a ni uno de los nenes y nenas les llamo la atención de como se marcaba la pija dura, me la toque sobre la trusa pensando —– ando muy calientes con ganas de jugar con la pija, uno quiere jugar conmigo para darle leches —- estaba una nena de unos ocho años sentada con las piernas abiertas y se le marcaba la concha, cuando me miró ella le sonreí pensado —- nenita si quieres te puedo dejar que me veas el palo, te vas gustar mucho —- me sonrió y continuo ayudando a los demás en el castillo, me di cuenta que las señoras ya habían visto que hablaba con ellos así que continuo caminado hacia dónde dejé la mochila.
Saque la toalla y la extendía para sentarme, pero antes me quite la trusa quedado desnudo, saque el termo con el agua de limón y la tomé antes de que se calentará, estaba muy excitado así que saque el tubo le puse crema y me lo ensarten mirando a los nenes y nenas que hacían el castillo, estaba tan distraído que no vi que venían corriendo tres nenes de trece, once y ocho años más o menos, los grandes traían de bañador tipo shorts y el más chico un bikini rojo, para que no se dieran cuenta que estaba desnudó me senté encogí las piernas tapando con las manos las bolas y pija, el más chico antes de llegar a las rocas se bajó el bañador y empezó a orinar a tres metros de mi, al llegar los otros y hicieron lo mismo dejando ver las pijas, se dieron cuenta que los miraba sonrieron y no les importo, cundo terminaron de orinar se acomodaron los bañadores y subieron las rocas, rempuje el tubo dentro del ano y me puse la trusa, subía las rocas mirando que los nenes jugaba y se metían al mar, no podía sacarme la pija porque me verían pero abrí un poco las piernas para con una mano estarme repujando el tubo al fondo del ano imaginando que le mamaba las pija al más chicos mientras el grande de cogía con su palo duro, los miraba de reojo y si me veían dejaba de rempujar el tubo, estaba muy excitado y no pare hasta que llegó el orgasmo salieron la leche en abundancia, parte traspaso la tela de la trusa, otra escurriendo por el muslo entre el resorte y parte salió por el resorte de la cintura, con los dedos limpie la del muslo para tragarla mirando a los nenes pensando que les decía —- se me salió la leche no la quieren ver — termine muy sudado y acalorado, baje las rocas y me metí al mar a mojarme para refrescarme al salir en la trusa mojada se notaba más la pija parada, me recosté en la toalla sintiendo como entro todo el tubo, quería quitarme la trusa para cuando los nenes se pasaran a esta playa me vieran desnudó pero no me atreví.

Me quedé recostado imaginado hacer cosas con ellos hasta que los vi aparecer sobre las rocas y bajar cerca de mi, los tres notaron en la trusa que tenía la pija parada, se miraron sonriendo morbosamente mientras se retiraban y me imaginaba decirles —- nenes, me quieren ver las bolas y pija — cuando se retiraron me quite la trusa sin levantarme, abrí las piernas agarré el tubo sacándolo y metiéndolo muy rápido imaginando que el grande me estaba bobeado disfrutado y gozando, no tarde tener orgasmo saliendo los chorros de leche sobre de mi, al terminar con dos dedos la lleve toda a la boca saboreándola, por el calor estaba sudando y acalorado otra vez, me puse de pie y me atreví a ir desnudó a meterme al mar, me remoje sacando el tubo para enjuagarlo quedarme un rato más.
Me fijé que nadie me viera y salí del mar, después de tres orgasmos la pija me colgaba frente a las bolas, me senté en la toalla mirando el reloj y eran ya se doce del día, tenia sed y hambre decidí ir al pueblo que estaba a doscientos metros de la playa tras las palmeras y maleza a comprar algo, saque de la mochila la otra playera que lleve que era más corta y me quedaba dos dedos bajo las nalgas, me ibas poner el short pero de caliente decidí ir solo con la playera arriesgando que alguien se diera cuenta y me viera las nalgas, bolas y pija, guarde todo lo demás en la mochila y me la colgué bajando la playera para que tapara las nalgas, camine así entre las palmeras sintiendo como las bolas rosaban los muslos, después de las descargas de leche la pija seguía colgada.
Al llegar a la primer calle me pare antes de salir de las palmeras, miré que venía una señora joven con una bolsa, respire profundo para calmar los nervios salí a la calle caminado hacía donde venía con miedo que se diera cuenta que traía colgando las bolas y pija, camine lentamente latieron el corazón muy rápido pase a su lado y no se dio cuenta, me detuve y gire mirándola alejarse, con las dos manos subí la playera dejando de fuera las bolas y pija pensando que le decía —– señora, mirarme las bolas y pija —- al llegar a la esquina gire y camine por esa calle buscando una tienda, camine dos calles y no había pero al llegar a otra esquina venían dos nenas de unos doce años, camine hacia ellas respirando profundo y bajando la playera un poco más, ellas no me dejaban de ver por ser negro, al estar frente a ellas pregunté

— a donde hay una tienda —
Las dos se pararon y una me contestó que una calle más adelante había una en la esquina, mientras lo decía yo pensaba que les decía — nenas, no quieren verme las bolas y pija —- me empecé a excitar y sentí como la pija empezó a pararse, me sonrieron y continuaron su camino, metí una mano bajo la playera jalándola despacio imaginado que les decía —- nenas me pusieron caliente quiero ver cómo me jalo la pija para que salga leche —- las miré hasta que entraron a un casa y camine a la tienda que era atendida por una señora un poco anciana.
Compré tres Coca-Colas, unas bolsas de frituras y unas galletas metí todo a la mochila, camine de regreso a la playa encontrado en una calle a tres nenes de entre los seis y ocho años, ya traía otra vez la pija apuntado al ombligo pero por la vergüenza no me atreví a dejar que me vieran, regrese a la playa al mismo lugar, extendí la toalla me fijé que nadie estuviera cerca, me quite la playera sentándome desnudó a comer los emparedados que me dio mi mama, frituras y tomar Coca-Cola soda, mirando a los nenes y nenas que aún jugaban el la arena teniendo pensamientos morbosos terminando más caliente y decidí acercarme para sacarme leche.

Me ensarten el tubo con crema, me puse la panti y playera corta, guarde lo demás en la mochila dejándola sobre la toalla, me puse de pie bajando la panti del frente dejando fuera las bolas y pija, camine por atrás de las palmeras hasta quedar cuatro metros atrás de dónde estaban sentadas las señoras, abrí un poco las piernas y con una mano me rempujaba el tubo dentro de las tripas, con la otra subí la playera dejando ver las bolas y pija apuntado al ombligo, estaba atento a que no voltearan y bajar la playera, también me fijaba que nadie viniera por las palmeras y me encontrarás de caliente, al mismo tiempo miraba a los nenes jugando en la arena, más a un de unos once años que en el bañador se le marcaban unas ricas nalgas llenitas y a otro que traía bañador bikini amarillo y se le notaba el bulto, al estarse correteando si se pegaban a las señoras bajaba la playera, estuve de morboso mirándolos y bombeándome hasta que llegó el orgasmo, pesando que les decía —- acérquense a ver cómo se me sale la leche —- al sentir que salía la leche puse la mano en la punta para que ahí cayera, al terminas sin dejar de rempujando el tubo lamí la leche de la mano.
Fue muy excitante lo que hice pero termine otra vez sudado y acalorado, subí la panti tapando las bolas y pija, camine lentamente rempujando el tubo a donde dejé las cosas para meterme al mar a refrescarme, cuando casi llegaba me descuide y no vi que del pueblo venía un nene de diez años que al verme la panti rosa con la pija haciendo carpa de circo se detuvo, me agarró de sorpresa como a el que me sonrió, me dio vergüenza que me viera en panti pero me controle y le sonreí, nos miramos unos segundos sin decir nada hasta que el dijo.
—– traes calzón de nena, también a veces mi mamá me da una panti de mis hermanas si no hay trusa limpia —-
No supe que contestar y le sonreí, el no dejaba de ver cómo la pija al punzar movía la panti, dijo otras vez riendo.
—- se ve que tienes una pija muy grande, la mía es chica jajaja —-
Mientras lo decía se bajó el short y trusa dejando ver las bolas y pija parada sin que le diera vergüenza, miré nervioso para todos lados, nadie estaba cerca recordé que a eso fui a dejar que me vieran para que se me quitara la vergüenza, respire profundo y me atreví baje la panti para dejar que me viera, al mirarme se pegó más a mi diciendo.

—– si que tienes unas bolotas y palote, como dicen que los negros la tienen —por fin me atreví a decirle.
—– cuando crezcan vas a tener una pija grande como la mía —-
Se subió la ropa así que subí la panti y solté la playera, mire para todos lados y nadie estaba cerca, se quitó el short quedando en trusa bikini color vino camino hacia el mar diciendo algo que me puso nervioso.
—- hermano David está haciendo mucho calor me voy a meter al mar, tú no te vas a meter —-
Porque el nene sabía mi nombre, de dónde me conocía, porque yo no lo reconocía, me quite la playera y fui tras de él a meterme al mar y saber de dónde me conocía.
Al traer aún el tubo ensartado al caminar se movía y me mantenía caliente, después de mojarnos un rato en el mar le pregunté
—– porque sabes cómo me llamo —
Me sonrió.
— hace dos años vivíamos en el centro de la ciudad y asistíamos al templo a las asambleas del pastor Isaac y el es tu papá por eso te conozco —
Al escuchar eso me puso más nervioso porque conocía a mi papá y podía decirle algo.
—- si mi papá es el pastor —-
Hice una pausa y continúe.
—- ya no vas al templo los sábados y domingos —
Se zambulló para mojarse y me contestó.

— ahora vamos al templo que está en el pueblo con el pastor Lucas —-
Desde nene lo conocía porque él me daba clases de biblia cuando era nene y después mi papá lo nombró pastor y lo mando a otro templó, por lo que si el nene le decía al pastor Lucas que me vio, se lo podía decir a mi papá, aún con nervios que me descubrieran tenía la pija muy dura después del orgasmo, nos estuvimos remojado un poco más sin hablar hasta que le dije.
—- en mi mochila tengo unas botanas y Coca-Cola vamos a tomarlas antes de que se calienten —-
Al salí del mar en la panti se pegaba más notables la pija parada, me di cuenta que a él también se le notaba en la trusa la pija dura, deje que se adelantará y me saque del ano el tubo para que no se diera cuenta, al sentarme en la toalla metí el tubo a la mochila sacando las Coca-Colas y frituras, le dije que se sentará frente a mí en la toalla dándole una Coca-Cola.
Mientras las tomábamos el miraba la carpa de circo que hacía la pija con una sonrisa morbosa, su pija también levantaba la trusa, se la tocó diciendo
—- tienes el palo bien parado, dejas que te lo vea otra vez —-
El nene era igual de caliente que yo, pero aún así la vergüenza y nervios de que él se lo contará al pastor Lucas o mi papa, sonreí tocándome las bolas sin decir nada, como si supiera lo que pesaba sonrió morbosamente bajando el frente de la trusa para que le viera las bolas y pija diciendo.
—- hermano, no te preocupes, a nadie le voy a decir que te vi el palo, ni creo tú digas que me lo viste —
Le contesté.
—- lo sé tampoco yo le diría a nadie —
Tenía vergüenza, miré que nadie estuviera cerca y me quite la panti, me senté con las piernas abiertas él se sobo las bolas y pija sobre la trusas mirando y dijo.
—- si mi hermana te viera la pija, te dirían que se la metas jajaja—-
El se quitó la trusa jalársela la pija y agregó.

— cuando le meto mi pija dicen que ni cosquillas le hago jajaja —-
Los dos reímos por lo que dijo por lo tímido no sabía que decirle, se pegó más a mí y me agarró la pija sintiendo correr por el cuerpo una sensación de placer.
—- me gustaría tener un palo como el tuyo para metérselo a la concha o ano a las nenas, tú no se lo has metido a nadie —–
Miré nervioso que nadie se acercara porque él seguía agarrándome la pija y le contesté.
—- no, nunca le he metido la pija a nadie, tu si lo has hecho —-
Me miro con sus grandes ojos café oscuro de morboso diciendo.
—- te lo voy a decir pero que quede en un secreto entre nosotros y dios, una vez vi que el pastor Lucas le metía el palo a mi hermana, el se dio cuenta y me dijo que no era malo hacer eso que otro día fuera a solas y lo haría conmigo, fui y me metió el palo al ano —-
No podía creer que el pastor Lucas les hacía sexo a los dos, porque lo conocía de mucho tiempo y no se sabía que hiciera eso, me atreví tocar sus bolas y pija diciendo.
—- hermano Josué y te gusta que el pastor Lucas te meta la pija —-
Se recostó frente a mí subiendo las piernas dejando ver el ano y se metió un dedo.
— las primeras veces me dolía, paro ahora ya no y si me gusta sentir su palo en las tripas jajajaja —-
Se sentó otra vez agarrándome la pija agregando.
—- a ti te han metido la pija por el ano, o le has metido tu palote a alguien —–
El nene estaba muy excitado y quería sexo, me atreví otra vez a agarrar su pija y darle unas jaladas.
—- yo no he hecho nada de sexo, solo me jalo la pija para sacarme leche —-
Como empezó todo de rápido e inesperado se termino, se levanto, se puso la trusa y short diciendo.
—- hermano David, me tengo que ir, solo me dejo mi mamá venir un rato al mar, sino van a venir a buscarme y nos van a encontrar desnudos —–
Ya vestido me agarró otra vez la pija diciendo.

—– traes a donde apuntar mi dirección y teléfono para ver si nos vemos otro día y me metas el palo si tú quieres ——
No podía creer lo que pedía, saque una libreta y lapicero para que lo anotada, se despidió y después de dar unos pasos regreso a decirme.
— hermano David, no le digas al pastor Isaac que el pastor Lucas nos hace sexo a mi hermana y a mí, porque nos da despasa alimenticia y dinero para ayudar a mi mamá —
Se alejó y miré lo que anotó, se llama Josué y tenía once años, me ensarte el tubo sacándolo y metiéndolo rápido recordando lo que el nene me contó hasta que tuve orgasmo descargado leche y me la tomé.
Estaba muy sudado, no había nadie cerca así que me puse de pie y me metí rápido al mar para sacarme el tubo enjuagarlo y limpiarme el ano, camine desnudó dentó del mar pasando cerca de nenes, nenas, jóvenes y personas mayores, el corazón latía rápido por el miedo de que alguien se diera cuenta, después de los órganos la pija me colgaba frente a las bolas pues ya no la tenía parada, vi en mi reloj que eran las tres y media y tenía que regresar ya que en autobús tardaría casi una hora y media para regresar a casa.
Salí del mar cuidando que no me vieran, me seque con la toalla para ponerme la ropa, aunque ya no traía parada la pija decidí regresar solo con la playera, metí todo a la mochila dejado fuera la playera larga con que llegue, cuando me la iba a poner decidí ponerme la más corta aunque me arriesgaba a que alguien me viera, estaba indeciso pero mientras lo pensaba se fue parando la pija, saque la otra playera y me la puse termine de meter las cosas a la mochila me la colgué y baje la playera para que me tapara las nalgas, camine entre las palmeras hasta llegar al pueblo y dirigirme a la terminal del autobús con el corazón latiendo rápido por los nervios, más si me cruzaba con alguien.
Al llegar al paradero del autobús, estaban esperándolo unos señores, dos señoras con sus hijos, hijas y la abuela, un grupo de ocho jóvenes y sus amigas de unos catorce a dieciséis años, me pare alejado a tres metros de donde estaban esperando el autobús que tardo unos veinte minutos en llegar, si alguien me miraba me ponía nervioso pesando que sabían que no traía nada debajo de la playera, pero respiraba profundo para controlarme.

Cuando llegó el autobús deje que todos subieran, me quite la mochila y baje la playera, saque el dinero para pagar y subí cubriendo con la mochila el frente para tapar las bolas y pija al subir, le pegue al chófer y camine por el pasillo al fondo del autobús porque los cuatro asiento del fondo estaban desocupados, al llegar y sentarme la playera se subió dejando de fuera las bolas y pija parada, trate de bajarla pero por lo corta no se pudo así que puse la mochila sobre los muslos para taparme por si se sentaban en los asientos de alado, en los asientos frente a mi estaba sentados una pareja de los jóvenes que se daban besos veces, los otros que venían con ellos estaban sentados más adelante.
Nadie más subió, el autobús empezó su recorrido y puse la mochila en el asiento de a lado, agarré la pija jalándola lentamente mirando a los jóvenes, los nenes y nenes imaginado que me miraban, cuando el autobús hacía una parada y subí alguien ponía la mochila sobre los muslos para cubrirme por si se sentaban a mi lado, si lo hacían más adelante la quitaba y continuaba jalando la pija disfrutando y gozando el momento, continúe con la paja hasta que sentí que llegaba el orgasmo, los músculos del abdomen y muslos se tensaron haciendo que separara un poco las nalgas del asiento, me controle que no se me escapara un gemido mientras la pija disparaba los chorros de leche que cayeron en el respaldo de los asientos del frente y escurrían, mientras pensaba que gritaba —- vengan a ver cómo se me salió la leche —- cuando me recupere con una mano limpie la leche que estaba en el respaldo untándola en las bolas y pija, calles adelante subieron varias personas y me cubría con la mochila, en los dos asientos del otro lado del pasillo se sentó una señora con una de sus hijas y la otra a lado de mi, tendría unos ocho años y reacomodar la mochila para que no se diera cuenta que no traía shorts.
El autobús llegó al centro se empezó a desocupar y subieron otras personas, más adelante se bajó la señora con sus hijas, quite la mochila y la pija estaba colgada frente a las bolas, casi me tenía que baja y saqué la otra playera para que me tapara más, cuando faltaba una calle me la iba a poner pero pensé ——– si desde la playa vengo así porque me voy a tapar más si nadie me a visto — metí la playeras a la mochila, en el autobús ya había poca gente, tres señores, las señoras con la abuela y los nenes y nenas, me puse de pie baje la playera y camine por el pasillo con la mochila al frente para tapar, el autobús paro y abrió la portezuela al bajar las escaleras sentí que se subió la playera al traer ocupadas las manos no la pude bajar, al estar fuera del autobús gire la cabeza y vi que el chófer tenía una gran sonrisa, seguro me vio las nalgas pero no dijo nada cerró la portezuela y se fue.

Camine las tres calles para llegar a casa y una antes de llegar saque la otra playera y me la puse porque no podía llegar dejando ver las nalgas, bolas y pija, al entrar fui a la sala a darle su beso a mi mamá y hermana pensando que les decía —– no traigo nada debajo de la playera porque estuve de caliente todo el día —– subí para ducharme saque de la mochila la trusa y panti para lavarlas mientras me duchaba, al salir metí a la escondite del clóset a que se secara la panti y trusa, después de echar fuera cuatro veces leche las bolas me colgaban y la cabecita de la pija estaba pegada al cuerpos, me puse una trusa clásica blanca con una bermuda y playera para bajar a ver televisión.
Cuando llegó mi papá mientras llegaba la hora de cenar pensaba si mi papá sabía que el pastor Lucas le hacia sexo con una nena y un nene.
Cuando me fui a dormir estuve recordando lo que hice y lo que Josué me contó que hacía con su hermana y lo que les hacía el pastor Lucas, yo lo conocía desde muy nene y un tiempo me dio clases de biblia y otras cosas relacionadas con asamblea y no podía creer que fuera un caliente como yo, hasta que me quedé dormido.
El viernes no anduve de caliente por tanta leche que me había salido el día anterior, por la tarde salí al parque con los amigos a jugar, después de cenar ya andaba caliente y decidí meterme el tubo antes de dormir, al irme a acostados fui el baño a desalojar las tripas y me ensarten el tuvo, me acosté y espere que la casa estuviera en silencio y semioscura para quitarme el short y trusa, me asome al pasillo y ya no había luz en el cuarto de mis padres, al salir escuche ruido en el cuarto de Sara me metí a mi cuarto, espere un momento y salí con cuidado y me asome en la puerta entre abierta, no lo podía creerlo ella andaban caliente como yo, estaba desnuda acostada boca arriba, con una mano se tocaba los pechos que le estaban creciendo y con la otra la concha, la muy caliente se estaba masturbando, me agarré la pija y la empecé a jalar lentamente mirando como lo hacía, con la otra mano detenía el tubo para que no se me saliera, a veces alcazaba a escuchar que gemía quedito como yo para que no la escucharán, de repente se quedó muy quieta por un minuto y se puso de pie, creí que se dio cuenta que la miraba y me metí rápido a mi cuarto y empareje la puerta, a tiempo porque ella salió poniéndose el camisón y fue al baño, estaba muy excitado por lo que vi y me quedé mirando tras la puerta entre abierta jalando la pija, cuando entro y emparejó su puerta salí a asomarme, se estaba poniendo la panti y se acostó a dormir, me quedé mirándola jalando, sacando y metieron el tubo hasta que sentí que casi terminaba entre al cuarto me recosté boca arriba dando los últimos empujones al tubo para que la pija descargará la leche sobre de mi para después tomarla, al terminar fui a asomarme otra vez a su cuarto y ya estaba dormida.
Regrese a acostarme con las piernas hacia la cabecera las subí y abrí, agarré el tubo sacarlo y metiéndolo muy rápido imaginando que un hombre me estaba bombeado, gozaba y disfrutaba lo que sentía más cuando me llegó el orgasmo y la pija disparo los chorros de leche se sobré de mi, cuando me recupere con dos dedos la fui llevando a la boca para tragarla, al terminar fui al baño desnudó ensartado para sacar el tubo lavarlo y limpiarme el ano, al regresar me asome otra vez a ver a Sara, entre a mi cuarto me puse la trusa y short para dormir.

Al otro día me fue a despertar mi mamá para que bajara a desayunar porque tenía que ir con mi papá al templo a que diera la clase a los nenes y nenas y después a la mía, me levanté poniéndome una playera y baje a la cocina, al entrar a lado de mi mamá estaba mi hermana en camisón que era de tela algo delgada por lo que se translucía un poco notándose la panti y corpiño, le di su beso a mi papá, mamá y al besar a Sara imaginé que le decía — anoche te vi desnuda manoseándote, cuando quieras dime y nos pajeamos al mismo tiempo para vernos y quitarnos lo caliente — me senté, oramos y desayunamos rápido para prepararnos para ir al templo.
Al estar haciendo limpieza de mi cuarto recordé que vería al pastor Lucas y decidí irme ensartado y con panti, espere que Sara se metiera a duchar para entrar a su cuarto por una panti, agarren un bikini rosa con estampado de Hello Kitty llevándome también el corpiño aunque no me lo ponían, porque una vez que agarre una de sus pantis se dio cuenta ya que solo estaba el corpiño y estuvo buscando la panti preguntándole a mi mamá donde estaba.
Cuando me tocó ducharme antes desaloje las tripas para lavar el ano, al salir se metió a duchar mi papá, entre a mi cuarto y no empareje la puerta, me quite la toalla quedando desnudó con las bolas colgadas y la pija apuntado al ombligo, saque el tubo de quince centímetros le puse crema y metí un poco en el ano, me pare en la puerta mirando el pasillo sentía que el corazón se me salía de miedo que me vieran pero salí y me asome por la puerta entre abierta de Sara, estaba para frente al espejo en corpiño y panty bikini amarillas con rayitas de colores desenredando se el cabello, abrí un poco las piernas puse la punta del tubo en el ano y lo empuje sintieron como se iba introduciendo a las tripas, pensando que le decía — mira como tengo la pija parada la quieres ver —- era peligró quedarme así porque podía salir mi papá del baño o mi mamá de su cuarto, regrese a ponerme la panti, camiseta interior que apenas tapaba la panti, de caliente salí a ver a mi hermana que seguía cepillado el cabello, le di unos rempujones al tubo mirándole las nalgas hasta que escuche que mi papá cerro las llaves de agua de la ducha me metí al cuarto.

Saque la ropa que tenía que llevar al templo y una trusa blanca típica para ponérmela por si se me salía la leche no mojara el pantalón, me puse la camisa blanca y corbata, así salí a asomarme al cuarto de Sara viendo como se ponía un conjunto de blusa y falda a la rodilla verde claro, mirándose en el espejo subió la falda a medio muslo para ver cómo se le veía, después subió toda la falda y se acarició las nalgas, no sé si por el espejo vio que la estaba espiando, giro la cabeza bajándose la falda y me metí rápido a mi cuarto agarrando el pantalón, ella abrió bien la puerta y se cruzaron nuestras miradas ella tenía una sonrisa morbosa, se me salía el corazón pues no sabía si me iba a decir algo, me puse el pantalón frente a ella cuidando que no se diera cuenta que traía su panti, se quedó viendo hasta que me estaba metiendo la camisa, no dijo nada y se metió a su cuarto agarró su bolso y salió para bajar a la sala sin ponerse mini shorts desobedeciendo a mi papá y mamá para que no se le viera la panti.
Me quedé en el cuarto para ponerme la trusa pero estaba muy excitado por ver a mi hermana decidí irme así al templo, baje a la sala, ella estaba sentada en un sillón con el vestido subido a media pierna y un poco abiertas dejando ver la panti, mis ojos fueron directos ahí de curioso, las cerro y después las abrió más mirándome con una sonrisa, seguro también vio mi mirada morbosa, solo fueron unos segundos se escuchó que bajaba mi papá por lo que cerro las piernas bajando el vestido sin dejar de sonreírme, como se decía Sara me estaba echando el calzón para calentarme y le hiciera sexo, porque ella no sabía que a mí no me gustaban las nenas para hacer sexo, salimos con mi papa para irnos al templo.
Mientras daba mi clase a los nenes y nenas traía la pija muy dura al recordar cómo Sara me dejó ver la panti y al sentir que el tubo se movía dentro las tripas al caminar o sentarme y entraba todo, trataba de controlarme porque si se me salía la leche mojaría el pantalón por no ponerme la trusa.

Al terminar de dar la clase fui a buscar a mi papá antes de ir a mi clase, al entrar estaba hablado con otros pastores entre ellos Lucas, los saludé y esperes que terminaran de hablar porque unos tenían que dar clase, miré al pastor Lucas recordando lo que me dijo Josué que les hacía de sexo a su hermana y el, creo sintió mi mirada volteo a verme y me sonrió, cuando salimos de la oficina me puso en mano en el hombro y me dijo.
—- hermano David que grande estás, recuerdo cuando te daba clases de biblia y tenis seis años —-
Lo miré sonriendo contestando.
—- si hermano, me acuerdo de sus clases y trabajos que me dejaba —
Mientras contestaba sentía la pija punzar por lo excitado que estaba imaginado de que tamaño tendría la pija, caminamos por un pasillo porque iba a mi clase y me dijo.
—- hermano David, recuerdo que eras el más travieso de la clase, pero también eras el que aprendía más rápido, seguro vas a ser un buen pastor como tú padre y tendrá tu congregación como yo —–
Me despedí, entre al salón y el sentarme entro todo el tubo al ano provocando el orgasmo, se tensaron los músculos del cuerpo sintieron como la pija punzaba y escupía leche mojando panti y escurriendo entre las bolas, al terminar ya había entrado el pastor que nos daba la clase y no podía pedir permiso de salir, abrí más las piernas y separé el frente del pantalón de la camiseta y camisa esperando que no se mojara.
Aunque descargue la leche seguía muy excitado con la pija muy dura al sentir el tubo en las tripas, cuando termino la clase me puse de pie mirando si no se había mojado el pantalón, no se notaba y fui al baño al bajar el pantalón vi húmedo el frente y entre pierna de la panti estaba muy mojada por la leche, baje bien la camiseta y camisa para taparla y subí el pantalón, salí para esperar a mi papá para regresar a casa a comer, vi que el pastor Lucas estaba hablando con unos jóvenes y señoritas fuera de la oficina de mi papá, me pare retirado mirándolo y pesando que si le hacía sexo a Josué y su hermana, a lo mejor también lo hacía con otros, mientras pensaba eso apretaba el ano para sentir el tubo, salió mi papá de la oficina para irnos, Lucas se acerco despedirse y caminaron a donde estaba yo, al llegar Lucas le dijo a mi papá

—– Pastor Isaac a ver si un día deja que el hermano David vaya a mi asamblea a dar una clase a los nenes y nenas —-
Mi papá le contesto que después se pondrían de acuerdo, nos despedimos y cada quien se fue sus casa.
Al subirnos Sara se sentó con las piernas abierta dejando ver los muslos y panti, se cruzaron nuestras miradas y sonrió morbosamente antes de cerrarlas y bajar el vestido porque mi papá y mamá no la vieran.
Al ir de regreso a casa fui pensado que desde la última comida en casa de mi tío, donde mi prima y hermana hablaban de sexo mientras Gabriela dejaba que le viera la panti y Sara el mini short tocándose la concha, mi hermana andaba desatada insinuándose para ver si hacíamos algo de sexo, a mi no me interesaba hacer sexo con ella pero sí que me viera desnudo y yo mirarla desnudo.
Al llegar a casa subimos a cambiarnos, ella entro a su cuarto sin emparejar la puerta se quitó el vestido y fue sacar la ropa que ponerse, me quedé mirándola por el espejo desde la puerta de mi cuarto, seguro sabía que la miraba saco un conjunto de falda y blusa rosa con blanco, se vistió sin ponerse mini shorts, cuando iba a salir me metía a mi cuarto pero ella al pasar frente a mi puerta sonreía morbosamente, cuando bajo me quite la ropa dejando solo la panti que estaba húmeda, la baje un poco y empecé a sacar y meter el tubo con miedo de que subiera mi papá y me viera, las bolas ya estaban muy pegadas al cuerpo y sabia que estaba por terminar, en la mesa de noche se había quedado una botella de yogur líquido que me había tomado, al sentir el orgasmo empujé el tubo el fondo con la otra mano agarré la botella y metí la punta de la pija en la boquilla y descargar la leche dentro de ella, tuve una descarga de unos ocho buenos chorros, cuando termine saque la pija del la botella mirando la leche adentró que ocupaba la cuarta parte, empecé a sacar y meter el tubo y me tomé toda la leche, ya me había tardado así que subí la panti me puse una de mis trusa blanca clásicas y uno de los uniformes del real Madrid que tenía, al bajar a comer aún tenía la pija muy dura.
Mientras comía, la pija se me bajo un poco aunque tenía el tubo ensartado, al terminar ayude a levantar las cosas de la mesa y me fui a ver un partido de futbol en la televisión con mi papá mientras mi mamá y Sara lavaba trastes y alzaban la cocina.
Cuando ellas llegaron a ver televisión, Sara se sentó cuidando que no se dieran cuenta que no traía mini short y la regañaran, mientras esperaba la hora para salir con los amigos se me fue poniendo dura la pija, dieron la cuatro y pedí permiso de ir con los amigos, salí al patio y tras el auto me quite de la short y trusa escondiéndolos tras las masetas, baje la playera que quedaba a media pierna y salía la calle decidido a dejar que alguien me viera por lo menos desnudó, pero tenía que alejarme de donde vivía para que no me conocieran.

Al caminar y sentir dentro el tubo me mantenía muy excitado por lo que si no había nadie subía la playera del frente dejando de fuera las bolas y pija, estando ya alejado en unas calles me encontré a unos nenes que caminaban hacia mi, me detuve abrieron un poco las piernas, metí una mano atrás de la playera rempujando el tubo, mientras se acercaban los imaginaba desnudos y les decía —- miren como tengo la pija de dura, tengo ganas de hacer sexo —- por la vergüenza no me atreví a levantar la playera para que vieran las bolas y pija, en otra calle encontré unas nenas de unos quince año, en otra a una señora joven con un bebé y a unos jóvenes de unos veinte años y no me atreví a dejarme ver por nadie, ya casi oscurecía y tenía que regresar, camine rumbo a casa subieron la playera a veces, ya tenía muy pegadas las bolas a punto de el orgasmo, me detuve subiendo la playera con una mano y con la otra sacaba y metía el tubo tan rápido que la mano hacia ruido al pegar en las nalgas, gemía y respiraba muy rápido más cuando la pija empezó a echar fuera los chorros de leche al piso, al terminar baje la playera y camine a casa.
Al llegar a la calle donde vivía vi que estaban afuera Cristóbal, Alan y otros dos vecinos hablando, metí las manos bajo la playera subiendo la panti para meter las bolas y pija que seguía dura después de descargar la leche, fui a hablar con ellos antes de entrar a casa, Alan estaba sentado en la reja que protegía un árbol, tenía las piernas abiertas y por la entre pierna del short se le veía la trusa bikini azul oscuro que traía, me quedé parado frente al para mirar discretamente mientras apretaba el ano para sentir el tubo imaginando que lo miraba desnudó y le pedía que hiciéramos sexo, eso me puso muy caliente y en quince minutos sentí que llegaba otro orgasmo, se me tensaron los músculos y me controle para no gemir mientras sentía como la pija escupía la leche mojando la panti, cuando termine no podía quedarme porque sentía muy mojada panti y escurriendo por el muslo parte de la leche, me despedí de ellos y entre al patio saque la ropa de la escondite, subí la playera mirando la panti con la leche con dos dedos limpie la que escurría por el muslo y la tragué, me saque el tubo del ano antes de ponerme la trusa y short para entrar a casa metiendo el tubo bajo el frente la trusa.
Estaban mirando una película Cristina, les di su beso y me senté a verla con la panti empapada de leche hasta que fuimos a cenar y la oración de la noche para irá dormir, al acostarme aun estaba húmeda la panti y me mantenía excitado, espere a que todos estuvieran en sus cuartos, me desnude ensartándome el tubo para bombearme imaginando hacer sexo con Josué disfrutado hasta que me saque dos orgasmo y tragarme la leche, cuando me recupere fui al baño a sacar el tubo para lavarlo, limpiarme el ano, orinar y regrese al cuarto a ponerme la trusa y short para dormir porque se le otro día nos despertándonos temprano para prepararnos para ir al templo, como muchas veces mientras me quedaba dormido me arrepentía de lo que hacía por andar de caliente, pensando que a lo mejor si era el diablo el que hacía que lo hiciera para desobedecer a mi papá y mamá.
El domingo aunque desperté con la pija dura, no estaba muy excitado después de que el día anterior me había sacado cinco veces la leche, después del desayuno nos duchamos y miré por la puerta entre abierta a mi hermana en ropa interior mientras se cepillaba el cabello, al no andar muy caliente me puse trusa típica blanca y la ropa para ir al templo.

Después de la asamblea fuimos a comer aún restaurante y dar una vuelta por un centro comercial parque mi mamá, así se pasó el día sin andar de caliente, en la noche ya acostado me la jale antes de dormir.
Desde el lunes quería hablarle por teléfono a Josué pero me daba nervios, hasta el miércoles me atreví, mientras le marcaba el corazón me latía rápido, más cuando el mismo contesto
—- hola, quien habla —
Respire profundo.
—- hola, hermano Josué soy David me recuerdas —-
—- si te recuerdo hermano David —-
Hizo una pequeña pausa y agrego hablando bajito porque seguro estaba con alguien.
—– y también recuero tu pija grande jajaja —-
El corazón aun me latía rápido de nervios y me atreví a decirle.
—- también recuerdo tu pija parada y tengo ganas de jugar con ella y chupártela —-
De nuevo respondió bajito.
—- a mi me gustaría que me metiera el pene al ano y me des tu leche jajaja —-
Escuche una vox de mujer que le preguntaba con quien hablaba y él le decía
—- es el hermano David lo conozco del templo de la ciudad —
Se escucho que le dijo otra cosa que no entendí y le dije.
—- hermano quieres que después te hable para no meterte en problema —-
—– no te preocupes hermano, es mi hermana que dice que no me tarde porque espera la llamada de un amigo —
Hizo una pausa y agrego
—- me da gusto que me hables, creí que no me ibas a hablar por ser el hijo del pastor —-
—– hermano Josué, como crees eso, me la pase muy bien ese día en la playa el rato que estuvimos juntos, me gusto lo que paso y hablamos —-
—- a mi también hermano David, quede con ganas de que me metieras la pija espero que un día lo podamos hacer —-
Sentía muchos nervios pero al no tener enfrente a Josué me atreví a decirle cosas que no las diría frente a él.

—– el sábado vi en el templo al pastor Lucas que fue a hablar con mi papa, me saludo y después le dijo a mi papa que si yo podía ir a dar clases de biblia a los nenes y nenas de tu templo en estos días de vacaciones, voy a decirle a mi papa para que me mande, así nos vemos en el templo y después si se puede hacemos algo caliente —-
Al terminar no podía creer lo que me atreví a decirle con el corazón latiendo muy rápido.
—– me parece muy buen hermano David, pero recuerda que el pastor Lucas no tiene que saber que te dije lo que hace con mi hermana y conmigo —-
Me lo dijo muy bajo para que su hermana no escuchara.
—- hermano Josué, lo sé eso nadie lo sabara solo dios tu y yo —-
— gracias hermano David, te dejo porque esta mi hermana está en espera del teléfono, háblame otro día, que dios este contigo —-
—- gracias hermano Josué, que dios este contigo, después te hablo —
Por la noche me metí el tubo al ano imaginado que Josué y yo hacíamos sexo hasta sacarme dos orgasmos.
En los días de vacacionas Sara continuaba dejándome ver las pantis cuando traía falda queriéndome poner caliente y le hiciera algo, a veces cuando abría las piernas de curioso le mira la panti imaginándola desnuda porque nunca había visto a una mujer desnuda en persona solo por las películas porno, solo le sonreía sin decirle nada sabiendo que andaba caliente y quería sexo como yo.
Ella resulto ser más caliente y atrevida, una mañana después de desayunar nos dijo mi mama que nos apuráramos con nuestros deberes y nos ducháramos porque íbamos a salir de comprar.

Al terminar de hacer la limpieza de los cuartos se metió ella a duchar primero porque tardaba más en peinarse y arreglase para salir como todas las mujeres, cuando salió del baño entre a ducharme no andaba excitado por lo que solo se veían las bolas colgadas y la cabecita de la pija pegada al cuerpo, al terminar me seque y salí envuelto en la toalla para ir a vestirme al cuarto, antes de entra vi por la puerta entre abierta a Sara peinándose en corpiño y panti bikini rojo con bolitas negras eran nuevas porque nunca las había visto, se escucho ruido en el cuarto de mi mama y me metí a mi cuarto, termine de secarme dejando la toalla en una silla y me puse a sacar la ropa que me iba a poner dejando la puerta un poco mas abierta, estaba distraído buscado en el cajón de espalda a la puerta y no me di cuenta que Sara estaba mirándome las nalgas, dio unos pasos y entro al escuchar gire la cabeza y me miraba con una gran sonrisa, no dijo nada giro lentamente como modelado su ropa interior, al quedar de frente sin dejar de sonreír se quito el corpiño y panti dejándolas en mi cama, gire parándome de frente para verla, por la sorpresa y nervios de que mi mama nos encontrar desnudos la pija la tenía muy pegada al cuerpo, ella giro otra vez para que la mirada desnuda, estábamos a metro y medio separados mirándonos desnudos por un minuto en el cual la pija empezó a crecer.
Después todo paso muy rápido, ella sin hablar nada se pego más a mí agarrándome la pija al tiempo que me dio un beso en la boca, soltó la pija que ya estaba algo dura, sin dejarme de besar paso los brazos por mi cuello empujadme por lo que caí en la cama con ella sobre de mi ente mis piernas moviéndose para sentir la pija en la concha, me quede quieto dejándome sin tocarla sintiendo correr por el cuerpo cosquillas, ella continuo repagando la concha contra la pija por un tiempo hasta que se detuvo y se puso de pie mirándome la pija ya muy dura y por fin hablo

—- creo los amigos del colegio tienen razón, no te gustan las mujeres eres gay jajaja —-
Me agarro la pija dura agregando.
— me hubiera gustado sentir dentro de mi tu palote pero eres un mariquita —-
Por lo que dijo me dieron ganas de llorar, me aguante pero se me salieron unas lagrimas, se dio cuenta sentándose a mi lado pasando un brazo por los hombros y me beso la mejilla.
—- discúlpame hermano por lo que te dije no quise ofenderte, aunque seas gay te voy a querer mucho —-
Se puso de pie agarrando su ropa interior y se fue a su cuarto, me quede sentado llorando recordado lo que paso hasta que escuche que mi mama nos gritaba que nos apuráramos, fui a sacar una trusa clásica blanca, bermuda y playera para vestirme, me seque las lagrimas y baje a la sala a esperar a mama, Sara ya estaba sentada en uno de los sillones se pego a mi diciéndome al oído.
—– David disculpa lo que te dije, no te preocupes no le voy a decir nada a papa y mama que eres gay, pero tu tampoco le digas a ellos que quiera que me metieras la pija —-
Le di un beso en la mejilla.
—- no te preocupes, lo que paso en el cuarto solo lo sabremos nosotros y dios será nuestro secreto —
Me dio un beso en la mejilla.
—- gracias hermano te quiero mucho —-
Bajo mi mama salimos de compras y después a comer a un restáurate con papa, Sara y yo no hablamos ya de lo ocurrido en mi cuarto.

Hasta aquí dejo el relato porque se alargo, en el siguiente les escribo lo que paso entre David y Josué, así de otras situaciones con el pastor Lucas y otras cosas de sexo que se las dejo de sospeso.

Sebas.