Más allá de Tavito (Lado B)
Que podía ser peor que ser manipulado por una niña de 10 años? El hermano de la niña de 10 años…
Era la tarde del sábado dos días después del cumpleaños de Tavito. Mi hermano jugaba la final del torneo de fútbol para el que se había estado preparando todo el verano, mamá y yo mirábamos el partido desde una de las gradas y mi papá con su familia estaba algo más lejos viendo también a mí hermano jugar. Mi hermano siempre había sido completamente diferente a mí, tanto en carácter como en gustos, él era más como mi papá y yo más como mi mamá. Mientras que yo era más introvertido y con un gusto mayor por lo freak, mi hermano era totalmente opuesto: siempre el popular de su grupo en la escuela, con dones innatos para los deportes y con un dominio en temas «de hombres», como los autos, fútbol, etc. En fin, mi hermano creció con el perfil perfecto del estereotipo de «hombre macho», mientras que yo vivía despreocupado por el qué dirán, algo por lo que siempre fuí apoyado por mi mamá, mi eterna cómplice.
El partido iba un poco avanzado, iniciaba el segundo tiempo y yo, aunque no tenía problema en ver un partido, comenzaba a cansarme un poco así que volteaba a los lados viendo cómo la gente reaccionaba a cosas que yo no terminaba de entender. Mientras pasaba la vista por las gradas observando a la gente llamó mi atención que en una de ellas un poco a lo lejos estaba Oscar, el hermano de Michelle viéndome, pero en cuanto su mirada y la mía se cruzaron volteó en otra dirección. El partido seguía, mi mamá emocionada animaba a mi hermano y platicaba conmigo sobre el partido y también por momentos criticaba la forma de vestir de la esposa de mi papá haciéndome reír. En una de esas cuando miraba a mi papá a la distancia como gritaba y saltaba del aciento de nuevo noté que Oscar me observaba, pero yo lo ignoraba, ese chico siempre me había resultado demásiado extraño. Hacía calor y sentía la boca seca, además que tenía antojo de uno de los helados que vendían en el lugar, así que pensé en ir a comprar uno y aprovechar para estirar las piernas,
– Tengo sed, voy a comprar algo. Tu quieres?- Le dije a mi mamá.
– No, estoy bien- Me respondió, y entonces comencé a salir lento habiéndome paso entre la gente. Logré salir del cúmulo de personas y me dirigía a comprar mi helado cuando escuché algo,
– Hey, tú- Decía, y entonces volteé extrañado viendo que se trataba de Óscar.
– Me hablas a mí?- Le dije.
– Si, tú- Dijo, y se acercó más a mí.
– Qué quieres?- Le respondí.
– Ocupo hablar contigo- Me dijo, cosa que me pareció en extremo extraño, pues jamás en la vida había sostenido una plática con ese chico, de echo él siempre había tenido fama de bravucón y ser un tipo raro.
– Hablar de qué?- Contesté.
– Aquí no, hay mucho ruido- Respondió, y de nuevo algo en mí se perturbó.
– Pero de qué quieres hablar?- Dije.
– Vamos a otro lugar y te digo- Respondió. No sabía si era su tono de voz o si era solo yo, pero algo no me convencía, sin embargo al final acepté.
– Ok, pero que sea rapido- Le Dije.
Comenzamos a caminar, yo siguiéndolo a él, hasta que nos alejamos un poco llegando a dónde estaban los baños cuando algo en mí comenzó a sospechar,
– Oye, ya estamos algo retirados, qué me quieres decir- Le dije, y él se dutivo y se giró.
– No te puedo decir aquí, alguien se podría dar cuenta- Respondió. Mis alarmas se encendieron de nuevo,
– No, ya dime- Respondí con voz firme.
– Ya te dije que no, alguien podría escuchar.- Contestó.
– Pues que me quieres decir? Ya! Dímelo- Contesté, entonces el volteó a los lados y finalmente regresó su vista a mí,
– Te ví cogiendo con mi hermana- Dijo. Sus palabras me cayeron como balde de agua fría y mi garganta se comenzó a sentir más seca de lo que ya estaba.
– Qué?- Le respondí. No podía creer que de nuevo me estubiera pasando lo mismo que hace dos días y solo podía pensar en que éste sujeto estaría pensando en molerme a golpes o quizás también sacarme dinero, si la hermana de 10 era una manipuladora porqué sería diferente con su hermano mayor?
– Camina- Me dijo, y retomó el paso. Seguía a Óscar, el parque deportivo dónde estábamos era amplio, yo no lo conocía muy bien, sin embargo al parecer él sabía perfectamente por dónde iba, cuando me dí cuenta que ya estábamos bastante retirados de la cancha y entonces entró a través de un muro de arbustos. -Ven- Me dijo desde atrás de la pared de arbustos y entonces caminé abriéndome paso entre las hojas y salí del otro lado viendo cómo estábamos en lo que parecían ser los transformadores de electricidad, ocultos de la vista rodeados por esos arbustos. Había una pared más al fondo cerrando el cuadro alrededor del los transformadores de electricidad, las paredes tenían grafitis y había algo de basura en el piso. Capté de nuevo la vista de Óscar y entonces comenzó a hablar,
– Entonces, te cogiste a mi hermanita- Dijo seriamente.
– Yo… No sé que dices…- Le decía, con un evidente nerviosismo.
– Yo estaba en el baño, fuí a la casa sólo a eso y escuché cuando alguien entró pero no hice caso porque pensé que solo era Michelle, pero cuando salí y me asomé al cuarto te ví de espaldas encima de ella cogiendotela.- Me dijo con sus ojos en mí. Pensé en correr, pero las piernas no me respondían, tenía la mandíbula apretada y un miedo gigantesco. Un silencio enorme llenó el lugar en lo que me parecía ser una eternidad aunque yo era conciente que solo habían pasado unos segundos.
– No voy a decir nada… Yo sé que no la estabas lastimando… La escuché como gemía y sé cómo es ella, así que no tengas miedo- Me dijo. La respuesta que Oscar me dió fué la última cosa que yo me esperaba que pudiera decir. Y yo que ya me imaginaba estrangulado en ese lugar oculto.
– Entonces qué quieres?- Le dije. Después de lo vivido con Michelle solo podía pensar que el silencio de Óscar no sería gratis.
– Yo…- Decía apartando la mirada.
– Qué?- Le respondí. Trataba de sonar firme para que no me persuadiera.
– Tu me gustas desde hace mucho… Siempre te miraba a lo lejos, y cuando jugamos el otro día con tu amigo cada que podía aprovechaba y te tocaba la piel- Respondió. Realmente no podía creer las palabras que estaban saliendo de los labios de ese chico gordo con cara de malote qué tanto imponía y regresando a aquél día en que jugamos me dí cuenta que era verdad lo que decía, pero no me había dado cuenta en aquél momento.
– Yo… Mira, yo no soy gay, y está bien…- Le decía voltando apenado a los lados cuando entonces él se dió la vuelta,
– Quiero que me cojas a mi también- Dijo bajando al pants negro que usaba en ese momento dejando a mi vista su culo, -Por favor, tú me gustas mucho y quiero que mi primera vez sea contigo- Dijo empinandose poniendo las manos contra la pared de concreto que había frente a él. Yo no sabía que hacer, realmente no me resultaba el más mínimo interés en hacerlo con Óscar, pues a pesar de cogerme a Tavito yo no me sentía atraído por hombres. -Por favor, cógeme, solo será una vez, o sino entonces si les diré a todos que violaste a mí hermana.- Respondió.
– Ok, pero por favor, no digas nada- Le dije.
– No voy a decirlo- Contestó, y entonces lento me acerqué a él. El culo de Óscar era gordo, con unas nalgas grandes, pero a diferencia de las de Tavito que eran esponjosas de carne, las de él eran pura gordura y con algunos granos que contrastaban con su piel blanca. Me saqué el pene del pantalón y de nuevo volteé a los lados, para asegurarme que estábamos totalmente solos. Ver a Óscar ahí de espaldas dándome el culo lejos de exitarme me daba más bien algo de repulsión, sin embargo comencé a mover mi verga con la mano imaginando que era de Tavito el culo que tenía enfrente listo para penetrar y logré una erección completa.
– Métemela- Dijo Óscar, se podía escuchar lo caliente en su voz. Separé sus nalgas con mi mano palpando lo flácido de ellas y miré su ano, tenía exactamente el mismo color que el de su hermana pero claramente más grande y para mí sorpresa, sin pelos. Acerqué mi punta y tan pronto hizo contacto con su hoyo la piel de Óscar se erizó haciendo que sus nalgas cambiaran de imágen. Puntié el ano de Óscar con mi verga sin embargo estaba seco, así que me alejé y arrojé un escupitajo grande en su hoyo para volver a colocarme y dando un empujón con mi verga mi glande entró en su hueco.
– Sssss…- Hizo Óscar en cuanto mi verga comenzó a irrumpir en su ano. Me retiré sacándola y apliqué más saliba para en un segundo empujón ver como mi verga se clavaba completa en el hoyo de Óscar, entonces él levantó más el culo y agachó la cabeza dando un gemido largo. Me quedé un momento viendo el acople de mi hombría entre sus nalgas y entonces aún con la cabeza gacha volvió a hablar. -Cogeme- Dijo.
El poder meter mi verga completa deslizándose con esa facilidad era nuevo para mí, evidentemente el ano de Óscar era más amplio que el de Tavito y no me daba esa sensación apretada que el culo infantil de mi pequeño ejercía, pero aún así se sentía rico la suavidad de ese recto más adulto. Comencé lento a sacar y meter mi erección del ano de Óscar, sentía rico sacarla y meterla entera sin la necesidad de preocuparme por si lo lastimaba o no, y aunque los barros en sus nalgas llamaban mi atención estaba disfrutando lo suficiente como ignorarlo y concentrarme en seguir mis clavadas. En un par de minutos podía entrar y salir de su culo con total facilidad y comenzaba a aumentar la velocidad de mis movimientos haciendome realmente gozar y sentir como dentro del ano de Óscar mi verga soltaba gotas de líquido que hacían más resbaladizo el movimiento.
– Ahh, que rico se siente… Con razón a mi hermana le gusta- Decía. Notaba como le playera de Óscar se le había subido un poco debido al movimiento y notaba como la gordura de su cuerpo que colgaba al frente se movía con cada metida que le daba. -Siempre soñé con éste momento, que me cogieras así- Dijo hablando despacio, la misma voz que antes me daba miedo ahora me provocaba algo de pena.
– Jamás me imaginé que te gustara la verga- Le dije casi sin pensarlo. Sabía que Óscar era raro, más no me imaginaba algo así.
– Pues ya ves, la tuya aunque es la primera que me meten se siente muy rico- Decía, y noté como con su mano se jalaba la verga al mismo tiempo que yo le daba por el culo. Seguía cogiendome a Óscar con fuerza, sus nalgas chocaban en mi pelvis y veía cómo se movían en cada impacto cuando entonces estiró más su mano por debajo y sujetó mis huevos acariciandolos haciendo que de inmediato la imagen de Tavito jugando con mis bolas viniera a mi mente.
– Hasta los huevos tienes gordos- Decía sin soltar mis bolas y yo seguía bombendole haciendo que sus lonjas bailaran, – Ya me voy a venir- Dijo volviendo a estrujarse su pene y yo aumenté el ritmo sintiendo como de pronto mi orgasmo llegaba y le lanzaba los chorros de leche dentro de su gordo culo y entonces comenzó él también a vaciarse soltando una grande cantidad de leche que yo veía desde atrás como caía al suelo. Terminé de descargar todo mi semen y entonces se la saqué quedando Óscar con el culo abierto escurriendo mi leche y aún estrujando su verga,
– Me dejas chupartela?- Me dijo todavía con la cabeza abajo.
– Dijiste que te cogiera y ya lo hice- Le dije, entonces él se dió la vuelta así como estaba con los pantalones abajo y pude ver su pene que efectivamente como había dicho Michelle era pequeño y quedaba algo oculto por la gordura de su cuerpo.
– Por favor, solo eso y ya. Es otra de mis fantasías y sirve que te dejo la verga limpia- Me dijo, y entonces estiró su mano comenzando a masturbarme y recordé cundo Michelle me dijo que había visto a su hermano como se la jalaba por las noches.
– Mamala, pues- Le dije tratando de sonar indiferente, entonces una sonrisa se dibujó en su rostro y arrodillanse ante mí miró un poco mi verga cómo saboreandose y se la metió a la boca. La sensación de la boca de Óscar era distinta de la de Tavo, incluso distinta de la de aquella novia que me había dado mi primer sexo oral, la sentía caliente pero también espaciosa, algo obvio pues no se podía comparar las dimensiones de la boca de Tavito y la de Óscar a la hora de chupar mi palanca. Óscar mamaba mi verga con total dominio, quizás viendo películas había aprendido cómo hacerlo, o quizás simplemente me hacía lo que le gustaría le hicieran a él, pero yo solo disfrutaba como mamaba con fuerza la cabeza de mi pene y le pasaba la lengua haciendo círculos en mi glande. Óscar se sacó mi verga de su boca con un chupetón y después pasó a masturbarme bajando sus labios a mis huevos comenzando a lamerlos sin saber que eso era algo de lo que yo más amaba y después inició chupando uno de mis testículos haciendo que mis piernas flaqueran un poco. Notaba como con la mano que tenía libre Óscar se ahorcaba él mismo su pequeña verga y por algún motivo eso me excitaba mientras él seguía cambiando de huevo en huevo chupandolos. Alejé mis partes del alcance de su boca y él volteó a verme a la cara,
– Abre la boca- Le dije apuntando mi verga a su rostro y él abrió grande permitiendo darme cuenta que una de sus muelas tenía caries, pero eso no me detuvo y le dejé ir la verga entera entre los labios y comencé a cogerlo por la boca. Le bombeaba duro a la boca de Óscar, desquitando esa fantasía que no podía con Tavito metiendo completa mi verga en él y dándole duro como hace unos momentos le había dado por el culo. Mi verga salía toda llena de saliba y yo volvía a metercela completa haciendo que su nariz pegara en mi monte de Venus y mis huevos se embarraban en su barbilla haciendo que las mejillas y la barba de Óscar se llenaran de su propia saliba mientras yo lo tomaba con amabas manos de la cabeza y cogía su boca a mi antojo sintiendo su lengua por debajo de mi pene rozando cada ves que se la sacaba y se la metía. Le metí hasta la garganta mi palanca por una última vez a Óscar quedando su nariz aspirando los pelos de mi intimidad y los lechazos salieron directo a su garganta botando uno tras otro con fuerza. Hasta que sentí la última gota de semen salir le saqué mi verga de entre los labios llena de saliba y algo de semen, volteé a ver a Óscar que seguía aún arrodillado, tenía la mirada perdida y aún estrujaba su pequeña verga ya flácida y notaba como él también se había venido una segunda vez y su semen creaba un pequeño charco frente a él.
– Entonces, no vas a decir nada?- Le dije quitando con mis dedos la saliba que había quedado en mi herramienta para después acomodarme la ropa.
– No voy a decir nada, ya vete- Me dijo como si estuviera en un trance mientras su cara aún lucía brillante de saliba alrededor de su boca y un poco de mi leche caía del borde de sus labios.
– Seguro?- Le dije.
– Sí, si no la lastimas está bien. Ahora vete- Contestó, y entonces me dí la vuelta y lo dejé ahí tirado escurriendo semen de sus dos hoyos y caminando a paso largo regresé a las gradas para ver el último de tramo del partido justo donde mi hermano metía un gol.
– A dónde fuiste? Dijiste que ibas a comprar algo y ya no te ví- Dijo mi mamá.
– Me fuí más lejitos para comer agusto- Le dije, y ella solo me miraba.
– Pues lo bueno que alcanzaste a ver a tu hermano meter su gol- Dijo, y entonces nos comenzamos a reír y aplaudir viendo como comenzaba la ceremonia de premiación. Terminó el evento y nos reunimos a felicitar a mi hermano incluyendo también a mi papá que lucía sumamente orgulloso mientras mi mamá guardaba su distancia y algunas fotos y minutos después todos comenzaron a salir. Yo voteaba a ver a los lados por si captaba a Óscar entre la gente, más no lo pude ver, lo cual me hizo pensar si se habría quedado más tiempo ahí jalándose la verga después de haberle hecho su sueño realidad,
– A quién buscas?- Dijo mi mamá, haciendo que recuperara mi atención.
– De seguro vió a Liz- Dijo mi hermano riendo.
– Ehhh, todavía andas detrás de Liz- Respondió mi mamá y todo el camino de regreso a casa fué burlas hacia mí y platicar sobre el partido mientras yo solo pensaba que ojalá y la cogida que le había dado a Óscar fuera suficiente para su silencio.
Pero aún no subes la parte de la hermana…
Me encanta tu historia y estaría bien se
siga cogiendo a Óscar y Tavito más que a la hermana de Óscar.
Si la subió, pero al ser mujer, la enviaron a la categoría hétero. Ven por qué les dije que eso se prestaría a confusiones? Mejor que siga con chicos y así nadie se pierde <3
La parte de la hermana se subió hace dos días.
Gracias por este episodio. Algo bizarro, pero supongo que era necesario para cerrar este ciclo… Ahora es momento de ir por ese hermano de Joel. <3
Síguete cogiendo a la morra neta me exite machín has que cuando te la cojas en su casa el morro se una y le des a los 2
Podría haber alguna extorsión dónde joel sea cogido? Me calientan mucho las historias de extorsion
Que pasaría si tavo se entera de esto, se prestaría o te dejaría… Esto me carcome digo el te quiere y dicen que los niños y los borrachos siempre dicen la verdad
Woow siempre ocurren esas cosas amigo buen relató
Sigue así ✌✌✌✌
Alv ya te cogiste medio barrio jaja