Me enamoré de un negro de 32 y perdí mi virginidad a los 5 años (HISTORIA REAL)
En este 1° irá la introducción pero también habrá mucho sexo .
Hola soy Maicol, actualmente tengo 18 años (casi 19), pero mi historia comenzó a tan solo dos meses de cumplir 5 años de edad ¡Y te la voy a contar!
(Cuando hayas leído la historia te vas a preguntar cómo es posible que un niño de 5 años haya tenido tantas experiencias sexuales, pues la respuesta es muy sencilla, yo no era el típico niño de 5, de hecho mi estatura estaba lejos del promedio, era más alto que la mayoría de niños de 7 años de mi barrio (incluso había un amigo de 8 años y nuestra estatura era similar), según los adultos mi mentalidad y madurez no eran normales para un niño de mi edad y se negaban a creer que tenía 5 años, pero asumo que se debe a todo lo que tuve que vivir ya que cuando mi mamá estaba muy enferma a mi me tocaba cuidar de ambos.)
Esta es la introducción pero es necesaria para que entiendan porque me enamoré perdidamente de ese hombre y como inicio nuestra relación y porque mi madre la aceptó, al inicio hablo sobre cómo nos conocimos pero unas líneas más abajo les contaré una historia con mucho contenido sexual para que entiendan porque yo era y soy tan pervertido.
¡Comencemos!
Para poder entender esta historia debo iniciar contando que soy producto de una violación, si mi hermosa madre era abusada sexualmente por su padre, su tío y su hermano desde que tenía 10 años hasta los 15 años, a esa edad decidió escapar, el día que la abusaron los tres al mismo tiempo, ella huyó sin saber que estaba embarazada.
POSDATA: Mi tío (el hermano de mi mamá) era abusado por mi abuelo, su tío y varios amigos de ellos desde que él tenía 6 años y el tan solo le lleva dos años a mi mamá, ella dice que por mis rasgos lo más probable es que yo sea hijo de mi tío y dice que a él no le guarda rencor.
Mi madre y yo vivíamos en un barrio muy pobre en una ciudad de Colombia, ella trabajaba como recicladora pero no podía hacer mucha fuerza ni estar tanto tiempo de pie ya que los abusos sexuales y el maltrato de su infancia le dejaron algunas secuelas físicas (también psicológicas), así que desde que tengo uso de razón le he ayudado a mi madre en casi todas las cosas y debido a ello me volví muy autosuficiente, ágil, trabajador, responsable, muy maduro y bastante «avispado», mientras los niños de mi edad se preocupaban por jugar, pasear o juguetes, yo me preocupaba por conseguir dinero para comprar comida, ayudar a mi madre cuando no se podía mover, hacer algunas reparaciones en la casa y en sexo, mucho sexo.
A prendí a leer a los 4 años cuando acompañaba a mi mamá a un taller de alfabetización, la instructora al ver mi interés me empezó a enseñar lo básico, leer, escribir, sumar, restar, dividir y debido a mis obligaciones y vivencias me volví bueno con los números y negociando (dicen que soy bastante manipulador jejeje).
Vivíamos en un lote invadido en un cerro donde nadie quería vivir porque estaba muy retirado de los postes de luz y era muy díficil que subiera el agua, además era una zona rocosa y la vivienda más cercana estaba a más o menos unos 60 o 70 metros, casi todas las casas eran de madera y los que vivían mejor tenían algunas partes de su casa con ladrillos, nuestra casa era de solo madera y algunas latas, no teníamos luz y le pedíamos agua a los vecinos, la casa estaba a punto de caerse ya que no podíamos pagarle a alguien para que la arreglara, teníamos un viejo colchón roto recogido de la basura el cual mi madre puso sobre unos ladrillos y tablas que recogía de la calle, de esa manera nuestra «cama» no se mojaba tanto, teníamos una vieja estufa a gas de dos puestos pero la pipeta de gas llevaba meses vacía, así que cocinamos en un fogón de leña en el patio, en la sala habían tres sillas *chuecas y rotas, en la cocina unas ollas negras y *abolladas con unos cuantos vasos desgastados y un par de cuchillos sin filo, esas eran todas nuestras pertenencias.
Como habían muchos recicladores y era difícil conseguir algo de valor, mi madre decidió un día comprar una bolsa de dulces (caramelos) y salir conmigo a pedir limosna ya que solo comíamos una vez al día y en ocasiones no teníamos nada para comer.
Ella eligió uno de los barrios donde vive la gente rica porque supuestamente era más fácil conseguir ayuda en un lugar así, llevábamos casi 4 horas entre caminar y descansar (por la enfermedad de mi madre) y solo habíamos conseguido $100 pesos colombianos (no alcanzaba ni siquiera para comprar un pan o una bolsa de agua «menos de un centavo de dólar») y ambos estábamos muy tristes y con mucha hambre, de repente mi madre vió a alguien a unos metros de nuestra ubicación, era un hombre alto, atlético, de tez negra y una sonrisa *vislumbrante (después supe que tenía 32 años, pero su apariencia era la de un chico de 24 o 25), el sacó algunos billetes para comprar un tinto y un cigarrillo en una esquina mientras reía con las personas que estaban allí, mi madre se acercó con la esperanza de que ese hombre le diera lo suficiente para comprar un pan y así darme algo de comer.
Ella se acercó a él bastante rápido y yo me quedé unos cuantos metros atrás porque estaba cansado, cuando llegué vi que él le estaba dando un billete de $2.000 pesos colombianos (menos de un dólar) y mis ojos se iluminaron porque sabía que iba a comer algo, en ese momento pasaron unas personas comiendo empanadas y mi mirada se dirigió hacía ellos, yo estaba perdido viendo cómo comían y me imaginaba que era yo quien devoraba esas empanadas estaba tan concentrado en mi sueño de comer que no noté que ese hombre a quien llamaré Arnold me estaba observando.
Arnold nos preguntó; ¿Tienen hambre?
Mi madre y yo nos miramos y bajamos la mirada.
El nos vió de arriba a abajo como buscando algo (nuestra ropa estaba rota y sucia) y luego nos dijo; vamos, en casa hay algo de comida.
Mi madre al principio mostró algo de desconfianza (estábamos en un barrio residencial de gente con mucho dinero, pero su apariencia era sencilla, una camiseta sin mangas, una pantaloneta de un equipo de fútbol y unas chancletas, nada común en una persona rica que está en la calle) pero al ver que algunas de las personas que pasaban lo saludaban con mucho respeto entonces bajó un poco la guardia y decidió que fuéramos con el, nosotros estábamos justo afuera del conjunto residencial en el que el vivía y al ingresar vimos que los vigilantes y las personas que pasaban lo saludaban, incluso algunos perros se lanzaban en busca de sus caricias y mi madre murmuró; «parece ser una buena persona», un vigilante salió y se ofreció a llevarnos en un carro ya que es un conjunto residencial MUY GRANDE y las casas quedan lejos de la portería, Arnold aceptó.
Llegamos a su casa (el conjunto residencial es de solo casas, casas gigantes), la casa de Arnold era de 3 plantas, con jardín, garaje privado encerrado y cuando abrió la puerta de su casa mi madre y yo quedamos perplejos, ¡Era una casa muy hermosa! baldosas negras que brillaban, un juego de sala color blanco en puro cuero, cortinas que hacían juego con la estupenda decoración, un televisor que cubría la mitad de la pared, un equipo de sonido con parlantes más altos que yo, lámparas colgantes, cuadros extraños, un acuario con peses coloridos , un comedor de 6 puestos junto a un mini bar, una cocina más grande que nuestra casa, con estantería en las paredes, horno, licuadora, microondas, una nevera de tres puertas y un montón de utensilios de cocina muy bien organizados, (era una casa muy amplia, creo que allí cabía nuestra casa unas cinco o seis veces jejeje).
Eran cerca de las 11:00 am y el nos preguntó; ¿Que desean beber?
Hay Coca-Cola, jugo de naranja, limonada y té.
Nosotros no supimos que responder así que el nos dió Coca-Cola y sacó unas galletas algo parecido a un atún (después supe que es algo llamado diablitos un producto muy consumido en Venezuela) lo mezcló con un aderezo, lo untó en las galletas y nos dijo; coman mientras termino de preparar el almuerzo (esas galletas eran deliciosas).
Nos sentó en una de las dos salas que hay en el primer piso y prendió un inmenso televisor para que viéramos algo mientras el cocinaba.
Minutos después nos sirvió la comida y yo me quedé petrificado, nunca había visto tanta comida frente a mi así que empecé a comer a toda prisa y mi madre hizo lo mismo, el solo nos observó y nos preguntó; ¿Cuando tiempo llevaban sin comer?
Mi madre hizo una pausa y respondió; «no habíamos comido nada desde ayer en la tarde, pero ya estamos acostumbrados, a veces duramos hasta dos o tres días sin comer nada».
Arnold se mostró asombrado y por sus mejillas empezaron a salir unas lágrimas, se levantó, giró su cuerpo, llevó las manos a su cabeza y con la voz temblorosa dijo;
Voy a hacer lo posible por ayudarlos. (Allí supimos que era un gran ser humano)
Terminamos de comer y el nos llevó hacia uno de sus carros, posteriormente nos llevó a un super mercado y nos compró muchas cosas, pero notó que no podríamos cargar con todo eso así que se ofreció a llevarnos a nuestra casa, al acercarse a nuestro barrio se le notaba la preocupación ya que era un lugar indeseable, al llegar mi madre habló con el dueño de la ferretería para que le dejara guardar el carro y Arnold llevó el mercado hasta nuestra casa, al verla volteó hacia nosotros con mucho asombro, entramos y al ver nuestro piso de tierra, una casa prácticamente vacía, a punto de caerse y una colchoneta rota, soltó una lágrima.
Descargó el mercado y nos pidió que lo acompañarnos a la ferretería, compró unas tejas, tablas, puntillas y unas herramientas y se dispuso a remodelar nuestra casa, se hizo un poco tarde así que se fue con la promesa de venir al día siguiente y así fue, al otro llegó a las 8 ocho de la mañana con más materiales para el arreglo y un par de obreros a quienes contrato para la construcción, tardaron varios días pero nuestra casa ya no se estremecía con el viento, la lluvia no nos inundaba, nuestro pipeta ya tenía gas, contábamos con una nueva estufa, dos habitaciones, una nevera y le pagó a un señor para que nos conectarán al poste de luz y a una vecina para que nos compartiera agua por una manguera. A la casa le pusieron nuevos cimientos, tablones nuevos, techo nuevo, desagüe, taparon el pozo donde hacíamos del cuerpo y colocaron una taza de baño (y mi madre por fin descubrió el lugar por donde yo me escapa para que me *destrozaran mi culito jejeje)
Adicionalmente me compró ropa y calzado, si ropa nueva, nuca antes había usado algo nuevo siempre eran cosas de segunda mano o que conseguíamos en la basura.
Cuando me dió esa ropa lo abracé con mucha fuerza y mi rostro quedó cerca de su verga, en ese momento sentí algo muy especial y algo se estremeció dentro de mí.
Mi madre se sorprendió por el abrazo que le dí a Arnold ya que nuca me había visto abrazado a nadie y siempre me mantenía muy alejado de los hombres adultos (al menos eso creía ella) debido las violaciones que ella sufrió y a que en mi barrio vivían algunos depredadores sexuales de los cuales les hablaré en este instante para que pueden entender mi mentalidad y porque se me paró la verga abrazar a Arnold. (Lo que les voy a contar sucedió mucho antes de conocer a Arnold)
En el barrio había un señor de aproximadamente 50 años de edad, barrigón, alto, barbudo y depravado llamado don Pedro, él era considerado el más rico del barrio ya que tenía una chatarrería, una panadería, un súper mercado, un restaurante y un bar, además su casa era la más bonita (no como la de Arnold pero aún así era muy bonita), y grande, tenía un patio con cerdos y gallinas que criaba, su casa era la única de ladrillos en toda la cuadra y tenía una plancha (techo de cemento) para construir un segundo piso pero la parte de atrás aún tenía techo de zinc y era fácil ver desde el techo lo que sucedía dentro de esa casa (una parte del techo estaba muy levantada), todo el mundo sabía que don Pedro era un pervertido que se cogía a varios niños, niñas, adolescentes y jóvenes de la cuadra y el barrio, pero nadie decía ni hacía nada ya que él era una de las principales fuentes de ingreso dado que tenía varios negocios y muchos empleados, además le fiaba a la gente y pues algunos incluso convencían a sus hijos para que fueran donde don Pedro ya que este siempre les daba dinero a cambio de comerse sus culitos, también tenía algunos criminales del barrio a su servicio y se dice que controlaba parte del expendio de drogas.
Mi madre me tenía prohibido acercarme a ese señor y ambos se tenían mucho odioso (nunca supe la razón) pero don Pedro siempre me miraba con deseo y perversión pues yo era un niño de cabello castaño claro, ojos verdes, nalgon (de hecho algunos se burlaban porque decían que yo siempre tenía el culo parado), y era muy alto e inteligente para mí edad, sin embargo el siempre evitó problemas con mi mamá y aunque ella me tenía prohibido acercarme a el, a mi me gustaba espiar desde el techo de su casa y ver cómo se cogía a los niños, algunos de mi edad otros un poco mayores.
No se porque, pero me encantaba ver esas escenas, desde la puerta de mi casa vigilaba cuando el llegaba con algún niño o niña o cuando ellos llegaban a tocar a su puerta, guiados por el hambre y la necesidad y a veces hasta obligados por sus padres (me sentí tentado muchas veces ya que los niños que él se cogía siempre tenían dinero) cada vez que alguien llegaba yo corría a subirme a su techo, don Pedro ponía pornografía infantil (ahora sé que la descargaba por Ares) en una vieja computadora y empezaba a besar a los niños mientras les quitaba sus camisas y bajaba sus pantalones, luego los niños empezaban a chupar su enorme, gruesa y peluda verga que ni siquiera les cabía bien en sus pequeñas boquitas, ¡En serio ese pene era enorme! (incluso ahora que ya soy adulto no he vuelto a ver un pene tan grueso), los niños parecían disfrutar de ese inmenso trozo de carne que los *afixiaba mientras el empujaba sus cabezas contra esa monstruosidad, vi a varios amigos míos entre ellos a Pipe un niño de 9 años, quien fue a tocar a casa de don Pedro mientras su madre estaba sentada en el andén viendo como su hijo entraba a que le *destrozaran su culito, yo corrí por el patio y me subí al techo a ver una vez más esa hermosa escena (ya había visto pornografía gay y hetero con los chicos pues en esa época estaba de moda las salas de internet), Pipe se sienta en la cama, don Pedro pone un vídeo en el que dos adultos tienen relaciones sexuales con un niño, don Pedro se acerca a Pipe, lo empieza a besar, mete sus manos entre su pantaloneta rota y Pipe se estremece, don Pedro le quita su playera, baja su short y un calzoncillo de Pokémon, lo acerca a su cuerpo y Pipe le ayuda a desvestirse, pone su enorme verga en la boca abierta del niño y con su mano cubre la cabeza del infante y lo empieza a empujar contra su pene, a Pipe se le escapaban un par de lágrimas y tosía atragantado por la gorda verga de don Pedro, él cual no mostraba compasión hacia el chico, luego lo puso en cuatro patas y empezó a lamer el culito de Pipe el cual parecía estar disfrutarlo ya que no era su primera vez (yo había visto antes como se lo follaba), mientras esa lengua se habría paso por su ano, después comenzó a introducir uno de sus enormes y *callosos dedos mientras Pipe gemía y se reía, luego introdujo un segundo dedo, el cual ingreso con muy poca resistencia, después don Pedro sacó un tarro con crema para hidratar la piel, la untó en su pene y lo restregó por todo el culito de Pipe, volvió a meter sus dedos y poco a poco su verga empezó a ingresar por el ano del alegre muchachito, de repente escuché un grito que jamás olvidaré ¡Aggggggg! Y volvió a sonar cuando don Pedro ya tenía más de la mitad de su verga en el intestino de Pipe ¡Aggggggg! «Saquelo un ratito don Pedro que me duele», grito el pobre niño, pero don Pedro estaba perdido en la pasión y lo ignoro ¡Auh, Auh, Auh, Auh…! Exclamó el pobre Pipe cuando los huevos de don Pedro golpearon sus nalgas, ya estaba casi todo adentro, ¡Duele, duele! ¡Ay don Pedro duele! Gritaba entre lágrimas y con voz *chillosa, don Pedro se detuvo un rato y sin sacárselo lo sentó en sus piernas mientras le besaba el cuello y le toca su pequeño *penecito, Pipe se estaba secando sus lágrimas, y le pedía que se lo sacara un ratito, su cara estaba roja y soltaba unos cuantos mocos, intentaba levantarse pero don Pedro no escuchaba sus súplicas y le dijo; «ni que fuera la primera vez», (estuve a punto de gritar por ayuda al ver que mi amigo lloraba, pero el miedo y la emoción me ganaron), después de unos minutos de estar sentado sobre sus piernas con la gruesa verga de don Pedro *separandole las nalgas, su llanto empezó a disminuir y su vos ya no era llorona, Pipe busco la boca de don Pedro, lo besó y empezó a mover sus caderas, ya no habían lágrimas si no gestos de placer y dolor al mismo tiempo, pasados unos minutos don Pedro lo levanto manteniendo su pene a dentro, lo acostó quedando sobre aquel niño feliz y empezó a hacer un movimiento lento de arriba abajo mientras Pipe se quejaba, pero poquito a poco empezó a acelerar el ritmo y un ¡Ah, ah, ah! Salía de la boca de Pipe quién hacia cara de dolor la cuál empezó a cambiar por una sonrisa mientras sus sonidos pasaron a ser jadeos, (como alguien que esta muy excitado), don Pedro lo besaba apasionadamente y le dijo, «así me gusta, ya tenías ese culito apretadito de nuevo» y el sonreía, y le contestó «yo solo culeo con usted y estos días no estaba» don Pedro se lo sacó y se puso boca arriba y sin que nadie dijera palabra alguna, Pipe se levantó, don Pedro limpió su verga la cual tenía un poco de mierda del culo de mi amigo, y tan pronto don Pedro soltó la toalla y se puso más crema, Pipe se sentó lentamente sobre ella y empezó a cabalgar con gran experiencia, levantó su cabeza y se mordía los labios mientras sus manos recorrían la *desprorcionada barriga de don Pedro, vi que Pipe estaba muy feliz y sonreía, don Pedro lo tomó de su cadera sin sacarle el la verga y lo puso boca arriba con las piernas en sus hombros, (el cuello de del chico parecía que se iba a partir), lo empezó a embestir con mayor intensidad que antes mientras Pipe gemía, lo besaba y acariciaba con loca pasión, ya habían pasado quizás media hora cuando Pipe empezó a gemir con más intensidad, don Pedro había aumentado mucho más el ritmo (parecía que lo quería partir) ‘plahs, plash, plash’ sonaba como si alguien estuviera aplaudiendo y Pipe gritaba ¡Ah, ah, ah, ah, ah, ah! De manera alocada, de repente se detuvo y se escuchaban dos respiraciones profundas y muy cansadas, don Pedro mantuvo esa posición por unos segundos mientras su lengua exploraba cada rincón de la boca de aquel chico con quién yo rebusca en la basura, luego saco su trozo de carne, llena de mierda del destrozado culo de mi amigo, Pipe se intentó levantar pero parecía que no podía, sus piernas temblaban y tenía poco aliento, le costaba mantenerse de pie así que decidió tirarse boca arriba en la cama y con sus manos *abanicaba su colita enrojecida para minimizar el ardor mientras don Pedro prendía un cigarrillo, yo alcance a ver un gran agujero en medio de las piernas de Pipe, casi que podía ver su interior y un líquido blanco empezó escurrir, don Pedro le dijo con vos enojada; «me va a untar las cobijas» y le tiró una toalla para que se limpiara, Pipe se limpió y aún agotado agarró nuevamente el pene de don Pedro y lo acariciaba mientras los miraba con una sonrisa, pasados unos minutos Pipe por fin se pudo levantar aunque aún un poco tembloroso, se vistió, abrazo a don Pedro, volvió a tocar esa verga sin quitar la mirada de ella y don Pedro sacó un billete de $10.000 pesos colombianos (aproximadamente 3Usd en esa época ‘2009’) se los dio y le dijo; dile a tu mamá que mañana pase por unas cositas al supermercado, tocó las nalgas de Pipe y este se fue sonriente.
Mientras todo esto pasada y a medida que veía esas escenas yo me excitaba y pasaba mis deditos por anito que ya está empezando a desear verga pero no sabía que pronto llegaría mi momento.
Esa no fue la primera ni la última cogida que vi que don Pedro le pegaba a mis amigos y compañeritos recicladores, pero sin lugar a dudas las que mas me gustaban eran las tremendas folladas que le daba a Mauro y José Luis, dos hermanitos de 12 y 7 años, pero eso se los contaré en la segunda parte. ¡Les va a encantar!
A partir de la segunda parte todo se empieza a poner mucho más morboso.
De pendiendo de la aceptación de este relato continuaré con la historia, DATO; «parte de esta historia fue noticia nacional y muchos colombianos la conocen así pueden corroborar que TODO es real».
Si quieren más hágamelo saber para continuar…
sigue contando mas y saludos buena historia amigo…. 🙂 😉 🙂 😉 🙂 😉
Si continúa
Estuvo genial todo. Cuando vas a continuarla? Ya te leyeron como 100 personas.
Es la repeticion del anterior….buuuu estafa!!!!! Un fraude
Hola, es una versión complementada, mis recuerdos de esa época son un poco difusos así que a medida que voy recordado algunos sucesos lo voy plasmando, ya envié el segundo capítulo pero aún no lo han publicado, ahora todo depende de los administradores de la página.
Agradezco su apoyo.
Buenisimo sigue contando me gústo mucho la 1ra parte
Que rica historia, me quedé con la duda de la noticia nacional, como la busco? Palabras claves para buscarla en Youtube?
A veces gusta pajearme mientras veo noticias de este tema 🤤