Me enamoro de mi tío (Continuación de mi primo Raúl Capitulo 4)

Después de coger tan rico con mi primo y mi tío, una sensación de lujuria se apodero de mi y sobre todo de placer por sentirme deseado tanto por mi primo como por mi tío, que en honor a la verdad me lo hizo mucho mejor que mi primo..
Permanecí unos momentos más ahí sobre las cajas de cartón, atónito por lo que había pasado, quitándome el semen de la cara y sintiendo como me escurría el que tenía en mi ano, dos hombres diferentes y tan iguales en un solo día, estaba extasiado, sentía adolorido, pero un dolor rico, del que uno gusta sentir, en mi labios aun sentía los besos apasionados de mi tío, besos que se saben dar, de los que no puedes olvidar, pero también evocaba los de mi primo y su salvajismo, estaba perplejo, me preguntaba, que sigue? ¿Qué va a pasar ahora con Raúl? ¡¡Me gusta mucho, pero mi tío me lo hizo mejor!! Era una locura pensar todo que en tan poco tiempo sucediera, de verdad una locura… Me levanté me puse mis shorts y mi playera y empecé a caminar hacia a dentro de la casa.

En casa todo normal, mucha gente, mi mama con mi tía y mis primos a la mesa junto con Raúl que ya estaban comiendo.

—Mamá— Que onda perdidoooo!!?? ¿¿Dónde andabas??

—Yo— Estaba acomodando unas cosas en el garaje y de ahí me fui con Roberto a su casa a jugar un rato al video juego

—¿M— ¿Pero ¿cómo te vas a ir con el vecinito Robert, si sabes que aquí están tus primos mijo? ¡¡¡Acuérdate que los tienes que atender!!!

—Primos— No se preocupe tía, como quiera ahí estuvimos jugando en el VG, tenemos más días

—Yo— Voy a bañarme para bajar a comer mamá…

Sentí de inmediato la mirada de Raúl, pero de alguna manera la esquive, de verdad estaba muy adolorido como para una tercera faena. Me encaminé al baño y me empecé a bañar, sentir el agua tibia cayendo sobre mi cuerpo era reconfortante, el pasar la esponja con jabón por mi cuerpo simplemente era relajante, cerraba los ojos y al pasarme las manos por mi cuerpo evocaba las manos de mi tío y de Raúl, era increíble el placer de recordar esos candentes momentos que simplemente me empezaba a excitar, pero además sentirme tan deseado, tan querido…

Terminé de bañarme y me fui a mi cuarto, me estaba secando y tal como me imaginé entra Raúl, cerra la puerta tras de sí.

—R— Que paso primito? ¿Estas bien?

—Yo— Si… Estoy bien

Me estaba comportando cortante, pues realmente estaba contrariado, lo veía y me encantaba, tan guapo y tan hermoso, pero en ese momento de verdad que yo estaba sacado de onda y el lo notaba.

—R— Dime si algo pasó, si no te gusto que estuviéramos juntos, si no te gusto lo que hicimos… No pasa nada…

—Yo— No primo, o sea. si me gusto, pero no se… estoy un poquito sacado de onda

Él se aproximó hacia mí y me paso su brazo por el hombro y tiernamente me dijo:

—R— No te preocupes primito es normal, igual y es lógico, somos primos, nos acabamos prácticamente de conocer entonces, pues está bien… De cualquier forma, quiero que sepas que te quiero mucho, que me encantó y que ojalá lo podamos repetir

Me da un beso en la cabeza y se marcha de mi cuarto. Terminé de vestirme y bajé a comer y aún estaban ahí mis primitos mis papas y mis tíos, casualmente y pareciendo hecho adrede quedé al lado de mi tío, el me abraza y me da un beso…

—Tío— Que paso mi sobrino lindo? ¿¿¿Como estas??? ¡Bien grandote usted bien dado!!!

Mis papas y primos simplemente veían la escena y asentían como lo más normal, sin imaginar todo lo que hace algunas horas había pasado entre él y yo… Todo era tan surreal, pero a la vez tan normal y común, después de ese efusivo saludo él puso su mano sobre mi pierna y yo sentí un hormigueo y una excitación por todo mi cuerpo, y como la mesa tapaba todo pues nadie se daba cuenta lo que pasaba abajo. En la plática en donde todos intervenían se hablaba de ir a la playa y diferentes actividades, al mall, a la plaza, al malecón, en fin, a diferentes lugares.

—Papa— Yo creo que podríamos ir a la playa y pasar el resto del día allá, ¿qué opinan?

—¡¡¡Primos— ¡¡¡Si la playa esta genial, vamos!!!

—Mamá— Pues si vamos a ir tenemos que apurarnos ya por que son casi las 11 am, y si vamos a pasar toda la tarde allá tenemos que subir todo

—Tíos—Podemos comprar pollo asado, Sabritas, galletas y refrescos de camino, para no perder tiempo…

Nos organizamos y empezamos a empacar las cosas para pasar el resto del día en la playa, nos fuimos en varios carros y en esta ocasión me fui con mis papas y mie primos, fue un trayecto divertido con canciones y charlas indistintas, mis primos jugando y así.

Llegamos a la playa y rentamos una palapa grande en donde estábamos todo juntos, mientras mis tíos y papas organizaban todo lo de la comida y bebidas mis primos y yo nos fuimos a refrescar al mar, entre el agua mis primitos y yo nadábamos, jugábamos, salíamos y entrabamos, en ocasiones nos quedábamos un rato en la arena y hacíamos castillos o montones de arena, nos enterrábamos y cosas así, a lo lejos veía que mi primo Raúl estaba platicando con una chava de su edad, seguramente ya se la había ligado, mis papas y tíos sentados tomando cerveza y en general todos pasándola excelentemente bien. Honestamente después de la mañana tremenda que me propiciaron mi tío y mi primo estaba bastante satisfecho, sentía un dolor rico en mi ano y con la calidez del agua salada sentía un cosquilleo rico… Nos pasamos cerca de 6 horas en la playa, comimos regresábamos a bañarnos, en fin, todo lo que se hace en una playa, ya por allá de las 6 de la tarde estábamos listos para regresar, nos fuimos a las regaderas para quitarnos la sal y entro mi tío a darnos toallas a los tres a mis primos y a mí, les pasa las toallas a mis primos y ellos salen, entonces me quedo en el baño obviamente a propósito, y cuando mis primos cierran la puerta mi tío me empieza a besar apasionadamente.

—Tío— Chiquito, ya te extrañaba…

—Yo—También yo tío…

Mi cuerpo desnudo y el de el vestido me excitaba demasiado, nos abrazábamos con cariño y sus besos me excitaban tanto como el que me agarrara como si fuera su posesión más preciada, el estar en ese baño era completamente un riesgo, por lo que me dice…

—Tío— Tenemos que encontrar la forma de vernos más tarde mi amor, porque aquí no se pueden hay gente esperando entrar…

—yo—Si tío, mejor cuando lleguemos a la casa, nos ponemos de acuerdo

—Tío— Si chiquito dame otro beso….

Y así lo volvía a besar mientras le agarraba su tranca que parecía que iba a explotar, era difícil luchar contra tanta lujuria, pero por fin salió del baño y yo solo me envolví en la toalla y Sali para reunirme con el resto de la familia. Total, nos cambiamos nos subimos a los carros y enfilamos el camino a casa. Al llegar mi papa nos manda a mis primos y a mí a casa de mi abuela por lo que me siento un poco decepcionado porque quería seguir con mi tío y terminar lo que habíamos empezado, pero pues comento que le harían una reparación a la camioneta por que le empezó a sonar algo, que Raúl les ayudaría, de mala gana nos fuimos a casa de mi abuela y ahí estuvimos el resto de la tarde noche, ya como a las 10, llega mi primo Raúl y nos dice a todos que mis papas y mis tíos se fueron de antro, que si queríamos jugar a algo, (Increíblemente me puse un poco triste porque yo quería estar con mi tío, a pesar que mi hermoso primo ahí estaba)

La noche transcurrió normal mientras jugábamos a juegos de mesa los cuales la verdad me aburrían, mientras todos mis primos y Raúl parecían divertidos yo honestamente me aburria, yo lo que quería era acción, quería mamar verga o coger, eso era lo que ocupaba mis pensamientos, evocaba los besos de mi primo en el Mall, pero también los apasionados de mi tío en el Garaje, era fácil de cifrar que prefería a mi tío mil veces por lo varonil y super cachondo además de experimentado al llevarme al placer como nadie lo había hecho jamás. En un momento me levante y fui hacia el patio para tomar aire fresco y no sé, también esperar que Raúl saliera y nos diéramos un buen faje, pero vi algo mucho mejor, a lo lejos se veía que iban llegando mis papas con mis tíos, para la camioneta en la casa y se bajan mi mama y mi tía y mi papa con mi tío continúan hasta la casa de mi abuela que es donde estábamos nosotros… Se me iluminó la cara al ver nuevamente a mi tío, por lo que al entrar a la cochera corrí a sus brazos y el me carga sosteniéndome en lo alto y casi agarrándome de las nalgas, mientras mi papá bajaba unas cosas del lado del piloto, lo cual no permitía vernos

Tío: ¡¡¡Que pasó mi chiquito hermoso!!! (me lo dice al oído y con su voz rasposa)

Yo: Tío, te extrañé, ya quería que llegaras para estar juntos…

Tío: Ya mi chiquito lindo, también ya quiero tenerte y darte muchos besitos, ahorita vemos como le hacemos para perdernos, ¿ok?

Yo: Si tío, yo te espero…

En eso mi papá le habla para que le ayude a bajar algunas cosas y yo me ofrezco a ayudarles, cargue algunas bolsas y veo que se aproxima mi primo Raúl hacia nosotros, el también nos acompaña y bajamos todo, en un punto el tener mi primo cerca, pero al mismo tiempo a mi tío sin que ambos notaran que yo me excitaba tener dos hombres con los cuales había disfrutado de sus ricas vergas simplemente me hacía calentarme mucho más. Total, metimos todo a casa de mi abuela y mi papá le habla a Raúl para que le ayude a mover el otro carro que esta en la otra casa, por lo que mi tío se queda ahí conmigo y mis primos. Para esto ya eran como las 2 AM, entonces entramos y mis primos ya estaban casi dormidos, mi tío me dice:

Tío: Deja ir a acostarlos y regreso contigo mi chiquito, espérame en el patio de atrás.

El patio de atrás de casa de la abuela es amplio y con muchos arboles de mangos, digamos que esta muy tupido, y pues de noche bastante oscuro hacia atrás por que el foco solo esta afuera de la cocina.

Salgo al patio y me siento en un redondel que tiene uno de los árboles a esperarlo, mientras lo hago tenía al corazón a mil por hora de poder estar de nuevo con mi tío, no tardo ni 10 minutos cuando lo veo salir por la puerta de la cocina, para mi sorpresa, quitándose la camisa y con el pantalón de mezclilla desabrochado, era un perfecto hombre que yo apreciaba con la poca luz del foco y la luna parecía que venia un gigante hacia mí. Se le dibuja una gran sonrisa en su rostro y nuevamente me carga abrazándome y levantándome como si fuera un muñeco, yo correspondo al abrazo y uno mi boca con la suya en candente beso lleno de lujuria, nuestras lenguas parecía que estaban jugando una lucha sin igual mientras el me tenia sostenido de mis nalgas que masajeaba sin parar y yo rodeando con mis brazos su cuello para no caerme, el me lleva hacia el final del patio en donde había mas arboles y un claro lleno de pasto. Me recuesta sobre el pasto sin dejar de besarme y yo Moria de placer con semejante faje que me estaba dando mi tío que en ningún momento quitaba sus labios de los míos, su lengua de la mía, ya recostado me empieza a quitar la ropa mientras yo le bajo el pantalón para dejar libre su monstruosa verga la cual me llevo a la boca y la empiezo a mamar como si la vida se me fuera en ello, el por su parte también me empieza hacer un oral rico, y en aquel 69 a la luz de la luna, sentía que mi tío me iba a matar de tanto placer. En un punto nuestras bocas se vuelven a unir, el me aparte un poco y con una forma muy seria sin dejar de abrazarme me dice

Tío: Chiquito, quiero que seas mío nada más, quiero que estemos juntos siempre, por que de verdad con nadie había sentido tan rico como contigo chiquito.

Yo: Tío parece que me conoces, tampoco dejo de pensar en ti, me estoy enamorando de todo lo que me haces, de como me tratas, de tus besos, de tu verga tan rica, de como me tratas y me hablas…

Tío: Me desespero si no te veo mi chiquito, prométeme que vas a coger nada mas conmigo, no con tu primo, ni con nadie…

Eso me estremeció porque era prácticamente renunciar a estar con alguien mas por el placer de ser cogido, que siempre era lo que había querido, y mi primo, aunque no mejor que mi tío, si era algo diferente para disfrutar, o de plano ser exclusivo de él, para el a su entera disposición.

Yo: ¿Tío, por qué me dices esto? ¿Qué es lo que quieres de mí?

Tío: quiero que seas mío, de nadie más, quiero que estas nalgas solo sean para mí, estos labios nomas me besen a mí, que todo tu cuerpo sea mío y de nadie más, me encantas y el solo pensarte con alguien más, me encabrona, eres mío y nada más mío

Sentí muchas cosas, sentí rico, pero a la vez sentí miedo ante tremenda declaración, también sentí como que muy valorado, muy apreciado, me sentí feliz enamorado y yo no respondí nada, simplemente lo bese apasionadamente lo puse boca arriba y lo empecé a cabalgar, dirigí su enorme verga hacia mi ya bien dilatado culito que lo empezó a devorar y poco a poco empecé a moverme cadenciosamente hasta tenerlo bien metido, lo brinqué como loco mientras el disfrutaba agarrándome de la cintura y atrayéndome  mas hacia él, me nalgueaba de vez en cuando y me daba besos apasionados que se me iba el aliento, yo me sentía en la gloria.

En un momento, me voltea y me pone boca abajo, empieza a comerse mi culito, y me hace gemir de placer como loco, pues después de sentir su verga, sentir su lengua como entraba en mi orificio era la gloria, éramos como animales bajo la noche y entre arboles de mangos, simplemente era una escena digna de una película porno, realmente indescriptible, me empieza a dar embestidas nuevamente con su verga al tiempo que pone su boca en mi oreja y me empieza a decir cosas ricas

Tío: ¿eres mi chiquito nada más, sientes rico?

Yo: Siiiiiiii Dame más, ¡dame maaaaas!

Tío: ¡¡pero dime que vas a ser mío nada más mi amor!!

Yo: Siiiiii tiooooo, tuyooo nada mas papiiitoooooo

Empiezan las embestidas mas fuertes y siento como me empieza a llenar de semen toda mi cola y el gime mucho mas fuerte casi lanzando un grito de satisfacción, todo su cuerpo se derrumba sobre mi pero sin sacarme la verga que sigue rígida como un fierro, yo siento como se expande con pequeños espasmos en donde todavía está saliendo leche caliente que inunda todo mi culo, así se queda un buen rato hasta que su verga empieza a perder dureza y sale dejando un hilo largo de leche espesa y blanca, poco a poco se pone a mi costado boca arriba y me lleva a su pecho, terminamos sudados y abrazados besándonos tiernamente, bajo la luna, exhaustos, satisfecho, respirando fuertemente y yo en su pecho me sentía el más afortunado del mundo…

Tío: Me encantas chiquito

Yo: Y tu a mi tío, me fascinas…

Tío: ¿Quiero que te vayas conmigo… qué opinas?

Yo: ¿Como? ¿Crees que se pueda?

Ya lo estuve hablando con tus papás y me dicen que, si tú quieres estudiar en EUA, ellos acceden siempre y cuando tú quieras. Y yo te quiero para siempre conmigo

Yo me quedé helado con semejante noticia, y lo empecé a besar tiernamente… Había mucho en que pensar…