Me fugué con el novio de mi madre

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Soy hijo de una madre soltera, criado como cualquier chico de clase media. Mi madre es una dama, muy exigente y dominante, creo que por eso, no ha tenido suerte con los hombres…y ha tenido varios fracasos en el amor. Fue, ya en plena adolescencia, cuando me fui dando cuenta de las realidades, de la vida y de la manera de ser de mi madre, siempre guarde, distancia, discreción y silencio respecto a su comportamiento y relaciones con hombres. Conmigo como madre, siempre me dió todo, pues trabajaba afuera para mantenernos, pero me enseñó a hacer todas las tareas, de la casa: lavar, cocinar, recoger, mantener todo en orden, etc, etc. Siempre me dijo, que así no sufriría por nada, si un día me quedaba solo.

Yo por mi parte, lo hacía todo, obedecía sumisamente y cuando algo no salía bien, recibía una tunda de bofetadas de su parte. Lloraba amargamente, encerrado en mi habitación y en esos momentos, la odiaba! Nunca me había detenido a pensar en mi sexualidad, ni en sexo…hasta el día que mamá, me presentó a Jorge Luis, su nuevo novio. Me impactó… un chico muy simpatico, bien guapo, con una barbita de candado bien asicalada, cuerpo bien trabajado en un gym (en el gym, lo conoció) pero no exagerado. Esa tarde charlamos mucho, como si nos conocieramos de antes y mi madre estaba muy contenta, no se parecía a lo gruñona, que era, cuando estaba conmigo. En mi interior, yo me decía, que ese hombre tan bello, era muy joven para ella, y admiraba su cara, su pecho, sus fibrosos brazos…no dormí esa noche, pensandolo.

Un día él se quedó, en casa con ella, y por la noche no puede resistir la tentación de escuchar detrás de la puerta sus gemidos y quejas haciendo el amor…me puse grave, ardía en deseos y me tocaba a mi mismo, pero solo pensaba en él. Me di cuenta, que yo lo deseaba con locura y que eso no debía de ser, yo estaba mal. Ya me retiraba, cuando lo senti decirle, que le iba a comer su culo, y mi madre le contestó, que ella, no era una puta, que eso si, que no y menos con una verga del tamaño de la suya, que la partiría en dos. Me fui a mi cuarto, y hasta riéndome, por eso que escuché. Esa noche me masturbé, pensando que Jorge Luis me penetraba a mi, que yo lo besaba y que él era mio. Luego de lograr el deseado orgasmo, y pasada la calentura, me dió pena, haber pensado en eso.

Como ya había terminado mis estudios y aun no trabajaba, siempre estaba en la casa. Un día me bañé me arreglé y de repente me entró ganas de vestirme con lencería, femenina de mi madre. Me puse un gistro blanco de encajes, su liguero igual de blanco, y unas medias largas de seda blancas…calzé unos zapatos de tacón en charol, que me quedaron casi perfectos…y cuando me miré al espejo; me encantó la imagen, que este me devolvió. Me puse un sostenedor y me maquillé suavemente…estoy lista para ti Jorge Luis, me dije para mis adentros…y me miraba, mis apetecibles nalgas, que el gistro las hacía ver firmes y ricas. En eso estaba, cuando de pronto, se abrió la puerta de mi cuarto, mi corazón se vino abajo, pensé que mi madre, me había cogido, en mi mariconería…pero no era ella, era, él…Jorge Luis.

Perdóname, no sabía…que tú, disculpame…y yo temblando de pies acabeza, le decía: te sulpico que no le digas nada a mi madre, es la primera vez que hago esto, y comenzé a llorar, entonces, él se acercó a mi y me pidió, que no llorara, que él no le diría nada a mamá. Yo me recoste en su hombro, y Jorge Luis me abrazó como si yo fuera una real chica…apretó mis nalgas con sus fuertes manos, y yo senti una corriente, que me llegó al cerebro, de deseo y placer. Que bueno estás me dijo, pareces una quinceañera deseosa de pinga, me dijo al oido…y yo ñoñamente, le contesté que lo quería a él….Rápido me separó de él y sin pensarlo, me hizo arrodillarme y comenzó a restregarme en la cara su fuerte erreción, tan así que aquel pene, quería reventar la entrepierna de sus jeans. Yo novato en eso, pero caliente como un motor, pasaba mis labios sobre su verga, la mordía suavecito por encima, hasta que no pude aguantar mas y la liberé de su prisión…para de nuevo hacerla presa de mi boca…la chupaba salvajemente, la lamía, la pasaba por toda mi cara y le daba lenguetazos en su gran cabeza, tragándome aquel líquido pre-seminal, que ya expulsaba. Te voy a hacer una hembra de verdad, me dijo Jorge Luis, y yo timidamente le explique, que nunca había estado con un hombre, pero que él me gustaba y lo deseaba desde que mamá, me lo presentó.

Comenzó a besarme, por el cuello, mi nuca y yo gemía de placer, y me besó por primera vez en los labios y me hizo ver el cielo, con un fuerte beso que su lengua recorría toda mi cavidad bucal, que delicia era eso. Pero yo no soltaba su verga, se la jalaba de arriba abajo, según, él me iba besando y acariciando. Me pidió entonces ponerme en cuatro patas sobre la cama, y asi con mi gistro, como estaba, me comenzó a besar las nalgas y a chupetearme el culo con su boca. Echó hacia un lado la tirilla del gistro y me enterró su lengua en mi virgen anito…brinqué del susto y placer…ese macho tenía corriente eléctrica en esa traviesa lengua. Yo como una hembra exótica, le pedía que me hiciera lo que él quiziera, que no me importaba nada ya, mas que él. Entonces Jorge Luis, se desvistió por completo y se puso una crema, que yo tenía, en su gran verga, e igual me puso a mi en mi culo…ananchandolo con sus dedos, de esa forma cuando lo creyó prudente…me comenzó a enterrar su verga. Primero lento, y cuando la cabeza se me fue, yo grité. lloré de dolor y placer…pero gemía y gemía…él siguió en su faena y de repente, me la enterró de un cantazo lo que quedaba, sentí sus bolas en mis nalgas…mordi la almohada de dolor, pero culeaba a cien por hora, y esa verga me taladraba una y otra vez. Mi culo abierto hacia arriba, mis tacones brincaban por cada arremetida, de aquel macho contra mi culo, y el liguero se estiraba, según él con sus manos, abría mis nalgas y las masajeaba rudamente en su calentura. Eres una real hembra, me decía, yo soy tu dueño, tu papi, me gritaba…y yo soy todo tuyo, le contestaba yo. En eso me penetró, que creia se me iban a reventar las entrañas…y me llenó todo de su semen, era tanto que rodaba por mis nalgas, bien calientito y rico.

Cuando todo pasó…me confesó que había terminado con mamá. Yo me estremecí, se me nubló la mente y creí que el mundo, se me caia encima. Jorge Luis, entonces no te volveré a ver? No ricura, me dijo él, yo me voy a mi pueblo, si quieres, escapate conmigo, allá yo tengo un apartamento, que es mio y vivirás conmigo, no quiero separarme de ti. Tu madre es muy dominante y peleona, yo no aguanto más. Planeamos todo y esa tarde…me fugué con el novio de mi madre…lloré no lo niego, le dejé una carta a mi madre, dónde le pedía que no me buscara, que luego yo la llamaría y que iba a estar bien. Jorge Luis, tambien me dijo, que nunca habia estado con otro hombre, pero que desde que yo lo trataba con tanto cariño y atenciones, notaba en mi algo diferente…era mi amor por él, lo que él veía! Hoy día hacen meses estamos juntos, yo lo amo y él me ha demostrado que tambíen me ama a mi. Cada noche me da un placer maravilloso, y yo le hago, todo lo que él, me pide sexualmente. Le cocino, le hago todo lo de la casa, y nos mantenemos como una pareja de roommates, que comparten un apartamento. De vez en cuando llamo a mi madre y aunque ella no sabe, ni con quien, ni dónde vivo, le dejo saber que estoy bien. No la traicioné, ella por su genio, perdió a Jorge Luis…y a hora él es mio!