Me sedujo en el campo

Nos conocimos en la ciudad y terminamos juntos en la pradera.
Yo tenia 12 años, el 16, nos conocíamos por vínculos familiares, pero sin ningún trato. Una vez vino con su familia a la ciudad (vivía con sus tíos porque sus padres estaban en el exterior), era verano y su tía me invito a que fuera a pasar las vacaciones en su campo.  Yo acepté encantado pues sabia que se podia ir a pescar, andar a caballo, cazar y participar de las tareas de una chacra, algo que siempre me había gustado. Además yo estaba despertando sexualmente y quería ver a los toros montando a las vacas, me atraían los testiculos grandes y colgantes que tiene estos animales. Yo fantaseaba queriendo ser la vaca montada por un toro.

Salimos de viaje en su auto, y luego de varias horas llegamos al pueblo de cabecera, a partir de alli habia que hacer varios kilometros de tierra, por una camino bastante poceado. Como tenian que llevar mercaderia para la chacra que no estaba en sus planes, el auto se llenó enseguida y quedó un solo lugar en el asiento de atrás. Como O. era más grande que yo, me dijeron que me sentara en su falda, si no tenia problemas. Dije que no, y nos acomodamos atrás.

El me miró intensamente y me dijo que me sentara sobre su falda con confianza, sentí un cosquilleo, su mirada complice decia algo más. El era muy varonil y su pantalón ajustado dejaba insinuar un bulto grande en su entrepierna.

Empezamos el viaje, que era bastante movido por los pozos del camino, yo intentaba estar apoyado en sus rodillas, pero con cada pozo me desplazaba hacia su falda y alli sentia su bulto calzando entre mis nalgas. Me movia hacia adelante, pero nuevamente por el movimiento terminaba sentado sobre su bulto. Notaba que su pene se habia hinchado y yo cada vez que caia sobre él, me iba quedando mas tiempo sobre el mismo. Ninguno decía nada , pero eramos conscientes de la excitacion mutua que nos estaba embargando. Yo le pregunte si lo estaba aplastando y me sonrio diciendo que me quedara tranquilo sobre su falda, que él estaba bien. Asi que el final del camino fue un goce hermoso, sentia su pene frotandose en mi cola, y tenia que contenerme para no acabar, tal era la calentura que tenía.

Llegamos de noche y nos ubicamos en su cuarto, donde había dos camas de una plaza. La casa era grande con varios dormitorios y baños, asi que estabamos a unos cuantos metros del dormitorio de sus tíos.

Cuando nos fuimos a dormir, el salio del baño luego de la ducha, completamente desnudo y secandose. Ademas de su gran pene, tenia testiculos grandes y colgando, algo parecido al toro de mi fantasia. No puede evitar comentar que bien dotado que estaba. Me dijo que yo tambien estaba bien dotado. Me ruborice y le dije que yo tenia todo chiquito, mi pene apena media 11 cm.

El me dijo que hablaba de mi cola. Que era grande , durita y le gustaba mucho. Me confeso que también había estado por acabar en el viaje, sintiendo como mi cola frotaba su pene. Ya completamente calientes por hablar de ese tema, su verga se hincho completamente, media casi 20 cm, era realmente grande. Por un lado me moria de deseo, pero por otro lado me embargaba el terror de tener que soportar la embestida de semejante miembro. Mi colita era virgen y estrecha, no pensaba que me podria tragar tamaña verga.

Nos fuimos a acostar muy calientes y yo teniendo fantasias con él hasta que me dormi. A la mañana me tuve que cambiar mi ropa interior, habia tenido una eyaculacion nocturna soñando con O.

Luego de desayunar salimos a recorrer el campo y a la tarde, cuando sus tios dormian la siesta nos fuimos a un montecito que quedaba a 1 km de la casa, a cazar pajaritos con tramperas. Cuando llegamos alli, dejamos las jaulas en el piso, nos miramos y él su puso detras mio sin decir nada, me abrazó por la cintura y me apoyo su bulto en mi cola. Yo suspiré y empece a acariciarle las manos y le dije que me gustaba muchisimo, pero que era la primera vez que estaba con un chico.

Me llevó contra un arbol, me dijo que me agarrara de las ramas, me hizo separar un poco las piernas, y se apretó nuevamente contra mi cola. Senti su verga hinchada en el medio de mis nalgas y yo empujé para atras, asi empezamos nuestro vaiven sexual, mientras la respiración de ambos se aceleraba. Un a de sus manos se insinuó debajo de mi remera y me entro a tocar los pezones. Yo tenía tetillas grandes, un poco porque era ligeramente rollizo y por le desarrollo  de la pubertad. Asi que él me decia que eran tetas hermosas y que las iba a chupar, yo para esto estaba como loca, ya me imaginaba mujer, franeleando con mi novio.

Cuando no dabamos más de la calentura, nos desvestimos y nos acostamos sobre un toallon que él se habia llevado en la mochila. El me puso la mano en mi nuca y me ordenó que se la chupara. Yo obedecí deseoso, abri grande la boca y me trague  la cabeza, que apenas me entraba en la boca. Empezé a chupar con avidez, con una mano tomaba su miembro y con la otra le daba apretoncitos a sus enormes testiculos. El jadeaba y me decia que era su hembra y lo enloquecia la chupada que le estaba dando.  Despues de unos minutos, me apreto mas la cabeza, me entrerro su verga hasta la garganta y empezó a eyacular en mi boca. No me dejaba mover y tuve que tragarme todo su semen para no ahogarme. Era caliente , salado y espeso, pero me encantó la mamada que le proporcioné. Yo mismo habia acabado sin necesidad de tocarme, en el momento que sentía los espasmos de su verga en mi boca.

Nos quedamos acostados un rato, recuperando el aliento y allí me dijo que habia traido lubricante para mi ano. Yo le dije que tenia miedo, su verga era muy grande para mi colita. El me dijo que confiara, que iba a doler un poquito la primera vez, pero que se me iba a agrandar el hoyito y la próxima me iba a entrar lo más bien. Me dijo que a las mujeres tambien les dolia cuando las desvirgaban, pero que luego se morian por tener una verga adentro.

Me hizo poner boca abajo y me empezó a untar el ano con manteca casera, metiendo un dedo y luego dos, lubricandome y masajeando. Despues de un rato se puso encima mio, empezó a frotar la cabeza del pene sobre mi ano, hasta que empezó a empujar para abajo. No quería entrar, era muy gruesa, yo empece a tener miedo y le pedí que no me lastimara. Eso en lugar de frenarlo lo excitó más, y finalmente logró meterme la cabeza de un empujón, yo senti que me partía en dos, grité y quise escapar, pero él me apretó más contra el piso, y con otro empujón me enterró todo su miembro, hasta que sentí sus testiculos apretados contra mis nalgas.

Yo empecé a llorar y le pedí que me la sacara, pero él me dijo que yo ahora era su mujer, y me podía cojer todas las veces que lo deseara y yo tenía que obedecer. Intimamente me sentí mejor con esas palabras, yo lo habia deseado y ahora tenía que soportar a mi macho adentro, aunque me hiciera sufrir con su miembro. Aceptar eso mentalmente me hizo relajar y el dolor fue disminuyendo. Notando mi aceptación empezó a meterla y sacarla, cada vez con mayor facilidad, nuevamente la excitación me hizo superar el dolor y yo tambien empezé a empujar hacia arriba, quería comermela toda.

Finalmente me gritó «te lleno m i amor» y sentí los chorros de semen que me inundaban las entrañas. Grité yo tambien de placer y tuve un orgasmos descomunal, nunca terminaba de acabar.  Nos quedamos jadeantes y abotonados como dos perros. Despues de un ratito se bajo, y se tendió a mi lado. Yo lo mire, le sonrei y apoyandome sobre mis codos, led di un beso en la boca. El me agarró de la nuca, hundio su lengua en mi boca, y me empezó a besar. Yo despues apoye mi cara en su pecho y mientras me acariciaba me dijo que ahora yo era su esposa en secreto y que ibamnos a hacer el amor todsos los dias. Que era nuestra luna de miel. Ese fue un mes realemnte hermoso, haciamos el amor dos o tres veces por dia. O en el campo, o secretamente en las noches en nuetra habitación mientras los demás dormían. Fueron una vacaiones inolvidables…