MEJOR AMIGO

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hubo un dia en el que fue a mi casa para ver unas peliculas, estanamos solos, y empezo a comentarme que ya tenia mucho tiempo que no tenia sexo salvaje, yo casuamente, ese dia yo estaba muy caliente tambien, entonces sin pensarlo le empece a acariciar el pene, el se sobresalto un poco, se le hacia raro, pero tal era su calentura que no me dijo nada, sino al contrario, se desabrocho el sinturon y se bajo los pantalones y sus calzoncillos, mi pene se levanto inmediatamente al ver su enorme, carnosito y delicioso pene rodeado de vello pubico, empece a jalarle y acariciarle el pene y de inmediato lo meti a mi boca, y el dio un gemido muy varonil, lo cual me exito mucho, su enorme pene apenas si cabia en mi boca, estaba delicioso, se la mamé durante un buen rato y despues me dijo, metámonos en la regadera, y nos desnudamos y nos metimos al agua, el por un momento se quiso salir al ver mi pee erecto, pues al ser hetero le disgustaa un poco, entonces lo sujete por su musculoso abdomen, y le dije que cerrara los ojos e imaginara que era carolina, que segun el me contaba era la chica mas rica que habia cojido, y asi lo hizo y me empezo a dar unos apasionados besos de lengua, y me empezo a meter sus dedos por mi culito, y yo gemia como una nenita

Seguimos tallandonos y enjabonandonos y el empezo a agarrar mucho jabon y empezó a lavarme el culito por dentro y por fuera durante un buen rato.

Al terminar, nos secamos y nos dirijimos a mi cuarto, me llevo cargando como a una princesa, me recosto, se puso encima de mi y empezo a darme mas besos de lenguita, despues me volteo con violencia y me dijo, levanta tu culito muñequita, estaba muy exitado, inmediatamente pense en su enorme pene dentro de mi, pero fue algo qu no me esperaba, me empezo a lamer mi culito y me lo estaba llenando de saliva para lubricarme, yo gemia como una nenita, y el seguia lengueteando salvajemente y me daba nalgadas mientras me decia "me encantas putito, me chupaste mi polla mas rico que carolina" y despues comenzo a introducir sus dedos por mi culito para dilatarlo, de repente senti como con sus dedos empezo a abrir mi culito y despues senti algo viscoso, era su legua!! empezo a meterme su lengua por mi culito dilatado, estube a punto de vnirme de tanta exitaciaon, pero yo solo gema como nenita por esa sensasion tan exitante, cuando senti que la sacaba solo le dije "mas por favor un poco mas y si puedes meteme tu lengua mas profundo" y el contesto "lo que desé la princesa" y asi contunuo mas salvajemente, lengueteando mi interior.

cuando ya estube lo suficientemente saciado, senti su enorme polla entrando despacio por mi culito, nuevamente la exitacion me invadio y empece a gemir como loco.
se la paso penetrandome y envistiendome como todo un macho durante casi media hora, me tenia agarrado por mi cinturita, despues me volteo para quedar de frente y minentras me cojia y me daba nalgadas y yo le arañaba la espalda, nos dabamos besos de lenguita.

Y finalmente después de casi una hora de coger, finalmente derramo toda su deliciosa leche dentro de mi, en una serie de gemidos varoniles que me excitaban aun mas, por lo que yo también me vine.

Se quedo un rato sobre mi, con su gran pene dentro de mi aun, después se levanto y saco su pene, me volteo y me volvió a decir que levantara mi culito y que sacara su semen, así lo hice y volví a sentir su seductora lengua de macho recogiendo su propio semen que salía a chorros por mi ano, dejó mi culito bien limpio, me volteo una vez mas para verlo de frente, me abrió la boca de un fuerte tirón con sus poderosas manos, acerco su boca a la mía, la abrió y pude ver como su delicioso semen salía de su boca hacia mi lengua, no me la trague de inmediato, me puse a saborear lentamente ese liquido blanquecino con esa textura viscosa tan rica que tanto me encanta tragar de otros chicos, después metió su lengua a mi boca y empezó a revolver su propia leche con mi saliva y la suya, hasta que por fin con una nalgada me dijo “trágate mi lechita jotito” y poco a poco fui deslizando el semen por mi garganta, pues quería disfrutar hasta la ultima gota, después nos recostamos, aun estando cansados, me volvió a penetrar y me abrazo con sus enormes y varoniles brazos y nos quedamos dormidos un rato.

Al despertar, estábamos un poco confundidos, el se sentía raro, sabía que nunca volvería a hablarme y tratarme de l misma manera, pero hasta hoy nuestra amistad vive y yo vivo con la esperanza de que se vuelva a repetir esa experiencia con el.