Memorama (El tambo 3)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por tezcatlipoca12.
Cómo caído del cielo, es la frase que mejor describe el momento, Jorge acababa de contarme como el putito de Julián se la había mamado, ambos estábamos tan prendidos que no nos hubiera importado tener una sesión de sexo oral entre nosotros, pero antes de que pudiéramos decirlo Julián apareció frente a nosotros.

A mí me la había mamado el viernes en la tarde, a Jorge el viernes en la noche y era domingo por la tarde, es decir Julián pasó de nene inocente y bobo a putito experto en ordeñar vergas, nuestras vergas, en solo un fin de semana.

Jorge y yo solo nos vimos, no hubo necesidad de planear nada, los dos sabíamos perfectamente que hacer, nuestro objetivo era claro, disfrutar a Julián juntos por primera vez.

Lo invitamos a "jugar" a casa de Jorge, el nenito aceptó sin saber en lo que se estaba metiendo ¿o lo sabía y lo estaba deseando tanto como nosotros?

5 minutos después, ya estábamos los tres encerrados en el cuarto de Jorge, sentados entre las camas de él y de su hermano menor, listos para jugar memorama, desde el inicio Jorge y yo aclaramos las reglas, el ganador de cada partida podría poner un castigo a los otros dos, los cuales estaban obligados a cumplir al pie de la letra.

Así todas las piezas estaban puestas, todo listo para empezar un rico trío, donde Juliancito nos vaciaría a los dos.

Dejamos que Julián ganará la primer ronda, el nene nos puso como castigó que bailáramos una canción, mis contemporáneos, seguramente reconocerán la canción del gorila, de una cantante niña española.

La verdad que los tres nos reímos con ello, pero Jorge y yo sabíamos a lo que de verdad íbamos así que nos pusimos manos a la obra en ello.

La segunda manó la gano Jorge y sin cortarse un pelo paso a la acción, su orden fue que los otros dos nos quitáramos los pantalones

Julián estaba a punto de protestar, sin embargo antes de que pudiera hacerlo me levante y de forma rápida me quite el pantalón, quedando con unos slips negros, por debajo claramente se marcaba el bulto de mi joven verga de 13 cm, detalle que no le pasó desapercibido al putito de Julián, el cual empezó a quitarse los pantalones sin dejar de ver mi bulto.
El nene quedo también en slips, de color crema, que combinaban muy bien con su piel morena clara, el ambiente empezaba a caldearse, Jorge y yo, que solo teníamos un objetivo en claro nos aliamos, lo único que importaba es que Julián no ganara y lo logramos, el pequeño no gano una sola partida y así era víctima de nuestros castigos, que por lo menos al principio consistieron en irnos desnudando de a poco.

Yo fui el primero en quedar totalmente desnudo, recuerdo como claramente Julián devoraba mi cuerpo con la mirada, es decir yo era delgado, pro gracias al mucho deporte que practicaba mi cuerpo adolescente tenia los músculos marcados, el nenito no paraba de verme el pecho y mi verga desnuda, no lo dijo, pero sé que le encantaba vérmela, poco después Jorge también quedo desnudo y ante la mirada atónita de Juliancito, su gorda y negra verga quedo amenazantes, él era el único de los tres que ya tenía vello púbico, El pequeño Julián, nervioso lanzaba tímidas miradas a nuestras vergas y al fin fue su turno de quedarse desnudo, al quitarse los slips salió su pequeñita verga, ya bien tiesa, sus huevitos eran una delicia, curiosamente gorditos y abultados, se mi hizo agua la boca, quise mamarle esos huevitos en ese instante, tal como Jorge ya me había hecho antes.

La siguiente mano la gano Jorge y como leyendo mis pensamientos, ordeno que mi castigo seria mamársela al pequeño Julián, castigo que por supuesto me encanto.
El nenito nervioso se dejó tumbar en la cama, con las piernitas separadas y colgando por la orilla, me arrodille entre sus piernas y se las levante poniéndolas en mis hombros, ante mi estaba su delicioso pubis d solo 9 años, el olor era tierno y exquisito, primero le di varios besos a sus huevitos suaves y cálidos, luego le pase la lengua a su vergita, nunca en mi vida he disfrutado tanto lamiendo un pene, yo estaba en la gloria y Juliancito primero reía, pro en el momento en que todo su sexo estuvo bien alojado en mi boca no paro de gemir.
Sus pequeños huevos y verga me cabían sin problema en la boca, así que sin sacarlos explore toda la extensión con mi lengua, sintiendo como Julián se revolcaba de placer, pagándole la mamada que él me había dado dos días antes.
Si por mi hubiera sido me habría quedado así por mucho tiempo, y seguro Julián no se hubiera opuesto, pero Jorge nos interrumpió, ahora era turno del castigo del nene y su castigo no era otro que mamársela a Jorge.

Julián ni se inmuto, como si ya supiera que tarde o temprano tendría que pasar, se arrodillo frente a Jorge y se metió la cabeza morada e hinchada de Jorge en la boca e inicio una suave mamada, la cara de Jorge daba clara idea de lo mucho que disfrutaba de la cálida boquita de Julián, si bien el nene era inexperto todavía, rápidamente aprendió como hacerlo y ya metía y sacaba el glande de Jorge de su boca, al tiempo que con su manita pajeaba el tronco, los deje disfrutar un poco y les dije que continuáramos jugando.
Gane la siguiente mano y ya supondrán cual fue el castigo, mi verga me dolía de lo dura que estaba, ya necesitaba de las atenciones de la boca del putito de Julián, sin reparos el nene se arrodillo frente a mi e inicio la mamada, era increíble como un nene pequeño e inocente estaba ahí mamándosela a dos adolescentes de 14 años.
Para ahorrar tiempo le dije a Jorge que mientras Julián me la mamaba él se lo hiciera al niño, así acostados los tres en la cama disfrutábamos como locos, Julián mamaba y se dejaba mamar sin protestar y poco a poco iba mejorando en su trabajo oral.
Así pasamos un buen rato, Jorge y yo ganábamos una y otra vez y nos intercambiábamos, mientras uno disfrutaba de la boca de Julián, el otro se metía su vergita en la boca, todo era delicioso y excitante, muy excitante.

Fue Jorge el que de pronto modifico la situación, al ganar una mano, mando a Julián a mamársela, pero a mí ya no me toco mamarle la verga a Julián, no, Jorge me mando a pasarle la lengua en el virgen culito del nene, la idea al principio no me agrado, pero me di cuenta de que El pillo de Jorge ya estaba planeando no solo satisfacernos con la Boca de Juliancito y con esa movida, empezaríamos a prepárale el ano.
Así pues Jorge se tendido en la cama, con Julián mamándosela en cuatro y yo detrás del nene, le separe las nalguitas y apareció su rico hoyito, aguantando un poco el asco empecé a pasarle la lengua, al nene esto le encanto porque gemía más fuerte que nunca.
Para ese punto del juego, siempre nos deteníamos cuando al que se la estaba mamando Julián sentía que estaba por venirse y en ese sentido jugar una ronda más nos ayudaba a retrasar el orgasmo, pero ya estábamos tan excitados que no necesitábamos seguir así, pero debíamos seguir fingiendo el “juego” para que Julián se viera forzado a seguir mamándonos la verga, así que decidimos cambiar las reglas, para así no tardarnos en disfrutar.
Tomamos tres cartas y las revolvimos, la regla seria que el que sacara la carta más alta les ordenaría a los otros dos.

A la primera el ganador fue Julián, yo pensaba que el nene pondría otro castigo estúpido, pero para nuestra sorpresa, el castigo que Julián nos puso, fue que yo la mamara la verga y Jorge el culo.
Jorge y yo nos quedamos boquiabiertos, fue totalmente inesperado, pero recibimos con gusto las órdenes, pues era claro que Julián ya estaba metido en la situación.
Lo acostamos de lado en la cama, entre los dos le mantuvimos una pierna levantada y hundimos nuestras caras en su pubis, yo por delante y Jorge por detrás y mamamos, mamamos como si no hubiera un mañana, Julián se retorcía y gritaba de placer, sé que era muy joven, pero les juro que fue claro que tuvo un orgasmo, no hubo corrida, pero el nene se convulsiono y grito y se quedó casi desmayado en la cama.
Jorge no solo le había estado lamiendo, ya para entonces le había metido un dedo hasta el fondo del culito a Julián y aprovechando que el nene estaba ido, decidió sodomizarlo.
Lo puso en cuatro en la cama y le puso su vergota en el ano, pero cuando el culito fue cediendo, El nene empezó a gritar de dolor y no era para menos, la verga de Jorge era tan grande que ni yo la hubiera podido aguantar.
-Espera, lo vas a matar, le dije.

Jorge desesperado se acostó n la cama y le ordeno a Julián que se la mamara, el nene que ya era todo un putito se pegó a la verga de Jorge, dejando todavía su culito parado, llamándome y yo respondo al llamado, les dije que mi verga entraría con más facilidad y me dispuso a encular al nenito.
El ano de Julián, estaba ensalivado y dilatado, así que sorpresivamente le pude meter mi verga con bastante facilidad, los quejidos de Julián eran callados por la verga de Jorge en su boca.

En cuanto le deje ir toda mi verga, no pude más con lo rico que su culito apretaba y le llene las entrañas de leche. Pero la cosa distaba de acabar.
Tomando las cintura del nene hice que su cuerpo se hiciera adelante y atrás, con ese movimiento nuestras vergas entraban y salían por sus agujeros, el nenito no era más que un pedazo de carne para satisfacer nuestras vergas, su boca y culo se llenaron de semen una y otra vez, los dos adolescentes no dejaron de joderlo hasta quedar satisfechos.
Un par de horas después salimos de la casa de Jorge, el pobre Julián apenas y se podía mover, lo dejamos en su casa con miedo de que descubrieran lo que le hicimos, pero para nuestra fortuna, no solo no pasó nada, sino que Juliancito ahora sí se convirtió abiertamente en un Putito, que no paraba de buscarnos para que le diéramos nuestras vergas.
Quiero pedir una disculpa por lo apresurado del relato, pero ya quería subir este capitulo, hare una sola parte más de esta saga y eventualmente subiré otras historias, de nuevo quiero agradecer sus comentarios.