MI AMIGO DEL INSTITUTO 12 (Cielo De Estrellas)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por leonardo.g17.
Leo – Después de todo debes estar feliz, no? Tus cosas han salido tal como lo planeaste
Emanuel – Creo que debemos hablar
Leo – No tengo nada que hablar contigo, ya conseguiste separarnos, no sé qué más esperas de mí
Emanuel – Contarte la verdad de todo, el por qué hice todo esto!
Leo – No quiero escuchar más mentiras de tu parte, por hoy he tenido suficiente
Emanuel- No me iré hasta que me escuches, porque es muy importante que te lo diga, quizá no me creas, eso ya estará en ti, no en mí
(Me senté y decidí escuchar, creo que después de todo no tenía más que perder)
Emanuel – La última noche que hablamos fuera de tu casa, todo lo que te dije, todo lo que pensé. En realidad no lo sentía de corazón. Pues nunca aria algo que te dañara
Leo – Mira, no sigas. No lo comprendes has causado mucho daño y te atreves a decir que nunca me harías daño, por favor
Emanuel – Te dije que escucharas y al final tu decidirás
Emanuel – Como te dije, nunca aria algo para causarte daño, Esa noche me fui con mucho odio y desilusión, con sed de vengarme no te lo negare. Como pasaron los días estuve al pendiente de ti, día y noche. Pero no era el único que estaba al pendiente de ti, un grupo homofobo no tomo con muy buenos ojos el que vivirán juntos y al igual que yo estuvo al pendiente de ti y de Alejandro, quizá tu más grande problema fue exhibirte de esa forma con Alejandro, todo el recinto se enteró rápidamente y no a todos les pareció la idea. Los estuvieron vigilando, las 2 semanas que estuvieron. El accidente que tuvieron tus padres no fue ni causado por mí, sino por ellos
Leo – No sé si creerte, todo suena tan confuso
Emanuel – Esa noche tus padres salieron y la camioneta que estaba fuera de tu casa se fue tras la de tus padres, supongo que pensando en que tu ibas con ellos, en una curva esta se acercó de más provocando que se fuera directo a los árboles, solo sostenida por un árbol, yo pude ver todo como paso se que no me creerás pero tu madre sabe que es verdad, porque después que ellos quedaron cerca del barranco y la camioneta huyo para hacerlo parecer un accidente, llegamos nosotros y ayudamos a salir a tus padres. O como te explicas que tu madre y tu padre llegaron al hospital si no pasa nadie por ahí.
Leo – Mi madre te conoce y me lo hubiera dicho
Emanuel –Yo le pedí que no te dijera por respetar tu relación con Alejandro, el no vería con buenos ojos que estuviera siguiendo a sus suegros y menos que estuviera tan al pendiente de ellos. Pero puedes preguntarle a tu madre que fue lo que realmente paso esa noche!
Leo – y lo de Alejandro como lo explicas?
Emanuel – Yo estuve fuera del hospital, cuando te vi llegar con Alejandro en el taxi, supe que algo andaba mal, pues es lo que ellos querían tenerlos a los 2. Ustedes entraron y al poco tiempo la misma camioneta se detuvo fuera del hospital. Pensé en llamarte pero no me ibas a creer, espere y espere y cuando vi salir solo a Alejandro del hospital, yo mismo arranque el carro, antes que ellos lo hicieran. Me adelante y me le cerre al taxi, les quite sus cosas y lo deje abandonado en la carretera. Asi ellos pensarían que fue una coincidencia y que otro aria su trabajo de meterle un buen susto. Cuando lo deje varado en la carretera a la camioneta le fue más difícil encontrarlo pues Alejandro corrió por los árboles. Fue lo mejor que se me ocurrió ellos no sé qué le hubieran hecho.
Leo – Alejandro te conoce, como es posible que no te reconoció
Emanuel – No lo hice yo, fueron unas personas que trabajan para mi padre los qu se bajaron en ese momento, pues pensaba que tu igual ibas en el taxi, después de eso yo regrese aquí a la casa pues escuche que tu te habías quedado en el hospital y un amigo en su carro rondo por allí hasta encontrar a Alejandro, todo tenía que parecer una casualidad de que alguien iba pasando y lo recogió, pero no fue casualidad. O que te dijo el?
Leo – Eso, que camino un tiempo hasta que un señor se detuvo y lo recogió que fue muy hamable y que lo trajo a su casa
Emanuel – Pues Leonardo esa es la verdad, no era la intención pero así tenía que pasar que Alejandro se alejara de ti, para evitarte daño a ti e igual a el. El es una buena persona y comprendo que tu lo amas mucho, y si el amor es tan grande como tu mismo lo dijiste lo mejor será que estén separados, por ahora.
Leo – Todo concuerda, todo lo que ma has dicho es no se, parece de cuento. Pero gracias!
Emanuel – Un dia te dije que te iba a proteger que no?, como amigo, como novio, esposo, fueras lo que fueras
Leo – Gracias, pero ya no sé qué creer, todo ah pasado tan rápido que tengo muchas cosas en la cabeza en este momento
Mama (Leo) – Lo que dice emnauel es verdad, todas y cada una de las palabras que escuchaste
Leo – Estabas escuchando madre?
Mama (Leo) – Si y puedo confirmarte todo, gracias Emanuel por todo lo que hiciste esta noche por nosotros y por nuestro hijo
Emanuel – De nada señora, solo espero esto no crezca mas
Leo – Alejandro se fue mama, pensó mal y si le explico todo
Mama (Leo) – Pensó mal igual que tú, juzgaron mal la actitud de Emanuel, no creo que seal el momento de explicarle algo. Lo conoces y siempre se ah antepuesto a los problemas y estoy segura que esta vez será igual y dirá que se puede solucionar. Cuando vez todo lo que ah pasado. Creo que hay que dejar pasar un tiempo, tal como le dijiste
Leo – Creo que tienes razón, ahora no me va a escuchar y la mejor forma de estar seguros todos. Es esta
Emanuel – Solo tenemos que esperar un poco, que todo se calme
Todo me tenía tan confundido, pero estaba feliz que todos estábamos bien de salud. Aunque me sentía mal por haber tratado tan mal a Emanuel, cuando el solo ayudo y de qué manera, si el no me hubiese estado vigilando, no sé qué hubiera pasado con mis padre esa noche, o con Alejandro en el camino. Después de todo le estaba eternamente agradecido
Emanuel – Bueno creo que será mejor que m valla, por ahora solo tienen que cuidarse mucho y sobre todo estén atentos
Mama (Leo) – Ya es noche, porque no mejor te quedas, después de todo lo que ah pasado, me quedaría con el pendiente de que te vayas
Leo – Pienso lo mismo que mi mama, yo creo que sería lo mejor
Emanuel – No, así está bien! No quiero causar molestias
Leo – No las causaras, no más de las que nosotros te hemos causado a ti
Emanuel – Esta bien! Me quedare
(Subimos a mi cuarto y le preste un pijama para que se quitara su ropa, pues no estaría cómodo)
Leo – En verdad no sé cómo te pagare todo lo que hiciste por nosotros, siento que mis padres te deben la vida y Alejandro pues igual. Gracias por ayudarnos
Emanuel – Leonardo no tienes nada que agradecer, tu sabes que todo pasa por algo, eso me lo dijiste tu hace no mucho, entonces solo quiero que sepas que lo que yo siento por ti no ah cambiado en lo absoluto, en verdad te quiero y por eso hice todo esto, el amor te hace hacer las peores, o las mejores cosas
Leo – Gracias, quizá nunca me canse de decirlo
Poco a poco me acerque a el para darle un beso en la mejilla, cuando me acerque. Podía sentir mucha paz, esa sensación de seguridad, de confort, me sentía protegido, el solo giro su cabeza y dijo “Tu aun sientes algo por mí?” “Si, pero no sé qué es, si es agradecimiento o amor” respondí
Solo se recostó sobre la cama y comenzó a llevar levente sus manos por detrás de mí cuello, hasta tenerme fuertemente prensado, sus brazos fuertes me rodeaban, sentía sus fuertes pectorales sobre mi cuerpo, yo tuque su cintura y el comenzó a safar mi playera y yo a desabrochar su cinturón, todo el momento las emociones hicieron que las cosas se fueran dando hasta estar sobre la cama completamente desnudos. Su dorso desnudo era perfecto su gran espalda, cada que apretaba sus brazos para abrasarme se le marcaban los músculos del brazo y abdomen, solo una sábana muy delgada nos tapaba y el poco a poco hacia precion sobre mi abdomen para dar la vuelta y yo quedar arriba, cuando me hice un poco hacia atrás pude sentir su verga completamente erecta y con una cabeza grande y roja.
Me inclino levemente hacia atrás y puso un poco de saliva sobre su verga para que no me doliera. Nunca nos dejamos de mirar, recordaba tantas cosas desde la primera vez que lo vi hasta todo lo que había pasado y en lo que nos había ayudado, dicen que uno es capaz de todo por amor, y el había hecho muchas cosas por mi, eso demostraba que lo que el sentía era amor verdadero. Puso sus manos en mi espalda y comenzó a levantarme y a subirme. Seguimos asi hasta después de un rato, comenzó a marcar más rápido el paso y su respiración se hacía más continua hasta que hiso una pequeña expresión con la cara, fue ahí cuando supe que se iba a correr, así que comenzó a masturbarme con una de sus manos, mientras yo brincaba más fuerte sobre su verga. Ahí sentí que igual estaba a punto de venirme sobre su abdomen. En eso cuando di el ultimo sentón fuertemente, explote lanzando 3 chorros de semen que cayeron directamente en su abdomen, y uno cerca de su cara. En ese momento el igual se corrió dentro de mi llenándome de el, solo nos pusimos de lado y nos miramos directamente a los ojos, había olvidado lo mucho que lo estimaba. Pero Alejandro y el habíamos formado esta historia, bien o mal era nuestra historia.
Cuando despertamos en la madrugada, nos la pasamos platicando de todo, le conté por igual de que escribía de todo lo que había pasado con Alejandro, como lo conocí y de todo. Fue ahí cuando me dijo que en la tarde esperaba lo pudiera acompañar en su moto a recoger un pedido por el que le mando su padre. A lo cual respondí que sí. Cuando dieron las 12 salimos de la casa y nos subimos a su moto, quedaba como a 1 hora, pero por donde nos íbamos a ir no pasaba mucha gente y era un poco peligroso por la cantidad de curvas y acantilados que hay. Me dio el único casco que tenía y nos fuimos
Cuando íbamos como a la mitad del camino, comenzamos a platicar de nuevo, no habíamos querido decir nada porque no sabíamos en que iba a terminar esto. No sabíamos en realidad que pasaría si se daría algo o simplemente paso, pero decidimos no tocar el tema
Emanuel – No quiero preocuparte, pero esa camioneta que viene detrás del carro rojo, salió desde allá con nosotros?
Leo – No se, no puedo verla, tu porque traes los retrovisores
Emanuel – Hum algo anda mal!
Leo – Porque no te detienes aquí?
Emanuel – No puedo, si me detengo, traemos carro atrás y nos lo echaría encima
Leo – entonces que aremos?
Emanuel – Tranquilo, posiblemente estoy muy paranoico, primero tenemos que ver si si nos están siguiendo
Pasaron otros 10 minutos y el caro que venía detrás de nosotros se giró y entro en una vereda, lo que nos dejó justamente frente a la camioneta, esta se acercó a la moto, podía sentir la camioneta justamente detrás de mí, estaba muy nervioso y aunque Emanuel, acelero, la camioneta nos alcanzaba de nuevo, Emanuel le hacía señas de que se pasara, pero la camioneta seguía detrás de nosotros. En eso acelero más y nos pegó en la parte trasera provocando que las llantas de la moto hicieran un chillido espantoso, fue ahí donde supe que efectivamente iban por mí, mi corazón latía muy fuerte y cuando gire la cabeza hacia enfrente vi la nuca de Emanuel estaba sudando y temblando del miedo. Decidí volear para enfrente y se venía una curva fue ahí donde la camioneta acelero mas y nos rebaso del otro lado la teníamos a un lado.
Emanuel, lo único que pudo hacer fue frenarse de golpe. Pero por mas que lo intentamos esta nos empujó contra el acantilado. La moto no tuvo resistencia contra la camioneta y nos expulsó para abajo. Rodamos mucho, la verdad no recuerdo todo fue rápido yo cai sobre unos pastizales que estaban como 5 metros cuesta abajo. No vi de nuevo a esa camioneta solo escuche su motor arrancando. Estaba verdaderamente muy lastimado, no podía ni enderezarme me dolía la espalda y estaba arañado de mis brazos y cara, por las ramas de los árboles. Me dolía mucho la cabeza y el cuello, me saque el casco y recordé que Emanuel no tria nada de casco por dármelo a mi, me rodé y caí del arbusto, camine lentamente buscando a Emanuel, pero por mas que le gritaba no contestaba. Había mucha maleza y no me permitía ver nada frente a mi, sentí que me iba a desmayar cuando
Emanuel – Leonardooo!
Leo – Emanuel, donde estas?
Emanuel – Un poco más al frente no puedo moverme
Leo – No te preocupes ya voy (No sé de donde saque fuerzas, con la vista nublada y un pie creía que fracturado me arrastre hasta donde escuche la voz)
Allí estaba la moto le había caído en uno de sus pies, y su cabeza sangraba mucho, estaba verdaderamente aterrorizado, no comprendía que había pasado, porque a nosotros, porque a el (Comencé a llorar e intente retirar la moto de su pie, pero no tenía fuerzas para nada, y al parecer un fierro se había incrustado en el por qué le dolía mucho cada que intentaba mover la moto. Mis rodillas de doblaron a un lado de el y mi vista comenzó a fallar de nuevo, me carie y caí justamente a un lado de el
Leo – Perdóname, esta fue mi culpa, ellos ivan tras mi, y solo yo te provoque esto
Emanuel – Shhh . .. ya no digas mas, no es la culpa de nadie, mucho menos tuya, te sere sincero eres la mejor persona que he conocido, te entregas en cuerpo y alma a las personas que amas y no todos saben valorar esa entrega
Leo – No se qué decir, por intentar ayudarme ahora venos, estamos aquí, tu estas sangrando mucho y tu pierna, esto no está bien. Y todo por protegerme. No merecías esto
Emanuel – Quizá si lo merecía, todos obtienen lo que merecen. Nunca lo olvides, y sabes no me arrepiento de nada, volvería a hacer todo esto. Todo estará bien para ti, ok! Escúchame! Se feliz con Alejandro el es un buen chico, les deseo lo mejor en verdad
Leo – Que pero que dices! Despierta Emanuel por favor
Emanuel – Tranquilo, todo pasa por algo, yo siempre te estaré protegiendo desde donde sea que este vale!
Leo – No no me dejes, Emanuel, no por favor, reacciona, reacciona
Emanuel – Cada que veas las estrellas, acuérdate de mi vale! Que yo estaré en una de ellas, desde arriba las cosas se ven mejor y dile a a Alejandro que te cuide porque si no nos veremos allá arriba de nuevo
Leo – Emanuel, no digas cosas, todo va a estar bien! Háblame, mira abre los ojos. Recuerdas cuando nos conocimos, lo que paso anoche, recuerdas
Emanuel – Ahora descansa tu. Se feliz y recuerda siempre estaré aquí (Poniendo su dedo en mi corazón)
Fue ahí cuando cerró sus ojos, no podía creerlo, solo grite y grite. De pronto el dolor en mi cabeza volvió y me desmaye a su lado. . . . . . .
Los que puedan y les interseca conocerme les dejo mi Facebook, no es el oficial pero por aquí podremos platicar y subirles fotos mías con Alejandro!
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Para los que no habían podido leer mis relatos anteriores se los dejo a continuación
MI AMIGO DEL INSTITUTO – http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-14838.html
MI AMIGO DEL INSTITUTO 2 (Las vacaciones) – http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-15055.html
MI AMIGO DEL INSTITUTO 3 (Alejandro regresa) – http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-15317.html
MI AMIGO DEL INSTITUTO 4 (La fiesta) http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-15561.html
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MI AMIGO DEL INSTITUTO 6 (El profesor) http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-17157.html
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