Mi amigo el orejón
Sigue mi debilidad «los dormidos» ahora con mi amigo hetero.
Había pasado bastante tiempo de que no había podido estar con algún dormido, en ese entonces mi mejor amigo era un hetero al que llamaremos «orejón» de verdad que éramos inseparables y nunca había sentido atracción por él hasta ese día. El orejón media cerca de 1.80 mts. Era crosfitero y estaba bastante marcado, sus brazos tenían bien delineadas sus venas, no era muy guapo pero tenía una personalidad que lo hacía ser muy bonito, obvio tenía las orejas algo grandes y por eso todos le decían «orejón» tenia el cabello rizado y una sonrisa amplia. Todo comenzó cuando estábamos en un bar como cada fin de semana y llegó otro amigo con nosotros, este nos invitó varios tragos y propuso ir a un teibol dance, ellos ya sabían que yo era gay y no le encontré ninguna objecion a ir al lugar, cuando llegamos al antro de verdad mis amigos se encendieron, parecían lobos hambrientos viendo a las mujeres desnudas, el alcohol siguió corriendo y después el otro amigo propuso ir a un salón VIP, subieron con nosotros 2 chicas, para ese entonces el orejón ya estaba bastante tomado, yo como traía el coche no habia bebido tanto, la fiesta continúo en el VIP, habia una bailarina muy linda que estaba hablando con el orejón, en un momento ella se subió sobre sus piernas y le comenzó a bailar, el orejon se quito su camisa y fue ahi cuando lo vi con deseo, vi su pecho peludo, sus grandes y bien definidos pectorales, su abdomen algo grueso y marcado y el camino de vellos que iba de su ombligo a su pantalón, nunca habia sentido atracción sexual por mi amigo pero verlo así de viril despertó en mi un deseo oscuro, de momento a otro la teibolera se le bajo de las piernas para servirse un trago y pude ver la erección del orejón, era un pene grueso, por la tela del pantalon se le marcaba la cabeza y la vena que surcaba su pene, eso fue para mi la mayor revelación, desde ese momento me propuse conocerle el miembro a mi amigo, quería verlo, tocarlo, olerlo y si era posible saborearlo, él al estar tan tomado no le importo y se levantó con la carpa en sus pantalones para repegarse por atras con la bailarina. El tiempo transcurrió y yo puse en marcha mi plan pedí una botella de tequila y les ofrecía shots a todos, claro que mi caballito estaba vacío cada vez que brindamos, las cubas se las servía muy cargadas al orejón y poco a poco mis dos amigos fueron perdiendo la batalla contra el alcohol. Salimos del lugar casi a las 5 de la mañana, con ayuda de los de seguridad los subí a mi coche y como el otro amigo vivía cerca del lugar lo pase a dejar y me lleve al orejón a mi casa, como éramos mejores amigos muchas veces se había quedado a dormir en mi cuarto así que no habría problema en llevarlo a mi casa.
Al llegar me costó demasiado bajarlo del coche y balbuceando llegamos a la sala, le dije que nos tomaremos otro shot, el más dormido que otra cosa acepto y aprovechando el trago decidí darle 15 gotas del medicamento que tenía para dormir, iba a tener entre mis manos ese pene tan jugoso que se marcaba en su pantalón y no quería que se fuera a dar cuenta, se tomó el shot y en poco menos de media hora estaba más que dormido, yo para tratar de cerciorarme lo intente llevar al cuarto, le hablaba y lo movía pero este no respondía, después de eso empezó a roncar y fue la señal para empezar a tocarlo.
Me acerque a su boca y con cuidado la abrí, sin más comencé a besarlo, él claro no correspondía mis besos, solo exhalaba aire con aroma a alcohol, lami sus labios mientras yo temblaba, con mi lengua recorría sus dientes, sabia tan bien su boca. baje a su cuello y lami la sal de su sudor, la mezcla de su perfume con aroma a cigarro para mi fue como una posición mágica, le desabroché su camisa y succione sus pezones morenos que tenían bastante bello, seguí bajando mientras lamía todo su abdomen, el seguía roncando así que pude llegar a la mejor parte, el camino de vellos, los lamía, los mordía, jugaba con ellos en mi boca me incitaban a seguir, desabroché su cinturón y desabotone su pantalón, con cuidado baje el cierre y pude ver su boxer blanco, que estaba ligeramente mojado, sentia el calor de su verga emanar del boxer, lo baje muy rápido, no me importaba ya nada, vi su vello púbico rizado igual que su cabello y de lado un pene largo y grueso, era moreno como él, tenia el cuerito cubriendo la cabeza y en ella se veia un poco se precum, al parecer la interacción con la bailarina me habia dejado su pene un poco morcillon, era como un regalo para mi, me lo metí completamente a la boca, saboreaba el dulce nectar que estaba en la piel que cubría su pene, olía un poco a sudor pero el sabor dulce de su miembro lo compensaba, enseguida su pene comenzó a tomar forma, sentia sus palpitaciones en mis labios, cada vez se ponía mas grueso, sentia la vena que surcaba todo su tronco y como no dejaba de soltar su miel. Se lo chupaba delicadamente y lo saqué de mi boca y pude apreciarlo, era un pene hermoso, moreno, grueso, media al rededor de 18 cm. Estaba bastante activo, no dejaba de brincar frente a mi cara, había alcanzado su plenitud con trabajo podía rodearlo con mis manos, el dejo de roncar pero respiraba pesadamente, tome mi celular y me saque varias fotos mamando su pene, ponía su cabeza en mis labios y succionaba su nectar, puse su mano sobre mi cabeza mientras mamaba de forma más fuerte, asi podia imaginar que el me obligaba a chupársela, el orejón ya no roncaba solo resoplaba, yo quería beber su leche y ya no me importaba si se despertaba, de repente escuché que le costaba más trabajo respirar y su pene se ponía más duro, de repente levanto las manos como queriendo levantarse, afortunadamente las gotas y el alcohol no lo dejaron sentí en mi boca 4 tallazos de leche, me la comi con demasiado gusto, sin tocarme ni nada me vine en mis pantalones de la exitacion, saque su pene de mi boca y vi la ultima gota salir de su glande. Tome muchas fotos y besando su lindo pene lo guarde en su lugar, me fui a dormir a mi cuarto dejándolo en la sala. Unas horas más tarde sentí como se acostó junto a mí en la cama y me empezó a molestar, me apretaba muy duro los pezones y se reía, me dijo que tenía mucho que no dormía tan bien, que ya se iba y platicamos un poco del teibol y nos burlabamos, al parecer no se dió por enterado ya que nunca cambio nuestra relación, tuve la oportunidad de chupársela en 3 ocasiones más pero solo esa vez pude probar su leche. Aún guardo esas fotos para refrescar mi memoria de lo rico que tiene el pene.
Cómo me gustan esas historias. Ojalá le hubieras comido el culo también