MI AMO ME COMPRO (HISTORIA REAL) Y RECIENTE
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Desde hacia algo mas de dos, meses, comenzó a decirme que un dia me exhibiría ante otro, bueno las cosas que se dicen, en los momentos calientes, pues yo pensaba que había algo mas entre los dos, que unos simples momentos, pues, el me hizo descubrir, que podía tener unos orgasmos, anales, totalmente desconocidos para mi hasta ese momento, y algo que al le entusiasmaba verme asín, totalmente fuera de si, incapaz, de nada, sin voluntad, recibiendo como descargas eléctricas aquellas sensaciones. pero también me equivoque había algo mas, importante para él, que todo eso y yo no lo supe hasta el ultimo instante, la droga.
Claudio todo eso lo disimulaba muy bien, más cuando aun tenia trabajo, hasta hace dos sabados, el viernes por la tarde pensé que quedaríamos, pero me llamó para cambiar la cita, y con suspense por su parte, ese sábado, debería estar, en su casa, a las 8 de la mañana, y mi ropa interior, debería de ser femenina, y unas bolas chinas, en mi culo, y una muda de ropa femenina no me sorprendió nada excepto la hora, y allí, fui siguiendo el juego como siempre pensando que me tenia hoy reservado Claudio, y vaya si me sorprendió, no llegue a subir, a su casa, él me esperaba, en su coche, subí, y marchamos, lo sentí nervioso, aunque no le preste atención, con eso de que hacia 10 días había perdido el trabajo lo comprendí sin sospechar la verdadera naturaleza de todo, y me dijo íbamos a la ciudad, vivimos a 16 kms de ella, llegamos, a la estación de autobuses, allí aparcó y bajamos, 5 minutos después, me presento a Alfonso, este me miró me dio la mano, fuerte, dura casi me hizo daño, sin dejar de mirarme, de arriba abajo, y fuimos a la cafetería, hablamos del viaje, hablamos de trabajo sobretodo ellos, Alfonso, cuando yo hablaba, ni me miraba, era como si yo no estuviera, aunque jamas perdió la compostura.
Alfonso tiene 51 años, soltero, 185cm, anchísimo de espaldas, con vello en pecho negro y canoso, con barba aunque muy corta, allí sentado parecía que la silla iba a romperse, mas por su complexión que altura, aunque tenia algo de tripa.
Ambos se cuidaron muy mucho, de hablar de lo que verdaderamente les había traido allí, solo que eran amigos, aunque no se veian hace años (después supe que todo era mentira), finalmente, tras unos 20 minutos escasos, Claudio dijo para irnos, y fuimos los tres, a casa de Alfonso, yo cuando lo dijo, no me sentí nada a gusto, pues como decía Alfonso, me ignoraba totalmente, y lo tenia por un maleducado, pero Claudio, lo hizo muy bien, mientras íbamos, me decía, que iríamos a su casa después comeríamos, fuera, por supuesto, que sabia nuestra condición de homosexual, en ese aspecto si hablábamos libremente, llegamos, a su casa, un amplio apartamento, insonorizado, todo montado con un enorme gusto, Claudio entró muy nervioso, ahora si, por su parte Alfonso, estaba como el hielo de frio y tranquilo, tan nervioso estaba, Claudio que nada mas cerrar la puerta, Alfonso, y tras pasar el vestíbulo, entrando en el amplio salón, dijo
– Ya esta lo que quedamos, ahora damé eso,
No comprendí nada, Alfonso, le dijo,
– No vais a tomar nada, ya te quieres ir
– Si – le contestó Claudio, ahora reaccione lo miré y le dije,
– ¿Qué hemos venido a hacer aquí entonces?
De pronto todo se nublo, para mi, Alfonso, me dio una bofetada con la mano abierta, no la esperaba, quedé con la cabeza baja en decimas de segundo intentando recuperarme saber donde estaba que había pasado, cuando sentí como tiraba de mi pelo con su mano fui a gritar y la otra me tapo la boca, ven aquí perra, veo que no estas tan bien educada, como me a dicho este, pero ya te enseñare yo, asin me gusta aun mas, todo eso yo iba, con un dolor enorme del tiron de pelos, y sin apenas poder respirar con aquella mano en mi boca, hasta una habitación, a 5 pasos de donde yo estaba, la abrió, y lo vi todo, había, colgando, tobilleras y muñequeras en la pared, listas para quedar inmovilizado a ella, Alfonso, me tiro al suelo en una colchoneta muy fina con funda de plástico negro, pero amplia, apretó mi cabeza, contra ella, grite pero me dijo nadie te va a oir cerda, si esto te gusta, dije que no y por favor, pero el no oia o no quería oir, me coloco un bocado, que me dolio los labios, me quitó la camisa y camiseta, asin encima de mi totalmente inmóvil yo, y ya solo farfullando con el bocado, bajo mis pantalones, soy delgado, me quito el cinto y me los quito con botones y todo, de fuertes tirones, quedando yo con las braguitas, a mitad de mis muslos, el las subio finalmente, y termino, con una ancha y resistente tela negra atándome en el suelo de pies y manos, de forma maestra, quedando yo atado e inmovilizado todo ello desde que empezó en pocos minutos, quede asin de lado y el se levanto.
– Bueno ya tengo a esta cerda en su sitio, y podemos charlar sin que nos moleste.
Lo que a continuación, ocurrio, creí que no era a mi, que hablaban de otra cosa en otro lugar, asin como una perra maniatada, e inmóvil de lado, mirando hacia la puerta, donde estaba de pie, Claudio, lo mire, vi en sus ojos, al traidor arrepentido pero incapaz de dar marcha atrás, y Alfonso, se sento en un sillón negro que tenia, grande amplio reclinable, e imaginándolo todo, lo que había ocurrido, empezó a hablarle, a Claudio.
– Esta perra no sabia a que venia, verdad, y ni siquiera has hecho ni la mitad de las cosas que decías hacer con ella, la has engañado y me has engañado a mi, Alfonso, puso un pie en mi cara presionó, y siguió hablando con él, me pediste, un dinero, y te ofrecí otro, y el polvo, ve para abajo traete, la ropa de la perra y tendras todo aquí preparado, pero, no quiero verte mas por aquí, no me van los mentirosos, con esto dirigiéndose a mi ya vere lo que saco, o si termino por echarlo, de la casa.
Claudio marchó, de la casa al apartamento habíamos tardado casi media hora, andando, a mi al verme asin tras escuchar, todo aquello estaba, casi llorando, Alfonso dejo de pisar mi cara, y me desato, pero me coloco, argollas en piernas y manos, y a su vez, los unio de tal forma, que termine quedando, en contra de mi voluntad, sobre sus piernas, con el culo ofrecido, y comenzó, a azotarme, ya la primera supe que no seria como Claudio, Alfonso daba de verdad, primero di unos gritos que salían bufidos por el bocado, tras cada azote, pero cada vez, fueron bajando, mas mis bufidos y subiendo mas su intensidad, salpicada con frases, grita cerda, si estas, bien atada y ofrecida, como una perra en celo, termine entrando en una especie, de trance, donde el dolor y sus frases comenzaron, a darme placer, a sentirme indefenso,incapaz de hacer nada, y disfrutar a su vez de todo aquello, Claudio llamó, el me tiro, quedando de nuevo en la colchoneta, inmóvil, e inmovilizado por sus grilletes y cadenas, Alfonso, hizo entrar a Claudio, y le dijo asin, es como azota un verdadero AMO, si te va el BDSM, solo escuche, a Claudio decir, como tiene el culo, sentía mis nalgas arder, las imagine rojas, cuando ante mi Alfonso le pago, dinero y "especias", escuche de nuevo como la puerta se cerraba, y los pasos al volver, de Alfonso, me trato como a un perro, sin ningún tipo de tacto, me halo del pelo, haciendo tirar todo lo que pude y sentí como, la crema se extendia en mis nalgas, acaricio mi culo, y saco las bolas, dando yo de nuevo bufidos, me desengrilleto y volvió a engrilletarme ahora las manos hacia atrás me quito el bocado, ahora perra vas a aprender a ser obediente, o ya ves lo que te puede pasar, te dirigiras a mi como Señor, andaras si estoy yo en la misma habitación a 4 patas, como una buena perra, vestirás siempre, de zorra, aquí en casa, y cuando no tengas tareas, te colocaras ante mi de rodillas, con las manos extendidas hacia delante, esperando ordenes, o caprichos has comprendido, todo, si Señor, no e he oído, si Señor le dije ahora mas claro y fuerte, me levantó, y fue hacia la pequeña mesa, vino y me coloco unas pinzas y de verdad, no como Claudio, comencé a gritar cuando la puso el me dijo sssss, si aguantas mucho mas zorra, fui respirando agitadamente profundamente, hasta que fue verdad aguantaba mucho mas, haciendo lo mismo con la otra, respirando, profundamente y aguantando el dolor, sin explicarme porque, volvió a estirarme en la colchoneta, y volvió atarme de pies y manos una vez inmovilizado, encendio una vela, me invadio el terror intent tranquilizarme, pero derramo unas gotas, grite las extendió por mi pecho rápidamente, y termine tras agitarme como una lombriz, entre la cera y al extenderla el me daba en las pinzas con su mano, era como latigazos, de dolor, que después, me hacia entrar en un estado, donde no sabia que era dolor que era placer, solo quedaba mi mente en blanco, no se como explicarlo.
Con toda la cera puesta, seca en mi pecho, y las pinzas me desató, aun eres una simple cerda, callejera, te queda para ganarte el collar, y pertenezcas a mi perrera, me hizo ir a 4 patas fuera de la habitación dándome patadas no fuertes, en mis nalgas al andar asin cerda mueve ese culo, me decía, sali al salón, para adelantarse el y guiarme hasta el baño, me metio dentro, me quito las pinzas, quede sentado frente a el desecho, en bragas, con mi culo, azotado, mi pecho, lleno, de cera, el frente a mi dividido por la altura de la bañera, junto al wáter, y comenzó a desnudarse, muy velludo, termino por quitarse el pantalón, y los short a la vez, y apareció, una verga, muy gorda, negra, sus huevos, enormes velludos, jamas había visto una polla asin en real, aun caída su cabeza, rojo marron, se cogio la polla y apunto a mi y me meo, desde medio metro al menos, asin guarra, me decía, toma bien meada, toda caliente, abre esa boca, cerda, y la abri, cayo un buen chorro, entre mi boca, mi cara, mis ojos cerrados, parecía que ni acababa aquel fuerte y largo chorro de meado, me baño entero, en su meada, y me ordeno quedarme asin, sin mover ni las pestañas me dijo.
Asin bien meada perra, bien chorreando, de mi, que yo vea lo cerda que eres, asin me tuvo al menos 5 minutos observándome, y yo escurriendo todo su meado en la bañera, finalmente volvió a sacarme, de ella y me metio la cabeza en el wáter dejándome allí, marcho y volvió unos minutos después tras escuchar yo ruidos.
Traia mi bolsa, la puso a un lado me alzo del pelo, dúchate y te presentas vestida, como una buena guarra, salio cerrando el baño, me duche me di bien en el pecho, hasta conseguir que saliera la cera, con algo de dolor, me limpie interiormente y me vesti, bragas ligueros, medias, botines cortos negros, como todo lo demás, y un vestido cortísimo y ajustado negro, salí a 4 patas, hacia el salón y cuando entre, estaba el desnudo, en la colchoneta, su polla gordísima y larga, ahora se veía dura, el me miro, dijo levántate, me levante, estaba a un metro de el mirándome, levántate el vestido un poco, lo hice, uuuuuff dijo que puta mas rica eres, desde que te vi en la estación, como a mi me gustan delgados de culito respingon cuerpo de guarra rica, y que los tenga que adiestrar yo, aun mas rico, aunque ese tonto me engaño, tenia su polla agarrada con una mano, hablándome y finalmente dijo venga, comete mi verga, que te voy a llenar bien de leche, mamona, me estire, para quedar mi cara a la altura de su polla y trague aquel cabezon, suave, comencé a comerlo y pronto comencé a sentir un enorme placer, por aquello, un placer en mi cerebro al pensar que se la estaba comiendo a un tio, que me había dado, una de miedo, y aquello encima me estaba poniendo, como jamas ante, termine mamandosela como una guarra fuera, de si, hasta que el me paro, me agarró colocándome encima de el de espladas a el, escuche como se lubricaba la vega, y mi culo, todo lo rudo, e insensible, de antes se volvió en suavidad, y delicadeza, me fue dilatando, con sus dedos e intentándolo con su polla varias veces, hasta que finalmente me entro aquella verga, recorrio como un taladro mi culo, y finalmente, consiguió metérmela hasta el ultimo centímetro,
Me tuvo asin sin moverme sentado en su polla, mientras yo solo jadeaba, medio mareado sudando, con aquello metido, que parecía me iba a romper en dos, comencé a moverme finalmente lentamente entre gritos esta vez de gusto, hasta que empezó aquel increíble gusto aquella increíble sensación sentía como mi culo se inundaba con mis propios jugos, mi boca me caia saliva del placer que estaba sintiendo, mis piernas me temblaban incapaz de obedecerme mientras el me tenia puesta sus manos en mis nalgas y me hacia subir y bajar pero a mi ritmo, lento, y sin apenas, sacarme polla, yo estaba fuera de si, una y otra vez y cuando intentaba por desfallecer de gusto caer hacia delante el volvia a cogerme sin sacarme nada de polla por la cintura haciendo que volviera a la situación inicial yo derecho sentado en su polla, termine moviéndome hacia delante y detas en vez de arriba y abajo con toda la polla metida y entonces el comenzó a decirme asin que puta mas rica asin mueve ese culito asin zorra, lo mivi y ahora era el el que cada vez, jadeaba mas y mas, sin moverse y comencé a moverlo mas rápidamente, si puta asin que bien te mueves guarra, lo hice aun mas rápido muerto ya de gusto también y fuera de mi
Mi mano agarro, sus huevos acariciándolos sigue guarra o si te voy a llenar toda bien de leche, sentí como se corrió en mi culo, escuche sus quejidos, y no deje de moverme, por fin termino de vaciarse, pero yo estaba calentísimo, segui moviéndome y entonces el me acaricio mi culo y empezó a decirme, muévete con ese culito bien lleno de leche, de macho guarra, empece a de gemir y decir si bien lleno de mi macho, con su leche en mi culito, si me tiene bien corrida y sigue follandome toda llena de leche como una buena perra, yo decía aquello fuera de si con un placer indescriptible, y me corri, de nuevo, esta vez, por mi polla, di unos gritos jamas dado antes incapaz de pararme, encima de su polla termine sentado, el aguantándome pues me caería hacia delante, era sobre la una de la tarde, cuando cai, y el se quito, qude bocabajo, en la colchoneta,incapaz de hacer nada mas, el se levanto, y entonces cogio una manta vieja, me la echo encima y me dijo tendras tres horas de descanso voy a comer fuera, hoy, después vendre.
Volvió algo mas tarde, de las tres horas, pero, no hubo ni ese sábado ni domingo, mas sesiones, de sado, estaba dolorido, me dijo, y me iba a adiestrar poco a poco, estuve toda la tarde y noche haciendo tareas de la casa, y cena, entre medias le hice una mamada, y por la noche volvió a follarme, al dia siguiente estuve sirviéndole hasta la tarde, cuando, me llevo a la estación de autobuses, y marche a casa, dolorido pero bien follado como nunca antes, y empezando mi educación, como perra de Alfonso, mi Señor, Volvi el martes tarde, para ordenar la casa, y follar finalmente en la noche, y volvi el jueves, para lo mismo, este sábado pasado volvió, a darme, una sesión, donde a comenzado a controlarme mis orgasmos, por mi polla, eso se que es duro, pero, se que lo conseguiré, pues, se que mi cerebro aunque no quisiera yo esta sometido, a el, ya.
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