Mi Colega Afrodisiaco

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por jerrad.
Me llamo Carlos Tengo 30 años, tez ni muy blanco ni del todo trigueño algo entre medio, nacido en Puerto Rico de padre italiano y madre puertorriqueña, buen físico y varonil. Académicamente, tengo un grado en inglés e idiomas estratégicos entre ellos español y francés y una maestría en lingüística aplicada. Recientemente, hice estudios en entrenamiento personal.

Actualmente, trabajo como profesor de inglés a nivel universitario. He hecho muchos colegas, pero hice mucha confianza con uno llamado Edwin (Seudónimo). Edwin es blanco ojos marrón claro, en el momento que lo conocí sabía que era profesor, pero era mi cliente, lo entrenaba físicamente sin más que agregar. El siendo más joven que yo se presentaba más informal y un poco más atrevido.

En diciembre pasado al terminar los exámenes finales, me tocó ofrecer el examen final en el mismo salón que el utilizo hora y media antes. Cuando va de salida, me hace seña para que verifique mi celular. A los minutos recibo un mensaje que lee:

E- “Deje el salón todo usado lol”.
C- Me perdí!?!?!
E- Es broma – ¿Vas a hacer algo después del examen?
C- No pq?!
E- A ver si quieres unas cervezas después de tu examen
C- Dale
E- Tú bebes?!
C- Sí con moderación
E- Te llamo.

En ese momento, mientras mis estudiantes tomaban el examen yo pensaba voy a beber y hacer el ridículo por que no acostumbro tomar. Ni modo, acepté por compartir con él porque me gustaba mucho. Cuando todos mis estudiantes me entregan, salgo del salón y de camino a mi carro lo llamo y él me contesta:

E- Me fui.
C- ¿Por qué, si es temprano apenas con las 8 y 10 pm?
E- Pues que hago te busco?
C- Sí, voy dejo el carro en el mall y me voy con tigo.

La conversación continúa…

Dejé el carro en un centro comercial cerca y el aparece… Baja su cristal y me dice móntate y yo le contesto mamalón. Mientras se ríe me dice, ¿quieres ir a comer algo? Yo pago, le contesto.

Llegamos, me dice, pero yo noto que hay muchos policías y le digo te van a parar por tintes. Tengo la licencia expirada, responde. Pues vira y vamos a mi casa que está cerca- le dije. Ya eran las 9 y 20 pm cuando llegamos a mi casa. Carlos, voy a ordenar algo, ¿que se te antoja? Yo cocino (de joven trabajé en una pizzería y hacia servicios de catering así que cocino muy bien). A lo que tu cocinas me muero de hambre y si no me muero cuando me coma tu comida riéndose a carcajadas. Mira Edwin, yo salí a las 8 pm y el que apendejó fuiste tú. A parte, cocino muy bien. Él se acerca a medida que cocino y comenzamos a hablar de tonterías relacionadas a la universidad, unas series que estábamos viendo por Netflix que él me recomendó. Termino, le preparé ravioli frito, un dip de atún con galletas, y pescado con vegetales. A medida que va probando la comida, me indica que retira lo dicho y que en mi apartamento tiene todo lo que necesita para ser feliz. Continua las bromas mientras le pregunto qué significa eso.

Carlos, esta casa está brutal, grandísima, tú cocinas, eres mi entrenador, ¿qué más puedo pedir? y continúa con las rizas. Le digo, ¿quieres verlo completo? Lo llevo a los cuartos y al cuarto master, al segundo que uso de oficina (aquí me pide matrimonio el muy payaso) y luego a un cuarto que lo tengo con pesas, un PS3, juego de cuarto pequeño. Prende el PS3 y ahí tengo los DVD de Shaun T para hacer ejercicios y el comienza a hacer los ejercicios. Le digo enserio los vas a hacer!! ¡Claro! Cámbiate entonces porque no vas a sudar esa ropa. Le busco en la misma habitación ropa ya que tengo muchas piezas para estar en la casa ahí. Comienzo a cambiarme frente a él ya que en el gym lo hacíamos todo el tiempo y él se cambia también.

Edwin cuando lo conocí estaba sobre peso, pero muy guapo no tiene abdominales muy marcados, pero tiene un pecho espectacular, sus pezones son hermosos, rosados pero enormes no he visto algo parecido en gente blanca, pero el puertorriqueño es 25% africano imagino que de ahí vienen. El video que puso duraba como cuarenta minutos ya eran las cómo las 10 y 55 pm cuando lo terminamos. Él comenzó a flexionar el cuerpo y me pidió que lo hiciera también, a todo esto yo no estaba nervioso porque lo considero un amigo y él nunca me ha insinuado nada. El me comenta a la verdad que estamos bien buenos. Edwin por favor. Admítelo mira que rico estoy y toma mi mano y se la lleva a su bícep. Le sigo el juego y le digo estas riquísimo le doy un beso en el bícep y otro en la tetilla y me dice sigue que me encanta con una riza cabrona. Yo le sigo el juego y comienzo a mamarle el pezón, en ese momento me puse nervioso pero me reía y le preguntaba que si le gustaba y él me dice que sí. Yo me despego y con la mano le halo el pantalón y le miro por dentro de su ropa interior y le digo no me motivas lo tienes muy pequeño y me rio de él (6 pulgadas súper ricas por cierto). El me hace lo mismo yo siguiéndole el juego me saco el pene y le digo si tuviera vagina me lo metías aquí mismo… y el riéndose me lo toca (en el gym me lo había tocado en broma por eso no tuve erección). Le digo me voy a bañar busca ropa para que te bañes.

En el baño, tardé un poco porque tuve una erección pensando en él y espere a que se me bajara. Cuando salgo él está ahí a la entrada se me acerca y me comienza a pasar la lengua por mis pectorales.

(Esto me ha pasado en varias ocasiones por eso no le doy importancia. Xavier mi barbero me rozó su pene por el brazo en una ocasión, pero yo me molesté pero luego paso algo que contaré en otro relato)

Continua con su relajito y me arranca la toalla yo me doblo para mamarle su tetilla también y cuando me despego veo que tiene una erección sobre su pantalón. Lo miro a los ojos y pasaron unos segundos. Carlos discúlpame, nunca me había pasado y se da media vuelta, regresa al cuarto a buscar su ropa. Lo alcanzo y le digo Edwin somos adultos y el me responde que vas a pensar de mí que soy gay. Me pongo la toalla y le digo siéntate. No vamos a dejar de ser amigos por eso. Pero, Carlos tú no vas a querer tener un amigo maricón. Como que maricón, Edwin tu eres una persona como cualquier otra. Medio mundo es Gay eso no tiene nada de malo. El me mira, con cara de vergüenza y ojos llorosos. Yo lo miro, fijamente y le digo Edwin yo soy Gay. Él se sorprende y me dice ¿qué dijiste? En serio yo pensé que me invitaste a las cervezas para tener algo y por eso acepté. El comienza a reírse y yo también. Ya eran como las 11:10 y le dije vamos a buscar mi carro.

Buscamos mi carro y estábamos hablando más tranquilos más tarde llegamos a mi residencia y en el patio me dice me voy ya es tarde. Le digo sube quédate aquí y me dice que no quería molestarme más. Le contesto, en estos tres años lo que has hecho es fastidiarme y ahora no quieres molestar más, ¡No jodas y sube ahora! Mientras subíamos las escaleras le dije aquí la vas a pasar rico y me acerco y le beso el cuello mientras le toco la entrepierna el solo me respondo tocándome el pecho y el abdomen.

Entramos a la casa y nos dirigimos al cuarto principal y le indique que se duchara. Prendo el acondicionador de aire y lo espero en la cama. Sale de la ducha y se acomoda detrás de mí. Me echa los brazos sobando mi miembro a través la ropa se sentía delicioso luego me sube la camisa y se sube la de él pegando su pecho a mi espalda así estuvimos un momento y el continuó manoseándomela y besando mi nuca. Comienza a bajar por mi pecho dando besos y mordiendo mientras le decía que rico estas. Él se me acerca al pene y comienza a mamarlo se sentía riquísimo especialmente cuando metía su lengua entre mi prepucio y mi glande. Estuvo así unos minutos luego me dice quiero tu leche. Edwin eso te va a dar trabajo no me vengo tan fácil, le contesto. Ahí el comienza a mamármelo con más intensidad apretando mi pene entre su lengua y la parte superior de la boca continua unos minutos más. Edwin si quieres puedo masturbarme para venirme y me dice déjamelo a mí.

Él seguía en su frenesí para probar mi leche, pero lo que había ya era una mezcla de mi pre seminal y su saliva. Se detiene y me pide un condón. Abre la gaveta ahí y saca uno condón y lubricante me unta un poco y se arrodilla sobre mí. Comienza a pasarse mi glande todo baboso por la entrada de su culo. Intenta unos momentos y me dice no entra. Le digo ponte abajo y déjame a mí. Nos volteamos y le meto el dedo del medio luego le meto dos y lo intento estaba durísimo y él ya se estaba apenando. Me inclino hacia él y lo beso mientras continuo intentando penetrarlo hasta que lo consigo. Comienzo a moverme de manera rítmica. Esa ocasión fue una de las mejores que tuve. El sexo estuvo delicioso mi pene llegaba muy profundo y él lo disfrutaba muchísimo.

El me pide que me acomode abajo y esta vez sí pudo entrar en su agujero. Me lo hizo muy rico prácticamente saltando sobre mi pene. La excitación fue tanta que no pude contener las ganas de venirme. Le digo Edwin me voy a venir y él se desmonta y ubica mi pene frente a su boca. Se tragó todos los chorros de semen.

Se quedó esa noche, cuatro días en total, hicimos de todo durante ese periodo. Le explique me podía llamar para lo que sea. Nuestra amistad ha sido más unida estos dos meses y con mucho sexo. El fin de semana pasado fuimos al concierto de Luis Fonsi. No somos pareja oficialmente, pero nos frecuentamos muchísimo.