Mi cuñado Erick 2

Quien lo diria….
Aqui esta la continuacion de mi aventura con mi cuñado.

Despues de tragarme la deliciosa leche de mi cuñado, pense que hasta ahi habria acabado todo, pero me sorprendio lo que vino despues.

Yo seguia super duro y empeze a masturbarme a lado de Erick, quien seguia gimiendo despues de tremenda mamada que le di. Cuando se dio cuenta de lo que hacia tomo mi verga con su mano y empezo a jalarmela, yo solo cerre los ojos y disfrute hasta que senti que se levanto, solo fue para acomodarse entre mis piernas y empezo a chuparme la verga. Jamas pense que el le gustaria algo asi pero la chupaba como todo un experto, bien guardadito se lo tenia.

Mamaba y gemia como una puta, me miraba a los ojos con mi pene en su boca y eso me calentaba mucho mas, no aguante y lo jale a mi lado para besarlo aun con el sabor de su semen en mi boca y el sabor de mi verga en la suya. Susurrando me dijo «Quiero que me mames el culo». No me lo creia, pero gustoso acepte y solito se desnudo para mi. Ver ese tremendo culo mientras el se ponia en cuatro me excito demasiado y comence a comerme esas nalgotas de hetero, un poco peludas y gordas.

Mi cuñado disfrutaba mi lengua dentro de su ano y cada vez paraba mas el culo, yo con esa imagen y super duro pare de mamar para intentar metersela, y la idea le encanto ya que se empino mas y con sus manos separo esas nalgas que me volvian loco.

Mi verga se abrio paso facilmente en cu culo de hetero, que hasta ahi entendi que ya estaba estrenado y usado seguidamente por el. Por lo borracho y todo el juego previo no aguante mucho para venirme, mas con sus gemidos de perra en brama que soltaba cada vez que mis bolas chocaban con sus nalgas. Cuando le dije que iba a terminar se quito y me suplico «Echamelos en la cara», a lo que sin pensarlo dos veces me puse de pie y el se hinco en el piso, esperando mis chorros de leche, que cayeron en sus mejillas y el la boca, a lo que el saco la lengua para probarla y me miro satisfecho. Nos bañamos y regresamos a dormir con todos los demas, no sin antes besarnos apasionadamente cuidando que nadie nos viera.

Despues de ese dia no tocamos el tema para nada, tal vez el por vergüenza porque a pesar que habiamos coqueteado «jugando» en el pasado, jamas se atrevio a hacer nada conmigo. Pero teniamos una platica pendiente, queria saber desde cuando ese macho, que casi siempre veias con su jersey de futbol y siendo tan varonil, le encantaba comer verga y quien lo inicio, pero eso sera en el proximo relato.

Espero les esten gustando estos relatos y dejen sus comentarios. Saludos.