MI CUÑADO QUERÍA ALGO DE MÍ
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola amigos, el relato que les quiero contar esta vez me sucedió sin pensarlo, realmente nunca me paso por mi cabeza que pudiera hacerlo, simplemente hasta mis días todavía me pregunto cómo es que pude o más bien cómo pudimos llegar a ello.
Les platico, mi cuñado es un chavo de 27 años muy atractivo pues va al gym y tiene un cuerpo durito, guapo de cara, en fin muy antojable pero no dentro de mis prospectos para coger con él puesto que es mi cuñado y no lo considero gay ni nada por el estilo puesto que el tampoco sabe de mis preferencias.
Cierto día fuimos a visitar toda mi familia a mi hermana que vive fuera, así que nos quedamos en su casa y nos acomodamos para dormir en los cuartos como pudiéramos, casualmente a mi me tocó dormir con él, para esto cabe aclarar que ya habíamos tomado unas cervezas pero no estábamos borrachos, simplemente tomados.
Cuando yo llegue a acostarme, mi cuñado ya estaba en la cama acostado, así que me acosté en el espacio que el me dejo y me puse comodo para empezar a dormir y así lo hice.
Más noche sentí como colocó su pierna encima de mí, pero no le tomé importancia puesto que pensé que tal vez así dormía o acostumbraba a hacer eso así que deje que lo tuviera en esa posición, pero minutos más tarde, me abrazo por detrás y empezó a empujar su pene en mi trasero haciendo movimientos como si me estuviera cogiendo.
Yo por mi parte deje que lo siguiera haciendo por que me estaba gustando pero luego dejo de hacerlo y se colocó nuevamente boca abajo para seguir durmiendo, ahí fue cuando pensé que tal vez me había confundido con mi hermana y al darse cuenta pues decidió no hacerlo más.
Ese fue mi primer acercamiento a mi cuñado que en mi cabeza quedó como una experiencia equivocada y por tanto debía olvidarla para no evidenciarnos.
Todo siguió normal entre nosotros, es decir, seguíamos hablándonos normalmente, nos mensajeábamos de vez en cuando para hacer relajo y platicar.
Pasó que un día yo estaba en el trabajo a punto de salir, cuando recibo una llamada de él diciéndome que estaba en la ciudad donde yo vivo y que necesitaba hacer unos mandados pero que no sabía donde quedaba la dirección y que si le podía ayudar acompañándolo, así que le dije que si y fui por el a la terminal para llevarlo a donde el decía.
Hicimos el pendiente que él tenía y como ya era algo tarde, le propuse que fuéramos a comer porque tenía mucha hambre y el por su parte también, así que nos dirigimos a un lugar donde sirven comida muy rica acompañado esto con unas cervezas bien frías para contrarrestar el calor que estaba haciendo.
Luego de un par de cervezas, le sugerí que si quería seguir tomando podríamos ir mi casa y comprar más ahí ya que nos salía más barato y además podríamos escuchar algo de música para amenizar la platica, él accedió y nos fuimos a mi casa a seguir tomando y cantar algunas canciones que nos gustaban.
La verdad lo estábamos pasando bastante bien, hasta que me dijo que ya tenía que irse porque debía regresar pues se le estaba haciendo tarde para viajar.
Yo le respondí que estaba bien, que nada más nos acabábamos lo que faltaba y yo le iría a dejar.
Seguimos bebiendo lo que nos faltaba ( que era una cada uno), hasta que el se levanta para según ir al baño y digo según porque al pasar detrás de pasó a morder la oreja y entonces me quedé muy asombrado por lo que habpia hecho pero mejor decidi no darle importancia, a su regreso, movió su silla más cerca de mí y sin más me abrazó atrayéndome hacia él y empezó a besarme con tal desesperación como si fuera su ultimo beso, eso a mi me calentó mucho y entonces también lo abracé y lo besé intensamente como el lo hacía, estuvimos así lago rato y el aprovecho para tomar una de mis manos y llevarla hasta su pene que estaba erecto, yo se lo acariciíe por encima del pantalón y seguí besándolo hasta que nos paramos sin dejar de besarnos y poco a poco caminamos hasta llegar a mi cama donde nos acostamos, haciendo del beso algo más excitante puesto que así yo me monté encima de el y refregaba mi trasero en su verga dura, el también agarraba mis nalgas y conducía el movimiento sobre su pene.
Acto seguido, nos sentamos sin yo dejar de montarlo y le quite la playera y el hizo lo mismo con la mía quedando al descubierto mis pechos que rápidamente comenzó a chupar con tal fuerza que parecía que quería arrancarmelos, pero a mi no me importó porque lo estaba gozando como nunca, así estuvo chipando un buen rato hasta que me dio la vuelta para acostarme en la cama y quitarme el pantalón y mi bóxer para dejarme completamente desnudo y así poder lamer tomo mi cuerpo, desde mi cuello hasta mis piernas.
De repente el se paró e hizo que me sentara a la orilla de la cama, fue entonces que se desabrochó su pantalón y liberó su verga erecta y lubricada de su excitación a la cual me acerqué y empecé a mamársela muy suavemente, primero la cabeza roja y babeante a la que le daba lengüetazos suaves y después me la introducía para chuparla con desenfreno y después toda completa haciéndomela llegar hasta la garganta, mi cuñado lo estaba gozando mucho, lo sabía porque lanzaba quejidos de placer y yo trataba de darle la mamada mas deliciosa que jamas nadie le hubiera dado, se la chupe mucho tiempo hasta que decidí desnudarlo por completo quitándole su pantalón para quedar los dos desnudos.
Me levantó para ponerme de pie y empezamos a besarnos nuevamente con mucha desesperación y mientras lo hacíamos, el tocaba mis nalgas y aprovechaba para tocar mi hoyo con sus dedos y entonces yo paraba más la cola para que sus dedos hicieran su trabajo sin ninguna dificultad.
Sentir el sabor de su boca por el delicioso beso que nos dábamos y su dedo metiéndose en mi culo me gustaba mucho, por mi parte yo lo abrazaba y acariciaba y apretaba sus nalgas, notando que le gustaba que hiciera eso por que se le escapan algunos gemiditos de vez en cuando.
De pronto dejo de besarme y poco a poco me giró para darle la espalda y en esta posición me besaba el cuello pasando su lengua humeda y su pene empezó a picar mis nalgas, subiendo y bajando a través de ellas y de vez en cuando por entre mi raya que quedaba húmeda por su lubricación de su pene que era abundante.
Me susurró al oído que quería cogerme y que ya no aguantaba, que quería meterme la verga y que hacía mucho que anhelaba tenerme así a su disposición, por mi parte le dije que yo también había esperado mucho este momento y que me cogiera ya, empujando mis nalgas hacía él.
Acto seguido, puso un poco de saliva en sus dedos untándomelos en el culo y poco a poco me fue metiendo la cabeza de tu trozo de carne y a cada empujon que me daba todo iba albergándose dentro de mi ano.
Cuando ya lo tuve todo adentro arquee mi cuerpo parando mis nalgas hacía él y empezó el mete y saca, primero cadensioso y después con velocidad y fuerte haciendo que al chocar sus bolas con mis nalgas, estas provocaran un ruido muy sensual, por lo que empece a mover mis caderas hacia atrás asegurando que entrara todo el pene de mi cuñado quien gemía y me decía, – mamita, estas bien rica- ( debo confesar que a mi no me gusta que me trate como mujer, pero en ese momento no me importo que me dijera así), y asu vez yo le decía que me diera más fuerte y que me gustaba mucho.
Me Tomó de mis hombros y empezó a impulsarse con mas velocidad y decir entre jadeos que ya se iba a venir, yo le dije que si que se veniera pero fuera de mi, y el me contesto que quería dejar su leche dentro de mi culo, le dije que sí y solo eso se alcanzó a escuchar, cuando un grito de placer de su parte se escuchó por todo el cuarto y dentro de mi sentí cómo mis intestinos se llenaba de algo caliente y eabundancia, sentía perfectmente los chorros de leche que chocaban dentro de mi y llenaban todo el hueco de mi culo, y mientras eso pasaba tomé mi pene rápidamente y empecé a masturbarme con mucha velocidad antes de que mi cuñado sacara su verga de mi culo y así con la estimulación que aún tenía de su pene dentro mi, acabé en el suelo con abundante leche que salió de mi verga.
Entonces él se salió de mi y rápidamente se fue al baño a asearse y yo hice lo mismo limpiándome con una toalla que tenía cerca.
Todo lo que pasó y cómo pasó fue riquísimo, lo que él me hizo, y lo que sentí me encantó, pero ese encanto se perdió cuando mi cuñado salió del baño, se vistió y me dijo que tenía que irse ya, sin hacer mención ni decir nada de lo que había pasado entre nosotros, al contrario, se portó frio y tal vez arrepentido, yo no quise tomarle importancia, así que lo acompañe a la puerta, le expliqué cómo podría llegar a su destino tomando un taxi y le desee buen viaje.
Tardaron muchos días en que el me escribiera nuevamente y pensé que sería primera y única vez que pasaría, pero pronto descubriría que no sería así pues en otras ocasiones tuvimos nuevos acercamientos más cachondos que lo que pasó en ese día.
Pero eso se los contaré en otro relato.
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