Mi cuñado y yo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por LeumasPrimate.
Mi cuñado trajo anoche a quedarse con él a su compañero de trabajo. El es de otra ciudad, pero por motivos de trabajo rezagado, no viajó este fin de semana, y se quedaron trabajando hasta tarde.
A medianoche, que me levanté al baño, aun estaban en la mesa del comedor, cada uno con su laptop, taza de café y descalzos, lápices, libretas, teléfonos, un bulto de papeles sobre la mesa, zapatos por ahí, y yo paseándome desnudo del baño a la cocina.

No pasé desapercibido. El compañero de trabajo de mi cuñado no dejó de verme, y cuando le devolví la mirada, una sonrisa en su rostro, y una frase: “Necesito usar el baño”
Se levantó, tocándose sus genitales, se dirigió al baño, y aproveché para acercarme a mi cuñado y poner mi pene en erección total en su boca. “Tranquilo papi, una hora más y estoy con vos en la cama”, me dijo, después de hacerme una breve y profunda succión en mi glande.

Caminé de regreso a mi habitación, y ahí me percaté que el compañero de trabajo de mi cuñado había accedido a ese baño, y no al que está en el cuarto de huéspedes. Me lo topé de frente, con su pene casi fuera del bóxer, a punto de estallar. Su sonrisa se topó con mi cara de sorpresa y encanto, a dos, un centímetro, y en menos de lo que escribo, estábamos besándonos, apasionadamente, tocándonos suave al principio, y con más intensidad inmediatamente después.

Me sentí culpable porque mi cuñado seguía enfrascado en números y papeles en el comedor, mientras yo me daba mi pequeño banquete con su compañero. Reaccioné un par de minutos después, y le susurré al oído: “Esperemos a que terminen, y dormimos juntos” A lo que me respondió: “No pienso terminar ese trabajo hoy. Acabo de encontrar algo más interesante” Acto seguido, se separó suavemente de mi, y se dirigió al comedor, donde mi cuñado sin levantar su mirada de la pantalla de su PC, preguntó: “¿Ya le perdiste el miedo?” Y él, con una mano dentro del bóxer, contestó: “Fue fácil” Entonces comprendí la intención de mi cuñado.

Trajo a su compañero de trabajo, para divertirnos sanamente otro fin de semana. Y yo no me quejo, la estamos pasando de película. Estoy bebiendo agua y compartiendo esta experiencia con ustedes, porque es nueva en mi vida, pero lo disfruto como nunca.
Los tres somos versátiles, así que no tenemos escrúpulos en divertirnos entre los tres y no parar hasta que todos estamos satisfechos. No sé cuántas veces he eyaculado, ni dentro de quién de ellos en su boca o en su delicioso trasero. Tampoco llevo recuento de cuántas veces he tenido uno o dos penes en mi boca, y me han llenado de leche tibia y espesa. Mi trasero también ha sido beneficiado. Siento que el sexo entre hombres es lo mejor que puede existir, después de mi experiencia heterosexual.

Tanto mi cuñado como su compañero de trabajo son muy varoniles, y saben exactamente donde estimular para dar placer. El hecho de ser hombres, nos hace expertos en la anatomía masculina, por eso cuando nos penetramos, nos divertimos tanto el que penetra, como el que la recibe. Y esta vez intentamos cosas nuevas. Es delicioso tener un buen pene por atrás y otro en la boca. Así como tener a mi cuñado apretando mi pene con sus nalgas, y el de su compañero dentro de mí.
Tenemos aun hasta llegar al lunes para terminar de escribir el kamasutra entre tres machos.