Mi desvirgada (Primera Experiencia Bisexual)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mi primera experiencia se puede decir que fue una violación que termino en gozo…
A mis 24 años me Gustaba Cantar, tocar instrumentos, me la pasaba de fiesta en fiesta cantando y parrandeando
Ese día estaba, tipo tranquilo en mi casa, era un día Jueves, no recuerdo la fecha exacta, a las dos de la tarde (02:00 pm) Llegaron unos amigos para invitarme a una fiesta de cumpleaños, para que fuera a cantar y acompañarlos con el cuatro (Instrumento musical), ok, accedí, al ello decirme que había paga, comida, ron y mujeres.
Llegamos al lugar de la fiesta y esta era una casa Grande, con gran patio, buen porche, se veían varias habitaciones.
Nos recibió el dueño de la casa quien era el cumpleañero, cumplí sus 38 años, era un Moreno como de un 1.
70 metro, Moreno, de buena figura, y un poco amanerado, pensé para mis adentros, ¡ay vale este tipo es marisco!, Ok, el nos presento ante los invitados y nos ubicamos en un sitio estratégico para cantar, no usábamos cornetas, ni amplificadores ni nada, a rin pelado, a garganta pura, empezamos a tocar y a cantar, todo natural.
Asi comenzó nuestra actuación, tuvimos cantando por un rato, las personas no nos prestaron mucha atención, ok paramos a descansar y disfrutar de la fiesta, comimos, y bebimos un rato, bailamos.
Al transcurrir como dos horas empezaron a llegar más invitados, entre los cuales habían muchos a los que les gustaba la música en vivo, una señora, hermana del festejado nos Pregunto: ¿Por qué no se cantan una bonita? Una balada
Ok.
Ahora si nos toca….
dijimos.
Empezamos a cantar toda clase de música, la que la gente iba solicitando: Vallenatos, recias, baladas, boleros, etc.
La gente se fue aglomerando a donde estábamos nosotros los músicos.
Ya pisaban las ocho de la noche, había un invitado que me conocía y sabia que yo cantaba música jocosa, de esas que se cantan para echarle broma y burlarse de los presente, me dijo: – epale, cántate una jocosa,… empecé a cantar y sacar los defectos o inventar defectos de los presentes, todos riéndose y en calma se había prendido la jodedera, llego el momento en que le toco su verso al cumpleañero, por medio de la música le empecé a echar vaina, burlándome de él por su amaneramiento y la gente riéndose de él, él ni siquiera se molesto, reía y se divertía igual que todos, todo siguió calmadamente, llego la hora de descansar, la hora de bailar con la minitk.
Yo bailando, y tomando cerveza, ron y Whisky a la vez.
Estaba bastante animado para parrandear, la gente saludándome y felicitándome, que si cantas bonito, tienes buena garganta, cantas bien, etc.
Me sentía como el propio artista famoso.
Pero esa Noche cometí un gravísimo error, había bebido demasiado, ligando muchos tipos de bebida y me estaba quedando dormido en una silla ¡Qué HORROR!.
Mis Amigos, compañeros, me incorporaron: Epale, te estas durmiendo, a lo que conteste, tengo bastante sueño, ellos me dijeron para llevarme a la cas y les dije si llévenme.
En ese momento, interfirió la misma hermana que nos había dicho que cantáramos antes y dijo: pero acuéstenlo un rato en uno de los cuartos a que repose y se le pase un poco.
– ¿Te Quieres acostar en un cuarto? Me preguntaron.
– Si.
.
Dije
Como dije antes, era una casa grande y había habitaciones disponibles como para acostar a 50 borrachos, aunque la verdad, no me sentía tan borracho, me sentía era con bastante sueño.
¿Y qué paso?
Me acosté, a dormir, entre dormido y despierto escuchaba la música y el bullicio de la gente, como a lo lejos hasta que todo se fue quedando en silencio.
Me quede rendido en el más profundo sueño.
Como a las una o dos de la mañana empecé a despertarme, sentía una presión y un empuje sobre mi persona, con un poco de fresco en mi cuerpo, pero con dolorcito en el ano, como si quisiera ir al baño, me desperté más y busque para darme la vuelta y no pude, pues tenía al cumpleañero cobrándose la broma que le hice o estaba reclamando su regalo (cualquiera de las dos cosas), me tenia boca abajo, con los pantalones hasta los tobillos, sentado de tal manera que cada rodilla de él quedaba a ambos lados de mi, sus nalgas sobre mis muslos, sus manos en mi cintura, mis nalgas levemente levantadas y con el pene metido dentro de mí, me estaba cogiendo, me estaba violando dormido, busque a moverme y me dijo:
– Quédate quieto, tranquilo.
A continuación paso lo que jamás en mi vida pensé que iba a pasar, creo que la manera más obvia de reaccionar seria, que luchase para quitármelo de encima, que me quitara de ahí peleando, que me saliera de debajo de él y le diera una golpiza, pero para mi sorpresa, y quizás para la sorpresa de él, lo que hice fue decirle:
– Dale con cuidado… – Mierda ¿Qué dije? Pensé.
El tipo me agarro por la cintura y me daba despacito, se sentía bien adentro, me dolía pero me gustaba, como que me estaba tocando donde era, me cogió así como por diez minutos, se paro y me dijo, ya vengo, tardo un rato por afuera del cuarto y en ese rato se me salieron las lagrimas, pensando en mi hombría, preguntándome ¿Dios que está pasando? ¿Qué estoy haciendo? ¿Y qué hace? ¿Sera que fue a decir que me está cogiendo y fue a buscar a otro para que me coja también? No que va yo me voy, y aun con más lágrimas en los ojos empecé a pararme de la cama, en ese momento él volvió y me encontró en eso llorando, me dijo:
– ¡No llores que esto queda entre tú y yo!
Traía en su mano dos vasos de vidrio llenos de ron seco y una caja de cigarros, me dio un vaso y un cigarro encendido, tome el vaso de ron y de un solo sorbo me lo bebí hasta la mitad, el se quedo parado caminando por el cuarto y yo sentado en la cama agarrándome las rodillas, como la propia violación a la que uno no puede escapar, pensaba que está pasando que estoy haciendo, Ya para ese momento me sentía más lucido, llevaba el cigarro ya casi por terminar y de otro sorbo me bebí la otra mitad del ron.
Bote la colilla del cigarro, entonces el se agacho o arrodillo al lado de la cama, me tomo de los tobillos y me jalo hacia él, me abrió un poco las piernas y empezó a mamarme el pene, Me dijo que me acostara boca arriba y siguió mamándomelo, me lambia el pene, los testículos, Me metía la lengua dentro del culo, me lo chupaba y me lo besaba, culo y pene, pene y culo, me alzaba las piernas para mamarme el culo, casi acabo y se lo dije me dijo ¡no!, me alzo las piernas, las coloco alrededor de su cintura, me tallo el culo con la cabecita de abajo para arriba, me lo tallaba y lo asomaba en la puertita – ya en ese punto yo lo estaba disfrutando – me gustaba el roce, la forma en que me lo estaba haciendo, se escupió la mano y me junto saliva en el culo, me masajeaba con los dedos, sentí que me metió un dedo, lo saco escupió y ahora dos, me alzo mas las piernas, escupió nuevamente en mi ano y en su palo, me tallo con la punta, la metió, empujo poco apoco, sentía que me entraba, como mas apretadito, con movimientos suaves pero firmes me empezó a dar, yo pensaba, ¿Qué está pasando dios? ¿Qué es esto?, quiero salir corriendo, pero me gustaba la penetración (estaba enredado, confundido con los pensamientos y el tacto), pensaba, yo no soy marisco, pero esta rico esto, lleve mi mano hacia mi pene y estaba que explotaba y bastante húmedo.
En ese momento dejo de cogerme y me lo saco despacio, empezó a mamarme nuevamente el pene y le dije:
– Quiero Cogerte yo.
– No, esta noche no, hoy voy a ser yo el que te coja.
Así te enseño.
No dije nada y seguimos.
Me tomo por la rodilla derecha, me acostó tumbado del lado izquierdo y él se coloco detrás de mí, ambos acostados de lado, me empezó a sobar entre las nalgas y el culo con las manos, me frotaba y abría mi nalga derecha, me pesaba y me mordía la espalda y el cuello, me sentía extasiado, excitado, a la vez me sentí cuidado y bien atendido, como si en verdad me estuviera enseñando a ser penetrado, ya me estaba entregando por completo, busco a besarme en la boca y le aparte la cara, no insistió, se acomodo bien y me di cuenta de que iba a entrar otra vez, que nuevamente iba a ser penetrado, levante un poco la cola, cual mujer sumisa, sin lubricar ni nada (ya para que) me lo volvió a meter despacio y me alzo la pierna empezó a cogerme sabroso, rápido, se producía ese sonido de dos cuerpos chocando plas, plas, plas plas.
Excitado me Dijo:
– ¡Tienes un culito rico! ¡Ufffff! Sabroso y me daba con fuerza.
– Ujummm Conteste.
Esas palabras me excitaron.
Ya no era yo.
Paro de darme y me dijo
– Dale tu, muévete un poquito, culea.
– No seas pendejo tú, ¡DALE Y MAS NADA!
En ese instante me empujo quedando yo boca abajo y el sobre mí con todo su peso, se sentía rico, su cuerpo sobre el mío, su calor y sus embestidas, le levantaba las nalgas para que le diera a placer, me gustaba lo que sentía, me decía o repetía para el mismo:
– ¡Que culito tan rico! Ufffff ¡Que culito tan rico! Ahhhhh ¡Que culito tan sabroso!¡Que culito tan Divino! Ufffffff y me cogía rico, ya no me importaba el hecho de que comenzó como una violación, me gustaba, me encantaba, lo que aquel hombre estaba haciendo conmigo
– Ummm, ummm, ummm, ahhh, ummm, era lo que escapaba de mi boca
Así acostados los dos yo boca abajo y el sobre, cogiéndome divino yo me sentía rico, deseado, el coloco su cara sobre la mía, cachete con cachete y empezó a hacerme varias preguntas:
– ¿Te Gusta?
– Ujjummm.
– ¿En serio te gusta?
– Aja, Ujjummmmm, siiii.
–Que bueno, porque tienes un culito sabroso de verdad, se dilata bien y se lo traga rico.
– ¿Si? Pregunte
– Si, sabroso, lo tienes, rico, divino, se siente apretadito y tragón a la vez.
– Ummmmmm como queriendo decir ok o que bien, como queriéndole decir: “Me Encanta que te guste”, como queriendo pasar la prueba…
– ¿Te Gusta? Volvió a preguntar.
– Si, siiii, dale, sigue.
El me seguía dando, cogiéndome con gusto.
– ¿Te habían cogido así antes?
– NO, es la primera vez.
– ¿Es la primer vez que te cogen rico?
– No, es la primera vez, es primera vez que me cogen.
Cada pregunta de él, me excitaba mas y me partía, ese tipo de pregunta me daban ganas de que me diera mas y mas.
– ¿En verdad?, no parece,
¬– Si, es primera vez.
.
ummmm sigue, sigue, dale
– ¿O sea, que te estoy reventando el virgo del culo?
– Ummmmmmm, Claro que si (le dije en forma excitada), eres el primero que me lo mete.
Ummmm, ummmm.
– ¡Ay que rico, me estoy cogiendo un culito virgen, ahhhha, lo tienes rico carajito.
Dejo de hablar y de hacer preguntas, me agarro con las dos manos por los hombros y me siguió dando, primero rápido, y duro, luego se afincaba, como queriendo metérmelo todo y se quedaba sin moverse unos segundos, y lo repetía se retiraba un poco para el impulso, y plac.
Adentro a pulso y se quedaba quieto, y repetía, luego empezó a darle rapidito, luego otra vez el afincadito plac.
A mí me gustaba de la manera que fuera.
– ¡Que rico! decía
Y plac.
– ¡Que rico! Uffff
Plac.
– ¡Que rico! ¡Queeeee divino!
Plac, y unos segundos quietos, bien metido.
– ¡Que rico!
Plac.
Plac,
Me sembraba con cada empuje, me gustaba, me encantaban sus embestidas.
Se levanto, se despego de mi, sin sacármelo, y se coloco en la posición en la que estaba cuando me desperté, arrodillado, con las rodillas a ambos lados de mi, semi sentado sobre mis muslos, con las manos levanto mis nalgas, me lo metió mas y pego su pelvis contra la parte baja de mis nalgas sin dejar que se bajaran, con las dos manos tomo mi cintura y empezó a culear divino asentadito sin sacarlo mucho, siempre afincándose más, más y más.
– Estas rico carajito – me dijo – en serio que tienes un culito sabroso.
Y se movía rápido, frac, frac, frac.
– Ujummmmmmm, ummmm, ummmm, ummmm, ujummmmm, era lo que podía yo articular
Me lo saco, así mismo boca abajo me mamo el culo y me lo escupió, en verdad yo no veía la necesidad de lubricar ya ese culito estaba abierto y completamente dilatado, me metió los dedos, como para varias, siguiendo yo boca abajo, me puso levemente de lado, levanto mi rodilla a la altura de mi cintura, su pierna izquierda por fuera de mi muslo izquierdo y su rodilla derecha entre mis dos piernas por debajo de mi muslo derecho, me lo metió despacito, como si estuviese empezando a meterlo, un poquito, otro poquito y otro, ya lo metió todo, así sin moverse coloco su mano izquierda en mis costillas derechas casi debajo de la axila y con su mano derecha me tomo por la cintura, nuevamente empezó a culear, umm que rico se sentía, primero suave y luego empezó a darme más duro, ahí empezó a dolerme un poco, pero no me importo, él siguió dándome, y como en la posición anterior se afincaba y quedaba quieto de vez en cuando, me sujetó bien y empezó a darme más duro, plas, plas, plas, sentía que sus testículos chocaban con los míos, más rico aun se sentía y mas excitado estaba.
El como que sabía que al decirme que mi culito era divino yo me soltaba más, pues me lo repetía una y otra vez.
– ¡Que culito tan rico! Ufffff ¡Que culito tan rico! Ahhhhh ¡Que culito tan sabroso!¡Que culito tan Divino!
Empezó a darme como si ya fuera a acabar, rápido y duro, me dolió, me dolía, pero el dolorcito se fue pasando.
Mientras él le daba yo metí mi mano para agarrar mi pene lo tenía bien erecto y húmedo, casi me estallaba.
El seguía como si fuera a acabar y yo empecé a sobarme el pene, excitado levante mas las nalgas para poderme agarrar el pene.
Entonces el me dijo:
– ¡tengo ganas de terminar.
–Acaba pues – le dije – Acaba
– No Todavía no – respondió él – todavía no.
Y fue reduciendo la velocidad.
– ¿Por qué? Pregunte.
Me lo saco poco a poco, creo que si me hubiese movido un poquito en ese momento lo habría hecho terminar, lentamente se retiro y se sentó sobre sus piernas y me contesto:
– Coño chamo, es que tienes un culito “bien divino” y no quiero dejar de cogerte, quiero darte y darte un buen rato, cogerte bien cogió, ya después de esta no es virgen ese culito rico y por eso quiero seguir dándote una buena cogía.
– ummmm, exclame en forma sarcástica y con una media sonrisa irónica.
Pensando: Y YO QUIERO QUE ME SIGAS COGIENDO.
– ¿No te duele? Pregunto.
Negué con la cabeza.
– ¿Quieres seguir?
Esta vez asentí, sin decir nada.
– Ya va.
Se levanto y tomo el vaso de él que aun tenía bastante ron, bebió un poco y me dio a beber.
Me tome casi tres dedos.
El tomo el vaso lo coloco en la mesa y me pregunto:
– ¿Seguimos?
Nuevamente asentí con la cabeza y los ojos.
– ¿Quieres Ponerte en cuatro?
¬– Ujummm.
Y a la misma vez que contestaba ya me estaba colocando en posición en la cama, levantando las nalgas, listo para volverlo a recibir.
Se me acerco, caminando con las rodillas, me beso un poco más arriba del ano, con sus manos abrió mis nalgas y empezó a mamarme el culo, metiéndome la lengua haciéndome sentir un escalofrió excitante por el cual hice un movimiento que parecía que estaba meneando el trasero, entonces me dijo:
– Unjuuuuum pareces una perrita puta.
– Es que me dio un escalofrió sabroso.
Siguió mamándome el culo por un rato, buscando quizás que volviera a repetir el movimiento, me lo hacía con frenesí, me metía la lengua, me lo lambia, escupía, metía los dedos, hasta que por fin se decidió a meterme el pene nuevamente, se coloco e intento meterlo, pero mi ano como que se había cerrado, me dolió y me retire
– ¿Qué Pasó?
– Me dolió.
¿Cómo así?
– Si me dolió, como que me quemo.
– a ver.
Nuevamente se coloco detrás de mí, me escupió el culo, se escupió el pene y con cuidado empezó a metérmelo, entro la cabeza y se sintió un dolor leve.
– ¡Uuuy, Se te puso apretadito! Exclamó
Lo saco, lo volvió a untar con saliva y lo intento de nuevo, era admirable la delicadeza con que me trataba ese hombre y yo ni corto ni perezoso, notando tal trato, levantaba las nalgas y trataba de relajar el culo, me froto el culo con el pene, volvió a meter la cabecita, esta vez sí entro suave, sin decir nada, empujo mas, se iba deslizando suave y rico, ya no me dolia, me tomo de la cintura con las dos manos y termino de meterlo toditico.
Aahhhhhhhhhhhh, suspire.
– ¿Te Dolió?
– U Umm, Exclame En Forma Negativa.
¬Me empezó a dar despacio y fue aumentando de ritmo, poco a poco, cada vez más rapidito.
– Ummm, ummm, ummm, ahhh, ummm.
Gemía yo
– ¿Te Gusta carajito? Pregunto
– Si, –– Ummm, ummm, ummm, ahhh, ummm.
– ¡Que rico!, ¡Que culito tan rico tienes! ¿Te gusta? ¿En verdad te gusta?
– Siiiiiiiii, –– Ummm, aaaaahhh, ummm.
– Dime que te gusta, dime que te gusta.
– Ujummmm, me gusta, me gusta.
Ufffffff, ahhha ummmmm, ahhhha
– Te voy a dar más duro.
–Aja,
Me levanto las nalgas, me empujo más el pene, me agarro fuerte por la cintura con las dos manos y me empezó a darme duro, duro plas plas plas, duro y más duro
– Ummm, ummm, ummm, ahhh, ummm, mis gemidos.
– ¿Te Gusta?
– Siiiiiiiii, siiiiii
– Dime que te gusta, dime que te gusta.
– Ujummmm, me gusta, me gusta, me encanta
– ¿Quieres que te de más duro?
– Siiiiiiiii, siiiiii
Me tenia bien agarrado por la cintura y duro, duro, cada vez más duro y más rápido, me daba como para reventarme, un dolorcito rico me entro y a la vez que me iba dando más duro se me iba quitando, solo me quedo estirar mis brazos, pegar mi pecho en la cama, meter mi cara en la almohada y levante el trasero lo mas que pude, me puse cómodo para recibir bien su embestida, ya era su puta y me resigne a ello
– Dímelo, dímelo.
– ¿Qué, quueeee? pregunte
– Dime que te gusta.
Como una puta pasiva, obediente a su macho conteste:
– Si me gusta, me encanta, siii me gusta, ufff ummmmmm
– Dime que te dé.
– Si, dale dale, dame, ummmm, uffffff.
Dame así.
– Dime que te de duro, que te de más duro….
Como ya me sentía como una puta y completamente entregado hacia todo lo que me pedía (excepto moverme).
Y me destape
… – Dime que te de duro, que te dé más duro….
– Si así – Me solté en deseo y lujuria, la verdadera puta –
– Dime que te Gusta, que te dé más duro….
– me encanta, me encanta, dale mas duro, dale mas dur, uffffff ,ummmm, cógeme, cógeme, cógeme duro, más duro, maaassssssss, aahhhhhhhhhh, uummmmmmmmmm.
– ¿Te reviento ese culito?
– ¡Siiii! Dame duro, hazme lo que tú quieras, sigue, sigue, cógeme duro, ahhh ummm, ummm, siiii, sigue, asi.
– ¿Quieres que te reviente ese culo?
– Siiiiiiiiiiiiiii, cógeme duro – y aunque no lo quería decir, lo dije – reviéntame ese culo, cógeme duro, reviéntame a pipe, cógeme duro, cógeme duro, sigue así, no pares, dame más duro.
Cógeme como a una puta.
– ¿Te reviento ese culo?, te voy a esguaza ese culito
– si dale, reviéntamelo, dame duro, reviéntamelo, reviéntamelo.
Sigue asi, ummmm ahhhhh.
Me gusta, me encanta, soy tu puta, tu perra, dale-
Nos quedamos callados y el siguió penetrándome, dándome duro, ya no sentía yo ningún dolor, estaba entregado al placer, ya él había conseguido lo que quería, convertirme en su puta.
Me daba y me daba, yo con las nalgas levantadas y el dándome sin soltarme, reventándome el culo, ya había pasado de una violación a un gozo y placer, pasaron unos minutos mientras él me cogía con furia y como le daba la gana y hablo nuevamente:
– Voy a acabar, voy a acabar.
– Acaba, acaba, acaba duro
– pero así no, me dijo
Se detuvo, mee lo saco y me dijo ponte boca arriba, lo hice, me mamo el pene un momento y casi me voy en chorro, se monto mis piernas sobre sus hombros me lo metió rápido, sin compasión me dolió un poco, pero ya para que, sabía que se me iba a pasar, me empezó a dar duro, plas plas, plas plas, plas plas, sentía que se me iba toda la pija para adentro y la mía estaba que estallaba, me alzo mas, quedando casi en el aire, me siguió dando duro, entonces me agarro por los hombros con ambas manos y se afincó mas, ahí si sentí que me lo enterró todo, sentí como si las bolas también me entraran.
– ¡Ahhhhhhhhhhhhhhh! Exclame o suspire
– ¿Te dolió?.
– No, no, me gusto, me gusto dale, daaaaleeeee, duro, métemelo mas.
(Que puta, menos mal que era mi primera vez)
Me sujeto bien por los hombros y se soltó a darme duro, más duro, durísimo, rico, me encantaba, quería mas y mas.
– Ummm, ummm, ummm, ahhh, ummm, – Si, –– Ummm, ummm, ummm, ahhh, ummm.
– Ahora si voy a acabar, te voy a llenar de leche, Voy a acabar, voy a acabar.
– Si Acaba, Acaba, acaba duro, dame duro-
Y empezó a darme duro para acabar
– Estoy acabando, estoy acabando.
– Si acaba, acaba, dame duro, cógeme duro.
Cuando estaba acabando sentí como el pene del se hinchaba dentro de mí, estaba acabando y sentía sus espasmos, sabroso, ricos, sentía divino, acabó, dio sus últimos golpes como para escurrir, para sacarse hasta la última gota de semen, así se tendió sobre mí, yo todavía excitado, se incorporo y me lo saco despacio, bajo su cara hasta mi pene y me lo mamo, no dure ni tres minutos y le dije voy a acabar, dejo de mamarmelo se puso en cuatro e hizo que se la echara en las nalgas, creo que jamás había acabado tanta leche como en ese momento.
El se rego el semen por las nalgas, a mi me temblaban las piernas, los brazos, todo el cuerpo.
Eran ya como las 5 y media de la mañana, ya estaba aclarando el cielo, me dijo:
– Acuéstate un rato, descansa.
– ¡Que bueno!,,, estaba cansado, agotado, me volví a embriagar, pero esta vez de placer y de gozo, sentía el ano caliente y humedecido por su semen, ni siquiera pensé en ir al baño, no podía, estaba exhausto, no me sentía las piernas, no podía caminar, desnudo me acosté sobre mi costado derecho y así me quede dormido, rendido de inmediato.
Serian como las nueve de la mañana cuando el nuevamente me despertó, dándome nalgadas suaves.
– ¡Ey! Levántate, ya es hora de irte, masajeándome las nalgas, ¡Ey! Parate y me nalgueaba – Tienes unas nalguitas bonitas y sabrosa vale.
Me levante, el tenia una toalla en las manos y me la entregó.
– ahí está el baño, échate un baño.
Claro que me tenía que bañar, tome el paño y me metí al baño, ya en la ducha, me empezó el ratón moral, – Ay, AY, QUE PASO, QUÉ HICE, QUE ME PASO,
Le dije me voy
me dijo la próxima te meneas
le dije ta bien pues, esto fue esta vez y nada más y cuidado con decirle a la guien me dijo esto es entre tu y yo
me abrio la puerta y me dijo hasta la proxima le dije jumm
Cuando ya me iba me dijo Tienes un culito sabroso oíste, en serio tienes unas nalgas y un culo sabroso
Eso fue como si me hubiera puesto una súper modelo porno desnuda, ahí sentí escalofrió y el pene se me paro de inmediato, seguí caminando y llegue a casa me bañe, pase todo el día pensando en lo sucedido
¿Qué me paso, será que ahora soy gay, será que no me gustan ya las mujeres?
Llego la tarde y Salí dispuesto a buscar una chica para cogerla, y así fue, Conseguí una conocida y machete Con ella, me encantan las mujeres, no hay problema ya lo que paso, paso, borrón y cuenta nueva.
Por mi forma de vivir en el canto y buena voz que tenia no me era difícil conseguir chicas, mas tenia buen porte, me llovían las mujeres en dos semanas ya no pensaba en eso
En dos semanas estuve como con varias mujeres para comprobar mi hombría, ya hasta se me estaba olvidando aquel encuentro sexual con ese hombre.
Pero…, siempre hay un bendito pero, A las dos semanas estaba yo tomándome unas cervecitas en la tasca del pueblo, tipo tranquilo, estaba en la barra, llego el violador
Se sentó a mi lado como si nada, me vio y me dijo epale, ¿como esta todo? – bien, bien – le dije, me dio como rabia, más entonces me dijo – tomate una, la acepte de hombre a hombre Hablamos entonces él le decía al barman: este es una rata cantando
El Violador: y jodedor, El día de la fiesta de mi casa fue puro vacilón saca una copla de donde sea jejejeje
Así estuvimos como hasta las diez de la noche
El tema de la singada ni se toco
Entonces se paro pago toda la cuenta y me dijo al oído:
– te espero en mi casa,
– Le dije no vale tú estás loco, yo no voy a ir, yo no voy.
Pero con un escalofrió y unos nervios por dentro
– Me dijo te espero, asi como si fuera mi jefe
Se alejo vio que el barman no estaba cerca y dijo te espero, (eso sonó como a una orden), ¡TE ESPERO! se dio la espalda y me dijo me tocas la ventana (Pero así con una autoridad del coño)
Negué con la cabeza, el se fue, yo me quede con una arrechera por dentro, pensando que se creerá el mama huevo este, no me joda el
Seguí Tomando como hasta las doce, me pare pague las cervezas tomadas y pedí ocho potes para el camino a mi casa, salí de la tasca decidido, caminando para mi casa tomándome mis cervecitas
– Y puedo decir, digo algo: el culo de uno es traicionero
No sé cómo, ni siquiera pensé en ello, llevaba la mente en blanco, solo escuchaba dentro de mí los sorbos de los tragos que me tomaba, y sin darme cuenta estaba tocando la ventana del violador.
Me abrió, pase, me quito las cervezas y las puso en una mesa, me tomo por la espalda Y me beso el cuello
Se puso en frente mío, busco a besarme en la boca y lo rechacé, se agacho y me quito los zapatos, me desabrocho el pantalón, saco mi pene y empezó a mamármelo, rico, lo hacía bien, mientras me lo mamaba me bajo un poco los pantalones y me sobaba las nalgas, me las abría y pasaba sus dedos por mi raja.
Se levanto y me dijo, me dijo pon tus manos sobre la mesa, lo que hice sin ningún reparo, se agacho, abrió mis nalgas con sus manos y empezó a mamarme el culo, mientras me abría y masajeaba las nalgas, sentí que me metió un dedo, se incorporo y aun con el dedo metido moviéndolo, me beso la espalda, saco su dedo y empezó a frotarme el culo con el pene y lentamente me lo fue metiendo, rico, se sentía delicioso, apenas dolía, me dio como por cinco minutos de una manera suave, mientras me lo hacía me dijo vamos apara el cuarto, ok, el tomo los potes y yo los zapatos y nos dirigimos a una habitación, al llegar al cuarto me volvió a agarrar por la espalda me la besaba, me besaba el cuello, me besaba luego el pecho me mamaba el pene y el culo, en un momento estaba en el frente y en otro estaba atrás, el me quito pantalón e interior, Yo me quite la camisa
Así, sin acostarnos ni nada, me lo volvió a meter por un rato tomándome de la cintura, esta vez me lo saco, se puso en cuatro en la orilla de la cama y me dijo métemelo
Se lo metí por un rato, sin decir nada se lo saque y me puse en cuatro me dijo :
– Aaah ¿te gustó verdad?
– Te toca le dije
Me dio me toco a mi ahora, así un rato cambiando de rol
Nos cogimos pero sentí mas placer al ser penetrado
Alternábamos pero yo intentaba que él estuviera mas dentro de mí que yo dentro de el
Esa noche quería era pipe por ese culo él se dio cuenta y me pregunto ¿te gustó verdad? ¿Quieres es pipe verdad?
Le dije que si
Esta respuesta como que lo volvió loco, y empezó a cogerme rápido y duro esa vez le dieron ganas de acabar rápido y me dijo voy a terminar, quise decirle que todavía no pero ya era tarde y acabo dentro de mí, yo quede con ganas, no de cogerlo sino que me siguiera dando, entonces empecé a frotar mis nalgas en su pene, me dijo que se lo mamara y le dije que no, seguí haciendo el trabajo con mis nalgas hasta que lo provoque bien y se le paro, el se escupio y me lo metió de ladito, me dio un rato pero con poco animo, me le salí, hice que se acostara boca arriba y me le coloque encima, me metí su pene y como la propia puta empecé a menearme, a darme duro por el culo y el acostado, hasta que se fue animando, me puso de todas formas como la vez anterior, con la diferencia de que esta vez si me le menee como la propia puta, y no dejaba de repetirme lo rico que era mi culo, lo rico que me meneaba, yo le decía si cógeme como a una puta, dale duro que estas cogiendo a un hombre, ya no fui más activo en esa noche, ahora me estaba dedicando era a llevar pipe por el culo, lo deseaba, lo necesitaba, quería que me diera duro, ya había comprobado que me encantan las mujeres, que las adoro, pero también era cierto que me gustaba como me cogía aquel hombre, me gustaba sentirlo dentro, me gustaba que me lo metiera rico y constantemente.
Esa noche seria su puta.
De todas las formas en que me puso llego el momento en que me puso en cuatro, me tomo por la cintura y se afano a darme lo que yo quería: ¡PIPE POR ESE CULO! Bien duro, yo gemía, casi gritaba y él me tapaba la boca y se reía,
Llego el momento en que iba a terminar otra vez y me dijo: – voy a acabar
– le dije así no,
– ¿cómo quieres que te acabe?
– Como la vez anterior.
le dije mientras me acostaba boca arriba y levantaba las piernas.
Ok piernas sobre sus hombros y machete parejo conmigo, me daba duro me dolía y me gustaba.
– Dale duro, dale, sigue, y el estaba en lo suyo, siempre repitiendo:
– Ya eres mi puta, tienes un culito rico, me tomo fuertemente por los hombros y me lo empujaba con todas las fuerzas, rico.
– si mételo mas, ahhhh, cógeme, tengo ganas de acabar le dije, cuando de repente empezó a darme duro para acabar, el estaba excitadísimo cuando el acabo por segunda vez, yo también acabe sin tocarme el pene ni nada solo por el hecho de sentirlo a él acabando dentro de mi mientras la leche escurría por mi pene, él siguió dándome suave exprimiendo su semen, dentro de mí, mi leche fue abundante y estaba en mi pecho y estomago, y a él le cayó también, lentamente me lo saco y empezó a limpiarme la leche con su lengua, me dio a probar y le dije que no, que no me gustaba y hasta la fecha nunca me ha gustado.
Así nos quedamos dormido ambos de lado, el detrás mío y yo totalmente húmedo en mi culo.
Desde ese entonces estuve teniendo relaciones sexuales con el por tres años y medio, en esos tres años se lo llegue a mamar unas seis veces (pues nunca he sido amante de hacerlo) y cada jueves sin falta nos veíamos en su casa, para tener sexo, a veces era totalmente pasivo y a veces totalmente activo.
Fueron mis años activadisimos de bisexual, claro que estuve con chicas y a montones, y claro que estuve con otros hombres pero esas son otras historias
El Violador fue mi primer y último hombre hasta los momentos y no me quejo de ello.
Conocí a mi actual esposa y he sido totalmente activo heterosexualmente, y con la que tengo una buena relación, tanto sexual, como sentimental.
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Desde hace ya 8 años que no tengo sexo con un hombre ni de rol activo, ni de rol pasivo.
(estoy pensando seriamente en Buscarlo para recordar Viejos Tiempos)
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