MI EXPERIENCIA CON MI PADRASTRO EL COMANDANTE DE LA POLICIA

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por EROFANTASIES.
A mi mama como a mí, nos importaba como se veía, y en realidad era muy masculino y eso lo hacía muy atractivo.
Tenía el cabello oscuro, piel blanca y como ya dije por su trabajo era bastante fornido, su carácter era bastante fuerte y demandante sin llegar a ser violento y eso es lo que más le atrae a mi mama y debo confesar que esa figura masculina en casa también me atraía mucho.

Siempre se portó rudo conmigo desde el principio pero en realidad eso lejos de disgustarme me gustaba y lo hacía más atractivo ante mí, porque consideraba que así debía comportarse un hombre.
Cada que podía aprovechaba para estar cerca de él y observar todo lo que hacía, sobre todo cuando hacia ejercicio y se ponía ropa ajustada la cual sudaba, también gozaba verlo en las mañanas recién bañado y con su loción exquisita me daba una sensación excitante y verlo con su uniforme impecable también le agregaba morbo al asunto y aumentaba lo que yo sentía.

No recuerdo exactamente cuándo empezó todo, pero cada vez más fantaseaba con verlo desnudo y me masturbaba de solo imaginarlo.
La primera vez que lo vi salir de la ducha vi cuan velludo era en su pecho y piernas, casi me vengo ahí mismo de solo verlo.
Él tenía unos hermosos pezones rosados rodeados de vellos fino y oscuro con un camino que bajaba hasta su abdomen, sus piernas eran gruesas y fuertes, al llegar a su cuarto él se quitaba la toalla y podía ver su culo, sus nalgas eran grandes y redondas con algo de vello, pero siempre cerraba la puerta por lo que nunca había podido verlo de frente pero esa imagen me excitaba bastante.

Yo estaba obsesionado, cuando él no estaba, yo buscaba la ropa interior que se quitaba y la olía.
A él le gustaba usar calzoncillos blancos y ajustados y el aroma de macho me llenaba de placer.
Con solo imaginarme que esa ropa interior había guardado sus genitales mi verga se ponía erecta.
Al grado de que cuando mi padrastro estaba en el baño para orinar, yo me acercaba para poder escucharlo orinar o tratar de verlo, mientras que yo escuchaba el sonido de su orina caer al agua de la taza.
Mmm y solo me imaginaba el tremendo pene que debía de tener.

Era tal mi obsecion, que en una ocasión cuando sabia que el tenia prisa por cambiarse y ponerse el uniforme porque ya estaba tarde para irse a trabajar, invente cualquier tipo de pretextos sobre algo que estaba buscando en el cuarto de ellos para permanecer en el y presenciar cuando el se desvestia y ponia el uniforme.
Quede con la boca abierta cuando desabrocho su pantalon y vi como se bajaba el cierre para dejarme ver su famoso calzon blanco ajustado y su tremendo bulto que guardaba en la entrepierna donde se marcaba la silueta de su verga en reposo.

Luego se quito el pantalon por completo y dejo ver su hermosas y fuertes piernas, y cuando yo creia que era el maximo del extasis, se bajo el calzon para cambiarse por uno limpio.
Yo estaba que babeaba, era la primera vez que veia su pedazo de carne en vivo y a todo color.
Tenia un tamaño considerable y se notaba algo gruesa a pesar de no estar parada.
El momento fue muy breve porque antes de que yo recuperara el aliento, ya se habia puesto el otro calzon y pantalon y ajustaba tanto su camiseta como su camisa del uniforme.
Acabo de vestirse y lucia muy guapo como de costumbre, con una presencia imponente pero en ese mismo instante decidi que eso no iba a quedar asi, que esa verga tenia que ser probada por mi, asi que idie un plan de ataque.

Él trabajaba un horario de 24 horas de trabajo por 24 de descanso por lo que en la policía pasaba toda la noche y llegaba a la casa hasta el siguiente día para dormir en la mañana.
Ese día en especial, mi mama se había ido a visitar un familiar enfermo a un pueblo cercano por lo que regresaría al día siguiente, yo no tenía escuela y mis hermanos si estaban estudiando por lo que ese día íbamos a estar solos los dos, para fortuna mía como quería dormir profundo tomo un par de pastillas que usaba mi mama para dormir con lo que estaba seguro que aumentaría el efecto de cansancio que ya tenía y yo podría hacer mis movimientos.

Le pedí permiso para ver la televisión de su cuarto mientras él se dormía ya que tenía la pantalla más grande de la casa.
El accedió pues me dijo que estaba tan cansado que no le importaría que viera la tele en su cuarto, las pastillitas estaban haciendo su efecto.
Tengo esa imagen muy clara, estaba en su cuarto recostado en su cama sin camisa y solo con una camiseta y el pantalón medio abierto dejando ver su ropa interior, ver a ese hombre que tanto deseaba tan accesible frente a mí me ponía muy encendido y todo mi cuerpo temblaba de deseo, pero deje pasar casi hora y media para asegurarme que estuviera completamente dormido.

Ahí estaba echado en la cama, con el pantalón puesto y entreabierto dejando ver sus calzoncillos blancos con las piernas abiertas, no se pueden imaginar como mi corazón latía.
Me le quede mirando a ver si en realidad estaba durmiendo y en efecto lo estaba.
Pero ya había esperado suficiente y no me iba a quedar ahí solo viéndolo yo quería tocarlo! Lo que hice fue muy normal como si no pasara nada me acosté a su lado y estaba roncando levemente.

Puse mi mano encima de su estómago.
y el respiraba mientras pasaba todo esto deje pasar un rato para asegurarme que no reaccionaba, así que luego hice que mi mano se bajara poco a poco hasta su cierre para bajarlo por completo y tocar sus calzoncillos.

Con más seguridad empecé a bajarle los pantalones para dejarlo solo en calzoncillos, aunque me costó trabajo lo logre sin que reaccionara y por fin pude admirar su enorme y delicioso paquete, mi mano se dirigió de inmediato hacia abajo poquito a poquito para que él no se diera cuenta de que yo estaba tocándolo y de repente ya tenía mi mano encima de su bulto.
Inicie por meterle un dedo dentro de su calzón por el orificio donde se orina y ahí palpe por fin lo que tanto deseaba, el gran manjar que tenía entre las piernas y que se me había antojado por mucho tiempo.
Pero mi mano no dejaba de temblar pues después de todo era mi padrastro y la pareja de mi madre, si se despertaba o me descubría causaría menudo escándalo en la familia.

Cuando tuve mi mano ahí su rico y delicioso pene se sentía fenomenal.
Poco a poco se le fue parando y yo lo tenía en mi mano y eso era una rica sensación.
Trate de quitarle la camiseta pero se me dificulto mucho porque para hacerlo tenía que prácticamente levantarlo, así que solo se la levante hasta el pecho para dejarlo al descubierto.
No pude reprimir las ganas de meterme el bulto con todo y calzón en la boca y dejárselo todo humedecido luego continúe besando y lamiendo sus abdominales y seguí subiendo hasta los pechos y sus pezones disfrutando cada lamida, bese su boca y acaricie su barba, sentí su olor a hombre por primera vez.
Seguí la faena y levante el resorte de su calzón para meter mi mano dentro.

mmm que ricura, me movía dentro de su calzón con su pene en mi mano, lo sentía… sus ricos vellos púbicos y sentía su verga que por cierto se veía más grande y más gruesa que lo que yo pensaba, lo estaba masturbando con mi mano dentro de sus calzoncillos mmm tan rico lo que sentía.
Tuve que liberar su verga y bajarle el calzón hasta sus muslos para poderla palpar directamente con mi lengua y mi boca.
Comencé a mamársela con frenesí y para ese punto su calzón ya me estorbaba por lo que decidí quitárselo completamente de una vez por todas y dejar a mi padrastro completamente desnudo a mi disposición mientras dormía profunda y plácidamente.

Su verga estaba poniéndose muy dura y lucia enorme, venosa con el glande hinchado por lo que me la metí en mi boca completita y la chupe con todas las ganas que había tenido retenidas por largo tiempo, conforme iba aumentando la velocidad, intensidad y fuerza de la mamada, sentí como su respiración aumentaba como queriéndose despertar sin lograrlo hasta que se tensó y gimió un par de veces lo que me anunció que se estaba por recibir un enorme chorro que mancho toda mi cara e inundó mi boca y manos con su delicioso sabor a semen.
Lamí todo su miembro y cuerpo hasta tragármelo todo y dejarlo completamente limpio.

Me masturbe ahí mismo viéndolo desnudo frente a mí pues mi pequeña verga estaba parada a mil y aunque solo saco un líquido cristalino y viscoso no tan blanco y espeso como el de mi padrastro, la sensación de cosquilleos por todo el cuerpo de las primeras masturbadas no se puede olvidar.

Luego lo limpie, le coloque su calzón en su lugar, acomode su verga dentro y me dispuse a dejarlo descansar esta vez se lo había ganado.
Yo no sé si se dio cuenta de lo sucedido o no porque al otro día se fue a trabajar como si nada y nunca menciono nada al respecto pero a mí me quedo el agradable recuerdo de la experiencia con mi padrastro el comandante de policía que de seguro me marcó para hacer de mi lo que soy el día de hoy, un adicto a mamar penes.