Mi hermano mayor me volvio su perra de pequeño
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Mi madre y mi padre se casaron muy jóvenes y tuvieron a mi hermano, tiempo después decidieron tener otro hijo y llegué yo.
Cuando yo nací mi hermano tenía 15 años, estaba en la edad de la calentura y el me ah contado (porque yo no lo recuerdo) que cuando yo era un bebé el se masturbaba frente a mi y me tiraba su leche en la cara, pero con el tiempo dejó de hacerlo cuando aprendí a hablar.
Mi hermano siempre fue muy caliente, ya a sus 19 años el era de tez blanca, ojos miel, cabello castaño, alto, delgado, muy varonil y muy caliente.
Yo en ese tiempo no sabía nada de sexo ni me imaginaba cuanto me iba a encantar la verga tiempo después.
Un día me desperté a la mitad de la noche y por no querer molestar a mis padres fui al cuarto de mi hermano. Abrí la puerta despacio, pues yo pensaba que estaba dormido. Entré y lo vi con los ojos cerrados sobre su cama con su pene en su mano, el cual yo veía enorme. (Tiempo después supe que era de 19cms). Me gustó lo que vi, pero yo sabía que algo estaba mal así que no hice ruido. Por unos segundos lo vi y analicé toda su verga, me encantaba verga tan dura y ver a mi hermano tan excitado, cuando mi hermano abrió los ojos, se tapó la verga y me dijo:
-Qué estás haciendo aquí? Qué no sabes tocar la pinche puerta antes de entrar o qué pendejo?-
Yo, sólo me quedé callado y trataba de ver su pene debajo de las sábanas, y cuando se dio cuenta me dijo:
-Qué se te perdió aquí? Te gustó o qué?-
El se sobaba su verga que seguía durísima debajo de las sábanas y yo no podía dejar de mirar, por dentro quería tocarla y me llamaba mucho la atención pero me daba vergüenza decir lo que fuera en ese momento. El me miró a los ojos y me dijo:
-Sabes, de chiquito te gustaba mucho mi verga, ¿Te acuerdas de ella?-
Se quitó la sábana de encima de su verga y pude verla bien tiesa, con la cabecita roja brillando y pelos saliendo de todos lados alrededor.
Me acerqué y le pregunté:
-¿Por qué está tan duro y tan grande el tuyo? El mío es diferente.-
A lo que me contestó:
-Porque estoy emocionado y cuando está así me gusta mucho que me la toquen, ¿Quieres intentar?-
El tomó mi manita y la puso sobre enorme verga de adulto y nervioso la toqué, el agarró mi mano más fuerte y me dijo:
-Tócala bien,aprietala, siéntela que te tiene que gustar.-
Empezó a mover mi manita como si lo estuviera masturbando y me soltó y me dijo:
-Muévemela así carnalito, que rico que siente que me la jales.-
Yo empecé a hacerlo más rápido cuando me di cuenta que a mi hermano le gustaba lo que estaba haciendo cuando de repente el se levantó de la cama y me empujó al piso y me dijo:
-¡Ay hermanito! Ahora sí, tu solito te la buscaste.-
Mi hermano ya no se veía tranquilo y relajado como cuando estaba masturbándolo, me levantó del piso y me puso frente a el, como yo era pequeño, estando parado, mi cara quedaba justamente frente a su verga y empezó a pasármela por la cara y me dijo:
-Métetela en la boca.-
Yo no quería, me daba asco, yo solo pensaba en cómo podía ser que me fuera a meter a la boca por donde mi hermano orinaba y le dije:
-No quiero, güácala.-
Él se rió y me soltó un manotazo en la cabeza y me agarró fuerte del cabello torciendo mi cuello y me dijo:
-No mames pendejo, más te vale que me hagas caso en lo que sea que te diga o sino te voy a partir la madre y le voy a decir a mis papas que andas de maricón tocándome el pito.-
Yo no entendía nada, tenía mucho miedo, ya no quería estar en el cuarto de mi hermano, cuando el apretó mis mejillas súper duro para que abriera la boca y me la metió completa en la boca.
Empecé a moverme desesperadamente, sentía ganas de vomitar y empecé a llorar. En ese momento mi hermano me soltó una cachetada y me dijo:
-Quédate quieto maricón de mierda, y más te vale que no sienta tus dientes en mi verga o te parto el hocico de un madrazo.-
Yo aterrorizado abrí mi boquita lo más que pude para no tocar su verga con mis dientes mientras lloraba el con una mano agarró mi cabecita y me empujaba contra su verga, yo me estaba asfixiando y traté de quitarme. Me salió la verga de la boca y en ese momento vi su mano a toda velocidad contra mi cara y me tiró al piso del golpe. Yo temblando de miedo en el suelo y llorando grité:
-¡Mamáaaaaaa!-
En ese momento mi hermano me levantó del suelo jalándome del cabello, me dio otra cachetada y me tapó la boca. Recuerdo como su mano era tan grande que me cubría casi toda la cara. Me miró a los ojos y me dijo:
-Mira mariconcito, me esperé 4 años para poder usarte y ya te la pelaste. Llegaste en mal momento a mi cuarto y vas a sentir lo que es tu hermano, tu macho y vas a ver de lo que soy capaz si me desobedeces niño idiota-
Aún con su mano sosteniendo mi cabecita se acercó y lamió de mi cara mis lágrimas y me abrió la boca con dos dedos y sin preguntarme me metió la cabecita a la boca.
-Chúpala putito, chúpala como paleta- Me dijo mientras yo daba lengüetazos en su verga. -No seas pendeja perra chúpala bien.- Yo no sabía lo que el quería que hiciera pero sabía que si no hacía algo diferente me iba a pegar, entonces me la metí toda la boca como cuando me asfixió con su verga.
-Aaaaay putito, así trágatela toda, ves como si te gusta perra, ves como tu solito buscaste esto.-
Mi hermano se sentó en la cama y me dijo: -Ven perrita sigue mamando.- Mientras, se agarró la verga con una mano y la golpeaba en su otra mano ofreciéndomela.
Yo aún con miedo me metí su verga en la boca y el empujó mi cabeza contra su verga con las dos manos. Yo empecé a tener arcadas y trataba de empujarlo pero era inútil, el era demasiado fuerte.
El tomó mis manos con sus manos mientras apretaba mi cabeza con sus piernas para que no pudiera quitarme su verga de la garganta.
Yo no podía más y se me vino el vómito en su verga. El me aventó y se levantó y mirándose la verga me dijo:
-Ay hijo de tu puta madre, por pendejo ahora sí valiste verga.-
Me volteó, se escupió dos dedos y me los metió de golpe, solté un grito y me tapó la boca diciéndome al oído: -Cállate mocoso pendejo que nos van a oir y aguántate porque esta sí te va a doler maricón de mierda.-
Mi hermano se abalanzó sobre mi y mi pequeño cuerpo quedo sometido completamente por su peso, así el empezó a pasar su verga por la entrada de mi ano que ya estaba sangrando un poco por los dedos que me había metido.
Cuando sentí que entró la punta intenté gritar pero su mano me tapaba la boca, intenté moverme pero su cuerpo me tenía inmovilizado. Estaba siendo violado por mi hermano y no podía hacer nada al respecto más que dejarlo terminar.
El peor dolor que recuerdo en mi vida fue en ese momento, como sentí como me quemaba el culo por adentro, me ardía, era un dolor que nunca había sentido y yo lo odiaba pero no me quedaba más que llorar.
Mi hermano tomó sus bóxers y me los metió la boca y empezó a violarme como un animal en celo, su verga entraba y salía completa de mi culito mientras yo temblaba de dolor el se acercó a mi oído y susurró:
-Ahora sí eres mio carnalito, siente el pito de tu macho entrando, chilla de dolor en mi verga maricón de mierda que te vas a acostumbrar a tenerla adentro.-
De repente mi hermano metió un dedo a mi culo y me lo metió a la boca.
-Prueba el lubricante que estoy usando hermanito, prueba la sangre de tu culito.-
Me siguió bombeando le culo varios minutos hasta que me la enterró entera como si quisiera meter más pene que no tenía.
-Siiiiii perraaaa, siiii llénate de leche putito.-
Sacó su verga de mi culito y yo me tiré al suelo abrazando mis piernas envuelto en dolor y lágrimas, lo miré y le dije: – Te odio.-
Él apretó mi cara con una mano y me escupió y me dijo: -Di que te encantó mi verga estúpido.-
Yo sólo lo miraba mientras lloraba y me escupió de nuevo. -Te dije que me dijeras cuanto te gustó mi verga perra.-
Entre lágrimas dije: -Me gustó.-
Después de ese día mi hermano comenzó a volverme su puta, cosa que tiempo después mi papá se dio cuenta y como dicen, la ley de la causa y el efecto….
Si quieren saber como me usó al día siguiente cuando volvió de la universidad con sus amigos, díganlo en los comentarios.
Uffff que buen post espero con ansias la parte 2
que ganas de leer l asegund aparte