Mi hermano menor

Estaba por masturbarme cuándo senti que tocaban la puerta, abrí para encontrarme a mi hermano menor..

En mi casa vivimos muchas personas, por lo tanto no hay muchos habitaciónes para todos y algunos tienen que compartir obligatoriamente. Este era el caso de mi hermano menor quién dormía en la misma habitación que mis padres, yo tenía mi propia habitación, pero esta era bastante pequeña cómo para que pueda compartirla con el y a mi mamá no le gustaba la idea de comprar una litera.

Mi hermano menor tiene 16 años y yo tengo 20. El todavía no pego el estiron por lo que la diferencia de altura entre ambos es bastante notoria.

A su edad ya esta entrando a la pubertad por lo que usaba su teléfono para ver porno, y cuándo yo pasaba los fines de semana fuera el dormía en mi habitación y aprovechaba para masturbarse. Me di cuenta de esto cuándo encontre varias papeles tirados al lado de la cama que daba contra la pared, cuándo agarre uno y lo lleve hasta mi nariz pude sentir el fuerte aroma que tenía, pudo darme cuanta casi al instante de lo que era.

En un momento donde nos quedamos solos, le dije que dejará de hacer eso en mi pieza.

Hermano: No tengo otro lugar, el baño es muy incómodo y en la pieza donde duermo no puedo hacerlo.

Yo: Pero minimo limpia y no dejes todo ahí tirado.

El se disculpo y dijo que no lo haría otra vez.

Esa noche en mi pieza estaba acostado y recordando la conversación que tuve con mi hermano en la tarde, había muchos papeles cubiertos con semen y yo me preguntaba que tanto podía correrse, esos papeles eran de ayer así que no se habían acumulado de otros días. Por alguna razón me calenté y quería masturbarme, busque en mi celular porno y mientras tanto me bajana el pantalón teniendo mi verga en la mano.

Estaba apuntó de hacerlo cuándo siento que tocan la puerta de mi pieza, me asusto por un momento y guardo mi verga ya erecta en mis pantalones, abro un poco la puerta evitando que se vea mi entrepierna. Era mi hermano quien toco la puerta.

Justo me acordé que era fin de semana y yo no me había ido, el me dijo que quería hacer eso y yo le dije que fuera al baño, me dijo que no y después de insistir por un rato termine aceptando.

Hermano: También estas por hacerte la paja? — Preguntó al ver que aun tenía la verga un poco dura. — Podemos ver porno juntos.

El sugirió y yo termine aceptando, la verdad me estaba calentando con la idea. Y ahí estabamos los dos, sentados en mi cama, las luces estaban apagadas y lo único que alumbraba era mi teléfono en donde se estaba reproduciendo un video porno, estábamos buscando mis audífonos inalambricos por lo que el ruido no era problema.

Pasaron los minutos y pudo sentir cómo mi hermano ya se estaba masturbando, me sorprendió que realmente lo estuviera haciendo, buscando molestarlo apunte el teléfono hacía su miembro, en ese momento quede shockeado por el tremendo pedazo que tenía.

Media alrededor de 16 centímetros y era algo gruesa, tenia unas venas marcadas en el tronco y el glande no estaba totalmente descubierto.

Hermano: Que pasa? — Me pregunto al ver que no decía nada y seguia apuntando a su verga.

Yo: no nada.. es que las tenes muy grande… — Tartamudee un poco y mi hermano lo noto.

Hermano: Queres tocarla? — Preguntó riéndose un poco.

Yo deje de alumbrar su verga y sin decir nada lleve mi mano hacía su verga, estaba muy caliente y dura, el se sorprendió porque no pensaba que lo harían pero tampoco se quejo.

Comencé a hacerle una paja, subía y bajaba mucho haciendo que su glande se viera por completo. Ninguno decía nada pero por los quejidos de mi hermano parecía que estaba disfrutando de mi paja.

Hermano: chupamela… por favor..

El susurro esas palabras, yo me quede mudo al escuchar y a la vez detuve mi mano. Lo pensé por unos segundos y finalmente lo hize, ya estaba tan caliente que no pensaba con claridad.

Abrí grande mi boca y comence a chuparle el glande, un sabor salado e intenso inundo mi paladar, el presemen de mi hermano estaba llenando mi boca. Era la primera vez que hacía eso, pero trataba de imitar los videos porno que siempre veía, trataba de tragarlo todo pero rápidamente me atragante y aparte mi cabeza.

Tosi un poco y después volví a chuparsela, usaba mi lengua para rodear el glande mientras subia y bajaba, apenas podía tomar menos de la mitad. Mi hermano gemia suavemente ante mi boca, yo me estaba acariciando la entrepierna por encima del pantalón, estaba muy excitado.

En la oscuridad de mi pieza se podía escuchar suavemente los jadeos de mi hermano y el sonido de mis chupadas, estaba chupando con fuerza ya que se me estaba cansando la boca, después de un rato mi hermano dijo que estaba por acabar.

Yo no tenía pañuelos ni nada en donde hacer que soltara su descarga, por tardar tanto en pensar el termino acabando en mi boca. Mi boca se lleno de su espesa y caliente leche, fue imposible no tragar un poco y sentir el sabor tan agrio que tenía, el sabor no me gusto nada pero tampoco era tan malo, al final termine tragando todo con mucha dificultad.

Mi hermano se sorprendió al ver que me trague su corrida, yo no sabía que excusa poner así que termine diciendo que estaba rica.

Esa noche se la chupe un par de veces más, no sabía si era por el morbo o que pero mi hermano tenía mucho aguante.