Mi hijastro 2
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Ahora con Ángel, somo mas cómplices, estamos mas unidos, cuando estamos en la cama, siempre nos chupamos las pijas, nos cogemos el uno al otro, a mi me encanta tragar la leche de mi hijastro y cuando siento su pija palpitar en mi culo, cuando se esta acabando, sentir como sale su leche de mi ojete.
Mi hijastro me hace poner en mil posiciones cuando me esta cogiendo, pero yo seguía esperando lo que él me había dicho, que iban a venir mas chicos a cogernos.
Una tarde me dijo Ángel que van a venir dos chicos a cogernos, dos amigos de él, yo estaba entre nervioso y ansioso, quería probar otra pija, hasta que como a las dos de la tarde llegan sus dos amigos, dos chicos negros, altos, fuertes, "hola, esta en mi padrastro", saludó Ángel con dos besos a los chicos, y ellos me saludaron igual, yo estaba nervioso, no sabía que los chicos que nos venían a coger eran casi hombres, pero bueno, ya estaba ahí y no me iba a echar para atrás.
Mi hijastro se empezó a besar con uno de los chicos negros y el otro empezó a besarme a mi, a pasar sus manos por mi culo por sobre el pantalón, estábamos abrazados, sentía como me iba entregando a mi rol de pasivo con ese chico negro, notaba un bulto bastante grande entre sus piernas.
El negro se separa de mi, y se afloja el pantalón, y saca una pija que me asustó, sería mas del doble de grande que la de Ángel, y yo vi a mi hijastro de rodillas frente al otro negro chupando su pija.
Yo lo miré al negro y le agarre la pija, era enorme, una cabeza bien negra y lustrosa, su pija palpitaba en mi mano, "chupa", me dijo simplemente el negro, yo lo mire y me fui poniendo de rodillas frente a él, y abriendo mi boca se la empecé a chupar, me llenaba totalmente la boca, nada que ver como la pija de mi hijastro, y a medida que se la chupaba, parecía que se hacía mas grande en mi boca.
Ahí estábamos mi hijastro y yo de rodillas frente a esos dos negros chupando sus pijas.
En eso Ángel se levanta y va corriendo al dormitorio a buscar la vaselina, mientras el otro negro se puso a mi costado y agarrando mi cabeza hizo que deje de chupar la pija de su amigo y metió la suya en mi boca, le estaba chupando las pijas a los dos negros.
Cuando llega Ángel, estaba desnudo de cintura para abajo y el negro que estaba con mi hijastro se sentó en el sofá del salón, y vi a mi hijastro pasar bastante vaselina en su pija, pasarse vaselina por su ojete, agarrar la pija del negro y entre gemidos, ir sentándose en su pija, hasta quedar completamente sentado sobre el negro, mientras yo seguía chupando la pija de mi negro, "quítate pantalón", me dijo mi negro al que yo le chupaba la pija.
Me puse en pie y me saque el pantalón, quedando desnudo de cintura para abajo, el negro se sentó junto a su amigo en el sofá, dejando que yo le envaseline bien la pija y pasando bastante vaselina por mi ojete, ya que la pija del negro era enorme, aunque veía a mi hijastro disfrutar de como el otro negro lo cogía, como lo subía y lo bajaba de su pija.
Yo le di la espalda al negro que estaba conmigo, y con mi mano dirigí su pija a mi ojete, empezando a sentarme, madre mía, que dolor cuando esa enorme pija empezó a entrar en mi culo, sentía como el ojete se me abría, como ahora si me estaba destrozando el ojete.
Me fui sentando despacio, sentía cada centímetro de pija entrar en mi culo, mientras mi negro me abría las nalgas, hasta que después de un buen rato, también quedé sentado sobre su pija, me parecía mentira que tremenda pija la tuviera toda dentro de mi culo.
Me empecé a mover despacio en círculos, sentía su enorme pija tan adentro, parecía que me hubiera empalado, mi negro paso sus manos por debajo de mis nalgas y me empezó a hacer subir y bajar de su pija, tengo que reconocer que casi no me dolía y me sentía muy excitado sintiendo esa enorme pija cogerme el culo, como mi negro me hacía subir y bajar de su pija, sentir como esa enorme pija entraba y salía de mi ojete.
El negro que estaba cogiendo a mi hijastro se puso en pie sin sacar la pija del culo de Ángel, y lo acomodó en cuatro patas sobre el sofá y los siguió cogiendo, yo lo miré a mi negro, y solo me puse en pie, poniéndome como estaba mi hijastro, sacando mi culo todo lo que podía hacia mi negro que se estaba acomodando detrás mio, y sonriendo, me abrí mis nalgas, sintiendo como mi negro acomodaba su pija contra mi ojete y agarrando mi cintura me la volvía a meter, haciendo que suspire de placer al sentir como mi negro me volvía a clavar la pija en el ojete, y me seguía cogiendo.
Sentía su pija entrar y salir de mi ojete, me hacía gemir de placer, hasta que me saca la pija del culo y me hace poner de rodillas y mete su pija en mi boca, yo se la empecé a chupar como loco hasta que siento que perecía que me estaba meando dentro de la boca por la cantidad de leche que me estaba dejando, me llenaba literalmente la boca de leche y yo tragaba con desesperación.
Le tragué toda la leche, le lamí bien la pija, le saqué hasta la última gota de leche, y el otro negro gemía llenando el culo de leche de mi hijastro.
Veo como le saca la pija del culo a Ángel y mi hijastro se arrodilla delante de su negro y le empieza a limpiar su pija con la boca.
Los negros se fueron y nos quedamos mi hijastro y yo desnudos de cintura para abajo, nos fuimos a la cama y nos mostramos los ojetes, mi hijastro me saco fotos y quedé sorprendido del tamaño que lo tenía, me lo había destrozado mi negro con su pija.
Mi hijastro me hace acostar boca arriba y él se acostó sobre mi, volviendo a chupar nuestras pijas, ya que solo habían acabado los negros, y mientras yo le chupaba la pija a mi hijastro, veía como le salía leche de su ojete, que yo lamía y seguía chupando, hasta que nos acabamos en la boca del otro, pero yo seguí chupando el ojete de mi hijastro sacando toda la leche que su negro le dejo dentro.
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