Mi historia con el pequeño Fabio y su papá Fernando
NO DEJES DE LEERLA Y VIVIRLA HASTA EL FINAL.
Mi historia con el pequeño Fabio y su papá Fernando
(Este relato es una historia de total ficción)
Puedes leer mis otros relatos aquí:
https://sexosintabues30.com/author/oscarito-chiquito/
(Si puedes déjame tus comentarios)
Hay errores que se convierten en peligrosos fracasos y nos ponen en circunstancias muy difíciles por la misma naturaleza de nuestros gustos.
Cuando pienso en el comienzo de toda esta historia y de cómo se fue desarrollando en el tiempo me vuelvo a asombrar y no importa cuántas veces repase en mi mente los hechos ocurridos, pues siempre termino totalmente absorto en mis pensamientos reviviendo lo ocurrido una y otra vez.
He cometido un error grave pues en todas las historias que he publicado no me he presentado de forma adecuada; mi nombre es Oscar pero de niño me decían Oscarito y ese apodo se me ha quedado entre mis familiares y amigos más cercanos, soy un hombre de edad madura en estos momentos y no soy atlético ni tengo un cuerpo escultural como suelen describirse la mayoría de los escritores Jajajajajajajaja, más bien siempre he sido algo rellenito pero no soy gordo y en verdad siempre me veo bien, soy de piel blanca y cabello castaño claro, mi estatura es promedio, me dedico a impartir clases de música pues soy profesor de solfeo (Lenguaje Musical) y mi gran pasión es enseñar a grandes y chicos a amar la música como yo la amo, en cuanto a mis mejores atributos puedo decir que mi personalidad es lo que más atrae a mis alumnos pues soy muy divertido en mis clases.
Esta historia la viví hace ya cinco años, yo estaba recién cumpliendo los treinta y he escuchado eso de la crisis que muchos padecen al llegar a esta edad, pues creo que yo fui víctima de esta situación.
Antes de narrar los hechos como tal es importante que sepan que he tenido relaciones con hombres y mujeres, pero en verdad los hombres me gustan mucho más pues solo he tenido dos relaciones con chicas, pero las historias con chicos han sido muchísimas más; desde muy temprana edad he experimentado y descubierto mi sexualidad como lo narro en mis historias anteriores, primeramente con mi primo Rafi y después con mi amiguito Robertico (Busquen esas historias y léanlas, se las recomiendo)
En una tarde de Abril yo estaba dando clases de música a un grupo de chicos cuando siento que tocan a la puerta del salón, enseguida le pido a mis alumnos que continúen realizando el ejercicio que les había indicado y me dirigí a abrir la puerta, al hacerlo veo a un hombre de unos 40 años de edad alto rubio pero algo feo de rostro porque era una de esas personas que de jovencito tuvo mucha acné juvenil y tenía toda la cara llena de huecos, el señor se presenta muy amablemente y me da la mano, la piel de su su mano era áspera como si se tratara de un trabajador de la construcción o algo así, su manera de apretar la mano también era algo tosca pero no porque apretara mucho en el gesto, sino porque sus dedos eran gruesos y en verdad esa sensación de áspero, tosco y grueso me hacía sentir vulnerable ante este inesperado encuentro, yo creo que él se dio cuenta de esta situación porque el tono de su voz se hizo inmediatamente muy amable como tratando de compensar la impresión de superioridad que seguramente él sabía que causaba su presencia y su saludo en la gente y en este caso en mí.
En medio de ese saludo inicial veo como detrás de él había un chico de unos 12 años de edad rubio y en verdad muuuuy lindo, mi mirada enseguida se desvió hacia él y fue entonces que la voz amable del señor se escuchó diciendo:
-Fernando: Buenas tardes Profesor, mi nombre es Fernando y vine a traer a mi hijo Fabio para que reciba clases de música, a él le gusta tocar el piano pero esta algo atrasado en el lenguaje musical y quería saber si aún tiene un cupo disponible en sus clases.
-Yo: Encantado de conocerle Fernando, casualmente estoy iniciando con este nuevo grupo y Fabio puede incorporarse desde hoy mismo a las clases si él puede.
-Fernando: Claro que si profesor, Fabio puede iniciar hoy mismo sus clases, gracias por esta oportunidad que le da a mi hijo, me han hablado muy bien de usted y sé que lo puede ayudar.
Fernando él papá entonces dirigiéndose al niño le dijo:
-Fernando: Ven Fabio para que conozcas a tu nuevo profesor de solfeo.
-Fabio: Papá se dice Lenguaje musical (Dijo el niño saliendo detrás de su papá)
Seguidamente el me dio la mano y allí pude sentir esa piel cálida y delicada típica de los chicos de esas edades, al darme la mano no pude evitar recorrer al chico con mi mirada de arriba abajo pues era uno de esos niños que a uno le parece que fácilmente pueden ser modelos de revista por su cabello rubio, esa piel blanca como si fuera Europeo y aunque no era un chico atlético llamaba la atención por lo bello y angelical de su rostro, antes que se me olvide contarles, sus labios eran rojitos como si se los hubiese maquillado y sus mejillas eran hermosamente rosadas.
-Fabio: Mucho gusto Profesor Oscar (Dijo estas palabras mientras me saludaba estrechando mi mano.
-Yo: Hola Fabio pasa para presentarte ante el grupo.
Seguidamente hice pasar al niño y toda la clase levantó la mirada pues en verdad este niño era como un sol que resplandecía por estos rasgos tan especiales.
-Yo: Muchachos hoy le damos la bienvenida a Fabio en esta Clase de Lenguaje Musical, le pido a algún voluntario o voluntaria que le preste su cuaderno para que el copie el contenido con el que iniciamos hoy.
Yo le indiqué donde sentarse y el chico muy formalmente se sentó abrió su cuaderno y yo proseguí impartiendo mi clase, no pasó mucho tiempo cuando me llamó la atención que Fabio tenía muchas dudas y era de esos chicos que no se estaba quieto hasta haber entendido todo, ese mismo día pude darme cuenta que tenía una personalidad muy extrovertida y sin conocer al grupo de vez en cuando decía alguna frase que el resto de los muchachos tomaba como chiste y en verdad era muy divertido y agradable ver a un alumno tan desenvuelto.
Al terminar la clase el papá de mi nuevo Alumno vino a verme y me preguntó cómo había ido a Fabio en su primera clase, entonces le comenté que me había parecido que el desempeño del niño era muy bueno y que su personalidad extrovertida era excelente para un intérprete musical, entonces el señor me dio las gracias y me dijo que ante cualquier situación no dudara en decirle pues Fabio es su único hijo y él se interesa siempre por todo lo que tenga que ver con él, después de decirme esto me planteó algo que me llamó la atención pues me dijo que me pedía de favor que le contara todo y si algo me incomodaba o me parecía extraño como cariño o confianza en exceso que no me lo tomara a mal ya que Fabio había perdido a su mamá hacia un año y estaba muy carente de afecto pero a veces ese vacío lo llenaba con excesos que no todo el mundo entendía y que ellos como padre e hijo habían desarrollado una relación muy abierta para poder trabajar todo lo relacionado con sus inquietudes.
Esto último aunque lo entendí me llamó mucho la atención pues no me cabía en la cabeza como un chico podría tener excesos de cariño o de confianza conmigo o con alguno de sus compañeros, me preguntaba a que se había referido esactamente su papá al contarme esto, ¿Acaso era uno de esos chicos que se comportaba indisciplinadamente en las clases queriendo ser el centro de atención haciendo chistecitos y burlándose de sus compañeros o de mí mismo?
Olvide contarles que como norma de la institución los padres y los alumnos deben de llenar una Planilla de Ingreso donde están sus datos personales, entre esos datos están la Dirección Personal, Números Telefónicos y como datos opcionales las redes sociales de Alumnos y Representantes; entonces al llegar a casa en verdad no me podía sacar de la cabeza a este hermoso chico y ese planteamiento tan poco usual que me hizo su padre, yo sabía que como profesor no podía focalizarme en ninguno de mis alumnos pero era la primera vez que me llamaba tanto la atención un chico de mi clase, entonces busqué la Planilla de Ingreso y para mi sorpresa allí estaban las redes sociales del papá y del hijo, rápidamente me dispuse a buscarles y en verdad las fotos del niño eran muy hermosas, en muchas se le veía en la playa con muy poca ropa al igual que al papá, y en algunas de las fotos se le veía a ambos besándose de piquito en los labios, esto aunque es tierno y muy común entre muchos padres e hijos me encendió y tuve una erección, me llamó la atención porque nunca me había excitado ver fotos de niños pero este era especial al igual que su relación tan cercana con su padre, de repente mis ojos se posaron en una foto donde ellos en modo de juego se estaban de espalda intentando bajarse el traje de baño y mostrando una parte de sus nalgas a modo de foto chistosa y esto en verdad me terminó de encender, entonces me saqué mi verga (Mi pene mide unos 16 cm más o menos) y me comencé a masturbar viendo las fotos de este niño.
En algunos momento miraba algunas fotos de su papá y aunque de cara como ya dije no era algo atractivo, por alguna razón la rudeza de sus manos y ese modo tosco de saludar en comparación con la delicadeza de Fabio me encendía totalmente; esa noche mi paja fue algo corta, no dure mucho por lo caliente que me sentía, pero no me pude contener y llené toda la laptop de semen al terminar, rápidamente la comencé a limpiar y mientras lo hacía me decía a mí mismo que aquello que me había pasado con el chico debía quedarse entre las cuatro paredes de mi casa pues aunque me gustan mucho los hombres Fabio aun no lo era y también tenía miedo que alguna situación se me saliera de control diciendo algo inapropiado delante del niño o de sus compañeros de clase.
Los días transcurrieron con relativa normalidad y mi fijación con este niño no disminuyó, llegue a pensar que algo estaba mal conmigo en mi cabeza, así que muchas veces antes de entrar al salón de clases me metía al baño y me masturbaba para bajar mi libido y dejar de verlo tanto mientras daba mis clases.
Ya habían pasado varias semanas de clases y Fabio ya se había hecho amigo de todos en el salón y me podía dar cuenta que no era un chico que abusaba de su habilidad de caer bien, más bien me parecía que era un chico noble, algo ingenuo y muy sensible; en esos días yo también había podido disminuir mis deseos por este hermoso chico y al parecer lo que había hecho para controlarme y cambiar la manera de verlo había dado resultado, ese día en especial al terminar la clase Fabio se dirige a mi mientras el resto de los alumnos iban saliendo del salón y me solicita reunirse conmigo pues tenía un problema que necesitaba contarme, esta situación me pareció algo extraña pero yo con el ritmo cardiaco en aumento le dije que estaba bien y esperé que terminaran de salir los alumnos, cerré la puerta y me senté frente a el:
-Yo: Dime Fabio que te ocurre
-Fabio: Profe necesito contarle algo pues creo que usted me puede ayudar.
-Yo: Dime
-Fabio: ¡Es que me da mucha pena!
Yo: No tienes que tener pena conmigo porque los profesores estamos para ayudar a nuestros alumnos
-Fabio: Mi papá hoy viene a buscarme más tarde porque va a salir un poco más retrasado de su trabajo y yo quería consultarle algo que no tiene nada que ver con la música y en verdad no se ni por donde comenzar para que usted pueda ayudarme
Al decirme esto me puse algo nervioso pues seguramente era algo personal y me encantaba poder tener este tipo de conversaciones con este maravilloso chico.
-Yo: A ver Fabio, voy a ayudarte a comenzar, ¿Es algo personal?
-Fabio: Si Profe
-Yo: Te enamoraste Jajajajajajajaja (Esto lo dije riéndome para romper el hielo)
-Fabio: No precisamente, pero tiene que ver con el amor
-Yo: ¿Es algo sexual; alguna duda?
-Fabio: En verdad son dos situaciones que necesito comentarle
-Yo: Fabio ya me estas intrigando mucho, comienza sin miedo que yo no me como a nadie
-Fabio: Tengo una marquita en mi pene y no sé si esto es normal, he buscado información en internet, pero no habla nada sobre esto y no sé si debo decirle a mi papá
-Yo: Bueno Fabio creo que tu papá debió enterarse de esto primero que yo, ¿Por qué no le has contado a el?
-Fabio: Yo quería que usted supiera que aunque él me ha dado confianza, creo que es mejor que usted me ayude porque el a veces es muy rudo y no quiero que me diga que soy un tonto o algo parecido
Ya en este punto el corazón se me estaba saliendo del pecho por la tremenda excitación que tenía, en ese momento tuve que cruzar las piernas para disimular la erección que ya se empezaba a notar.
Yo: Bueno si quieres puedes mostrarme y yo te voy a decir lo que veo con total sinceridad
-Fabio: Pero tengo algo de vergüenza de enseñarle mi pene para que lo pueda ver
-Yo: Tienes mi permiso Fabio, puedes hacerlo con confianza pues ya a esta hora no hay nadie en los pasillos, la puerta está cerrada y no se puede abrir desde afuera sin tener la llave, además somo hombres y tu pene no tienen nada que yo no halla visto antes; puedes confiar en mi
Ya en este punto estaba rojo de la calentura, sentía un temblor recorriendo todo mi cuerpo y en verdad no podía creer lo que estaba escuchando y aún más me emocionaba mucho lo que estaba a punto de ver.
Fabio entonces un poco apenado se puso de pie y lentamente abrió la hebilla de su correa, desabotonó su pantalón, bajo su cremallera dejando ver unos interiores amarillos, pero luego se volteó dándome la espalda.
-Yo: ¿Por qué te volteaste? ¿Te dio pena conmigo otra vez?
-Fabio: Me da un poco de pena, pero tengo que parármelo primero para que pueda ver bien lo que le digo porque si lo tengo dormido no se ve bien y no va a servir de nada
Estas palabras fueron una estocada directa a mi cerebro y a mi corazón que ya para este punto se me estaba saliendo por la boca de la tremenda excitación que tenía, mi verga estaba tan tensa que quería reventar la tela de mi pantalón y yo seguía tratando de ocultar mí ya muy notorio bulto, al parecer el cruzar las piernas ya no era suficiente para disimular esta situación; entonces veo que él chico se demoraba mucho más de lo esperado y adicionalmente empiezo a escuchar sonidos como de frustración…
-Yo: ¿Qué te sucede Fabio?
-Fabio: ¡Profe es que no se me quiere poner duro!, es que como me da algo de pena se me está haciendo difícil esto…
-Yo: Fabio voltéate, no te preocupes y que no te de pena porque yo también tengo un pene igual al tuyo
Al terminar de decir esto el chico lentamente se volteó y me dejó ver una hermosura de verguita media erecta con poco vello púbico, era blanquita de unos 14 cm y debajo de ella se veían dos escrotos rosaditos que eran una delicia ante mi asombrada y libidinosa mirada, en ese momento estaba tan concentrado en este increíble espectáculo que no sentí más mis temblores y tomando el control de la situación le dije:
-Yo: Mira si quieres puedo ayudarte, pero quiero que esto quede entre tú y yo solamente, porque si no me lo prometes no puedo hacer nada
-Fabio: Esta bien profe, yo le prometo que no le digo a nadie porque me daría mucha pena que alguien se entere de esto
Yo miré sus ojitos mientras hablaba escuchando con detenimiento cada palabra que decía y en verdad me parecieron tan convincentes que ya no me detuve más y decidí estirar la mano tomando ese penito blanquito, le pedí a Fabio que cerrara sus ojitos y lentamente comencé a masturbarlo, al ver que el chico estaba reaccionando positivamente a esta situación le dije que antes que se pusiera durito del todo quería observar su cabecita (Glande) a ver si todo estaba bien, él me dijo que si y yo le corrí hacia atrás su prepucio dejando al descubierto una hermosura de cabecita morada que ya estaba tomando dureza juntamente con el resto de tu pene, pero lo que más me encendió fue que cuando le eché hacia atrás su prepucio él se le escapó un ligero suspiro, ya después de esto seguí masturbándolo lentamente mientras con la otra mano acariciaba sus huevitos que colgaban como bambalinas de un blanquito y hermoso arbolito de navidad, en poco tiempo la erección estaba completa y Fabio tomando su pene y volviendo a echar para atrás su prepucio me dijo:
-Fabio: ¿Mire esta marca que me ha salido aquí? ¿Es normal esto o es algo malo?
-Yo: Fabio esta es una vena que todos los hombres tenemos y es totalmente normal que ya a tu edad se esté notando
-Fabio: ¿Me podrías mostrar tu pene a ver si usted también la tiene?
En ese momento yo dudé un poco ante esta inesperada petición pero superé mi duda, me puse de pie delante de mí alumno y antes de poder desabrochar mi pantalón Fabio con su mirada clavada en mi entrepierna dijo:
-Fabio: ¿Profe porque ya usted la tiene dura?
Yo quedé por un instante sin saber que decirle y lo único que se me ocurrió sin pensarlo mucho fue que eso me pasaba cuando tocaba un pene que no era el mío, en verdad no se ni porque dije eso, debió ser que la excitación y los nervios ligados a la emoción de este inesperado encuentro hizo que dijera lo que estaba pensando sin procesarlo bien, el chico entonces sin despegar sus ojitos de mi bulto me dijo:
-Fabio: Creo que entiendo profesor…
Yo seguí desabrochando mi pantalón y en ese momento como estaba tan nervioso me lo bajé juntamente con mi interior hasta las rodillas liberando mi verga la cual apuntaba hacia la verguita de mi alumno como un misil.
-Fabio: Profe su pene es mucho más grande y grueso que el mío y tiene baba
El líquido pre seminal estaba goteando de la punta de mi verga la cual palpitaba con cada latido de mi agitado corazón.
-Yo: Fabio esto no es baba, es liquido pre seminal y es normal que salga en esta cantidad cuando uno es adulto y esta con el pene parado, a ti también te debe salir pero más poquito
-Fabio: ¿Profe puedo hacerle lo mismo que me hizo usted a mí?
-Yo: Claro que si Fabio, estamos solos y es muy justo lo que estas pidiendo
Cuando la mano blanquita y delicada del chico toco mi verga no sé cómo describirles lo que sentí, fue una electricidad que recorrió todo mi cuerpo y el repitiendo todos mis pasos echó para atrás mi prepucio, se sentía como si estuviera explorando mi pene con curiosidad y gusto a la vez.
-Fabio: Si profe usted tiene razón, las marcas también las tiene su pene y están más grandes que las mías ¿Le puedo hacer una pregunta?
Esto lo decía sin soltar mi verga y sin dejar de hacerme una masturbación lenta tal y como yo se la hice a el minutos antes.
-Yo: Claro que si Fabio dime
-Fabio: ¿Usted es gay?
-Yo: Si Fabio yo soy gay y me gusta lo que estás haciéndome, lo estoy disfrutando mucho
-Fabio: Yo también siento que esto es muy rico y le prometo nuevamente que no le voy a decir a nadie lo que estamos haciendo
Ya en este punto no pude más y tomándolo con mis dos manos por su cabeza hice algo de presión hacia abajo, esto hizo que él se agachara quedando mi verga babeante de pre seminal frente a su hermosa carita angelical
-Yo: Fabio abre la boca y mámame la verga ¿Sabes cómo hacerlo?
-Fabio: Si profe, yo ya he practicado
El chico sin decir más palabras abrió su delicada boquita rojita y comenzó una mamada espectacular que me hacía sollozar y suspirar como un loco demente, yo tomé su cabeza y comencé a cogerlo por la boca sin profundizar mucho para que no se asustara o se ahogara, esto no duró mucho tiempo pues en unos pocos minutos ya estaba descargando dentro de su boquita mi semen caliente en varios chorros abundantes y parte de ellos se escurrían por las comisuras de mi muchacho, no pudiendo evitar en esos instantes emitir un sonido de placer que se escuchó más como un gruñido ahogado.
-Fabio: ¡Profe usted bota bastante leche!
-Yo: Si mi niño, ya veo que te tragaste la mayor parte, eso quiere decir que te gustó; ¡Ahora te toca a ti papi bello!
Entonces lo tomé de sus hombros y lo levante, inmediatamente me agaché y le empecé a mamar desesperadamente esa hermosa verguita que ya estaba durita como piedra, el imitando lo que yo le acababa de hace tomó mi cabeza con sus dos manitos y me comenzó a coger la boca, solo que él no se contuvo como yo lo había hecho y comenzó a clavarme su penito de forma desesperada, en ese momento yo pensaba (menos mal que no es tan grande su verguita porque me hubiese ahogado si la tuviese como la mía), yo disfruté ese increíble espectáculo de ver como este chico estaba entregado a sentir sin miramientos el placer que le daba cada clavada que me estaba propinando en mi boca; yo por mi parte aproveché ese momento para bajar su pantalón y acariciar y apretar esas nalgotas que tanto me gustaban, que solo había visto parcialmente en aquella foto y no había podido tocar hasta este día, de pronto Fabio empezó a respirar profundo gimiendo muy rápidamente, entonces clavó por última vez lo más profundo que pudo su pene y descargó su semen dulcito de adolescente en lo hondo de mi garganta.
Al terminar sus dos o tres disfrutadas descargas se quedó inmóvil continuando con la presión de sus manos, dejando su verguita aun palpitante después de la eyaculación en mi boca, poco a poco él fue suavizando la presión sacando su miembro, al salir totalmente le pedí que se volteara pues quería ver sus nalguitas y fue allí cuando quedé extasiado viendo dos maravillosas pompas blancas y regordetas ante mis ojos, seguidamente les di un beso a cada una de ellas y me puse de pie.
Después de este momento seguimos conversando algunas tonterías y riéndonos de algunos chistes mientras nos subíamos los pantalones y nos acomodábamos los cabellos porque quedamos todo despeinados, yo me burlaba de él diciéndole que le había quedado un peinado de payaso y él me decía que el mío se parecía a un nido de avestruz.
Entonces entre risas y juegos nos fuimos del salón, nos sentamos un rato en el banco del pasillo y como a los 10 minutos vimos que llegaba Fernando (El papá) apresurado pues se le había hecho mucho más tarde de lo que él esperaba debido a su reunión de trabajo y no dejaba de disculparse y de agradecerme por haber acompañado a su hijo todo ese tiempo mientras el llagaba, algo que recuerdo con intensidad fue cuando Fernando me dio un abrazo y pude sentir esa fuerza de sus brazos rodeando mi cuerpo, en ese momento se despertó en mi esa sensibilidad de gay pues en verdad yo me hubiese quedado rodeado de esos brazos toda la tarde, seguidamente me despedí de mi bello Fabio y al llegar a casa no aguanté las ganas y me masturbe dos veces más esa misma noche viendo nuevamente las fotos de las redes sociales de Fabio con su papá.
Pasaron varios días y ya Fabio tenía dos ausencias en mis clase de música, al principio pensé que podría estar enfermo pero no me había atrevido a llamar antes pues sería sospechoso, así que al ver esta segunda ausencia decidí llamarle después de clases a su número privado, al llegar a casa me acomodé en el sofá de mi sala y me dispuse a marcar su número, repicó varias veces y finalmente atendió mi muchacho, al escuchar mi voz sentí su alegría inmediatamente:
-Yo: Hola Fabio te habla tu profe Oscar, ¿Quería saber cómo estabas y que te ha ocurrido que no has venido estos dos días a tu clase de música?
-Fabio: Hola profe, que bueno que me llamó, me alegra mucho conversar con usted, en estos momentos tengo muchas tareas en el liceo, pero la verdad en específico del porque no he ido a las clases de música es que mi papá se molestó mucho conmigo y me castigó
-Yo: ¿Fabio pero que hiciste para molestar así a tu papá?
-Fabio: Profe mi papá entro sin avisar a mi cuarto y me sorprendió viendo algunas fotos en internet y masturbándome, eso lo molestó muchísimo y me dijo que hablaría con usted al respecto
En ese momento no le di mucha importancia al asunto pues todos los adolescentes visitan páginas de pornografía y seguramente Fernando (El papá de Fabio) necesitaba orientación de cómo actuar en esos momentos embarazosos que a veces se vuelven muy difíciles de manejar por parte de los padres, entonces tomando el control de la situación le dije a Fabio
-Yo: Mi niño no te preocupes, dile a tu papá que me llame para ponernos de acuerdo y reunirnos
-Fabio: Está bien profesor, yo le voy a dar su mensaje, pero por favor no se valla a molestar usted conmigo por lo que hice
-Yo: Fabio lo que hiciste es muy norma a tu edad, déjame intervenir y explicarle a tu papá de una manera adulta y estoy seguro que lo va a entender
-Fabio: Profe es que no le he terminad de contar toda la historia
-Yo: ¡Bueno Fabio cuéntame!
-Fabio: Primero prométame que usted no se va a molestar conmigo
En este punto ya yo estaba un poco intrigado y empezaba a intranquilizarme, pero respiré profundo y le traté de transmitir a Fabio toda la calma que pude.
-Yo: Tranquilo mi niño, nada de lo que haya pasado puede ser tan terrible como para que yo me moleste contigo porque somo amigos
Hubo un silencio en la conversación por parte del niño y de pronto me dice:
-Fabio: Profe las fotos que estaba viendo en la Internet mientras me masturbaba eran suyas
Al escuchar esto un frio me recorrió todo el cuerpo y Fabio prosiguió contando:
-Fabio: Mi papá me sorprendió haciendo esto y en ese mismo momento me interrogó y yo le tuve que contar lo que hicimos el otro día en el salón de clases mientras lo esperábamos a el
Mi corazón se paralizó en ese momento y creo que dejó de latir y créanme que hasta se me paralizo la respiración, me quedé totalmente mudo, las manos me temblaban y por mi mente pasaban pensamientos terribles, ¿Ahora cómo podría justificar eso que hice?, pensaba que mi vida había culminado y me encontraba al final de mi camino por esta vida, en verdad estaba tan mal emocionalmente que no pude hablar más y colgué la llamada, el teléfono sonaba y yo veía que era Fabio y yo solo le colgaba, esto se repitió tres o cuatro veces, pero ese sentimiento de desesperación, de miedo e intranquilidad no lo había experimentado nunca, hasta me pasó por la mente que el papá de Fabio ya me había denunciado ante las autoridades; después de la tercera llamada del niño el celular dejó de sonar y yo me sumergí en los pensamientos más oscuros que he tenido en toda mi vida, literalmente era un huracán incontrolable de ideas, cada una peor que la anterior; de pronto sonó mi celular nuevamente, era un numero desconocido y con la voz entrecortada decidí responder pensando que era nuevamente el niño que me estaba llamando desde otro móvil.
-Yo: Hola
-Fernando: Buenas tardes profesor, le habla el papá de Fabio
Yo estaba en shock total, no sabía si colgar y suicidarme o seguir escuchando a aquel señor que por el tono de su voz se sentía bastante molesto.
-Fernando: Acabo de llegar a la casa y me he encontrado a Fabio llorando, él me dijo que acababa de hablar con usted, ya sé que le conto lo ocurrido pero lo peor es que él dice que usted se molestó y le colgó la llamada, él ha intentado llamarle varias veces y usted le cuelga
-Yo: Es que el celular se me descargó
Mi voz era temblorosa y se me notaba el nerviosismo que sentía
-Fernando: Necesito conversar con usted en mi casa, estoy pensando hacer una reunión entre Fabio usted y yo para hablar de lo ocurrido y encontrarle una solución
Yo escuché estas palabras y en medio de mi shock emocional no entendía nada de lo que aquel señor estaba proponiendo, en el fondo sentía alivio que no me hubiese denunciado pues si así fuera no me invitaría a su casa a conversar sobre lo ocurrido, me pasó por la mente que seguramente me podría agredir físicamente pero el hecho de estar frente a su hijo haciendo esto me parecía muy extraño y sin sentido, entonces saqué fuerzas de donde no tenía y le respondí.
-Yo: Señor Fernando por favor páseme su dirección Google y en una hora estaré en su casa para poder explicarle mi versión de los hechos
-Fernando: Ya le voy a pasar mi dirección, le espero profesor en mi casa, aprovecho para decirle que como sé que usted es un hombre educado y sensible quiero que no se preocupe, no lo voy a denunciar ante las autoridades, pero hoy mismo tenemos que arreglar esta situación
-Yo: Entiendo lo que me dice y en verdad agradezco mucho su alto grado de comprensión, no le voy a fallar nunca más, esto se lo puedo jurar por lo más sagrado que tengo en mi vida, en menos de una hora estaré llegando a su casa
-Fernando: Aquí le esperamos profesor
Al colgar la llamada no sabía que pensar, estaba realmente con fundido, tenia tanto miedo como asombro, en verdad estaba esperando que Fernando de alguna manera me hiciera pagar lo ocurrido con su hijo; hasta llegue a pensar que la policía me estaría esperando en su casa.
Todo esto y más me estaba atormentando pero como pude me cambie de ropa y conduje hasta la casa de mi alumno Fabio; al llegar pude notar que era una casa bastante grande y estaba rodeada de un muro que no dejaba ver nada del interior, al estar al frente de la casa no vi patrullas ni policías y eso me calmó un poco, tomando un aliento Sali de mi auto y toqué el timbre de la puerta y en breve abrió la puerta el papá del niño.
-Fernando: Buenas tardes profesor Oscar pase
Al abrir la puerta me llamó la atención que el Sr. Fernando estaba descalzo, con unos chores negros y usaba una franelilla lo cual dejaba ver que si bien no tenia un cuerpo escultural de gimnasio, tampoco se veía descuidado pues sus brazos eran gruesos y su pecho totalmente lampiño.
Al atravesar el umbral de la casa yo esperaba algo de agresión o por lo menos algún reclamo por lo ocurrido, sin embargo, el Sr. Fernando estaba totalmente calmado y cuando llegamos a la sala de la casa me invito a tomar asiento en una de las butacas.
-Fernando: Profesor, yo lo respeto mucho a usted por su labor con los alumnos y ya que ocurrió este incidente entre usted y mi hijo quiero que sepa que en nuestra familia hay reglas muy diferentes a las otras que usted seguramente ha podido conocer a lo largo de su vida laboral y personal incluyendo su propia familia, aquí en nuestra casa desde que Fabio nació nosotros hemos tenido una política de apertura total en lo sexual para que la comunicación sea la mejor sin esconder nada; lo que le voy a comentar y proponer a usted quiero que sepa que tiene toda la libertad a negarse e irse o aceptar y quedarse, si usted no quiere aceptar mi propuesta, quiero que sepa que tampoco yo lo voy a denunciar por ello, pues lo que le quiero plantear no es un vil chantaje, es un acuerdo entre usted y nosotros, pero si una solo palabra de esto sale de su boca con otra persona yo mismo me voy a encargar de que usted pase el resto de su vida en prisión por haber roto nuestro pacto de silencio
-Yo: Bueno Sr. Fernando usted puede tener la mas absoluta seguridad que yo no diré nada de lo que aquí conversemos
-Fernando: Lo primero que quiero que sepa es que no me molesta lo que hicieron Fabio y usted, incluso quiero que se repitan esos encuentros entre ustedes dos
Al escuchar estas palabras créanme que mi corazón no dejaba de latir, parecía un caballo desbocado y no daba crédito a lo que este padre de familia me estaba diciendo, entonces el continuó
-Fernando: Yo mismo le he enseñado a Fabio las artes del amor, pero hemos tenido una dificultad que estoy seguro si usted acepta la podríamos solucionar
-Yo: Creo que le entiendo Sr. Fernando, usted le ha leído e instruido al niño desde temprana edad sobre sexualidad
-Fernando: Jajajajajajajaja, usted no me está entendiendo, mejor llamo a Fabio y así va a poder entenderme mejor; Fabio se que estas escuchando desde la cocina, vente hijo que quiero que le demuestres a tu profesor Oscar lo que le estoy tratando de explicar
No había terminado Fernando de decir estas palabras cuando el niño asomó su cabeza tímidamente y con un lento caminar sin dejar de mirarme entró en la sala.
Fabio estaba vestido con unos chores blancos lo cual resaltaba esas nalgotas que ya le había besado en el salón de clases, y al igual que su papá estaba descalzo, usaba una playera azul claro la cual hacia resaltar mucho más lo hermoso de su color de piel y sus cabellos rubios, algo que ese día disfruté mucho fue lo sublime de sus pies descalzos, en lo personal en ese momento descubrí que tenía ese fetiche con los pies de algunos nenes, pero en verdad los pies de mi niño eran perfectos y delicados, en general parecía un ángel sin alitas en la tierra.
-Fabio: Buenas tardes profesor, espero no esté muy molesto conmigo por haberle contado todo a mi papá
-Yo: Fabio yo no estoy molesto contigo ni con nadie, perdóname por no haberte contestado las veces que me llamaste, la verdad es que estaba muy mal emocionalmente por lo que conversamos y creo que tu papá se puede imaginar cómo me sentía y aun me siento con todo esto, yo te quiero pedir disculpas por no controlarme y dejar que mis impulsos te lastimaran emocionalmente ese día en el salón después de clases y hoy después de colgarte la llamada
-Fernando: Profesor no se preocupe por eso, ya conversamos un poco al respecto para que pudiera estar más calmado
-Fabio: Profe lo que paso aquel día en el salón no me lastimó, ni me hizo sentir mal en ninguna forma, mi papá sabe que me gustó mucho, lo que si me hizo sentir mal es no haberle podido terminar de explicar bien todo porque usted no me contestaba las llamadas y en ese momento si me desesperé mucho pensando en lo mal que se podía sentir usted
En ese momento el papá lo interrumpe y le dice:
-Fernando: Fabio ven aquí conmigo hijo y enséñale a tu profesor de música como nos tratamos aquí en la casa
-Fabio: ¿Papá y si el profesor se ofende o algo?
-Fernando: No te preocupes por eso hijo que eso no va a pasar, ven aquí y que el vea como ayer en la noche cuando te dio miedo por ese mal sueño me convencías que te dejara dormir conmigo en la cama
Fabio se dirigió hasta donde estaba sentado su papá y con una de sus manos comenzó a acariciarle la cara y el cabello, luego sin dejar de acariciarlo se le subió encima delicadamente y comenzó a besarlo, pero este beso ya no era el típico besito entre padre e hijo, este era un beso de pasión donde ambos se involucraban introduciendo sus lenguas y entrelazándolas, yo no salía de mi asombro y mi verga se me empezó a parar cuando veo que el papá sin dejar de besar a Fabio comienza a acariciar las nalgas del chico por encima de sus chores, luego las masajeaba, y al pasar un tiempo comenzó a apretarlas no violentamente pero si muy sensualmente dándole de vez en cuando alguna que otra nalgadita.
Luego de esta tremenda escena, el papá detiene la acción de Fabio, indicándole que se sentara en sus piernas y así continuó la conversación.
-Fernando: Profesor como ya pudo ver nosotros tenemos una relación padre e hijo totalmente abierta y Fabio conoce de sexo desde los primeros años de su vida pues mi difunta esposa estaba de acuerdo que los hijos deben ver a sus padres teniendo relaciones sexuales porque es lo mas natural del mundo, y si ellos quieren participar de esta relación también lo pueden hacer con total libertad, en nuestro hogar no se obliga a nadie a tener sexo, solo si estamos de acuerdo y tenemos las ganas lo podemos hacer sin problemas, los limites los ponemos y los respetamos siempre porque la idea es que el chico aprenda y disfrute al mismo tiempo, algo que quiero comentarle es que yo no me molesté con Fabio porque se masturbara viendo fotos y videos suyos, mi molestia fue que él no me conto lo sucedido y rompió nuestro código por primera vez, entonces lo castigue porque nosotros nos contamos todo sea lo que sea
-Yo: En verdad les confieso que estoy totalmente asombrado de lo que me está contando amigo, nunca había conocido una familia que hiciera esto, aunque debo reconocer que tiene mucha lógica lo que dice, también comprendo porque no debo comentar nada a nadie pues esto es algo confidencial e intimo en su familia y a mi no me corresponde hablar de esto con nadie
-Fernando: Que bueno que lo entiende profesor y que esta dispuesto a guardar nuestro pequeño secreto familiar, le comento que Fabio al ver a mi esposa conmigo teniendo sexo muchas veces se disponía a participar, pero no le gustaba hacerlo con ella, solo le gustaba hacerlo conmigo, mi esposa lo entendía totalmente y muchas veces se intercambiaban los roles dejando que Fabio me hiciera sexo oral y hasta me masturbara antes de penetrar a mi bella esposa; esta situación se mantuvo durante toda su vida, pero a raíz de la muerte de su mamá ahora Fabio y yo somos más íntimos que antes, yo no lo obligo a nada, pero el me busca y me ha manifestado que quiere complacerme como lo hacia su mamá y aquí es donde vienen los problemas
-Yo: Bueno entiendo que Fabio tiene una orientación gay desde que pudo escoger su rol sexual, ¿Pero no entiendo cual es el problema de querer complacerlo como lo hacia su mamá? Si ya Fabio es decididamente gay el puede complacerlo a usted sin problemas
-Fernando: Jajajajajajajaja profesor usted no me entiende totalmente, yo necesito mucho mas que mamadas y masturbadas, yo soy un hombre que quiero penetrar y sentirme completo acabando dentro de mi pareja y con Fabio no puedo hacer esto
-Yo: Ya Fabio es bastante grande y creo que el puede ser penetrado sin problemas, yo a su edad y desde un poco antes practicaba sexo anal y en verdad me encantaba, claro que hay que tener cuidado para no lastimarlo
-Fabio: Profesor a mi me gusta el sexo anal, pero es que el pene de mi papá no es como el suyo, el de él es muuuuy grueso y por mas que lo hemos intentado no me ha podido penetrar
Al oír estas intimidades de su papá se me volvió a activar el morbo gay y ya para este punto de la conversación les juro que se me había olvidado totalmente lo mal que me había sentido mas temprano y ya estaba calentándome de manera tremenda con todo lo que estaba pasando
-Fabio: Papá déjame seguir mostrándole al profesor
-Fernando: ¿Profesor le podemos llamar Oscar? Creo que si ya le hemos revelado nuestros más grandes secretos si usted quiere puede convertirse en parte de la familia, para Fabio y para mi seria genial si así usted lo decide
-Fabio: Si papá… seria increíble que el profesor… disculpe, quise decir Oscar pudiera ser de manera oficial otro papá para mi
Yo seguía asombrado, pero confieso que aquella propuesta me no me era indiferente, me calentaba este hermoso nene que parecía un sol de medio día juntamente con su papá que despertaba en mi esa sensación de vulnerabilidad gay
-Fernando: Oscar por favor vente para acá cerca de nosotros
Yo me levanté de mi butaca y me acerqué a ambos sentándome junto a ellos en el sofá, Fabio entonces se volteó nuevamente quedando frente a su papá y comenzó otra vez a besarlo, pero en esta ocasión juntamente a este encendido beso comenzó un masturbar el miembro de su padre por encima de la tela, era evidente que el hombre se estaba excitando pues volvió a agarrar las nalgotas de Fabio y esta vez empezaba a meter sus manos por debajo de la tela, el chico dejó de besar a su papá y agachándose frente a él comenzó a besar y a darle pequeños mordiscos suaves por encima de los chores a ese pene que cada vez se hacia mas y más voluminoso haciéndose evidente que la tela ya no podía estirar más.
Entonces Fabio, lentamente comienza a bajar los chores de Fernando, este al ver que esto le estaba costando trabajo a su hijo se inclina hacia arriba para facilitarle la tarea y cuando al fin el chico logra bajar totalmente la prenda su padre pude observar cómo apareció una verga gruesa en gran manera que era una belleza, este monstruo que guardaba Fernando entre sus piernas no era tan larga, creo que media unos 17 cm mas o menos de largo pero el grueso era lo espectacular, la hermosa verga de este hombre tenía forma de tabaco, la punta era pequeña y luego se ensanchaba enormemente en su mitad para luego estrecharse un poco en su base, nunca había visto en la vida real algo así, solo en algunas películas había podido ver un pene de estas características, las bolas eran grandes y colgaban de ese tallo grueso como un trofeo maravilloso que me enamoraba y quería ganar para mi placer.
Fabio haciendo un esfuerzo abrió su boquita y trataba de darle el mejor sexo oral que podía, pero las dimensiones de aquella bestia requerían de una boca más grande, entonces Fernando sin detener las mamadas de su hijo se dirigió a mi
-Fernando: Oscar, ahora que ya viste el problema dejemos que Fabio siga haciendo lo suyo y vente frente a mi
Yo me pare del sofá colocándome frente a Fernando, este me desabotonó mi pantalón y me los bajó lo mejor que pudo, yo me quité los zapatos y termine de quitarme el pantalón.
-Fernando: Bájate el interior que quiero ver lo que tanto le gusto a mi hijo de ti
Obedecí inmediatamente y mi verga estaba parada y lista para la acción.
-Fernando: Súbete al sofá por encima de Fabio que quiero probar esa delicia que traes
Siguiendo las indicaciones me subí tal y como me había dicho que hiciera, antes de hacerlo no pude evitar darle unas caricias en la cabecita rubia de Fabio que estaba trabajando arduamente en tragar lo más posible esa vergota, se veía muy dedicado a hacerlo lo mejor que podía y esto me calentaba en gran manera, pero antes de recibir mi tan esperada mamada y ya estando encima de Fabio y de Fernando en aquel sofá
-Fernando: Oscar ya entiendo porque a mi hijo le gusto tanto tu verga, el quiere que lo desvirguen penetrándolo por primera vez y como vez yo no puedo hacerlo sin causarle serios problemas, esa tarea te voy a encomendar a ti
Diciendo esto puso sus rudas manos en mis glúteos e hizo que me deslizara en lo profundo de su boca para mamarme intensamente, su boca devoraba desesperadamente todo mi tallo, entonces al rato yo comencé a gemir, agarré su cabeza para tomar la acción pero Fernando me detuvo repentinamente
-Fernando: ¿Te gusta Oscar?
-Yo: ¡Me encantaaaa!
-Fernando: Hijo ven aquí para que veas algo en vivo y en directo
-Fabio: ¿Papi vas a hacer como en las películas?
-Fernando: Si hijo, yo te lo prometí y te lo voy a cumplir
-Yo: ¿De qué están hablando ustedes?
-Fernando: Oscar yo le prometí a mi hijo que le mostraría como se le abre el culo a un gay, él quería que yo se lo abriera pero como ya le comenté esto no es posible aun, pero quiero abrirte el culo a ti, quiero que Fabio vea como te perforo es huequito y lo hago mío, en lo que Fernando decía esto Fabio estaba abriendo mis nalgas como explorando mi hoyito, entonces dijo asombrado:
-Fabio: ¡Papá no tiene pelos como el tuyo!, se parece al mío pero es mas grande y algo más oscurito
-Fernando: ¿Déjame ver lo que me voy a comer hoy mismo?
Diciéndome esto Fernando me volteó y me pidió que me inclinara hacia adelante, frente a mi estaba la carita de Fabio que se le veía muy entusiasmado, tengo que confesar que las piernas me empezaban a temblar porque aquella verga era gorda tamaño gigante y yo no sabía si podría abrirse tanto mi culito sin ser destrozado, entonces veo como Fabio fue al lado de su papá y escucho como reían en lo que sentía como los gruesos dedos de Fernando recorrían respetuosamente el borde superficial de mi culito haciéndome caricias, de pronto siento como entierra su cara entre mis nalgas y comienza una danza de lengua y ligeras penetraditas de sus dedos para volver a la mamada
-Fernando: Hijo mámale el pene a Oscar para que disfrute
En esa posición semi inclinado hacia adelante el niño comienza a mamarme la verga y los dedos de Fernando comienzan su incursión un poco más profunda dentro de mí, esto duró unos pocos minutos cuando Fabio interrumpió mu mamada para decir:
-Fabio: Papá tú me prometiste que tratarías que mi primera vez sería una experiencia de los dos, ahora eres tú eres el que estas rompiendo nuestros acuerdos
El niño hablaba y Fernando seguía su mete y saca de uno de sus dedos en mi hoyito el cual ya estaba recibiéndolo hasta el fondo
-Yo: ¡No entiendo lo que dicen!
-Fernando: Oscar, lo que pasa es que nosotros una vez habíamos hablado que trataríamos que la primera vez que yo penetrara a un gay delante de Fabio el también seria penetrado a su vez por este mismo hombre, hijo lo había olvidado totalmente, pero eso lo vamos a solucionar de inmediato si Oscar quiere claro está
Con una voz medio entre cortada por el mete y saca del dedo de Fernando dije que me encantaría y así de esta manera se detuvo la acción en mi culito y Fernando dijo:
-Fernando: Hijo vamos a invitar a Oscar a nuestro cuarto
Fabio me tomó de la mano y me llevó hasta la habitación principal, en ella había una cana grande y en verdad estaba muy hermosamente decorada, entonces yo les pedí que antes de proseguir me dejaran ir al baño a prepararme bien pues todo lo ocurrido me había tomado por sorpresa, Fabio enseguida se ofreció a llevarme y al llegar me dijo.
-Fabio: Profe aquí en ese cajón sobre el lavado está un aparato para enemas que yo nunca he utilizado, mi papá me lo compró pero como ya usted sabe nunca lo hemos intentado
-Yo: Gracias Fabio, dile a tu papá que en unos minutos me reúno con ustedes en el cuarto
Al quedar solo en el baño no podía creer lo que estaba pasando, era como una experiencia irreal, créanme que en un momento me pellizqué a ver si estaba teniendo un sueño vivido, pero para mi asombro y alegría estaba pasando de verdad, tome el aparato de enema, lo preparé con agua y un poco de jabón liquido que era lo que tenía a la mano y funcionó a la perfección, luego me seque bien con la toalla y aún con mi pija bien parada llegue a la habitación donde me esperaban padre e hijo, al llegar sin pérdida de tiempo Fernando tomó el control y dijo:
-Fernando: Oscar me encanta verte así con tu verga bien activa, eso quiere decir que tienes muchas ganas de continuar; por favor termina de quitarte la playera y ponte boca arriba a la orilla de la cama y Fabio quítate toda la ropa que hoy va a ser nuestro día prometido
Obedientemente me quité la playera y me acosté boca arriba en la cama mientras veía como mi hermoso niño se desnudaba y entonces pude ver desde otro ángulo sus nalgotas y esa deliciosa combinación de una barriguita adolescente con esos glúteos redonditos que invitaban a morderlos.
-Fernando: Fabio ahora colócate en un sesentainueve encima de Oscar para que le hagas sexo oral mientras yo sigo abriéndole poco a poco el culo, quiero que puedas ver en la realidad como se le clava una verga de verdad por el culo a un gay; Oscar tú puedes devorarte su penito o su hoyito, tú decides lo que más te guste hacer
-Fabio: ¿Oscar puedes comerme el culito?
Yo nunca imaginé que me pudiera suceder algo así y la petición de Fabio fue una deliciosa invitación a explorar y profundizar donde nadie había estado antes, estaba muuuuy emocionado porque sería el primero en comerme ese culito, no pasó mucho tiempo y ya Fabio se había colocado encima de mí y con mis manos temblorosas abrí esas nalgotas para descubrir el maravilloso espectáculo de un agujerito totalmente rosadito, estando allí en VIP descubrí que tenía unos pocos pelitos pero eran rubios, la calentura no me dejó seguir admirándolo y me lance en una frenética mamada de ano que le causaba unos ligeros quejidos a mi nene.
-Fernando: Mira no más que putita me saliste Fabio; te felicito Oscar, estás haciendo un excelente trabajo pues conmigo nunca ha gemido como lo está haciendo contigo, se ve que tiene muchas ganas de perder hoy su virginidad anal jajajajajajajaja
Entonces Fabio entre suspiros y gemidos ligeros dijo con una voz entrecortada parecida a la mía hacía un rato
-Fabio: Papá métele la verga mientras yo sigo mamando, quiero ver cómo le entra a mi profe
-Fernando: Calma hijo, que esto apenas está empezando y él debe estar bien abierto para recibir toda mi hombría dentro de él
Fabio seguía mamando deliciosamente, yo me estaba comiendo su culito metiendo mi lengua y saboreando ese saborcito metálico delicioso y no había pasado mucho tiempo cuando ya Fernando me tenía tres de sus dedos dentro y era tal mi excitación que no aguanté y comencé a dildear a Fabio, al meter mi primer dedo el chico comenzó a respirar más profundo y podía ver como se dilataba deliciosamente ese hoyito, luego metí un segundo dedo y el comenzó a quejarse bajito con cada mete y saca, por mi parte yo también me estaba quejando pues Fernando ya había introducido desde hacía rato su tercer dedo y de pronto Fernando volvió a interrumpir esta escena diciendo:
-Fernando: Oscar ya estas listo para mí, Fabio tráeme el tubo de lubricante que está en el cajón de la derecha
Fabio salió disparado y le entregó a su papá el lubricante…
-Fernando: Oscar ahora yo me voy a acostar boca arriba y quiero que tu tomes este lubricante y lo uses para facilitar tu trabajo, quiero que Fabio pueda ver cómo te clavas tu solito y me haces feliz como lo hacía mi esposa
-Fabio: Si papá, sí, sí, sí, yo quiero ver …
Entonces aquel hombre se quitó su playera y se dejó caer sobre la cama boca arriba, esa verga regordeta estaba intimidante, pero decidí hacerlo porque era como un reto para mí, me puse encima de mi hombre, el me dió el tubo de lubricante y lo primero que hice fue colocarme suficiente en mi hoyito que ya estaba bastante abierto, pero esto no se comparaba con todo lo que tendría que abrirse para tragarse esa columna viril.
Seguidamente coloqué suficiente lubricante en el pene de Fernando; yo estaba encima de él, pero mirando hacia sus pies y veo como Fabio se había colocado al lado mío con su carita a pocos centímetros de la acción para no perderse ningún detalle, respiré hondo y comencé a intentar clavarme esa verga lentamente, haciendo esfuerzos para que entrara poco a poco, era algo que nunca había intentado a esta escala.
-Fabio: ¡Mira papá como se le está abriendo! ¡Ya tiene la cabeza dentro!
Yo no aguantaba el dolor y me la saqué de repente para tomar aliento nuevamente.
-Fabio: ¿Por qué te la sacaste? Ya estaba entrando
-Yo: Fabio esto debe ser poco a poco porque es muy gruesa y no quiero sangrar, si lo hago rápido puedo sufrir un desgarre y quiero disfrutar este momento
-Fernando: Fabio no lo desconcentres para que él pueda seguir, si quieres ve del lado de allá para que le veas la cara que está poniendo, yo la estoy viendo por el espejo pero quiero que lo veas de frente; este Oscar si es un mariconazo de verdad porque no se ha rendido jajajajajajajaja
Fabio se me puso al frente y yo cerré los ojos para no verlo y poder concéntrame, entonces cuando sentí un poco de alivio en mi trasero inmediatamente empecé a meterme nuevamente ese guevote, esta vez me di cuenta que me entro mucho más; al fin había llegado al centro que era la parte más gruesa, sentía como todo mi culo se había estirado al máximo y pensaba que ya no se podía abrir más, pero estaba equivocado y pronto lo descubriría, por un momento abrí mis ojos y pude ver la cara de asombro de Fabio, tenía los ojos muy abiertos como quien no puede creer lo que está viendo, en su expresión se notaba la excitación combinada con alegría y asombro.
-Fabio: Dele profe, dele un poquito más que le falta muy poco para entrar completa, no se detenga
En verdad yo sentía que ya no entraba más, mi ano estaba super estirado y el dolor había regresado, yo respiraba profundo para relajar mis músculos en mi esfínter, las piernas me temblaban y no sabía porque, en mi mente solo tenía la idea que hasta allí había llegado y no podía continuar.
-Fernando: ¿Oscar que pasó? ¿No me digas que te estas acobardando casi al final del camino?
-Yo: En verdad siento que no va a entrar mucho más Fernando, es que es muy gruesa y ya siento mucho dolor
En ese momento siento que las manos de Fernando me empezaron a acariciar la espalda y aunque me dolía increíblemente mi culito yo sentía algo de placer al sentir esas caricias, de repente las manos suben hasta mis hombros y cuello, la sensación era muy agradable
-Fernando: Quiero que te relajes un poco más, ya lo que te falta es muy poco y créeme que lo peor pasó, quiero que te concentres en mis caricias, Fabio ponte frente a Oscar y acaríciale con una mano los huevos y con la otra dale caricias por el rostro, se delicado hijo, no le toques aún el pene para que no acabe antes de tiempo
Entre las caricias de Fernando por mi espalda, hombros y cuello y las de Fabio en mis huevos y rostro sentí que me estaba empezando a relajar, yo mantuve casi todo el tiempo los ojos cerrados y en un momento que los abrí veo como Fabio estaba como tratando de entender algo que el papá le estaba diciendo, en verdad me llamó la atención esto pero no le di mucha importancia, de repente el niño deja de acariciarme la cara y veo como se agacha acercando su carita más a mi zona genital y tratando de ver por debajo de mis huevos como para no perderse ningún detalle de mi clavada, las manos de Fernando siguieron sus delicadas caricias por mi cuello y hombros y aunque me intrigó mucho el secretismo de Fabio con su papá nunca me imagine lo que acontecería después.
Yo estaba tratando de dar un tiempito a que pasara el dolor para continuar tratando de llegar al final de esta vergota, cuando pude sentir como las manos de Fernando me agarraron por los hombros.
-Fernando: Voy a ayudarte un poco Oscar
Diciendo esto empezó a hacerme presión hacia abajo y yo enseguida comencé a chillar como una niña malcriada
-Yo: No Fernando, no lo hagas duro por favor que me duele demasiado
-Fernando: Yo pensaba que eras mas marica y me resultaste cobardona, no te voy a clavar mi verga de una, voy a darte solo una ayudita
En lo que él decía esto yo sentía que el me presionaba por los hombros un poco hacia abajo, y después paraba, cada empujoncito que el hacía era un poquito mas de verga que expandía mi ya dilatado esfínter y créanme que el dolor era intenso.
-Fernando: Ya casi entra toda Oscarito ricooooooo, desde hacía mucho tiempo no sentía el calorcito y lo apretadito de un buen culito como el tuyo, una vez que te entre la primera vez veras como te acostumbras a mi mandarria y después vas a pedirme que por favor te coja cada rato
Créanme que el dolor era muy intenso, imaginaba que me habría desgarrado esa gruesa masa de carne endurecida, hasta que con el ultimo empujoncito pude al fin sentir que llegué al final de su tallo, en ese punto recuerden que se estrechaba un poquito y eso me dio cierto respiro.
-Fabio: Papá ya entro todaaaaaaaaa
Fabio estaba muy eufórico y en verdad a mi me temblaban como nunca antes as piernas, podía sentir los huevos de Fernando en mis nalgas y yo ya estaba volviéndome a aliviar y relajar y fue entonces que me dejé sentar totalmente sobre sus muslos ensartado como nunca antes lo estuve.
-Fernando: Viste Oscar que podías hacerlo, yo solo te ayude un poquito nada más, que delicia de culito tienes, quiero reventártelo hoy a vergazo limpio, pero primero quiero que te acostumbres, avísame cuando estes listo
En verdad tengo que reconocer que Fernando era un buen amante porque no sentí que me estaba forzando, mas bien sentía que el me estaba ayudando y conduciéndome en esta nueva experiencia para mí.
Una vez que paso el dolor le dije a mi nuevo amante que ya estaba listo y entonces Fernando me agarró por la cintura y me cambió de posición poniéndome en cuatro y detrás de mi comenzó una lenta entrada y salida de su bestia, la cual al salir hacía que se me ensanchara mi culito por el grosor de su parte central, para luego dejarme el alivió al llegar a su base donde se estrechaba un poco, en este punto ya el dolor había pasado y descubrí como mi culito era más elástico de lo que me había podido imaginar.
-Fabio: Papá ya lo tienes totalmente clavado, profe ¿Cómo se siente tener esa verga dentro?
Yo no quería responderle a Fabio porque empezaba a disfrutar de esta hazaña tan increíble y la sensación de tener tan expandido mi esfínter y sentir esa vergota entrando lentamente y saliendo me hacía enmudecer.
-Fernando: Oscarito; te voy a llamar así mientras te cojo ¿Puedo hacerlo?
-Yo: Fernando llámame como tu quieras, siento que me estas quitando una segunda virginidad esta tarde, hoy seré lo que quieras
-Fernando: Que ricura Oscarito, esto lo vamos a disfrutar al máximo, pero no hemos terminado.
-Yo: Ahora que ya estas adaptado a mi verga quiero que Volvamos a la posición que teníamos antes ¡Pero no te la saques…!
Yo obedientemente con cuidado me eché hacia atrás, el estiró sus piernas quedando yo nuevamente sobre el.
-Fernando: Ahora quiero que te des vuelta igualmente sin sacártela y quedes de frente a mi
Yo volví a obedecer sin saber lo que él estaba planeando, una vez que ya había logrado la posición, pude ver su cara de placer y lujuria al mismo tiempo, esta vez, aunque tengo que aceptar que seguía siendo una cara fea, se veía diferente porque había una ligera sonrisa malévola que me estremecía de la emisión, yo quería saber que estaba planeando y no tuve que esperar mucho para entenderlo todo.
-Fernando: Oscarito ahora que ya estás de frente a mí, quiero que estires tus piernas y te apoyes en tus brazos
Yo volví a obedecer y entonces vino lo mejor de ese momento
-Fernando: Fabio ahora quiero que te sientes sobre tu profe, de frente a él y te claves su verga tal y como él lo hizo con la mía
Esas palabras de Fernando me hicieron olvidar lo ensartado que me encontraba y se convirtieron en una electricidad que terminaron en la punta de mi pene que anhelaba penetrar ese asterisco rosadito que tanto me había gustado cuando me lo comía con mi boca, mi lengua y mis dedos.
-Fernando: Yo voy a observar la cara de mi hijo en el espejo desde aquí y quiero que veas la cara de tu macho mientras eres ensartado, quiero que ese recuerdo te quede en la mente y siempre sepas que este hombre y tu padre en este día te dieron lo que tanto has habías pedido
En verdad no se para quien era mas emocionante esta situación, pues para mi ver la carita de mi precioso Fabio en esta acción sería lo más idílico que me hubiese pasado; entonces el chico sin decir nada y en estado total de obediencia se subió sobre mi y al tomar con su manito mi verga volví a sentir esa electricidad inexplicable recorrer todo mi cuerpo, pero esta vez no pude evitar que se me escapara un profundo suspiro, nunca me había pasado esto, debía ser que como estaba tan ensartado con aquel monstruo el cual me abría totalmente de adentro hasta afuera, me había puesto muy sensible.
-Fernando: Hijo aprovecha que este profe tuyo está deseándote tanto que ya lo pusiste a suspirar
En ese momento nadie dijo nada más, Fabio lubricó mi ardiente pene y lo apuntó a su hoyito, el trataba de que entrara y yo no dejaba de disfrutar esa carita de dolor y deseo que este precioso muchacho estaba poniendo frente a mis ojos, después de unos minutos ya tenia la punta adentro y el seguía batallando para que entrara.
-Yo: ¿Fabio viste que no era una tarea tan fácil como pensabas?
-Fabio: Me duele, pero yo sé que voy a poder metérmela toda hoy
Yo ya estaba entrando en una especie de transe por lo caliente que me encontraba por delante y por detrás, esa sensación de sentir tan abierto y empotrado por mi culito y simultáneamente estar empotrando a este precioso chico me sacaba de la realidad, y al igual que me hizo Fernando, comencé a acariciarle los hombros y el cuello, haciéndole presión de vez en cuando hacia abajo para ayudarle, con cada empujoncito que le daba el chico se quejaba y a veces gemía, yo podía sentir lo delicioso de ese túnel por el que se estaba abriendo paso mi ardiente verga, era cálido y estaba super apretado, cada vez que le empujaba un poquito y penetraba un milímetro más dentro de él podía ver su carita de queja y excitación; entonces la calentura me sobrepasó y ya no me pude aguantar más, y en un impulso animal desesperado hice una gran presión sobre Fabio el cual cayó de nalgas sobre mí, penetrando con mi palo hasta lo mas profundo de su hoyito, el chico gritaba y en ese momento quería sacarse mi verga pero yo lo sujeté con fuerza y lo abracé para inmovilizarlo, sentía que yo estaba como poseído por el deseo y ya no me importaba que le doliera, quería cogerme ese culote y hacerlo mío.
-Fabio: Suéltame, suéltame, suéltame que me duele mucho, quiero parar, no quiero seguir…
-Fernando: Hijo aguanta que ya se te va a pasar el dolor, recuerda que eras virgen y nunca te habían abierto tu culito
-Yo: ¡Quiero cogerte rico Fabio, me tienes loco, ya no me aguanto más…!
Yo hablaba sin soltar ni aflojar el abrazo que le estaba dando a mi bello Fabio para controlarlo y después que pasó un rato veo que el chico deja de gritar y se empieza a calmar, no pasó mucho más tiempo cuando el muy maricón comienza a moverse circularmente y cuando le veo la carita se estaba riendo.
-Fabio: Profe ya se me paso el dolor, ahora si puedo disfrutar como lo he soñado muchas veces con mi papá; Cójame por favor, se siente muy rico tener abierto el culo y estar sentado como usted sobre una buena verga
Estas palabras fueron como una explosión en mi mente e inmediatamente tome yo el control del momento.
-Yo: Fernando y Fabio vamos a movernos y ponernos en trencito, Fabio sin sacarte mi verga ve moviéndote para ponernos los dos en cuatro sobre la cama
En ese instante se inició el cambio de posición, parecía una coreografía ensayada, Fabio y yo nos empezamos a mover y Fernando tomaba posición también al final del trencito, lo más difícil fue darme la vuelta encima de Fernando pues recuerden que yo estaba sentado de frente a él y ahora debía quedar de espaldas sin sacarme su bestia pero simultáneamente debía sostener mi verga dentro de mi nene mientras el también se acomodaba; finalmente logramos llegar a la posición.
-Fernando: Bueno Oscarito ahora después de esta deliciosa espera ya no hay escusas para no reventarte ese culo, desvirga bien a mi hijo y déjale sentir lo que hace un macho cuando esta caliente
Sin demora Fernando comienza a sacar y meter su vergota y como había estado algo de tiempo en la base que era un poquito menos gruesa, comenzó a sentir ese dolorcito sádico pero placentero de cómo se vuelve a abrir mi culo al pasar por el centro de su tronco, yo aun inmóvil tratando de reacostumbrarme siento que ya estaba disfrutando lo suficiente como para iniciar mi mete y saca también, entonces manteniendo el lento ritmo que me daba Fernando comienzo mi sacada y metidas de ese delicioso hoyito, Fabio comienza a gemir como una mujer y esto calentó mas a Fernando que comienza a acelerar sus embestidas, yo por mi parte le sigo el ritmo a mi empotrador clavando mas profundo mi guevo dentro de mi chico, esta situación al poco tiempo se volvió totalmente alocada pues Fernando me agarró de los cabellos y comenzó a bestializar sus embestidas, yo también agarré de los rubios cabellos a Fabio y aceleré mi cogida, Fabio ya no gemía, el estaba literalmente gritando, yo comencé a gritar también mientras Fernando sonaba como un animal furioso, mis nalgas sonaban con cada clavada que me daba mi amante y yo repetía como copiando el patrón con mi Fabio, cada vez que veía como mi verga penetraba por entre esas preciosas nalgotas de mi nene sentía que estaba en el paraíso y esa presión bestial de esos golpes en mis nalgas contra la pelvis de Fernando me estaban llevando a la locura, entonces en medio de este huracán Fabio dice gritando desesperadamente:
-Fabio: ¡Me estoy haciendo la paja y voy a acabar! ¡Quiero acabar, quiero acabar, que rico es acabar así!
-Yo: Mi niño maricón, aguanta que yo también ya estoy a punto de llenarte ese culo de leche
-Fernando: ¡Eres mi perra Oscarito!, ¡Maricón de mierda, te voy a preñaaaaaaaaar!, ¡Que culo tan delicioso tienes!
De pronto Fabio gritó que estaba acabando y pude sentir como al eyacular apretaba los músculos anales mientras yo seguía bombeándolo con fuerzas clavando mi estaca hasta el fondo, pero ese apretón interno que recibió mi verga hizo que no aguantara más y tomando un último aliento clavé lo más profundo que pude mi verga dentro de mi chico presionando mi cuerpo contra esas nalgotas y dejándole mi leche lo más hondo que pude, esa sensación fue extremadamente deliciosa pues Fernando seguía sus brutales embestidas las cuales se hacían cada vez mas intensas y profundas, entonces abracé con fuerza a Fabio sin sacarle aun mi pene y ambos pudimos sentir cada impacto de su padre castigando mi muy abierto culo que recibía toda la violencia de un macho a punto de explotar.
-Fernando: Aguanta perra que ya me falta poco, me quiero vaciar dentro de ti, ahora vas a sentir lo como acaba un hombre de verdad
Yo gemía y a veces gritaba en cada golpe que recibía, Fernando agarró mi cabeza incorporándome y como yo tenia abrasado a Fabio el se incorporó juntamente conmigo, Fernando trataba de besarme jorobando mi cabeza sin detener sus embestidas y de pronto veo que extiende sus brazos y nos abraza fuertemente a ambos en una penetrada final, los brazos de Fernando tomaron el abdomen de Fabio presionándolo contra mi y yo a su vez fui violentamente presionado contra Fernando quedando los tres fundidos como en un solo cuerpo, Fabio y yo al sentir la fuerza de sus brazos nos quejamos lanzando un sonido de ¡Aaaaay…! que sonó al mismo tiempo y retumbó en toda la habitación.
-Fernando: Recibe mi leche perra, préñate con todo lo que tengo; ahhhhhhhhhhh… que deliciaaaaaaaaa
Al descargar toda su hombría dentro de mi nos quedamos fundidos en ese fuerte abrazo triple un buen rato hasta que Fernando se separó de mi sacando su guevo ya menos duro y yo hice lo mismo con la diferencia que el mío aún estaba duro, pues aunque había acabado totalmente dentro de mi bello Fabio esa brutal cogida que me había dado Fernando me mantuvo caliente todo el tiempo.
Nos tumbamos boca arriba sobre la cama los tres, estábamos sudados y exhaustos, en los rostros se notaba la felicidad de haber disfrutado un momento único.
-Fernando: Oscar, ahora ya te puedes sentir parte de la familia, esta fue solo la bienvenida pues estoy seguro que tanto Fabio como yo queremos más de ti
-Fabio: A mi me gustó mucho profe
-Yo: Fabio no me digas profe aquí en tu casa, dime Oscar o puedes decirme tío Oscar si así lo prefieres mas
-Fernando: Fabio mejor dile papito Oscar porque a partir de ahora eres su perrita, así que prepara bien ese culito que te lo van a reventar a cada rato ¿Pues eso era lo que tu querías verdad?
-Fabio: Me duele un poco papá
-Fernando: Eso es normal porque nunca habías experimentado lo que podía hacerte un hombre, a Oscar también debe dolerle jajajajajajajajajaja
-Yo: En verdad que mí también me duele un poco, pero se que en un rato eso se me pasa
Después de esa conversación rendidos ante el cansancio nos quedamos por un momento callados y de pronto Fabio y yo sentimos como Fernando estaba roncando, nosotros nos echamos a reír bajito y con cuidado para no despertarlo nos levantamos de la cama y ambos nos fuimos al baño para lavarnos, mi verga estaba llena de una mezcla de excremento y semen pues Fabio no se había preparado como yo si lo hice, entonces decidimos bañarnos juntos, en el baño termine de explorar cada parte intima de mi chico y el aprovecho para hacer lo mismo conmigo; nos estábamos enamorando sin saberlo…
Fernando al rato se despertó, se bañó y el mismo nos cocinó pizza con su receta especial, tengo que reconocer que este fue el día más extraño e increíble de mi vida, cada vez que lo recuerdo revivo cada momento de él, pero allí no termina mi historia con Fernando, Fabio porque en verdad se convirtieron en mi familia y tuvimos nuevas experiencias que en próximos relatos les contaré.
Me ha enganchado tu historia…, espero que añadas mas capítulos. Además, no es frecuente, por estos lares, leer una buena redacción, con una ortografía cuasi perfecta. Salu2.
Gracias por tu comentrio mi bello amigo… Si quieres puedes ver mis otras historias BESITOS PARA TI