Mi Mejor Amigo Gabriel
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola mi nombre es cristián pero todos me dicen cris, tengo 16, mido 1.70 mts, soy una persona carismática, alegre, recochera, inteligente (no quiero presumir mucho) y también como pasatiempo practico gimnasia artistica y marsial
Gabriel y yo hemos sido amigos desde hace 3 años, cuándo lo conocí, era el tipico culi-cagado al que se bateaba a la mujer que él quisiera y que él consideraba que estubiera "a su alcance".
Él es igual de moreno que yo un poco más fuerte claro que él practica un deporte llamado Taekwando o como se escriba, mide 1.
77 mts, cabello negro pero ondulado y por las prácticas se le marcan los músculos de los brazos un poco más que los mios.
Total: Desde ahí en adelante todo normal, yo sabia mi tipo de orientación sexual, pero noselo iba a contar así de fácil a cualquiera porque de joven pueden surgir muchos problemas e inaceptaciónes por parte de eso (y con esta desconfianza que hay en esta época menos -.-).
Pasaron 3 años y como ustedes saben, cada año las personas cambian su parecer, sea físico, mental, de inteligencia, etc.
Gabriel y yo habíamos cambiado mucho.
Ya habíamos tenido varias novias antes (Él más que yo) pero las terminamos, habiamos engordado y enflaquecido por la comida y la plata, debo admitir que me encata hartar hasta no poder más jajaj, recuperamos nuestros tonos físicos habituales (yo soy un poco más delgado que él) y seguimos con nuestras típicos juegos y pendejas cómo los mejores amigos normales.
Yo antes no sentía nada por él ya que me acostumbraba a que él siempre se algareteaba a alguna chica sea del colegio o en la calle y yo lo felicitaba y le daba concejos en cómo conquistarlas pero no casí siempre le funcionaba sus tácticas de conquista.
Él y yo fuímos mejores amigos desde que nos conocimos hasta que un dia le dejé de hablar.
Les cuento: Un día estabamos en el salón de clases yo estaba concentrado en hacer las tareas que no hice ayer y me tocó hacerlas a la carrera en el salón.
Sabía que si no las hacía, me pondrían mala nota y eso a mi no me gusta.
Ese dia él llegó tarde cómo siempre y empezó a joder como él siempre lo hacía.
En eso, él me vió y enseguida de atrevido me arrebató los trabajos.
G: Oyeee y tu por qué carajos estás haciendo los trabajos a estas horas eh?
Yo: Hey dámelos que ni siquiera los he terminado y tu ni hables que los trabajos más simples tú no los haces.
G: Ah no? Para que sepas marica que hoy si los hice y eso que soy mejor que tu.
Yo: Ah si? Demuestrelo!
G: *Me parte los trabajos que habia hecho*
Yo: ERES UN.
Acto seguido le propiné un puñetazo en la cara tan fuerte que le sangró la nariz.
Él me la devolvió pegandomela en la oreja izquierda que me dolió demasiado.
Me llené tanto de ira que nos cojimos a puños, patadas, bolsasos y hasta mordiscos.
Mis compañeras gritaban mi nombre que lo soltara que lo podría matar, pero yo no las escuchaba, sólo tenía mi ira concentrada en él, dándole a entender que en momentos de tension no me molestara.
Dos de mis compañeros se pararon y me agarraron de los brazos separándome de él yo ya no tenía energia para seguirle pegando pero patadas le seguian cayendo, también debo admitir que a mi me dieron unos golpes que me dejaron muy adolorido pero no lo podria creer sabiendo que él practicaba una arte marsial más que yo no se defendió casí, pero él pegaba unos puñetazos más fuertes que los mios.
Mis compañeros al separarme de él me pegaron contra la pared y me dijeron que me calmara que nunca él salón entero me viera actuar así de ese modo.
Miré a Gabriel y ví que algunos de mis compañeros lo ayudaban y otros ayudaban a parar las sillas sorprendidos por el semejante acto que acababamos de hacer.
Yo me dí cuenta de lo que acababa de hacer y salí corriendo del salón hacia el baño de hombres.
Me miré en el espejo y pareciera cómo si acababa de salir de la guerra todo sucio y asqueado con unas gotas de sangre en el bolsillo de la camisa.
Lleno de enojo y llorando me limpié la cara y los brazos que los tenía adolorido y llenos de raspones, me peiné y me arreglé.
Me quedé ahí durante unos 5 minutos para calmarme completamente.
Ya calmado y con miedo y con vergüenza entro al salón todos me miraban callados y no decian nada al respecto.
Él profesor había llegado y ya él se habia dado cuenta de lo que había pasado.
El profesor me llamó afuera del salón para reclamarme porque había hecho semejante show en el salón si él nunca había visto en mi ese comportamiento si yo era uno de sus mejores alumnos que tenía y ahora tenía a uno de sus alumnos en la enfermería sanándose de las heridas físicas que le causé.
Le expliqué lo que sucedió y me sentía mal por eso.
Tras de eso, me dió un plazo para entregar el trabajo que Gabriel me partió pero con una calificación más baja, y, aliviado, le dije que se lo entregaría sin falta.
Pero sin nada más, me obligó a que le pidiera disculpas a él por la pelea.
Acepté y me acompañó a la enfermeria.
Entramos, y lo ví (yo estaba nervioso y tenía miedo si intentaba vengarse de lo que le hice, pero el profe estaba conmigo) estaba sentado en la camilla recostado contra la pared y mirando hacia el techo.
Lo ví y en cuanto él se dió cuenta se sorprendió y frunció el seño.
Su brazo izquierdo tenía dos moretones que le hice y en el derecho en su codo tenia un mordisco que le ocasioné cuando estabamos en el suelo dándonos, su pantalon estaba sucio de tierra.
Él se dió cuenta que lo estaba examinando y guió sus brazos hacia atrás lo cual él me dijo:
G: Qué quieres? Viniste a terminar de partirme la cara idiota?
Yo: .
Profesor: Mira Gabo (Asi le decimos), el jóven Cristián le quiere decir algo.
Suspiré profundamente y dije:
Yo: Mira Gabriel, lamento lo que te hice, no debí actuar de esa forma ni tampoco atacarte así, quiero que me perdones honestamente.
– Dije un poco avergonzado.
Gabriel no dijo nada pero el profesor dijo después de eso:
Profe: Bueno, espero que después de ese bochornoso accidente se arreglen las cosas entre ustedes y si no, los tendré que expulsar, les quedó claro?
Los 2: Si profesor.
Salimos de la enfermeria y Gabriel se quedó adentro cómo por una hora más.
Llegué al salón y continué con mis clases normalmente pero me sentía un poco aliviado por pedirle perdón.
Pasaron los dias y Gabriel y yo no nos hablabamos, ni en el salón ni en los descansos, yo a veces me daba cuenta que él me obserbaba en las clases más aburridas y cuándo yo volteaba la cara él la agachaba, estaba actuando muy raro pero yo no le decía nada, cuándo yo no iba al colegio y al día siguiente iba, preguntaba si habian hecho algo y me decian que cada vez que no iba Gabriel preguntaba por mi diciendo que porque no venia y se preocupaba, se me aceleraba el corazón y las manos me comenzaban a sudar si lo veía cerca de mi.
En las noches no podría dormir por lo ocurrido y terminaba trasnochandome me dolía un poco menos la mandibula y varias partes de mi cuerpo.
Sentía cómo si me faltaba algo o alguién para dejar de sentir tanta culpa y arrepentimiento, hasta que al fin lo superé, no por mucho tiempo
Se acercaba el dia de la entrega del trabajo pero yo ni siquiera habia empezado, en cuanto salí del colegio noté que se abecinaba un gran aguacero, hacia mucho viento y llegué rápido a mi casa.
Mi mamá me llama para decirme que no llegará en 2 días por el clima con mi hermanita y es muy peligroso manejar así, me envió algo de dinero para la comida, le dije que no se preocupará.
Total: Éra Viernes, me cambié, y me dispuse a hacer el trabajo que el profesor me mandó a hacer de una.
Ya era de noche y estaba terminando, no paraba de llover y relampaguear.
Terminé con éxito y aliviado me dispuse a prepararme algo para comer, estaba algo estresado y agotado sólo pensaba en descansar cómo nunca.
Pero para mi desgracia se fué la luz.
Prendí algunas velas y me disponía a escuchar música en mi cell cuándo oigo gritar mi nombre.
Creí que era otros "cristian" ya que en mi calle hay como 4 de ese mismo nombre (xD) pero no eran ellos era yo.
Pero quién era? Exacto.
Era Gabriel.
Había llegado en su cicla en medio de la tormenta y yo lo miraba desde la ventana:
G: CHRIISSS! CRISTIAAN!- Se sacudía la cara con sus manos para ver mejor entre la lluvia – POR FAVOR SAL.
NECESITO HABLAR CONTIGO!
Salí con una franelilla blanca y un pantalón naranja a la terraza que, por cierto, tenía techo.
Él estaba ahí parado llevaba una camiseta gris y una bermudas cafés que se veía bién vacano cuando se mojaba y está ahí, detrás de la reja y me observó cómo salía de mi casa y le pregunté con tono serio:
Yo: Qué quieres Gabriel?
G: Necesito hablar contigo chris, por favor! No creo que aguante aquí afuera me voy a empapar por completo.
Yo: Y para que? Si ya lo que teniamos que hablar ya pasó Gabriel.
Nosotros no tenemos nada de que hablar, me oiste? Y si piensas que me vas a rogar para que te haga alguno de tus planes o alguna tarea del colegio estás muy equivocado.
Así que lárgate! – le dije con tono serio, pero él no quería eso por lo que dijo:
G: No Chris! No quiero nada de eso, quiero que me escuches, por favor, déjame entrar!.
Yo: Ya te dije Gabo! Nosotros ya no somos nada así que vete por favor!- Le dije mirándolo a los ojos.
Pero su cara reflejaba ruego, vergüenza, algún tipo de emoción que no podia ver por culpa de la oscuridad.
Pero él me dijo y me advirtió:
G: BUENO.
! SI NO ME ABRES ME QUEDARÉ AQUÍ SENTADO HASTA QUE SALGAS, PODRÁN PASAR 5 DÍAS PERO ME QUEDARÉ AQUÍ SENTADO, MOJÁNDOME HASTA QUE HABLES CON MIGO CRISTIÁN! – Su voz cambió y eso me asustó un poco.
Sabía que si no le habría se quedaría allí sentado empapándose más y más de la lluvia que se ponia más peor y que a parte de eso le podría pasar algo malo.
Estaba en mi responsabilidad.
Yo: Esta bién.
Entra – No dijo nada.
Coji las llaves dejé que entrara con su cicla y cerré.
Entré primero y le dije:
Yo: Bueno, quedate aquí mientras busco una toalla.
Estás empapado – Se quedó callado y fuí a buscar la tolla.
Él sólo se quedó ahí parado mientras yo me le acercaba con la toalla para dárselo.
Me pusé enfrente de él para escucharlo mientras se secaba le dije – Escucha Gabo.
– un poco avergonzado – Sé que hemos tenido muchas diferencias y sé que hemos sido mejores amigos y todo eso pero ya te dije que lo sentía y si querías que te dijera eso por segunda vez, pues te lo digo otra vez, de manera oficial.
– Lo miro a los ojos y siento cómo su respiración le pega a mi boca aunque estubieramos separados, no lo podia evitar, me exitaba mucho verlo ahí todo mojado por la lluvia, agitado, y parado en frente de mi mirándome fijamente mi pene empieza a despertar lentamente (Uff eso no se vé todos los días jajaajaj) pero él habla:
G: No.
Yo no vine para que me dieras otra disculpa chris.
Quiero que me perdones por haberte tratado mal, por hablar mal de ti, nunca debí romper ese proyecto que significaba más para ti.
Yo: Y tu lo rompistes Gabriel, no debistes ser imprudente.
G: Lo sé.
Yo: Y si no me quieres hablar bien! Lo entenderé y seguiré con mi vida normalmente – Me disponia a recoger las llaves para que se fuera en la lluvia, pero de repente el me toma de la muñeca, me atrae hacia él rápidamente y me abraza cómo si nunca hubiera abrazado lo cuál yo le digo impresionado echandome un poco para atrás para que no sientiera mi erección – Hey! sabes que estás todo mojado y me vienes a abrazar con tus pantalones mojados!
G: Chris.
Perdoname si? No sé lo que haría si tu te fueras, me asusta cuándo no vienes al colegio, y me siento horrible por lo que te hice.
Bro, lo siento mucho.
Yo: Ok gabo, pero sueltame que me está mojando tu ropa – Gabriel me guía con sus manos sosteníendo mis brazos llevandome más hacia la oscuridad de mi casa que no había llegado la luz – Hey qué haces?
G: Shhh.
– toma mi barbilla con su mano y me dirige hacia su boca haciendome que lo bese.
No podría creerlo yo me quedé paralisado y por la paralisis accidentalmente abrí mi boca un poco más causando que su lengua entrase cómo un intruso, cerré mis ojos.
Mi erección estaba por completa y no queria que él se diera cuenta, tenia que controlarme.
Yo: Gab-o *Beso* – Por-favor *Beso* Me acercó más a su cuerpo.
Intenté separarme pero dios.
sus benditos brazos apretaban mi espalda! Me tenía encerrado entre sus fuertes brazos, mi erección ya tocaba, rozaba, su entrepierna causando que jadeara más mientras me besaba.
Me dejé llevar por él, me levanta la camisa para comenzar a quedar sin ropa y no paré de quitar mi vista en su cara, tan exitada y tan varonil, uff me tenia a mil.
Caminamos hacia mi habitación y caigo en la cama boca arriba ahí me quito toda la ropa hasta quedar en bóxer y él también.
Se coloca arriba de mi y siento su erección junto a la mía, mi verga estaba que rebentaba de la enorme exitación que sentía.
No parabamos de besarnos lentamente mientras nos tocabamos todo el cuerpo y jugueteabamos con nuestras lenguas.
Gabriel bajó hasta mi cuello para besarlo y morderlo.
Dios! Me sentía en la gloria y gemia.
Me causaba risa cuando me suspiraba en el cuello, bajó aún más y se detuvo en mi boxer y mi erección que gritaba por salir, la acariciaba por encima del bóxer y le soltaba un poco de saliba para provocarme aún más.
Bajó mi interior y mi verga salió disparada hacia él, mi verga mide aprox.
16 cm y es delgada.
Gabriel estaba nervioso porque era la primera ves que chupaba una verga a si que lo ayudé a hacerlo, abrió su boca y se la metió en su boca, gemí cuándo él me la mamaba y la mamaba bien.
Yo: Un poco más rápido por favor.
Empezó a darle más rápido a la mamada y sentia un punto en el que ya me queria venir porque ya mi pene le salia bastante precum, le dije que parara que era mi turno.
Se bajó su boxer y ví su verga, mismo tamaño que la mia pero gruesa y rasurada, es la verga más hermosa que he visto en mi vida, la olí y olia a puro hombre lo que me exitaba bastante, la agarre con mis manos y le hice una lenta paja, después me la metí en la boca, empezaba lentamente igual que él lo hizo, lo miré y tenia la boca abierta dándome lentamente.
Después se la mamé rapidamente y no paraba de gemir luego se detuvo y me lubricó con sus dos dedos para que me estimulara, me puso en cuatro, se colocó el condón y se aproximó a mi anito que estaba bien dilatado:
Yo: Bro, Por favor, despacito que esta es mi primera vez.
G: Ok.
Te daré el mejor masaje anal que allas sentido – me besa la mejilla.
En eso mete la cabeza, siendo un leve ardor en mi ano cuando entra, Gabriel se quedó quieto por algunos minutos y fué enterrando toda su verga en mi.
Gimió victorioso al saber que desde ese momento ese culito era suyo.
Empezó a bombearme lentamente, yo sentia mucho dolor, me sentia lleno, se sentía como si me querian partir en dos ó algo parecido pero luego ese dolor desaparecia y quedaba miedo mezclado con placer.
Bajé mi espalda y mi cara poniendo todo mi culito a su disposición yo aún no podría creer que mi mejor amigo me estaba cojiendo en ese momento, gemiamos considerablemente y de vez en cuando decía su nombre:
Yo: Aghhhhh Gabo-oh-oh Mmm.
G: Chris. Oh.
Me cansé de esa posición y me colocó boca arriba.
Subí mis piernas en sus hombros y colocó su verga en posición, le causaba mucho morbo a él metiendomela toda y después sacándola por completo para ver mi cara de satisfacción, se reía al ver esas muecas que hacía pero ahí venia lo bueno.
Esta vez, su verga entra completa mente y sus embestidas son al principio suaves pero profundas dándome a entender que ese culito es de él, después sus bombeos son más frecuentes y no paraba de gemir mirándo hacia arriba y embistiendome cada vez más fuerte causándome a mi una nueva erección esta vez y gimiéndo con él.
Gabriel hechó a un lado mis piernas y bajó hacia mi para besarme, sus besos junto con sus embestidas fueron la mejor parte.
Colocó su brazo derecho por encima de mi cabeza y con su mano agarraba mi cabello para asegurarme y con la izquierda me agarraba el hombro.
Estabamos unidos el uno encima del otro.
En un momento de gloria me dice al oido exitado:
G: Chris. Ohh. Ahhh.
Yo: Ahh-Mmm Gabo-oh.!
De ahí en adelante sus embestidas aumentan más y más y su respiración se aceleraba en mi cuello, sacó su verga de mi culo:
G: Chris. Me ven.
Ohhhh Aghhhhh! Dios! Oh si. oh.
Y 4 chorros de semen calleron en mi abdomen.
Yo de la calentura que tenía me hacia la paja y solté una gran determinada cantidad de semen que perdí la cuenta.
Jamás había eyaculado tanto semen en mi vida.
Nos limpiamos con nuestras misma ropa y nos dormimos ahí, echados uno abrazando al otro.
Sentí una hora después que la luz llegó y encendí el ventilador porque hacia mucha calor la lluvia habia sesado un poco pero lloviznaba, y además era muy tarde así que me acomodé y satisfecho dormí junto a Gabriel.
Al día siguiente en la mañana desperté y me dí cuenta de que Gabriel no estaba en la cama, la lluvia seguia dándose pero un poco menos intensa que la de anoche, me levanté y me percaté que olía a quemado éra Gabriel tratando de hacerme el desayuno.
Yo: Que haces pendejo? – En tono sarcástico.
G: Hola! Buenos días, te preparé el desayuno.
Qué tal quedó?
Yo: Mmm horrible.
jajaj Mentiras! A la próxima no te pases con el fuego.
Si?
G: Si jejjejej – me hace una pregunta un poco avergonzado – Y.
cómo está tu.
? ya sabes.
Yo: Me duele un poco menos.
Valla que te pasastes un poco anoche.
G: Si? Jajajaj perdóname es que no le doy así a cualquier persona jajaja – Se acerca a mi y me da un beso – Gracias bro por perdonarme no sabía lo que haría sin tí.
Gracias mi hermanito- Le sonrío y le digo lo mismo y me da un beso en la frente.
Luego de eso escampo un momento pero no tardaría en llover otra vez así que Gabriel cogió su bicicleta y antes de irse se despidió haciendonos juegos de manos y saludos:
G: Hey Chris gracias por todo.
Los mejores amigos -diciendome al oido – pero con derechos -y me giñó el ojo- Adiós bro!
Yo me quedé sonrojado por lo que dijo pero satisfecho y feliz por lo que acababa de pasar porque ahora nos miramos con ojos diferentes y ese será nuestro secreto: De amantes.
Espero les guste mi relato gracias por comentar.
Se cuidan.
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