Mi mejor amigo – los celos –

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por pasivo22103.
Hola amigos soy armando, gracias por todos sus comentarios, sé que son para que yo crezca, esta historia es algo larga pero si te gusta el romance léelo completo, pero  si eres de las  personas que solo busca sexo en el relato,  este relato no es para ti o tal vez si quieres ve hasta más de la mitad del relato en donde empieza el sexo  ya sin más  que decir empecemos (tiempo de lectura 10 min)   hace unos días cumplí 20 años ya jejeje pero bueno, continuando con la historia que me paso con Alberto, después de mi primera vez con él, todo surgió normal, terminamos el semestre los dos con buenas notas, en navidad no surgió nada ya que él se  fue a  uno de los  municipios de mi estado y regreso hasta  el inicio de clases, ya  estábamos en 6 y último  semestre y fue ahí donde tuve que  cursar una materia que reprobé cuando yo estaba en 4, ya estando el primer día en el salón de la materia que recursaría como era de esperarse todos se me quedaron viendo, pasaron las clases y ya tuvimos que formar  parejas para hacer un trabajo ya que es costumbre en las escuelas de mi  amado país y estado, entonces me formaron con un chavo  de 17 años su nombre es José, es varonil,  mide 1.75 (muy alto para su edad) es blanquito, delgado  pero está marcado, y lo que resalta de él son sus brazos que están muy grandes ya que trabaja con sus papas en el mercado de mi ciudad, al principio nunca pasó por mi mente que era bisexual, yo podría decir que era guapo sí, pero estaba enloquecido con Alberto, y  que a José  solo lo veía como un chavo guapo,  pasaron 2 meses y aún no volvíamos a tener relaciones con Alberto a pesar de que yo iba  a su casa, solo nos besábamos y teníamos faje jajaja pero  hasta ahí, pero no porque no queramos si no que estábamos ocupados con el inicio de semestre, fue ya a mediados de marzo en donde sucedió lo que les relataré:

La clase que reprobé lo tomaba de 12 a 1 de la tarde, y después seguían mis clases normales, recuerdo perfectamente, fue un jueves, la maestra no llego a dar la clase, entonces me fui con José (para eso ya nos habíamos hecho muy buenos amigos pero a Alberto yo no le había hablado de José) fuimos a un parque que  está  cerca de la escuela ya que aún lado venden unos helados muy ricos y José me dijo que me invitaría, ya estando en el parque me encuentro con una escena que no me agradó mucho:

(Al: Alberto J: José  A: Armando)

J: que te pasa armand
A: nono nada Jos, ven vamos a saludar a un compañero de mi salón

La escena que vi fue que Alberto tenía abrazada a una chava de mi salón que se llama esmeralda, entonces fui con José hasta donde estaban ellos, Alberto no se dio cuenta ya que estaban en una banca que están de espaldas, entonces le dije

A: qué onda Alberto

Cuando le dije eso dejó a esa tipa se paró y Alberto solamente se me quedo viendo al igual que yo me le quedé viendo con una cara de encabronado y solo le dije:

A: no sabía que ustedes andaban
Al: no, no andamos solo estábamos platicando, yo ya tengo a otra persona
A: ahh si claro, mira él es José un amigo que hice en el salón donde recurso, José él es Alberto, un compañero de mi salón

Alberto saludo de mala gana a José, solo se le quedo viendo

Al: y donde vas con este wey (cabe destacar que Alberto es una persona MUY celosa, al igual que yo)
A: Tiene nombre Alberto, pues me invito un helado y como no entro la maestra hoy pues le acepte, bueno en fin, nos vemos al rato

No  me despedí de el y hable a José a para irnos, durante  el transcurso de la tarde , no hablé a Alberto e incluso  no me senté junto de él, me senté con otros compañeros, trataba de  evitarlo, estaba enojadísimo con él , ese día a la hora  de la salida no lo espere ya  que salí primero del  laboratorio, sus mensajes no los contestaba, así pasó el viernes y el fin de semana,  fue el lunes que llegue a mi clase que  recursaba y vi a José y me fui a sentar con él , platicamos mientras entraba el profe, él era muy chistoso y me hacía reír mucho,   terminó la  clase y salimos  los dos y él  me dice

J: ¿qué clase tienes armand?
A: ahorita tengo computación, dichoso tú ya te vas
J: jaja si, ya nos vamos a separar de nuevo
A: tranquilo ya nos veremos mañana
J: si ya se es verdad, pero pues si quieres vamos te acompaño a la sala de cómputo y te espero a que llegue el profe
A: ¡sí!! Vamos, (Entre mi dije, que me iba a vengar de Alberto jaja sé que estaba mal en usar a José, pero mi enojo y venganza pudo más)

Llegamos a la sala de cómputo y pasaron como 5 min y veo que llega Alberto, y nos ve, ve que nos estamos riendo José y yo, y como a José ya se lo había presentado él lo ve y lo saluda

J: mira ahí viene Alberto, qué onda  
Al: hey

José lo saluda y yo solo me le quedo viendo

Al: perdón si interrumpo algo, yo creo que mejor me voy

Alberto se fue a sentar a otra banca que estaba ahí cerca, pasaron 15 min y llega el prefecto a decirnos que la maestra no vendrá por complicaciones médicas, y recuerdo que ese día después de esa clase nos tocaba una hora libre y le dije a José

A: ¿oye Jos vamos acompáñame a comer, ya ando con hambre, o ya te tienes que ir ayudar a tu papá?
J:  amm no, jeje y si me regañan ya ni modo, pero valió la pena

Hasta ese momento no había captado todas las indirectas que daba José, pero todo lo escuchó Alberto y se enojó más, lo que restaba de la clase y la hora libre me la pase con José, me hacía  reír mucho y Alberto ahí mismo fue a comer y solo me miraba, ya cuando me despedí de José le di un abrazo, ya que él es más alto que yo y me alzo y me giró a pesar de que estoy gordito si me sostuvo ya que es fuerte e incluso creo que más fuerte que Alberto (eso lo comprobé, más adelante les contaré) y cuando me bajo le di un golpe y lo volví abrazar y todo eso lo hizo para vengarme de él, de Alberto.
Durante toda la tarde lo seguí evadiendo ya hasta la hora de la salida me alcanzo a donde estaba y me jaló del hombro y me dijo:

Al: me vas a seguir ignorando, ya ni los mensajes me contestas, vamos hablar, ni me dejaste explicarte ese día
A: ¿qué quieres, hablar qué? Ve hablar con esa pendeja
Al: ya amor vamos hablar enserio, me estás haciendo sufrir, acompáñame al malecón y ahí hablamos (ya que el malecón de nuestra ciudad queda cerca de nuestra escuela)
A: está bien vamos

Durante el transcurso del camino no le hable, llegamos y me senté en un lugar donde no había gente

Al: ya me dejarás hablar?
A: pues ya lo estás haciendo no?
Al: ya bebé, no te enojes (me trato de agarrar la mano pero lo quite)
A: ve agarrarle la mano a esa estúpida, abraza a esa zorra, ve con ella no sé qué haces aquí conmigo, es más, ni se por qué vine
Al: ya tranquilo armando, mira me estás hablando de ella, pero que tal tú con ese  pendejo de José, lo abrazas te abraza y te gira, que tal con ese idiota,  ya no quiero verlo porque le voy a rajar su cara, está tocando algo que es mío
A: que te pasa él puede abrazarme y hacerme lo que  él quiera, así como tú con esa  zorrita
Al: mira ya ese día ella sola se arrincono a mí, la traté de rechazar pero insistió y ya no pude hacer nada, bebé créeme enserio, solo a ti te amo, ya me hierve la sangre al verte riendo con  otro pendejo
A: no se Alberto, lo pensaré y ya es  todo?
Al: si

Agarre y me fui, toda la semana me estuvo contentando, fue hasta el viernes que ya estaba insistiendo mucho y como recompensa me dijo que fuéramos a la playa, para ya no hacerles larga llegamos a la playa estuvimos un rato los dos ahí comiendo y haciéndonos cariñitos, y con esos cariñitos él ya tenía la verga al full y yo solo se lo agarraba discretamente y en eso él me dice:

Al: ¿oye bebé vamos ya a meternos al mar, ya no ves cómo ando?
me enseño su short y como ya les había dicho la tenía piradísima
A: No voy ve a decirle a esmeralda que se meta contigo -.
–
Al: ¿hay vas a empezar?
A: jajaja no es cierto bebé, vamos, pero vamos corriendo por que uff se te va a notar mucho que la tienes parada

Dicho eso él se fue corriendo a meterse al mar yo fui caminando al llegar nos fuimos al fondo de la playa, yo no sé nadar mucho así que el me agarraba por detrás y me untaba su verga  en todo mi culo, yo solo reía, todo lo tratábamos de hacer con mucha discreción, para eso, eran las 4 de la tarde casi no había nadie dentro del mar  y la marea ya estaba alta,  llegamos hasta un punto  en donde hay una especie de  barda que divide la zona que esta considerablemente alta a la zona que ya es profunda, pero en esa parte te puedes sentar, cuando llegamos ahí, él se sentó y yo me senté  a la de él, Alberto empezó acariciarme la espalda poco a poco y fue bajando hasta mi  culo en donde también metió su mano y me lo empezó acariciar y yo le  dije:

A: Alberto tranquilo ya  cálmate estamos  en un lugar público nos pueden ver
Al: hay bebé quiero metértela aquí mismo es uno de mis fantasías, ándale deja  que te lo meta
A: no Alberto nos pueden descubrir y sería una  vergüenza pasar  eso
pero cuando dije eso, el metió uno de sus dedo en mi culo yo solo lo disfrute y Alberto lo  siguió  metiendo,  ya yo me había excitado así que baje hasta  su verga le baje su  short y  aun con el agua salada del mar me metí  su verga, ya parada a mi boca solo le  di como 3 chupadas suficiente para que él se calentara más, cuando salí del agua solo me viro bajo mi short y de una me la metió hasta el fondo, yo solo grite y el me mordió mi espalda, (la ventaja es que estábamos lejos de la orilla de la playa y no se escuchó y  como había un concierto de un grupo local ahí estaba la  mayoría de la gente) yo solo agarraba sus piernas y las apretaba ya  que el culo me ardía un poco no sé si era por la sal, pero la estaba pasando genial, yo solo tenía que aguantar los gemidos y calmar mis expresiones de placer, Alberto solo me seguía dando  despacio pero por ratos me daba unas fuertes envestidas, ahogaba mis gemidos, y Alberto ponía su cabeza en mi espalada y ahí rugía de placer hasta  que  me  dijo:

Al: Te amo Armando, tienes un culito delicioso, uff nunca quiero dejar de cogerte, siente mi verga bebé
A: si mi amor, me encanta tu verga, dame más, uff

Alberto tardo como 5 min más cogiéndome en la misma posición, ya que no podíamos cambiar,

Al: me vengo bb, agggg

Alberto se vino dentro de mi culo, se quedó abrazándome y poco a poco salió su verga de él y con ello supongo que la leche que se revolvió con el agua del mar, yo solo me vire y le plante un beso profundo pero rápido, lo abrase y le dije.

A: Te  amo Alberto, te creeré todo lo que me dijiste, pero quiero que te alejes lo más posible de esa pendeja,  entendiste, porque por lo visto quiere algo contigo, si es bonita y guapa, pero tú eres mío, entendido?
Al: Si bebé, pero tu harás lo mismo con ese pendejo de José, no me gusta cómo se tratan y ya te dije cuando se me acabe la paciencia y si lo vuelvo a ver contigo haciéndose cariñitos o cosas así,  le voy a romper su cara
A: -.
– Alberto , José es hetero no sé de qué te preocupas, él  nada que ver conmigo, tranquilo bebé, además no puedo dejar de hablarlo es mi compañero  de salón y de pareja  para los trabajos
Al: está bien, pero lo quiero lo más lejos posible de ti, entendido?
A: si bebé está bien

Nos salimos del agua y nos fuimos a la palapa en donde estábamos, al llegar al lugar me encuentro con que la palapa que estaba aún lado lo desocuparon y la persona que lo ocupo, quien creen que fue?

Muchas gracias amigos por leer mi relato, sé que estuvo muy largo, pero no quise evadir algunos detalles, si no les gusto que fuese muy largo, díganmelo y la próxima historia iré más al grano, en el próximo relato les contaré como Alberto me llevo a una Sex-shop y compramos un juguetito que hizo realidad una fantasía mía.