Mi Novio, Mi hijo y Yo (Gays)

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Acostadoyflojo.
me llamo Ricardo soy bisexual, viudo, tengo actualmente 35 años y un hijo de 10.

la historia comienza básicamente hace 10 años, cuando conocí a Juan, un muchacho muy guapo, era alumno del colegio donde yo trabajaba.

yo tenia 25 y Juan 16.
fue un amir a primera vista entre ambos, yo fui su primera vez y desde entonces mantuvimos una relación amorosa secreta.

tristemente mi esposa murió 5 años después, yo contaba con 30 y mi Juan tenia 21, ya estábamos mas que formales.
yo quede devastado con la perdida y al cuidado de mi pequeño de casi 5 años.

Juan se mudo a vivir conmigo, para mis vecinos era un sobrino y para mi familia era un amigo al que quería ayudar.
y el me ayudaba con las cosas del hogar y con Mario mi hijo.

uno soy delgado, blanco, no muy alto, de cuerpo normal, soy pasivo con los hombres por obvio Juan era el activo de la relación.
era un muchacho trigueño, tan o mas alto que yo, practica béisbol y esta en la universidad casi finalizando.

todo iba bien, Juan quedaba con marío hasta que yo volvía del colegio y eramos una familia feliz.

hasta que un dia salí mucho mas temprano del trabajo, recuerdo era poco pasado el medio dia, y llegue sin avisar, en ese entonces Mario tenia 7, Juan 23 y yo 32.
entre a la casa y por el silencio pensé no abría nadie, pues a veces ellos iban al parque.
me quite los zapatos y deje mis cosas en una mesa y me decidi a tomar una ducha e ir con mi familia.

subí las escaleras y al llegar arriba escuche ruidos, eran una especie de quejidos, de mi habitación y según podía apreciar era Juan.
"a si nene mama lo, si que rico lo haces, aprendiste rápido" lo primero que pensé fue que me esta poniendo los cuernos y lleno de rabia me dispuse a enfrentarlos, pero al abrir la puerta lo que vi fue totalmente diferente
Mario estaba desnudo, arrodillado en la cama entre las piernas de Juan, este también desnudo con sus manos tras su cabeza y los ojos cerrados concentrado en el placer que debía sentir.
Mario estaba mamando la verga de Juan (20cm de largo x 5cm de grosor).

no podía creerlo, me quede petrificado al ver a mi hijo de 7 años haciéndole sexo oral al hombre que yo amaba, un hombre de 23 años, ver suso labios rosados abrirse al máximo para tragar la cabeza y un poco mas mientras sus dos manitas blancas masajeaban el moreno tronco
– pero Juan, que significa esto.
?.
no pude seguir cayado y hable sin pensar en nada
– mi amor, no es lo que crees, es que Mario tenia curiosidad por lo que tu y yo hacemos y me deje llevar, perdoname
Juan alterado, Mario llorando y yo enojado.
explicaciones iban, insultos venían y lágrimas mediaban.
paso todo el dia y llegada la noche con algo mas de calma
– pero tu estabas disfrutándolo Juan, es un niño.
eso esta mal
– me deje llevar y en verdad si estaba disfrutándolo tu hijo mama tan rico como tu
– pero lo obligaste, el no sabe de esas cosas
– el nos a visto Ricardo y quiso saber que se sentía.
y yo acepte.
y si tu me das permiso quisiera ser yo quien lo enseñe antes que alguien mas que podría dañarlo lo haga.
tu estarás presente y veras que no abra daño.

cada minuto me convencía y con sus caricias y besos termine aceptando.
me sentí el peor padre del mundo, pero el amor por Juan era al parecer mas grande.

fuimos juntos al cuarto de Mario.
Juan entró y yo espere afuera mientras el hablaba con mi hijo.
al cabo de unos minutos Juan salio y me dijo "ya, todo esta listo".
ambos entramos, yo no dije nada, me senté en un sofá que había y me dispuse a observar todo desde un rincón.

Mario estaba en calzoncillos y Juan en bóxer.
comenzaron acariciándose, a Juan se le notaba una su dirección y a mi hijo un pequeño bulto entre su pierna.
se besaban y acariciaban y entre tanto y tanto quedaron desnudos.
Juan se arrodillo y abrió sus piernas, dirigió a mi hijo hacia abajo y le acerco su caritas al pene enorme, Mario lo tomo y abriendo su boquita comenzó a chuparlo.

yo pude ver como mi niño disfrutaba comiéndose esa verga, y la verdad no podía cuñparlo pues es una de las mas hermosas y deliciosas vergas del mundo, larga con una curva hacia arriba, lampiña y de cabeza acorazonada, venas brotadas pero suaves.

mientras Mario mamaba Juan metía sus dedos ensalivados en su culito.
(después supe que ya lo habían intentado antes).
dos dedos entraban y salían.
gemidos de ambos se escuchaban y yo.
? con mi verga entre mis manos dura, palpitante y excitado me masturbaba.

Juan se puso tras Mario y supe que era momento de la penetracion, la posición era perfecta para ver cada momento de la penetrada.
fueron 2,3 o 4 intentos hasta que la cabeza de esa hermosa verha pudo entrar
– aaaaayyy duele mucho
– tranquilo nene aguanta, después veras que solo te va a gustar.

yo pensaba que máximo media verga entraría, era imposible que un niño de 7 años pudiera aguantar una descomunal verga.
lmo esa.
pero cuando llego a la mitad en ves de retroceder Juan lo tomo de su caderita y con un fuerte movimiento lo empaló completamente.
20cm gruesos estaban dentro de mi niño quien se quejo de firma sonora por el dolor.

cuando sus quejidos fueron desapareciendo Juan comenzó a moverse suavemente sacando todo el pene dejando la cabeza dentro para luego con un solo movimiento volverlo a meter hasta el fondo.

15 o 20 minutos después nos quejidos de dolor se iban transformando en gemidos de placer, varias posiciones fueron practicadas pero a Juan le gustaba mas en 4 pues así podía dominar toda la situación y su verga entraba completamente en el culito de Mario.

cabe destacar que Juan era casi el doble de tamaño que mi hijo y con el contraste de color y tamaños el morbo que veían mis ojos era impresionante.
era delicioso verlos follando, sus cuerpos llenos de sudor, jadeantes y moviéndose.

– ah ya acabó voy a terminar, te Llenaré el culito de mi lechita sabrosa.
ah ah ah aaaaaaaa.

se estremecía y convulcionalba y al acercarme vida como su verga palpitaba clara evidencia de que estaba eyaculando.
al terminar cayó sobre el cuerpo del niño quedando ambos exhaustos.

yo quien seguía masturbandome cerca de ellos no aguante mas y eyacule salpicando los a ambos con mi semen.

a partir de esa noche los tres dormimos juntos y Juan siempre tiene dos culitos a su disposición para satisfacerlo, a veces juntos y otras por separados.
ya llevamos 3 años con esta relación y los tres somos muy felices