MI NUEVA PERRITA
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
A mi no me engañó su aspecto, siempre intuí que tras aquel hombre había una hembra deseando despertar, aparecer, empecé por darle confianza, conversar en la terraza, de temas mundanos, pero a la vez, me di cuenta, que yo le atraía, lo ocultaba claro, pero las miradas perdidas el subconsciente dice mucho más de lo que nosotros hablamos, así supe que hacía nada mas y nada menos que era divorciado hacía 8 años, tenía un apartamento alquilado en el otro extremo del barrio donde vivo, se hacía ante mi el hombre seguro de si mismo, pero mi intuición me decía que todo era fachada, que ya lo había vivido otras veces para que intentara engañarme con los demás cliente funcionará como con sus vecinos pero no conmigo.
Es simpático, siempre la sonrisa en la boca por su trabajo, de esa manera fue pasando el tiempo los meses y empecé a decidir que le iba a atacar, pensando cuando y donde, me salió el momento sin esperarlo, esa noche llegué al bar a ultima hora me tomé una copa mientras cerraban y él me decía que tenía el coche en el taller, e brindé a llevarlo a su casa, apenas a 1.
000 metros, de allí,he de decir, que yo en el sexo soy muy dominante, además de que una vez metido no suelto a mi presa, no me gusta me dejen con la polla dura y se vayan, pues bien, entramos en mi coche y él iba con el uniforme de camarero, llegamos cerca de su portal y vi un aparcamiento que ni pintado, bajo uno de los arboles de la acera lo que hacia que hubiera una enorme oscuridad, le dije que esperara que nos fumaramos un cigarrillo charlando, mi nabo estaba a tope, charlabamos y sin él esperarlo cogí su pequeña mano izquierda y se la puse en mi pantalón en mi bulto, yo mismo se la dejé ahí aguantada él sorprendido sin hablar, sin saber que hacer, mi mano fue a su muslo pero pronto intento ir atras a su culo, pero asi como estabamos era imposible, él siguió mudo hasta hipnotizado con su mano quieta en mi bulto, hasta que le dije ve atrás, nunca vi a alguien tan nervioso, casi tartamudeando me contestó
– Yo nunca he hecho nada de esto
Pero no me dijo que no lo deseara se lo repetí, ve atrás yo quería que pasara por entre los asientos de mi coche al asiento trasero, lo hizo sin dejar de mirar por los cristales, yo tuve que salir del coche rapido y entré ahora mas seguro, pero él era un flan, al principio intentó que no le sobara el culo, su mano insegura solo acariciaba el pantalón a veces otras las quitaba como asustado pero yo estaba ya lanzado, conseguí con esfuerzo dejarle el pantalón, algo bajado, lo justo para que su culito quedara al aire, era peligrosisimo donde estabamos y como `pero mi calentura era mayor, apreté una nalga otra, él empezó a cambiar de actitud, dió gemiditos empezó a dejarse llevar, me aproveché, le aparté el slip, mis dedos los mojé en saliva, los pasaba presionando su ano, él gemia más hasta terminar a 4 patas en el suelo del coche yo sentado mi mano en su espalda y la otra "trabajando" su ano, hasta que introduje un solo dedo, gimió, no habia visto gemir a un tio de aquella manera por hacerle aquello, lo que me hizo proseguir y prolongarlo, empecé a mover mi dedo dentro de su ano lentamente pero firmemente, sus jadeos iban n aumento no pude contenerme y con mi otra mano le dí un fuerte azote en una de sus nalgas, al poco sentí como se corría, su ano se abria y cerraba vibrantemente, el jadeaba hasta que quedó inmovil, le saqué el dedo, él en un instante se subió el pantalón sorprendiendome, le dije para ir a mi casa no me dijo en ese instante solo queria irse, salir de allí, me cabreé, se echó literamente a llorar y tuve que dejarlo salir del coche.
A pesar de no haberme corrido, habia sido una experiencia de lo mas excitante, para mi, distinta cuando ya en casa se me pasó el cabreo de no haber conseguido nada en ese momento, hice recuento del momento, le dije se fuera atras obedeció, le excitó le diera ese fuerte azote y se corrío rapido a 4 patas como una perra de una forma que yo nunca habia visto, mi conclusión era un pedazo de sumisa, le iban la "dominaran", pero cuando, se corría, le entraba el pánico de ver lo que realmente era, mmmmmmm pensé el macho que la educara para él, se lo iba a pasar en grande con una perrita así.
Al otro día como si no hubiera pasado nada estaba allí, solo que él me sorprendió a mi, cuando estuvimos a solas me dijo que él nunca habia estado con otro hombre y que debiamos olvidar lo pasado la noche anterior, no hice caso sino lo que busqué fue de nuevo el momento adecuado, lo encontré pocos dias después el libra dos dias, en la noche suele ir a un solitario pub del barrio a tomar una copa, allí fui yo, era lunes, habia pasado mas de una semana de lo ocurrido, él me vio, en parte se le cambió la cara y yo pedí la copa y me senté junto a él, no le hablé de nada de sexo solo de futbol, hasta que nos fuimos, el pub esta en un parque, cuando me vi seguro y alejado de todo, sin esperarlo lo agarré y lo metí entre unos setos, él hipando, diciendo, dejame pero con voz callada, yo lo llevaba como a un pelele sin esforzarme apenas literalmente con mi fuerza lo obligué a quedarse inclinado intentando defenderse aunque inutilmente, le bajé el pantalón hasta los muslos y el slip, empecé a darle azotes a la vez que le decia ahora voy a hablar yo, gritó del dolor, a la vez trabajé de nuevo su ano hasta hasta que le introduje el dedo, fue como un calmante para él, ahora fue pasando a dar gemidos estaba scuro pero sabía que le habia azotado fuerte el culo, que debia estar rojo, quedó inclinado inmovilizado por mi, con mi mano me bajé la cremallera, saqué mi verga y empecé a darle en la cara con ella, no quería chuparla, yo seguia frotando interiormente su ano, él cada vez más excitado, ya sin defenderse, hasta que literalmente le obligué a metere mi polla en la boca, todo el glande y una equeña parte mas, solo la tuvo metida no la chupaba, entonces me movi como si le follara la boca y saqué mi dedo de su ano le di de nuevo un par de azotes cuando vi a lo lejos una pareja en dirección a nosotros, aunque claro no nos veia, me metí la polla en el pantalón, lo erguí le subi yo mismo el pantalón le dije se lo abrochara, en ese momento me dijo que lo dejara que se iba a casa, la voz era llorona, solo que esta vez, mi mano se puso en su cabello tiré fuerte y le dije que se iba a ir a mi casa y terminé diciendole y punto.
Incluso yo interiormente iba sorprendido, no dijo nada mas solo caminaba a mi lado callado, sumiso, obediente, ya sabía ante quien estaba yo, que clase de hembra era, en casa tengo ropa de mujer de "otras" zorras que la dejaron allí, yo en una noche pensaba, tras lo ocurrido y caminando hacia mi casa, hacerle de todo sacarla de su carcaza de tio cuando estuviera conmigo, llegamos a mi piso, entramos, le dije que entrara en el baño, se desnudara y se lavara a fondo, fui al dormitorio lanzado, cogí unas bragas negras y un corsé negro, fui al baño, estaba de pie, ya se habia lavado y de nuevo tenia el slip, me dijo que nunca habia follado que me haría una paja, si yo estaba de acuerdo, simplemente me lo pasé todo por los cojones la cogí del pelo, tirando hacia arriba, daba grititos, pero no le tiraba yo ni fuerte ni flojo se veia ante el espejo, yo queria que fuera asi, y le dije sin soltarla quitate los slip, lo hizo, ante mi apareció, un pene minusculo como sus testiculos los de un recien nacido, todo afeitado, le puse las bragas en sus manos y le dije pontelas, obedeció, después el corsé y yo se lo fui abrochando desde atras, lo saqué, del baño, lo habia pensado mil veces, desde que intentaba meterla en mi piso, iba a intentar que gozara como una perra, esa era la clave y la tendria a mis pies, hasta ahora habia acertado en todo, de su personalidad, solo era que si la volvia loca comeria en mi mano, la senté en uno de mis sillones, tenia un cuerpo de una muñeca asi en bragas y corsé, sabía estaba caliente, del parque mas ahora al ver que no habia puesto impedimento en la ropa de mujer me arrodillé ya solo tenía yo los boxer, le abrí las piernas levantandoselas y mi boca se perdió en su ano, esperaba una buena reacción de la zorra pero no esa, al poco, la tenia como una perra jadeante, fuera de si, ahora si con tranquilidad vi que su ano hasta se lubricaba de gusto, con un pegajoso y transparente liquido, pero es que la perra no dejaba de jadear en ningun momento, siempre ofrecida, abierta ya por su voluntad, hasta que ya me apartaba intentado no darle más gusto, lo hice ma levanté me saqué el boxer y le planté en su cara desencajada y cansada mi verga esta vez se la metí a la primera no la rechazo, empezó a chupar, inexpertamente, le coloqué su manita en mi verga aun parecia mas pequeña asi, se la hice mover, la dirigí como debia chupar mi polla ella se esforzaba y aprendia por momento, acerqué mi mano a la mesa, cogí el tubo de lubricante, de nuevo me agaché, al verme empezó a negarse a decirme que no, pero no podia salir del sillón, le introduje un dedo bien lubricado, empezó a gemir, de nuevo, a la vez sin confianza decía que no que follar no, entre gemidos, me lubriqué mi verga frente a su cara, tras haberla terminado de lubricar con dos dedos, finalmente, la cogí con fuerza levantandola a la vz que dandole la vuelta.
La aguanté quedando apoyada en el sillon su cabeza y brazos sin dejar de decir que no pero yo pasaba mi verga por su ano de arriba abajo, una y otra vez, gemia decia que no, apunté y apreté.
Daba grititos, intentaba moverse pero la tenia bien agarrada y mi nabo bien apuntado en su ano, introduciendose un poco primero ella gritando intentó culear, pero eso lo que hizo fue ayudar mas a mi polla a meterse más dio un ultimó grito a la vez que yo sentia como se abria como una flor, mi polla fue entrando, lentamente pero seguida, ella empezó a sudar, dejó de culear al ver que mi polla habia ganado, seguí ahora con tranquilidad al no culear ella metiendole más y mas, jadeaba movia la cabeza a un lado y otro a veces, hasta que la monté, miraba su ano todo abierto, mi polla allí metida, yo de pie algo encorvado, sin sacarle la polla la fuí haciendo se arrodillara a 4 patas y yo pegado tras ella, cuando quedamos asi comencé a follarla, sin prisas, disfrutandola, gemia como una perra al poco, si le daba un azote, gemia mas y mas, sentia en mi polla cuando sus rapidos orgasmos anales le venian se volvia loca y vuelta a empezar, asi una y otra vez, a tuve mas de diez minutos, hasta que practicamente la tenia reventada y yo tenia ganas de terminar en su boca, se la saqué ella derrengada, la volví y le metí mi polla en la boca, alli me corrí, entre gritos de gusto y chorros de leche encima de su rostro y boca.
Se duchó, queria irse a su casa pero se lo impedí, la iba a ser toda una hembra en una sola noche, tras la ducha iba a colocarse su ropa le dije que no, volvio al corse y la braga, la llevé al dormitorio y alli habia tres vestidos, de mis anteriores zorras le hice ponerse uno negro ajustado, la hice estar asi, tomando una copa en mi salon, al principio, cortada hasta que se fue soltando como yo habia predicho, para llevarmela de nuevo esta vez al dormitorio y follarla alli.
desde hace dos meses que ocurrio esto nos vemos, casi todos los dias sin levantar sospechas, como amigos, para a solas ser mi perrita.
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