mi nueva vida gay II
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Esta es la continuación de mi nueva vida gay que les conté al principio y es para decirles mi verdadera actualidad al momento de esto. Me encanto que me la metieran, pero sigo en el closet para evitarme problemas.
MI vecino y yo terminamos nuestra relación secreta, entre a trabajar y deje de probar verga como tres meses, ya tenia muchas ganas de tener a un hombre en mi cama y tener sexo con un macho pitudo y me hiciera estremecer, volver a saborear semen y sentirme femenina. Quería otra aventura llena de adrenalina y vaya que soy afortunado.
En el trabajo empezó a oír rumores que unos de los socios de la empresa y mi jefe era bisexual y que había tenido sexo con un compañero de otra área, pero como comprobarlo y para no arriesgarme a coquetearlo y descubrirme, investigue más y le pregunte directamente a él y me dijo que si, pero era algo secreto y delicado, él era gay abiertamente pero el jefe no.
Mi jefe es un hombre apuesto, maduro de 55 años, casado con hijos, alto, delgado, rico, caucásico y estaba dispuesto a tenerlo hasta que llegó el día en el cual el y yo fuimos a la oficina un sábado por el trabajo, había muy poco personal, el rara vez iba un sábado, tenia que aprovechar. Me llamó a la oficina para darle unos documentos y aproveche para decirle que lo deseaba como nunca y que sabia que había tenido relaciones con otro hombre, iba a ser discreto y podía confiar en mí, me dijo que no en ese momento que no era el lugar, espera un momento, Salí de su oficina decepcionado y avergonzado pero a la hora me llamó otra vez, entre y cerro la puerta con seguro y me empezó a besar y acariciar me calenté enseguida, me desnudo completito y me mamó la verga muy rico, estaba muy caliente, ya tenia ganas de un hombre.
El se levantó, y abrió la cremallera de su pantalón y ¡que suerte! Era un pedazote de verga, unos 20 cm y muy gruesa y no tarde en mamársela, la metí en mi boca y pase la lengua por toda su verga succione y saboree, tenia muchas ganas. Me coloco de perrito hacia el escritorio y se puso crema humectante en su verga y me la metió, ¡aaaahh! Delicia. Me embistió un buen rato, me subió al escritorio y me puso con la cola de lado y me dio otras embestidas, mi culo estaba dilatadísimo, no quería que parara de cogerme, me puso de misionero sobre el escritorio y el parado, y que sexo, unas tres embestidas y me eyacule todito, el siguió y me echo todo su semen encima de mi, tan calientito y sabroso, estaba muy satisfecho, por fin tuve mi hombre. Él tenía que salir, guardo su verga ya que no se desvistió por completo, ¡quédate aquí! me dijo, ¡hasta que llegue! Recalcó, me dejó encerrado y me quede desnudo hasta que su semen se seco en mi piel, llegó después, me encontró desnudo todavía, me recibió con unos besos y caricias pero nos fuimos a un motel.
Actualmente nos seguimos viendo y cogiendo muy rico. Ojalá y les allá gustado, comenten, saludos.
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