Mi nuevo vecino un vicioso del sexo
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por morochouruguayo.
Me invitó a tomar una cerveza en un bar cercano. Y me preguntó que por que lo miraba tan descaradamente cada vez que pasaba a su lado, ya perdido ante lo evidente le pedí disculpas y le dije la verdad que me calentaba mucho, que me parecía el tipo más lindo que había visto en mucho tiempo y que mi intención no era molestarlo. Me dijo que estaba bien, pero que no fuese tan descarado pues hasta su novia se había dado cuenta de como yo lo miraba. Le comenté que muchas veces lo pensé, que era muy descarado, pero que era a su vez imposible dejar de mirar.
Tomamos un par de cervezas más, charlamos largo y tendido y me dijo que a partir de ese momento lo saludara que le había gustado mi franqueza y que eso evitaría que hablaran sus conocidos de mis miradas, dejaría caer por el barrio que yo lo confundía con una persona de mi pueblo y listo, sin más preguntas que responder.
Al cabo de unas semanas me invitó a su casa para comer juntos me extrañó, pero como aquel día quedamos como amigos me hizo ilusión tener un nuevo amigo hetero. Con toda la naturalidad del mundo me pidió disculpas en primer lugar, para luego hacerme un montón de preguntas sobre mis relaciones con los hombres, me digo que cuando tomo confianza con alguien no le oculto nada y así empezamos una larga conversación. Que no me preguntó, ¿cómo?, ¿cuándo?, ¿por qué?
Y de pronto observé que me miraba mi bulto. Me puse algo tenso pues no quería que mi mente fuese más lejos de lo que estaba hablando. De pronto me comentó que me había invitado para contarme que desde el día de nuestra conversación, había tenido un par de sueños húmedos y que se había manchado de semen su abdomen y me preguntó si yo también los tenía, le dije que no muchos pues mi vida sexual era muy completa, la verdad no me puedo quejar. Pero cual fue mi sorpresa al decirme que había sido conmigo, le quise quitar importancia pues lo asociaría al encuentro y él me dijo: no, lo que quiero decirte es que quiero hacerlo contigo.
Yo le respondí que imposible, que no quería hacer de ese encuentro un mal paso y que prefiero la amistad a un polvo, pero él me dijo que así podía quitarme la calentura que tenía, pues en ese momento mi verga estaba a punto de reventar y que no había por que darse malos pasos, pues él era quien lo pedía. Me atreví a tocar su bulto por encima del pantalón y pude apreciar una rica verga medio dormida, no muy grande lo normal, él hizo lo mismo y me dijo: _ Que dura la tienes.
En eso yo me dispuse a quitarle la remera que llevaba puesta dejando así su hermoso torso al descubierto, eso me puso a mil y me lancé a mamarle los pezones con lo cual tuvo una buena reacción y me dijo que eso le gustaba. Yo estaba perdido en la lujuria y le di un beso en los labios, pero tenía los labios cerrados y después de pocos segundos abrió su boca dejándome probar su lengua, bendita lengua, que beso me dio el hijo de puta no pude más y le pedí que nos desnudásemos, pues mi verga me dolía, aprisionada en mi pantalón.
Así lo hicimos, pero él me desnudó a mí y yo a él dejándome ver un cuerpo espectacular, y tenía un poco de vello, cosa que me vuelve loco. No pude más y me arrodillé hasta la altura de su verga que empecé a acariciar con mis manos y mis labios con lo cual reaccionó casi al instante y empezó a ponerse dura como el acero, abrí mi boca y muy lentamente me fui introduciendo ese pedazo de verga de unos 16cm x 4,5cm. Primero la cabeza que era perfecta, me deleité un rato con ella para luego meterme todo su tronco hasta lo más profundo que podía llegar, él dio un gemido, yo notaba sus testículos en mi labio inferior.
No podía aguantar más y me acabe creo que hasta después no se dio cuenta que yo me había acabado, era el sueño de mi vida poder mamársela a alguien así. Pero yo seguí mamando, él agarró mi cabeza y empezó a bombear con un mete saca muy sensual lo cual hizo que mí verga se agrandase de nuevo, cuando sentí que estaba por acabarse me aparté y lo dejé que se calmase un poco no quería que se acabe y perder la oportunidad de que me penetrase mi culo. En eso me llevó a su habitación y me arrojó sobre la cama, y me dijo ahora me toca a mí se puso encima mío y abrió su boca para meterse mi polla, notó mi semen y eso parece que le gustó, pues como un poseso empezó a mamar y yo me volvía loco del gusto que me estaba proporcionado, hasta le dije que si me había engañado y no era la primera verga que se comía, pues lo hacía muy bien. Me juró que era la primera.
En eso lo giré para así poder comerme su verga y sus huevos normales, pero con mucho vello, mi saliva era jugosa la cual aproveché para pasársela por su rico agujero, lo cual le gustó porque con mi verga en su boca gemía como un loco, lo que me invitó a pasar mi lengua por su delicado esfínter, y así estuve un buen rato, del ano a sus huevos, los cuales me metía con glotonería y de los huevos a su ano que parecía que me invitaba a pasar dentro.
– ¿Me vas ha penetrar?- me dijo – A lo que le dije: solo si tú quieres. Metí un dedo dentro de su culo que ya lo tenía bien dilatado y le gustaba, me dio un pequeño movimiento para pasar su lengua por mi culo y yo no podía resistir tanto placer, busqué un condón y se lo puse.
– ¡No me vas ha penetrar?- me dijo un poco triste – Tranquilo- dije yo y se dejó hacer, lo tumbé boca arriba dejando su polla tiesa mirando al techo, me puse en sentadilla y poco a poco me introduje su verga en mí culo a lo que mi verga reaccionó y se puso más dura él lo notó y me la agarró para hacerme una paja mientras yo subía y bajada sobre su verga, yo cerraba mí esfínter para proporcionarle un mayor placer, me pidió que lo besase y así lo hice cuando sentí que empezaba a bombear semen en mi culo y yo apreté más mi esfínter lo que le hizo gritar de placer.
Así nos tumbamos en la cama, nos acariciamos, besamos, al reposar un poquito me dijo, ahora me toca a mí, quiero ser tuyo.
Comenzó a besarme con más pasión, bajo hasta mis tetillas me excité nuevamente, se me puso como garrote, me puso un condón y se sentó de un solo golpe en mi verga (20×6), me di cuenta que le dolió pero se la banco como bien macho que es, no demoro mucho en su cabalgata gozaba como loco.
Se la saque lo puse acostado, levante sus piernas, y me tumbe sobre el mientras lo penetraba lo besaba, cuando estaba a punto de acabarme me pide que se la saque y le acabe en la boca, cumplí su deseo, se la trago toda mi leche, nos dimos un hermoso beso, descansamos un poquito y nos fuimos a duchar.
Ese fue nuestro primer encuentro, me pidió que la próxima vez quiere hacer un trío si conozco a alguien que lo lleve así lo cojemos entre los dos, quiere experimentar doble penetración.
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