Mi padre borracho 2
Despues de probar la verga de mi padre por primera vez descubro que es un pervertido de primera, volviéndome su mujercita en la cama.
Hola morbosos, les traigo la continuación de mi anterior historia, en donde le chupo la verga a mi padre estando borracho, espero la disfruten mucho igual que yo
Luego de aquella vez en la que pude disfrutar la verga de mi padre, comencé a morbosearlo cada vez mas, cuando llegaba del trabajo no podía dejar de verle la verga y como se marcaban esos huevos enormes que ya había tenido en mi boca, disfrutaba mucho masturbarme recordando aquella noche en la que su leche llenó mi boca, y para mi fortuna, pude replicar aquello en dos ocasiones, lo que no solo me hizo querer esa mas, si no que también me volvió adicto a sus aromas, oler su verga sudada después del trabajo, lamer sus axilas peludas y disfrutar del olor de sus pies apestosos, era un estasis total
La confianza entre el y yo fue creciendo cada vez mas, y es que hubo tiempo en el que el y mi mama tuvieron que separarse, no por gusto, si no porque mi abuela enfermo de gravedad durante unos meses, lo que hacia que mi madre tuviera que irse a cuidarla, llevándose a mis hermanos con ella y dejándonos solos a mi padre y a mi, dado que mi escuela quedaba mas cerca de la casa y mi padre debía hacerse cargo de la misma. Fueron meses bastante amenos, por desgracia mi padre dejo de beber tanto por respeto a la situación que se estaba viviendo, pero eso no quito que en mas de una ocasión llegara casi inconsciente, llegando a quedarse dormido en el suelo de la cocina, en el baño e incluso tratar de orinar en mi cuarto al confundirse con el baño, por supuesto que en cada una de esas ocasiones aproveche para hacer de aquel hombre mi juguete personal, incluso ya sabia como chupársela para hacer que se pusiera dura sin mucho esfuerzo. Al cabo de 2 meses, el panorama se había vuelto mas critico, mi abuela tuvo una operación delicada que requería tener cuidados 24/7, haciendo que mi madre viviera todo el tiempo en su casa para estar a su cuidado
Los días con mi papa era los mejores, los días en los que no llegaba borracho salíamos a cenar o pedíamos comida a domicilio, y los días en que llegaba borracho, yo podía darme un festín. Por desgracia, poco a poco aquello dejo de darme el mismo morbo que me daba antes, no negaba que era todo un estasis tener la verga de mi progenitor en la boca y sentir a mis hermanitos llenarme la boca, pero no era lo mismo comparado a las veces en las que un hombre me hacia su puta y me degradaba como me gusta, hacia falta algo.
Una noche en especifica, mi padre llegó en el estado esperado, yo ya me encontraba preparado vistiendo mis boxers mas delgados para mayor comodidad, sin embargo, esta vez el hombre se sentó en la sala para llamar por teléfono, quedándose dormido al cabo de unos minutos, me acerque preparado para disfrutar la leche paterna, pero la posición en la que se encontraba hacia tan difícil sacarle la verga que fue inútil, incluso el querer voltearlo no funcionaba, ya que por el tamaño del sillón no había mucho espacio para maniobrar, aquello me había sucedido mas de una ocasión, en las que por asares del destino no podía disfrutar de su verga, resignado, me senté frente a el, dándome cuenta de que su teléfono estaba tirado en el suelo
Me acerque para recogerlo, llevándome la sorpresa de que se hallaba desbloqueado, lo cual era muy raro porque ese hombre cuidaba su teléfono mas que a su propia vida. Por mera curiosidad, ingrese para ver que era lo que encontraba, llevándome la mayor sorpresa de mi vida. En sus chats de whatsapp el le enviaba mensajes a un sinfín de mujeres, varias de ellas siendo incluso primas de mi madre, esposas de amigos o hasta sobrinas lejanas (y algunas cercanas), en ellos el les escribía de manera indirecta que quería invitarlas a salir, a beber un rato o incluso pasarla rico, para su desgracia o fortuna, muchas se negaban al saber que era un hombre casado. Fue una gran sorpresa, ya que hasta este punto siempre había demostrado ser un hombre muy respetuoso, incluso muchas de esas mujeres las encontraba en la calle mientras salía con nosotros en familia, saludándolas de la mejor manera sin mostrar indicios de otra cosa, pero ahora sabia la verdad, mi padre era un macho calenturiento que solo buscaba vaciar su leche. Uno de esos tantos chats era con una de mis compañeras de escuela, en donde mi padre la invitaba a salir y verse en un motel para coger, el le decía que pasaba por ella a la escuela y luego se iban a echar un palo rápido, a lo cual ella obviamente se negó. Ver tantas conversaciones donde mi padre buscaba coger con varias mujeres sin pudor alguno hizo que ese morbo volviera, saber que esa verga que estaba en mi boca era la de un hombre infiel que no le importaba vaciar su leche en otras mujeres estando casado hacia que mi verga solo se pusiera más dura
Seguí revisando, ahora entrando a su galería esperando encontrar fotos de su verga, lo cual no fue asi, ya que solo eran fotos de su trabajo, fotos que enviaban sus amigos y obviamente pornografía, muchísima. Al revisar su papelera, tampoco encontré nada extraordinario, solo mas fotos y capturas de pantalla de los chats que tenía con las mujeres. Sus redes sociales eran poco más de lo mismo, sus chats de Messenger eran igualmente el insinuándose a otras mujeres, pero ninguna dándole entrada. La parte buena fue encontrar su historial de búsqueda, al comienzo todo fue normal, búsquedas como “xxx casero” “xxx colegialas” “cogiendo ropa” “cogiendo en el carro” aparecían haber sido hechas casi de diario, no fue hasta dar con algunos términos en específico, que hicieron que mi cuerpo comenzara a temblar de la calentura, “xxx con mi hermana” “niño cogiendo con su mama” “padre e hija” “cogiendo a mi hermanita” “hermanastra coño caliente” “espiando a mi hijastra” “hija desnuda”, como esas, varias búsquedas relacionadas al incesto comenzaron a salir, su historial estaba lleno de ellas, vi algunos videos por curiosidad y en todos se mostraban a jóvenes no mayores de 25 años cogiendo con señores, algunos de ellos siendo POV, caseros y de marcas reconocidas, continúe buscando más hasta llegar al último video, el cual parecía ser con el que se había masturbado recién en la mañana, el cual decía “me cojo a mi hija trans”, en el video, una chica trans era cogida por un hombre como el, alto y fornido, me daba morbo saber no solo que mi padre era un degenerado que fantaseaba posiblemente con cogerse a una de mis hermanas, sino que también tenía gusto por las trans. Seguí así por un rato no encontrando nada que resaltar, al volver a la cama, comencé a idear un nuevo plan, si mi padre era un calenturiento de primera, iba a usar eso a mi favor para finalmente poder probar su verga sobrio
Al dia siguiente, fui al centro a comprar un chip de teléfono nuevo con una lada desconocida, mi nuevo plan seria mensajearme con el para ver que mas podía descubrir. Luego de instalar todo, me coloque una foto de perfil de una chica que encontré por twitter, al igual que guarde algunas otras por si era necesario. Para no hacer largo el cuento, le envie un mensaje saludando bajo la excusa de ser una hija de uno de sus amigos de hace tiempo y que vivía fuera de la ciudad, a lo que pronto contesto como cualquier viejo calenturiento, la plática no tardó mucho en subir de temperatura, mi padre alababa mis atributos y pedía que le enviara fotos, a lo cual le enviaba las que ya había descargado, tragándose por completo el cuento de que era algo real, así estuvimos por varios días, en los que me encerraba en mi cuarto para platicar con él, teniéndolo solo a unos metros de distancia. Mi padre resulto ser un hombre muy morboso, hablaba de como le gustaba que las mujeres se vinieran en su boca, que le gustaba mucho dedearlas con sus dedos gruesos hasta que se vinieran, lo mucho que disfrutaba comer un buen culo y coger por atrás, pero sobre todo sus fantasías, con toda intención, le comentaba que yo tenia una supuesta hermana que vivía conmigo y que por eso no podía enviarle tantas fotos desnuda, a lo que siempre respondía que no importaba, que la niña también tenia que aprender lo que era lo buena. A continuación, cito una de las conversaciones que tuvimos
—Lo siento, es que mi hermanita esta aquí conmigo en el cuarto y no me puedo encuerar
—Mmmm tu hermanita siempre esta contigo jejeje, segura que no es tu hija
—Nooo si es mi hermana, solo que mis papas trabajan todo el dia y siempre la tengo que cuidar, ya te imaginaras como le hago cuando tengo que coger jaja
—¿Apoco te la llevas cuando coges?
—Nooo, pero la dejo en la sala a que se entretenga mientras a mi me coge, aun esta chica para saber de todo eso
—Pues mejor que se entrene desde chiquita jeje, casate conmigo y ya los dos le enseñamos
—Jajaja ay si seguramente, ya me vi chupándote la verga y enseñándole a ella como se chupa con la verga de su padrastro
—Pues si, que madres que aprenda con otro, mejor que aprenda en casa como se hace, asi se vuelve experta como la madre
—¿Y si no le cabe en la boca?
—No importa jeje, desde chica así se puede ir amoldando al tamaño ya para que cuando este grande ya pueda coger jeje, así se turnan mama e hija para que cuando una se canse la otra entre
—¿Ay apoco si te cogerías a tu hijastra, tu no tienes hijas?
—Si si tengo
—¿Y no se te antojan?
—Están pequeñas todavía, una tiene 15 y la otra 17
—Ah ya jeje, y aun asi te las cogerías entonces
—Pues vale madre ya que jejeje, si lo he pensado, pero son mis hijas y esta su mama, como me las voy a coger, ni modo que le diga a ver amor dile a la niña que venga que le quiero comer su cuquita
—Pues deberías andar en bóxer enseñándoles el paquete, capas y se le antoja a una y te la terminas echando
—Si ya me han visto en bóxer jaja, pero se hacen las santas y nadamas no me miran el fierro
—Si yo fuera tu hija ya me hubiera hincado a decirte papi papi quiero verga
Conversaciones como esas me prendían mucho, haciendo que cada vez mis intenciones con el fuesen mas claras, ya tenia pensando que es lo que haría para conseguir lo que tanto había querido, solo era cuestión de tiempo para que las circunstancias lo permitieran.
Los días pasaron y la conversación tuvo sus altibajos, al estar ocupado con la escuela no podía contestarle tan rápido como debía, lo que le hizo perder el interés poco a poco, ya no me contestaba como antes y no cachondeaba igual, sabia que era hora de hacerlo o no habría vuelta a atrás. Llegado el fin de semana me mensajee con el, preguntado que haría durante esos días, a lo que contesto que estar en casa con su hijo y visitar a su mujer
—Que lastima, yo quería invitarte para que ahora si nos conociéramos, este fin de semana ire a visitar a mi familia y quería conocerte
—Claro que si corazón, tu dime en donde y te veo, quiero probar esos jugos tuyos
—Si amor, ¿te parece si nos vemos en un motel? Te mando la dirección, ya te estaré esperando ahí— acto seguido le envié la dirección de un motel al cual yo solía ir, justo porque se encontraba en una zona de otra ciudad en la que nadie me conocía, lo que sería perfecto para el también
—Asuu está muy bien la zona jeje, para mantener todo secreto, allá te veo mi amor espero que vayas lista para que te llene de leche
El dia finalmente llego, mi padre sabia que yo no estaría en casa porque “visitaría” a uno de mis amigos por lo que no tendría que preocuparse por mí, nos despedimos como de costumbre y me dirigir a la otra ciudad, en donde hice tiempo hasta la hora pactada. Llegado el momento entré al motel, comentando al chico de la recepción (al cual ya conocía) que, si alguien llegaba preguntando por “Ana” que lo dirigiera a mi habitación, y sin más, entre para prepararme. Ya dentro no tuve tiempo ni siquiera para cambiarme de ropa, mi padre me envió un mensaje avisando que ya había llegado hace apenas unos segundos y que iba camino a la habitación, tomé mi mochila que aún seguía sobre la cama y la escondí en el mueble del baño. La puerta del cuarto estaba abierta, por lo que no tuvo problemas para entrar, al no verme, escuche su voz llamarme, no podía contestar aun así que me limite a enviarle un mensaje diciendo “estoy en el baño preparándome amor, ponte cómodo y saldré a verte”, escuche como se sentó sobre la cama, quitándose los zapatos y la ropa, recibiendo una foto suya, mostrándome su verga dormida con un “ya sal que te está esperando”
Reuní todo el valor que pude, todo podía salir muy bien o muy mal dependiendo de su reacción, ya me había encargado de sembrar en el la fantasía del incesto unos días antes, ahora solo faltaba que todo se uniera para tener la mejor cogida de mi vida, me asome ligeramente por el marco de la puerta, allí estaba mi padre con la verga ahora dura y completamente desnudo, respire hondo y sali, dejándome ver finalmente, la cara del hombre se puso palida, casi como si hubiera visto a un fantasma, llevo ambas manos para cubrir su erección, mirándome
—Vete a la verga que haces aquí— su mirada acorralada me decía que estaba genuinamente sorprendido, asi que era momento de tomar las riendas de la situacion
—¿Esperabas ver a una niña culona papi? Ya lo se todo
—No mames de que hablas porque estas aquí
—Mas bien tu porque estás aquí, si me habías dicho que estarías en la casa todo el dia, ¿o tenías planes de verte con ana?
—Puta madre— su nerviosismo iba en incremento —que te dijo la vieja, seguro nadamas me engaño
—Ay pa— contesté tranquilo —Ya lo se todo, ya se que te coges a otras además de mi mama, ya que se tienes fantasías con cogerte a mis hermanas, ya se todo lo que platicaste con Ana, asi que no tienes nada que esconder, ya lo sé todo, nunca creí que serias así de depravado
—No chingues— su mirada cambio a una de preocupación, lejos de verse molesto, lucia totalmente paniqueado, giro a verme para hablar —no mames, no le vayas a decir a tu mamá, o seguramente ella fue la que te dijo que hicieras esto verdad
—Mi mamá no sabe nada y no se va a enterar— me senté en la cama junto a el, llevando mi mano hasta la sabana para tratar de quitársela
—Eh eh eh que haces— su mirada cambio, poniéndose a la defensiva —déjate de puterias
—No se va a enterar mi mama ni nadie si me dejas chuparte la verga— mis palabras parecieron haber sido como un golpe que lo hizo enojar, me tomo la mano y me dio una cachetada
—Que son esas puterias pendejo, no me digas que eres maricon— a todo esto, nunca le había confesado a mi padre sobre mi orientación, todo el tiempo supuse que era algo obvio, pero al parecer no, con un poco de miedo, segui en mi papel, lo tenía en mis manos y no lo dejaría ir tan fácil
—Si pa si soy, y siempre he querido comerte la verga porque se te ve bien rica, y ahora que te la acabo de ver parada solo quiero que me dejes chupártela
—No mames escucha las porquerías que estás diciendo, aparte de puto maricon estas enfermo, por eso siempre te me quedabas viendo cuando usaba esos shorts que me compraste verdad mariquita— la forma en la que mi papa estaba hablando me prendía cada vez mas, escucharlo referirse a mi de formas tan despectivas solo me excitaba mas, le segui el juego, esperando a ver hasta donde llegaba todo
—Si pa toda mi vida he deseado que me hagas tuyo y que me cargues y me toques asi como le haces a mis hermanas, ya se que fantaseas con cogértelas porque lo dijiste con ana, pero a ellas no se les antoja tu verga pero a mi si— mis palabras parecieron resonar en el, ya que bajo la sabana delgada podía verse su verga comenzando a endurecerse nuevamente —¿No quieres romperle el culo y chuparle la vagina a mis hermanas? ¿no te gustaría amoldar sus culos a la forma de tu verga? ¿o no fue eso lo que dijiste? Que quisieras que ambas te la mamen hasta que una se canse y vaya la otra
—Deja de decir mamadas y cállate pendejo
—¿O no eres tan machito como dices? — aquello fue la gota que derramo el vaso, pude ver en sus ojos un coraje que nunca antes había visto, por un momento crei que comenzaría a golpearme, pero estaba equivocado. Recibi solo una cachetada y me tomo por el cuello para comenzar a gritarme
—¿Quieres ser una mujercita puto maricon? — su mano ahora apretaba mis mejillas mientras me gritaba a la cara —No sabes de lo que estás hablando, los maricas nunca van a ser como una mujer para satisfacer a los hombres, pero si que lo tu quieres es que trate como una niña de ahora en adelante asi lo voy a hacer, para que veas que no vas a aguantar ser una hembra
De forma agresiva mi papa quito la sabana de su verga, era la primera vez que la veía completamente erecta, era mucho mejor de lo que se veía dormida, las venas resaltaban todo el tronco moreno, su verga latia con vida propia y su cabeza morena brillaba de lo lubricado que se encontraba, la curvatura de su verga y su grosor solo hacían que se me antojara más. Acto seguido, llevo mi boca hasta verga, metiéndola toda en mi garganta de un solo golpe y lastimándome en el proceso, podía ser su enojo
—Querías verga y ni siquiera la puedes mamar— iba a hacer que se tragara sus palabras, fue difícil acostumbrarme a su verga completamente dura, pero finalmente lo logre, pronto comenzó a embestir mi garganta sin piedad, como si estuviera cogiendo una vagina, sentía mi garganta abrirse y esas ganas de vomitar presentes, pero mi calentura y éxtasis podían mas que eso, continúe por un rato escuchando sus insultos que solo terminaban por calentarme aún mas —Pinche puto, si la chupas rico, hasta parece que ya la habías chupado antes— levante la mirada para encontrarme con la suya, casi al instante reacciono, tomándome del cabello para detenerme un momento —¿Tu fuiste el que me la chupo mientras estaba borracho verdad puto enfermo? Si ibas a andar haciendo tus marranadas al menos te hubieras tragado mis miados bien, por tu puta culpa tu mamá me regaño, pero hoy me voy a cobrar todo eso— sus embestidas aumentaron al punto de ahora si ahogarme, le pedí parar, pero se negó, manteniendo mi cabeza pegada a el, mi nariz era inundada por el aroma a sus huevos sudados y sus pelos, los cual pronto también se percató y no perdió el tiempo para hacerlo notar —¿Que? ¿me vas a decir que también te gusta el peste de mis huevos? Ayy putita, eres una puerca como me gustan— saco finalmente su verga de mi boca, poniendo mi cara en sus huevos dejando que ese aroma delicioso inundara mi nariz —Eso putita, huéleme los huevos, ¿te gusta el olor de tu papi verdad? — sus palabras me encendieron aún mas, haciendo que mi boca comenzara a chupar ambos huevos de toro, causando también que el hombre comenzara a gemir
El momento se vio interrumpido cuando sus manos se dirigieron a mis nalgas, levantándome de manera brusca y quitándome el short, dejando mi culo al descubierto
—Mira este culito de puto, hasta pareciera que son unas nalgas de vieja— sus manos acariciaron mi culo, hasta que uno de sus dedos comenzó a meterse en el, causando algo de dolor dado que no hubo ninguna preparación previa, gemí de dolor, pidiendo que no fuera tan brusco porque me dolía, a lo que solo respondió que no me quejara y me aguantara. Pronto aquello paso de ser sus dedos a una sensación húmeda y caliente, mi papa me estaba chupando el culo, y hacia un trabajo excelente, el sentir su lengua entrando y saliendo me hizo dilatar muy rápido tanto que pronto dos de sus dedos gruesos entraban en mi. Sin avisar, sentir una embestida que me hizo dar el grito de dolor más grande de mi vida, de un momento a otro tenía toda su verga en mi culo, sintiendo como esta latía dentro, acto seguido, el peso de un hombre de 108 kilos estaba sobre mí, aplastándome por completo
—¿Lista mi putita? — susurro en mi oreja, tomando mis manos con las suyas para ponerlas tras mi espalda, empinando mi culo para facilitar la penetración —Hoy te voy a hacer mujercita y ya no vas a querer probar otra verga nunca— acto seguido, mi padre comenzó a cogerme de forma agresiva, sus embestidas podían sentirse casi hasta el estómago, el grosor de su verga me hacía sentir la necesidad de volver a tenerlo dentro cada vez que salía, yo gemía de tanto placer, trataba de sonar lo más afeminado posible para encender a mi padre, lo cual funciono, ya que ocasionalmente me decía que era su princesa, que era su niña y que ahora era su putita. Me cogió en varias posiciones, siempre ocultando mi verga para que no la viera, definitivamente podía ver la lujuria y el morbo en sus ojos, ya que me trataba como un juguete sexual del que podía disponer en cualquier posición y eso a mí me encantaba, estuvimos así casi una hora, en la que el sudor, el placer y el morbo era lo único que salía de esa habitación. Al estar en la posición del misionero, sentía su sudor caer sobre mi cuerpo, al igual que su mirada clavada completamente en mí, a este punto ya no sabía si mi papa solo se estaba desquitando e imaginaba que cogía a otra persona, o de verdad estaba disfrutando el cogerse a su propio hijo
—Abre la boca— comento jadeando, a lo cual accedí sin cuestionarlo. Se acercó a mi rostro de forma peligrosa, escupiendo directamente en mi boca en dos ocasiones, era lo más cercano a un beso con mi padre, y esa simple acción hizo que me viniera en mis calzones. Obviamente, mi padre noto eso, riendo a manera de burla —¿La niña ya se mojó? Y eso que todavía no has visto cuanta leche saco cuando estoy consiente— rápidamente nos separamos y el saco su verga de mi culo, comenzando a masturbarse, acerque mi cara tan rápido como pude, y no tardo mucho para que chorros de leche comenzaran a salir de la punta de su verga, eran varios, estaba tan embobado por el espectáculo que sin darme cuenta mi padre me tomo de la cabeza y nuevamente metió su verga en mi boca, llenándome la boca de su rica leche paternal, la cual bebí disfrutando el sabor dulce, a los pocos segundos, la textura y el sabor cambiaron, levante la mirada solo para encontrarme con una sonrisa perversa del hombre, sus manos seguían aprisionando mi cabeza contra su verga, obligándome a seguir allí bebiendo ahora sus orines
—¿No querías beberte también mis miados putito? Tómatelos todos, es tu recompensa por ese rico palo— no pude negarme, así que tragué lo más que pude, el sabor fuerte y aroma intenso se volvieron más disfrutables, así hasta que finalmente termino de vaciarse, dejando mi boca con un olor a orines y leche.
Mi padre se levantó al baño sin decir nada, por mi parte, me quede sentado en la cama sin saber que era lo que iba a pasar ahora, no podía creerlo, finalmente había cogido con mi padre, mi culo dolía y apenas podía caminar por la verguiza que me había metido, mi estómago revuelto producto de tanto semen y orina se sentía extraño, pero el placer de saber todo lo que había pasado podía más contra ello. Mi padre volvió, vistiendo unos boxers ajustados que hacían ver su bulto prominente, gire a verlo, dándose cuenta de ello
—Ya deja de verme, ya me la viste y hasta la tuviste adentro — respondió agarrándose su paquete y acostándose al lado mío, no sabía que responder, nos quedamos en completo silencio hasta que el tomo la palabra —Ya llevaba un tiempo sospechando que eras gay, pero nunca dije nada porque esperaba que tú me lo confesaras, varias veces mis amigos me decían que te veían con otros hombres en la calle pero es tu vida, así que no tengo porque meterme, ¿solo cuídate mucho si—
Sus palabras me tomaron con total sorpresa, apenas hace unos minutos me estaba tratando como su puta, y ahora actuaba como todo un padre comprensivo
—¿No estas molesto entonces? — respondí
—Un poco, fue una jugada muy sucia hacer todo esto y me hubiera gustado enterarme de otra forma acerca de tus gustos— dijo serio —siempre he notado que me miras más de lo que debes, incluso cuando andaba en boxers en la casa, tú eras el único que se quedaba viéndome como si te antojaras, ahora ya sé por qué, y déjame decirte que en otras circunstancias no hubiera hecho esto, pero creo que la situación se prestó para hacerlo
—Lo siento, pero es que no podía evitarlo, siempre creí que tenías una verga muy rica y cuando llegabas borracho aprovechaba para mamartela y sacarte la leche, pero es la primera vez que te veo así
—Si me daba cuenta, pero siempre creí que era tu hermana la que lo hacía, incluso me sorprendió que aquella vez se tragara mis miados después de venirme, creí que me había sacado la lotería con una hija así
—No pa, fui yo todo este tiempo
—Mira te seré sincero, no soy puto como tu, pero cuando era joven me cogí a algunos solo para experimentar, debo decir que si algo tienen es que la maman muy rico y son bien puercos así como tu, cosa que con una mujer no es muy normal, yo si quisiera cogerme a tu hermana, hoy te cogi a ti pensando que era ella por el culote que ambos tienen, mira, hasta se me está parando de solo pensar en ella— gire la mirada y efectivamente, aquel trozo parecía querer romper la delgada tela de los boxers, sin pensar lo tome con una mano, recibiendo solo una sonrisa por parte de mi padre —¿te la quieres comer otra vez? Aprovecha que sigo caliente— no lo pensé y comencé a mamarla otra vez, aunque ahora mi padre me permitió hacerlo con calma, pudiendo disfrutar de su erección al 100%. Cuando todo termino, nos vestimos para salir del lugar, el había ido en carro, por lo que volveríamos a casa juntos. Durante el trayecto charlamos un poco acerca de mis experiencias sexuales y mis fetiches y fantasías, el incesto era algo que ambos compartíamos y disfrutábamos, pero que hasta ahora solo habíamos podido saciar uno con el otro, mi padre parecía verse abierto sobre el tema, así que aprovechando la situación viaje todo el trayecto de vuelta a casa con mi mano puesta sobre su verga
—¿Una sola vez te bastó para volverte una putita hambrienta de mi verga verdad?
—Pa no lo digas así jaja
—Es la verdad, ¿no me digas que no quisieras que te la vuelva a meter?
—Todos los días de ser posible
—Hmm— mi padre rio, guiñándome el ojo —Putas no me faltan para coger, pero en la casa no tengo ninguna, así que si te portas bien puedes ser mi mujer en la casa, pero tienes que darme de comer, lavarme y hacer de todo como una mujer de verdad
—Ya de por si lo hago ahora que mi mamá no está jaja, pero ahora lo hare con más gusto
—Ya vez, así me gusta
A partir de ahí, mi padre y yo nos volvimos muchísimos mas cercanos, aprovechando cada momento que teníamos disponibles para dar rienda suelta a nuestros placeres. Si les interesa puedo seguir contando lo que ha estado pasando durante este tiempo, aun tengo algunas historias que compartir en donde seguramente se la terminaran jalando por tanto morbo jeje, saludos
hola tenes telegram el mio es @facuzoo
Gran relato! Podrías sumarle más morbo con nuevos personajes, amigos o familiares del padre…
Es hora de meterle más morbo con la familia, me excita tu historia.
Uufff este relato me hizo correr me más de una vez, me fascinan tus relatos, porfavor no tardes en escribir el próximo…