Mi padre, más que un amigo 2

Continuación de como a mis 13 años la separación de mis padres cambio mi vida y mi padre se convirtió en mas que un amigo, (la conversación) ) .

Quienes leyeron mi primer capitulo recordaran que por primera vez vi a mi padre desnudo con su gran verga parada y con una innegable calentura…

Recuerdo que yo no lograba salir de mi asombro al ver a  mi padre en ese estado y mas al ver el gran tamaño de su verga, mi padre debió notar mi expresión pues inicio una conversación que yo no esperaba

P- ¿Qué pasa Samu (como solía llamarme)? te veo nervioso, parece que te asusta ver mi verga parada, ahora que recuerdo, creo que es la primera vez que la ves así, ¿eso te  pone nervioso?- , yo no sabia que responder, es cierto, estaba un poco nervioso pero no tanto debido a verlo así, la causa de mis nervios era que me había dado  cuenta que mi verga también se había puesto dura y  me daba vergüenza que el lo notara, pero por mucho que trate de evitarlo mi padre se dio cuenta

P-hijo creo que ya se porque estas nervioso, ¿tu verga se puso dura, cierto?.

Y- (debo haber tenido la cara roja de vergüenza) mmm si, es cierto, pero no se porque.

P-  por que es normal pues, estas viendo a otro hombre desnudo y con la verga dura, es lógico que  tu edad  tu cuerpo reaccione, lo raro seria que no te pasara nada, sabes, hace tiempo esperaba   que esto pasara para poder tener una conversación de hombre a hombre contigo, como la tuvo tu abuelo conmigo y mi hermano y enseñarte sobre la vida y el sexo como el nos enseño, claro que nosotros éramos menores que tu, me hubiera gustado tener esta conversación antes contigo, pero tu mamá es muy mojigata y reprimida, todo lo relacionado con el sexo  para ella es casi sucio, es demasiado cerrada de mente y no quiero que tu seas así, quiero un hijo que sea abierto de mente, que aprenda a disfrutar del sexo a gozarlo sin culpas, como yo, quiero ser mas que un padre, quiero ser tu amigo, que nos tengamos una confianza total en cuanto al sexo, enseñarte, guiarte ¿te gustaría eso?.

Y- (de verdad a mi me tenia cautivado la forma en que mi padre me conversaba, lo que decía, creo que deseaba tener un amigo así, porque yo era mas bien tímido, herencia de mi madre, supongo)- si, me gustaría que tu fueras mi amigo de confianza, creo que soy muy tímido a veces y me gustaría ser como tu.

P- bien, así me gusta, pero debes  tener confianza total conmigo y yo la tendré contigo, es la única forma de poder enseñarte, dime ¿ya te masturbas, te corres la paja? cuéntame sobre eso, yo empecé como a los 10 y jamás he dejado de hacerlo, aunque tenga sexo, soy muy pajero y me gusta, cada noche aunque tuviera sexo con tu madre o con quien fuera necesito pajearme, mi cuerpo lo pide, desde que estamos los dos solos cada noche fácil me corro 3 veces, dime que pasa con contigo en ese tema, pero con total confianza, cuéntame desde cuando lo haces, como lo haces, cuantas veces lo haces, cuando empezaste a botar leche.

Y- (yo estaba encandilado, encantado con la confianza que papá me daba y solo  quería contar y contar, creo que siempre desee conversar sobre sexo pero no tenia con quien y ahora lo podía hacer) -si me pajeo, empecé como a los 11 y mi primera vez con leche fue el año pasado, siempre lo hacia por las noches en mi pieza y ahora lo hago por las tardes antes de que tu llegues, me desnudo, coloco un video y me corro a veces toda la tarde, a veces hasta 3 veces seguidas sin parar, ¿no se si eso es mucho o me puede hacer mal?.

P- bien!, saliste caliente igual que yo, me gusta saber esas cosas de ti, todo lo que me cuentas es normal hijo, es bueno que lo hagas, que disfrutes, además estas solo casi todo el día y es bueno que aprendas a darte placer y conocer tu cuerpo y no te sorprendas ni te preocupes por correrte 3 veces seguidas, hazlo las veces que desees, todas las veces que tu cuerpo aguante no de prives de sentir placer, yo he llegado a correrme como 5 veces seguidas, claro que en la quinta estoy agotado y traspirado entero, pero mientras el cuerpo lo pida y te provoque placer, no hay nada nada malo en eso.

Mientras teníamos esa conversación, veía como la  verga de papá estaba aun mas dura que al principio, su tetillas paradas, todo su cuerpo tenso, y el liquido pre seminal no dejaba de salir por la cabeza de su pene, recorría todo su tronco que apuntaba al techo y caía sobre la gran cantidad de pelos que tenia en sus bolas; por mi parte yo estaba en igual situación pero me tranquilizaba saber que estaba vestido, aunque en mi interior deseaba haber estado desnudo como el, deseaba que me viera, tener ya la confianza de mostrar mi verga dura y mojada frente a el; aun no me daba cuenta que la conversación con mi padre estaba haciendo despertar en mi algo nuevo, algo que todavía no sabia como llamarlo, después aprendería que se llama morbo y que mi padre era muy morboso.

P- Samu!, me llamo fuerte mi padre, (yo estaba perdido en mis pensamientos) hijo, parece que te quedaste en la nubes jajaja, y por lo que veo a los dos nos gusto la conversación que tuvimos, porque tu bulto parece que va a reventar tu pantalón y yo estoy mojado ya casi hasta las piernas, creo que por ahora es mejor dejar la conversación hasta acá, porque si la seguimos no podre enseñarte como yo deseo, estamos muy calientes los dos, lo que es totalmente normal hijo, así que vamos a hacer una cosa, ahora que ya somos amigos de confianza no habrán secretos entre nosotros, por lo menos respecto al sexo, así que yo me voy a ir a acostar y a masturbarme y quiero que tu también te vayas a tu pieza y te masturbes mucho por que lo necesitas, pero ya sin miedos ni culpas, gózalo, gime, quéjate, todo lo que desees, no tengas temor de que yo te escuche, ni yo tendré temor de que me escuches a mi, desde ahora quiero que aprendas a disfrutes del sexo y yo te ayudare a eso; pero antes de que nos vamos a acostar quiero pedirte algo, mañana no te masturbes durante el día, por muchas ganas que tengas, trata de no correrte, espera hasta que yo llegue.

Luego de decir eso, mi papá se fue a su pieza cerrando la puerta tras de el, yo me fui a la mía (que esta pegada a la suya), de verdad yo estaba muy caliente, demasiado creo, no entendía porque esa conversación me había puesto así, solo sabia que necesitaba masturbarme muchas veces, tal como mi padre me había dicho, eso hizo que mi confianza en el se hiciera mayor, el sabia lo que yo sentía, lo que le ocurría a mi cuerpo aun sin yo decírselo, entre a mi pieza, me desnude y vi mi verga extremadamente dura y mojada, me acosté sobre la cama y sin necesitar ver ningún video comencé a darme placer a mi mismo, fueron  pajas distintas, las disfrute como nunca, acariciaba mi verga, la apretaba, deslizaba mi mano sobre ella sintiendo el placer, sentía deseos de gemir de dejarme llevar, pero al principio evitaba emitir ruidos porque mi padre estaba en la otra pieza, pero en un momento el silencio de la noche me hizo escuchar como mi padre gemía fuertemente en su cuarto, comprendí que el también se estaba masturbando y gozando, escuchar sus gemidos me provocaron sensaciones nuevas y a mi mente vino la imagen de mi papá desnudo haciéndose un paja, sentía como mi sangre hervía, mi calentura era ya demasiada y deje de reprimir mi goce, comencé a gemir muy fuerte, mientras recordaba la conversación, el cuerpo desnudo de mi padre, el tamaño de su verga, el liquido que recorría su miembro hasta sus bolas, sus pelos, si, me estaba haciendo una paja  excitado con el cuerpo de mi padre, pero solo me deje llevar, solo deseaba sentir placer, además los gemidos de mi padre no paraban y se hacían mas, audibles cada vez al igual que los míos, creo que deseaba que el también  me escuchara, recuerdo que la primera acabada la tuve como casi a los 10 minutos, aunque habría deseado prolongarlo mas, eyacule de una manera increíble, mi pecho, (incluso mi cara) quedo bañado en semen, creo que fue la primera vez que eyacule en tanta cantidad, pero necesitaba sentir mas placer, así que continúe masturbándome sin parar por un par de veces mas, gimiendo ya sin ningún temor a ser escuchado, mientras mi padre al parecer también lo hacia pues aun escuchaba sus gemidos, finalmente termine luego de correrme como 3 veces seguidas, no porque no deseara seguir, sino debido al cansancio que ya sentía  por lo enérgica que fueron esas masturbaciones;  también mi padre dejo gemir.

Al otro día al levantarme, muy cansado y agotado, encontré una nota que mi padre había dejado para mi sobre la mesa del comedor :»te escuche anoche, me gusta que hayas disfrutado tanto, recuerda lo que te pedí, hoy no te masturbes, espera hasta que yo llegue».

Esa tarde a pesar del deseo no me masturbe.

continuara…