MI PADRE ME ENTREGA A SU AMIGO
Parte 4.
En esta cuarta entrega de mi relación con Rodolfo relatare como poco a poco me fue feminizando y haciendo una mujercita a su gusto, después de la fiesta con sus empleados y de las cogidas salvajes que me metió ese día termine muy adolorida, llegamos de la fiesta y los dos caímos rendidos en un sueño profundo, me sentía muy adolorida de mi colita y de mis piernas, la semana que mi marido estuvo de vacaciones hizo que me cerrara de nuevo y aunque ya me había terminado de desgarrar aun debía amoldarme al amor de mi vida, mi esposo iba a trabajar y yo me quedaba en casa, una mañana llego mi suegro a verme, yo estaba sola ya que mi esposo ya estaba en uno de sus talleres salude al señor y le pregunte que quería de desayunar y comencé a hacerle los huevos que me había pedido, yo llevaba puesta una licra con un top, ya que acababa de terminar mi rutina de pilates «señora no debe de salir asi a la calle, una vieja debe de vestir retacada y con modales» yo solo asentí con la cabeza y le comente que estaba terminando de hacer ejercicio, el señor saco unas patillas de una bolsita de plástico y en eso tocaron a la puerta, el abrió y era una mujer, se veía una mujer biológica y me lleve una sorpresa al saber que era una trans como yo, era muy bonita, tenia muy buen cuerpo y era muy delgada, ella me saludo y me dijo que estaba hi para enseñarme como iba a empezar mi hominización «muñequita te vas a sentir medio rara, pero mira, te vas a poner estas inyecciones en las mañanas y antes de dormir vas a tomar estas pastillas, este parche va siempre en tu hombro y en una semana aproximadamente vas a empezar a notar cambios en tu cuerpo» la chica termino de explicarme, me puso la primera inyección y se fue, una vez que estábamos solos mi suegro se me quedo viendo de una forma fija y me dijo «señora ya mero cumple sus 18, en unos meses ojala ya parezca mujercita para esa fecha» empecé a limpiar la cocina y le hice un café a mi suegro, el me seguía viendo y me volvió a comentar «esta bien chiquilla señora, mi hijo ya me había platicado de usted, ya estaba entregada y hablada desde hace mucho» yo solo le comenté que estaba muy feliz y mas feliz aun de empezar un tratamiento para lograr ser la mujer que siempre había querido ser, «señora no le comente nada ami hijo de esto, el pago por todo pero no haga que pierda la magia, que el vaya viendo sus cambios y los vaya disfrutando, estas son cosas de viejas y que se queden entre viejas, usted nomas dedíquese a su marido» mi suegro se fue y comencé a hacer la comida, Rodolfo me había pedido que le llevara la comida recién hecha a las 2 pm todos los días ya que le gustaba todo hecho a mano y no calentado en micro.
Cuando llegue al taller uno de los peones me comento que mi esposo había salido a comprar unas piezas y que estaba por llegar, yo entre a la oficina para poner la mesa ya que llevaba platos, cubiertos y vasos, yo llevaba una ensalada verde para comer con mi hombre, mi dieta era muy rigurosa tanto para mantener la figura como para no manchar a mi esposo cuando tuviéramos relaciones, estando esperando a mi marido uno de los mecánicos entro a la oficina buscar herramienta que estaba en el almacén el se me quedo viendo «señora ya le vino a traer la comida al patron?» conteste que si y el solo me veía de pies a cabeza, entendí pq mi suegro hacia tanto énfasis en vestir discreto, yo llevaba un pantalón aguado de algodón y una playera de manga corta y cuello de tortuga el trabajador me pregunto mi edad a lo que conteste que tenia 17 años, «uyyyy señora, se la llevaron bien chiquilla con su marido, ya la sacaron e la prepa?» me limite a contestar que era feliz con mi marido, el solo dijo «las viejas como usted son las que vale la pena, tiernita, atiende a los hombres como antes, llego virgen con el patrón, cualquiera quiere a una como usted de planta» yo no conteste ya que no quería problemas, llego Rodolfo y entro a la oficina, diciendo que había mucho trabajo pendiente y que tenían que sacarlo en ese mismo día, el mecánico salió de la oficina y me quede a solas con mi marido, comencé a servir mientras el se sentaba comimos juntos lo veía y no podía creer que un macho como ese me había escogido como esposa, cuando termino me dijo» flaquita quieres postre» empezó a sobarse el pene y lo saco de su pantalón, estaba muy parada, tiesa «cómetela toda flaquita, chúpala» me hinque y comencé a mamar, me encantaba la verga de mi marido el con su mano en mi nuca marcaba el ritmo en que quería que chupara, seguía y seguía, el gemia como el hombre varonil que es «trágatela toda flaca, naciste para mi» estuve mamando como media hora cuando de la anda se me vino en la boca «no tengo tiempo de atorártela flaca, pero me vaciaste rico, vete a la cas y ahí espérame, llego mas tarde» al salir de la oficina vi como todos los trabajadores habían escuchado los gritos de mi hombre escuchaba como susurraban y decían «esas si son viejas» «pinche maricona salió buena mujer, mejor que la que tengo en la casa».
Llegue a la casa y me puse a hacer el aseo general, volví a hacer ejercicio y comencé la cena cuando estaba por terminar mi marido llego a casa y corri a besarlo, me le colgué en los brazos y el me cargo para llegar hasta la sala empezó a besarme apasionadamente, le empecé a quitar la camisa y el me quito los shorts deportivos y la blusa, vio mi parche hormonal, el me besaba el cuello me acariciaba las nalgas yo empecé a gemir de placer como la mujercita que era, «te toca que te de flaquita, a la hora de comida no pude pero ahora si te toca recibirme» me acostó boca abajo en tapate de la sala, y se termino de desnudar, cuando sentí su bulto entre mis nalgas, el estaba acostado sobre mi besándome la nuca y el cuello empecé a sentir como su verga abría paso entre mis nalgas, me la dejo ir como a el le gustaba, sin piedad y de un solo jalón sentí como me partía y aunque cada vez era menos seguía doliendo bastante, el empezó a bombearme, rápido y salvajemente, sin embargo seguía dándome dulces besos en mi cuello, me sentía poseída, sabia que tenia que cumplir y me encantaba, estuvo bombeándome como media hora cuando me dijo ponte de perrito, quiero verte el culo mientras te la atoro, procedí a levantarme y me la dejo ir de nuevo «me encanta ver como te la comes toda vieja, no uso ni lubricantes ni te como la pucha pq como mi vieja tienes que recibirme asi a pelo» gemia y decía «amor soy tuya, hazme lo que quieras» el seguía bombeándome cada vez mas rápido, me nalgueaba me tomaba de la cintura con sus dos manos, las sentía asperas, llenas de cayos por el trabajo, eso me exitaba demasiado, sentirlo, asi de grande, asi de fuerte, asi de dominante, el haciéndome suya empezó a correrse dentro de mi. Me dio un beso y me dijo «verte asi de chiquita, como mis manos rodean esa cinturita me pone muy caliente flaca, sentirme asi de tiernita, ver como te duele el tenerme dentro de ti, hace que me vuelva loco» le di un beso «soy totalmente tuya mi amor» «levántate flaca, báñate y cámbiate, quiero que te pongas lo mismo con lo que me llevaste la comida, van a venir mis amigos» me arregle, el solo se puso desodorante, note que estaba mas panzón y eso me gustaba demasiado «amor, te gusta lo que te hago de comer?, dime si quieres que cambie algo de mi sazón» «vieja yo ya soy un hombre casado, cocinas perfecto, los hombres no nos arreglamos ni cuidamos el peso, tu como mi vieja, si te tienes que cuidar para seguirme gustando, pa que no busque fuera lo que me puedes dar en casa» «me voy a mantener bonita siempre para ti mi amor, no quiero que andes de volado» «ayyy flaca, soy hombre, vas a tener que ver para otro lado en algún punto, aparte todavía no tengo hijos hombres, eso si se tiene que hacer, pero ya veremos en unos meses, ahorita preocúpate por atenerme».
Llegaron los amigos de mi marido, mi papa estaba entre ellos, me dio gusto saludarlo, cuando me vio me dijo mijita que guapa como siempre, serví la cena y me quede a tomar una copa, la platica era totalmente de hombres y cuando me levante y me despedí todos me vieron y me dijeron nos vemos Lily, vete a dormir que las mujeres ya no deben de estar con hombres que no sean sus esposos. Al espiar su conversación como siempre mi papa y Rodolfo comenzaron a platicar «compadre dígame como va a estar lo de las hormonas de mija, no quiero que sea muy brusco y ande toda alterada» «suegrito ya veré como la hormonizo, hoy empezó y acuérdese que el que manda sobre ella ya soy yo, no tu suegrito» «tienes razón ya eres tu el hombre de esta casa yerno, ya tu sabes como la cambias» siguieron platicando todos, cuando se termino la reunión mi marido subió, yo dormía desnuda por ordenes de mi esposo y cuando me vio el solo empezó a besarme «levántate vieja que quiero echarte la verga» me puso de misionero y me hizo suya toda la noche, termino dentro de mi 3 veces, al terminar y antes de dormir solo me dijo «flaquita vas a terminar hecha toda una buena vieja para tus 18, vas a tener tetas y todo» me arme de valor y le pregunte como manejaría lo del hijo varón el solo me dijo «esas son cosas de hombres flaca, las mujeres son de su casa y no deben de ser metiches, ya se va a ir dando» le pregunte también de mi futuro, si iba a trabajar y me dijo «duérmete flaquita y una cosa si te digo, mi esposa no va a trabajar, solo va a estar para atenderme y en su casa, si por eso te agarre de 17 y virgen para que me obedezcas» le di un beso y le dije que yo iba a hacer lo que el quisiera, dormimos juntos y a la mañana siguiente me levante para hacerle desayuno y el se fuera a trabajar, una vez que termino y se fue llego mi suegro y me dijo «señora, ya esta en tratamiento y ya le conseguí una puta a Rodolfo ya pa que tenga un hombre, que con puras hijas viejas a quien le va a dejar todo, las hijas se le van a casar y van a estar como usted en su casa, tiene que tener un varoncito pa que se quede con todo»
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