Mi pareja, su padrino y el albañil (última parte)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Xavi87.
Albañil: Hay patrón usted si aplica lo de hoyo aunque sea de pollo, le tira a todo lo que se mueva, pensé que era un puta vieja, pero ya veo que también le entra a la carne de puerco.
Me sentí algo ofendido y molesto por los comentarios, me quede viendo a mi pareja quien no decía nada pero sonreía morbosamente y fue su padrino quien contesto el comentario.
Padrino: pues en épocas de guerra cualquier hoyo es trinchera y desde que me dejo mi vieja no había tenido la oportunidad, además hay que probar de todo.
Salí casi corriendo del baño y me dispuse a ponerme la ropa aun con el cuerpo mojado, en eso se acercó el padrino y me dijo, relájate, no pasa nada, deja te doy otra toalla para que te seques bien, ponte cómodo, el albañil termina rápido su trabajo y se va, además tu aun no terminas y es una falta de respeto dejarte así.
El albañil entro a revisar el baño para checar los trabajos, pero salió en seguida, diciéndole al padrino, patrón pues creo que voy a colocar la puerta primero, el baño está muy mojado y no me va a permitir hacer los demás detalles, necesito que seque para seguirle, con los demás detalles para que le quede bien.
Yo seguía secándome y el albañil no quitaba su mirada de mí, un hombre 175 cm, casi de la misma estatura de mi pareja, moreno, pero por su trabajo y exposición al sol se veía casi negro, pelo rizado, barba cerrada, robusto, con venas salientes en sus brazos y cuello, se le notaba una panza chelera, vaya una chacal como comúnmente se define a ese tipo de persona.
Albañil: les molesta si me cambio aquí para empezar a trabajar? Pregunto, el padrino respondió para nada, está en su casa.
De una mochila casi rota saco un pantalón de mezclilla toda rasgada y manchada de cemento y pintura, y una camiseta blanca de tirantes que de no lavarla ya estaba casi negra, y se empezó a desnudar para cambiase de ropa, tenía el pecho lleno de pelos así como las piernas, las venas le saltaban por todos lados por su trabajo, su panza llena de vellos lo hacían ver más sexy, me le quede viendo, y el padrino se dio cuenta que en unos pasos llego hasta mí y me dio una nalgada, diciendo en voz alta,
Padrino: no puedes ver hombre por que luego se te suelta el culo, el albañil alzo la mirada para verme, y sonrió diciendo.
Albañil: no me veas así wey que me despiertas al chamaco, y no vas a querer dormirlo, yo me sonroje y me quede callado, pero mi pareja argumento:
Pareja: ni le de cuerda porque lo va a exprimir y va a querer más.
Albañil: apoco si muy tragón, quizá porque no ha encontrado un buen macho.
Padrino: Aquí donde la ve es bien puta, mientras más verga le da más pide y no tiene llenadera este culito, y me da otra nalgada.
Yo no sabía qué hacer, me temblaban las piernas, estaba nervioso y sonrojado, me extrañaba la actitud de mi pareja, se sentía como una puta en venta, ofreciéndose al mejor postor, pero extrañamente eso me excitaba también, el albañil quedo en pura trusa, y agarrándose su paquete que se veía grande, y dijo, no me lo den a desear si no me van a dar por que cuando este animal se despierta no hay quien la haga dormir, antes de que yo o mi pareja dijéramos algo, mi padrino me tomo de la cintura, y me llevo hasta el albañil diciendo, pues en esta vida hay que probar de todo, me dio la vuelta y me quito la toalla que ya tenía sujeta a la cintura y abriendo mis nalgas le dijo al albañil.
Padrino: cómo ve la mercancía, se anima?
Albañil: pues se ve rica, pero habría que probarla para decidir si esta rica realmente.
Padrino: pues ahí la tiene tome su probadita a ver qué le parece, yo seguía de frente a él, y mientras me seguía abriendo las nalgas para mostrarle mi culo al albañil, me decía al oído, te vamos a dar la usada de tu vida, para que andas de puta, te vamos a dar tu merecido.
Mi pareja se acercó y me dio la vuelta quedando de frente al albañil y me dijo, has lo que sabes hacer bebe, y me empujo del hombro hacia abajo quedando en frente del paquete del albañil que para entonces ya tenía la verga parada, yo no sabía que hacer aún no creía lo que está pasando me quede pasmado y no hice nada, el albañil se bajó la trusa dejando ver su vergota, 18 cm igual a la de mi pareja, venosa como sus brazos y casi negra que se confundía con el abundante vello negro que tenía, mi pareja me empujo de la nuca hasta llegar a la verga, diciéndome, toma bebe tu biberón, anda tomate tu lechita, empecé a mamarla como hasta entonces había aprendido, a recorrerla con la lengua, y desaparecerla toda en la boca, se la mamaba como si fuera acabarse el mundo, mi lengua se volvía una experta recorriendo el glande, mi garganta se contraía succionando esa delicia de verga, el albañil gemía y me pedía que no parara, pase un rato así, hasta que el albañil me tomo del brazo y me levanto, diciéndome, la mamas mejor que mi vieja, se ve que tienes experiencia.
Al voltear observe que mi pareja y su padrino estaban acostados en la cama y se fundían en un beso apasionado, mientras se masturbaban, el albañil me empujo del hombro hacia ellos diciéndome, has más verga para ti, así que a sacarle brillo, dos ricas vergas, bueno la del padrino era fenomenal, las empecé a mamar primero una por una y después quería meterme las dos al mismo tiempo pero la verga del padrino no me cabía, mientras el albañil le daba una buena lavada de cazuela a mi culito, que ya estaba muy bien dilatado, sus fuertes brazos me abrían las nalgas con tal fuerza que sentía que las iba a separar en cualquier momento, mientras su lengua se abría paso entre mis pliegues para entrar lo más profundo que podía, hasta que sentí que algo se introducía más la fondo, gire la cabeza para ver que era y el albañil ya me tenía ensartado hasta el fondo, mi culo estaba tan dilatado y floreado por la verga del padrino que dejo pasar la verga del albañil sin esfuerzos, cerraba los ojos y se mordía los labios, demostrando que estaba gozando metiendo su verga, deje que hiciera con mi culo lo que quisiera y me enfoque a seguir mamando esas ricas vergas.
Después de un rato se levantó el padrino y se dispuso a atenderme el culo también, diciéndole al albañil, ahora me toca a mí, al ver la enorme vergota, exclamo, no manches patrón la va a partir en dos con ese animalón.
Padrino: No se preocupe ya se la come toda, cuando usted llego la tenía toda adentro y la estaba disfrutando, es bien puta, mientras más vergas tenga más pide, no tienen llenadera.
Albañil: si se ve que es una hembrita golosa, tiene el culo bien caliente, como la puta que es.
Se salió el albañil y entro el padrino, a pesar de ya haberlo tenido adentro, me dolió bastante que entrara nuevamente, que me retorcí de dolor, y el padrino rio diciendo: haaa verdad, no que muy puta y aun no me la aguanta, arquie la espalda para que mi culo estuviera a toda su disposición el padrino se dio vuelo con mi culo, las arremetidas eran tan salvajes cada vez más, toma puta, trágatela toda, gózala perrita, querías verga no, atáscate ahora que hay, me decía el padrino, era un enorme placer tener esa tremenda verga en mis adentros por un rato, en eso mi pareja me jalo hacia el para que me montara en su verga que reclamaba mi culo como de su propiedad.
Me monte y empecé a cabalgar como loco, el padrino y el albañil se pasaron uno de cada lado parados para que yo siguiera mamando esas vergas mientras me montaba en la verga de mi pareja, pero mi culo quería más verga, entre gemidos, gritos, y mamada les pedía que me dieran más verga, así, que el padrino le dijo al albañil que me la metiera junto con la de mi pareja, el albañil puso cara de asombro y duda por un momento yo también dude que las aguantaría pero la excitación era más grande que me abrí las nalgas, para que el albañil viera que si la quería las dos a dentro, el albañil se acomodó y poco a poco me la fue metiendo, al principio me dolía mucho pero no quería dejar pasar la oportunidad, así que me relaje lo más que pude para poco a poco mi culito goloso fue dando paso las dos vergas hasta comérselas por completo, mis piernas me temblaban entregándose por completo a la pasión, mientras mi boca y garganta se ocupan de darle servicio a las descomunal verga del padrino.
Que puta te vez así, tragándote las tres vergas al mismo tiempo, no te las metes por la nariz y orejas no más porque no te caben, zorra, perra, disfruta, me decía el padrino, mientras me daba de cachetadas, mi pareja abría mis nalgas para dejar pasar las dos vergas con más facilidad, era una lucha de vergas por apoderarse de mi culo, una lucha por llegar más al fondo por adueñarse de mi agujero, mientras mi garganta succionaba con fuerza la verga del padrino que me agarraba de la nuca y me ahogaba con su animalote, sentí como su glande crecía dentro de mi garganta y no dejaba pasar el aire, trate de sacármelo pero sus grandes manos que sostenían mi cabeza no lo permitieron, sentí como me faltaba el aire, el padrino empezó a gritar como loco, avisando que se venía, te los voy a depositar hasta la panza para que no los regreses me decía, que voy a preñar por la boca, así quedaras preñada por los dos lados, y entre fuertes metidas sentí como se vaciaba en mi garganta, con el poco aliento que me quedaba mi garganta succionó hasta la última gota de leche de sus huevos, y me los tome todos, me retire lo más rápido que pude una vez que el padrino termino para retomar la respiración ya que sentía que me estaba desmayando, la excitación era tanta que empecé a moverme con una ritmo más rápido y entre arremetidas el albañil gritaba que pura eres como te las comes, bastaron unos minutos más para que mi culo experimentara la sensación de como dos vergas se vaciaban al mismo tiempo dentro de mí, la dos vergas escupían leche caliente que me quemaban el culo, era tan rico que me hizo venirme sin necesidad de tocarme, apreté el culo, mis dos anfitriones gritaban de placer al sentir la presión del culo en sus vergas y el padrino me besaba tan rico que mi verga dejo salir toda la leche que tenía acumulada en mis huevos, entre gritos de placer termínanos al mismo tiempo.
El albañil se recostó encima de mí, y los dos encima de mi pareja, el padrino se acomodó a un lado, y así nos quedamos por un largo rato, hasta recuperar las energías y que la excitación bajara, y poco a poco mi culo fue soltando las vergas en su interior que salieron empapados de leches mezcladas, nos quedamos acostados un rato más, yo en medio de tres deliciosos hombres.
Espero les haya gustado mis choco aventuras, jejejeje, hay más porque a partir de esto me dedique a experimentar más sobre el sexo y a disfrutar por supuesto, ya les estaré contando que mas siguió…
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