MI PRIMERA EXPERIENCIA GAY Y LAS QUE VINIERON DESPUÉS DE ESTA Parte 3

Mi hermano se entera de lo que tuve con mi amiguito de siete y me propone coger con el, acepto y mi culo termina siendo suyo.
Después de esas experiencias con mi amigo de mi edad y con mi amiguito de siete, también tuve una con mi hermano, pero a diferencia de las primeras, con el hice solo de pasivo. Me cogió y lleno el culo de leche por más de un año.

 

Mi hermano se enteró de lo que había tenido con mi amiguito de siete, me lo dijo un día sábado en el que nos quedamos solos en casa. Ambos estábamos viendo tele en su habitación, solo el tenia tele en su cuarto porque su madrina se la había regalado. Mi mama se despidió de nosotros y antes de irse lo llamo para decirle los deberes de la casa que debían de hacerse, cuando finalmente se fue mi hermano volvió a la habitación y se sentó a mi lado y sin más ni más me pregunto.

 

El: oye Ángel, es cierto lo que me han contado

Yo: ¿de qué?

Ya presentía que era sobre lo mío con mi amiguito de siete

El: de lo que hacías con Piero

Yo: ¿qué cosa?

El: es cierto que te lo cogías

Yo: ¿quién te ha dicho?

El: ¿por ahí escuche a alguien, es cierto o no?

Yo: si, pero no le vayas a decir a mis papas

Tenía miedo de que se fuesen a enterar y me castigasen y mirasen mal

El: ya, ya, pero dime, como. ¿Se la metiste por el culo?

Yo: si

El: ¿y cuando, ese día que me preguntaste?

Yo: si

El: ¿ese día nomas, o varias veces?

Yo: varias

El: y, ¿se sentía rico?

Yo: si

El: y a él le gustaba

Yo: si

Luego sin más ni más vino la propuesta, primeramente, se bajó su short dejando su erecto pene a la vista, nunca se lo había visto así de erecto y erguido, las veces que se lo había visto lo tenía flácido ya que era cuando nos poníamos a miccionar a la misma vez en el inodoro.

Teniendo ya su pene afuera me hablo

El: ¿quieres coger?

Al escuchar su propuesta lo mire y luego a su pene

Yo: ¿me la vas a meter?

El: ¿quieres?

Luego de decirlo teniendo cogido su pene desde la base lo sacudió.

Al mirar como sacudía su pene erecto me sentí tentado, yo ya había sentido el pene de mi amigo cuando lo frotaba contra mi ano y entre mis nalgas generándome placer, y ahora que veía el enorme pene de mi hermano deseé experimentar el sentir su enorme pene en mi culo, aunque era obvio que él no tenía pensado solo frotarlo entre mis nalgas y contra mi ano sino que quería metérmelo.

No lo pensé dos veces y acepté.

Cuando uno es niño no piensa en lo que está bien o mal solo se deja llevar por el placer y por darle gusto al cuerpo.

Yo: ya

El: sácate todo

Me comencé a desnudar al igual que él hasta quedar ambos despojados de cualquier prenda que pudiera cubrir nuestros cuerpos.

Ni bien nos desnudamos me dijo cogiéndose el pene

El: ya ponte

De inmediato me puse en cuatro y el sin perder tiempo se puso tras mío, me cogió el culo con ambas manos y apretó suavemente, luego de darse el gusto de tocar y sentir mi culo con sus manos poso su glande en mi ano (¡vaya!  qué bien se sentía), después de tiempo volvía a sentir un pene en mi culo. El jugueteaba apretando suavemente su glande contra mi ano, en ese momento yo solo sentía mi ano calentarse y ya deseaba que entrase en mí. El mantenía su glande posado en mi ano, en mi entrada, como si le estuviera haciendo conocer el terreno por el cual pronto iba a entrar, su pene ya comenzaba a expulsar líquido pre seminal sobre mi ano humedeciéndomelo, mi hermano expandió ese líquido con su glande moviéndolo de modo circular, yo por momentos solo ajustaba y luego relajaba mi ano. Luego de juguetear, mi hermano decidió que era el momento de preparar mi culo para el ingreso de su pene, dejo de posar su glande en mi entrada y en su lugar puso uno de sus dedos, comenzó a acariciar mi ano de modo circular a la vez que esparcía aún más el líquido pre seminal que ya antes me había dejado, sus dedos acariciaban los pliegues de mi ano, luego se centró en mi entrada, ahí movía su dedo de arriba hacia abajo presionando suavemente mi ano, lo hizo así solo un rato hasta que comenzó a introducirlo lenta y cuidadosamente. Cuando lo sentí entrando en mí comencé a ajustar y a relajar mi ano para ver la reacción de mi hermano; lo hacía para molestarlo, el solo atinó a decirme.

El: ya pues, no hagas eso

Yo solo le dije.

Yo: ya, ya

Y lo deje seguir sin ofrecer resistencia.

Al parecer el líquido pre seminal no era suficiente así es que me hecho saliva y continuo con su dedo explorador, me lo iba hundiendo más y más.

El modo de hacerlo era empujando hacia adentro, luego hacia su dedo hacia atrás, luego empujaba más adentro, nuevamente hacia atrás como tomando impulso y siguió así hasta llegar a la zona hueca y vacía donde mis esfínteres ya no ofrecían resistencia. Al llegar a este punto me lo hundió con todo hasta el fondo sin hacer una sola pausa, conseguido el objetivo comenzó a moverlo lentamente de adelante hacia atrás.

Si hacía falta más lubricación me echaba más saliva y continuaba dilatándome el ano.

Empezó con un movimiento lento y luego el movimiento de sus dedos de adelante hacia atrás se hizo más constante debido a que mi culito ya no ofrecía resistencia, ello le dio pie a mi hermano para que sume un segundo dedo a la dilatación de mi culo.

Nuevamente más saliva en mi culo y ambos dedos me los introdujo cuidadosamente hasta el fondo, esta vez entraron algo más ajustados, volví a ajustar mi culo para ver la reacción de mi hermano y el como buen hermano mayor me pregunto si me dolía a lo cual respondí con un no, deje de ajustar el culo y lo deje seguir. Me dilato bien el culo, sus dedos los podía girar con facilidad debido a la buena lubricación y dilatación que había hecho.

Finalmente teniendo ya mi ano bien lubricado por su saliva y también bien dilatado por sus dedos, procedió a penetrarme, poso su glande en mi ano y comenzó a hundírmelo lentamente, su glande se sentía súper duro y caliente, llego a un punto en el que mi culo ofrecía una pequeña resistencia para que ingrese todo el glande, nada que un empujón firme no lo solucionase, y así lo hizo, me cogió firmemente de las caderas y de un empujón firme entro toda la cabeza de su pene en mí. Sentí mi ano caliente, húmedo y baboso, y deseaba que su pene continuase enterrándose más en mí, y así lo hizo. Mi hermano me lo comenzó a hundir lentamente, el sentir como se iba introduciendo en mí atreves de mi ano y alojándose en mi recto me generaba placer. Me lo metió todo y se quedó quieto, nunca pensé que ser penetrado, que tener un pene alojado en el recto se sintiese tan bien.

Mi hermano al conseguir introducir todo su pene en mi culito solo atinó a decir.

Mi hermano: Ya está. No te duele ¿no?

Yo con vos de placer, complacencia y de sometimiento producida por encontrarme penetrado por el solo respondí.

Yo: no

Ni bien le dije que no comenzó a moverse algo rápido haciendo el mete y saca, cosa que me tomo por sorpresa ya que, aunque se sentía bien tener su pene metido en mí, mis esfínteres aún no se habían amoldado al grosor de su pene y por ello era un poco doloroso e incómodo,

Le dije espera y él se detuvo, en ese momento solo apoyé mi cabeza sobre el colchón y mis manos las puse donde no estorbasen y este más cómodo.

Mientras terminaba de acomodarme el pregunto muy atentamente.

Mi hermano: ¿ya?

Al parecer estaba deseoso de comenzar a cogerme

Yo: ya, despacio.

Y así fue, empezó lento y cuidadoso

El pregunto mientras se movía

Mi hermano: ¿así?

Yo: si

El continúo cogiéndome y mientras lo hacía dijo

Mi hermano: ¡Ah! que rico!

Yo solo estaba en silencio disfrutando pasivamente ser cogido por mi hermano mayor

 

Que bien se sentía, nunca pensé que me fuese a gustar tanto, las sensaciones que se despiertan en tu cuerpo al ser penetrado son únicas, se sentía extraño, pero se sentía bien. Comenzó lento y luego fue haciéndolo más rápido, mientras lo hacía me decía por momentos muy atento a lo que me pueda pasar como el hermano mayor que era.

Mi hermano: si te duele me dices

Yo solo le decía ya con la cabeza apoyada en la cama, rendido por el placer y sensaciones que despertaban en mí el estar siendo cogido por él. Llevaba un buen tiempo dándome por el culo sin sacar su pene, cosa que provoco que la saliva que lubricaba mi culito se comenzara a evaporar provocando así la fricción entre mi ano y su pene, se frotaban piel con piel, la de mi ano y su pene. Saco su pene por un momento para echar más saliva en mi culito, en el momento en que lo hizo sentí un vacío en mi provocado por la ausencia de su pene, de inmediato puse mis manos hacia atrás para coger mi culo y estirar mis nalgas, al hacerlo mi hermano escupió más saliva en mi ano y cuando volvió a metérmela volví a soltar mi culo.

Me continúo cogiendo más rápido cosa que me gusto y con una vos de sometimiento y rendición a él le dije.

Yo: sigue así

El solo atinó a decir

Mi hermano: ya

Seguido de eso ya vino un

Mi hermano: ¡ah! que rico!

Mientras me cogía sin parar, hasta que comenzó a desacelerar, daba unos mete y saca más lentos y finalmente se quedó quieto bien pegado a mí con sus testículos tocando mis nalgas. En ese momento sentí que de su pene expulsaba en mí interior enormes cantidades de un líquido tibiecito, pensé que se estaba orinando en mí.

No me asuste al pensar eso, el placer que sentía al tener su pene metido en mi estaba por encima de cualquier cosa, pero aun así le pregunte.

Yo: Te estas orinando

Mi hermano: no, es semen.

Nunca antes había oído esa palabra

Yo: que es eso

Mi hermano: es para que las mujeres salgan embarazadas y tengan hijos

No pregunte más y deje que me siga llenando el culo.

Debió ser su primera vez ya que expulso una buena cantidad de semen en mi llevado por el orgasmo y el placer de cogerse a alguien.

Luego de eyacular saco su pene de mi culo y un par de gotas de su semen que salieron de su pene cayeron en mi ano, el poso su pene en mi ano para dejarme sus últimas gotas. Luego se echó para atrás y cuando lo hizo recién deje mi posición para verlo, su pene aún estaba erecto y se iba poniendo flácido poco a poco.

Al mirarme y yo mirarlo a él solo dijo.

Mi hermano: ya esta

Yo solo atine a decirle

Yo: si

El: ¿te gusto?

Yo: si

El: no hay que contarle a nadie

Yo: ya

A partir de ese día mi hermano me volvió a coger muchas veces más, me cogió por más de un año.