Mi primera mamada
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola, este es mi primer relato, es totalmente verídico, como dato añadir que soy heterosexual, pero muy curioso 😛
Antes de esta primera experiencia gay que tuve, ya solia curiosear por internet, viendo videos porno gay de todo tipo, pero lo que mas me atraía del sexo gay era las mamadas, aunque curiosamente siempre fantaseaba con ser yo el que me comia una buena polla.
Esta historia transcurre en una madrugada, en la que yo como cualquier chaval de 20 tiernos años, salía de fiesta con unos cuantos amigos. En un principio la noche transcurrió como cualquier otra, hicimos botellón y yo y mis cuatro amigos decidimos, despues de haber bebido ya bastante, ir a una discoteca de la zona (omitiré el sitio, para mantener mi identidad en el más estricto secreto). Todo siguió como siempre, unas cuantas copas más y bailar un poco, y porque no decirlo, haciendo el ridiculo probablemente ya que nuestra coordinación estando borrachos es bastante inestable jajaja.
Lo que parecía que iba a ser una noche más giró radicalmente, cuando debido al efecto del alcohol y de mis cada vez más frecuentes fantaseos gay, decidí irme a casa e intentar cumplir mi fantasía de comerme una polla. Caminé durante un rato largo hasta que llegué a casa, serían las 4 de la mañana aproximadamente. Estaba muy cachondo, había estado todo el camino de vuelta a casa pensando en comerme una polla. Total que cuando llegué a casa, encendí el ordenador y entré en un chat gay, con la esperanza de encontrar a alguien dispuesto a cumplir mi fantasía. Después de un rato, iba perdiendo la esperanza, ya que encontraba muchos hombres dispuestos pero, la distancia era un problema. Hasta que cuando ya estaba a punto de darme por vencido, apareció un chaval, decía ser de mi barrio, tener 25 años, delgado con barba, y aseguraba total discreción. En un principio dudé, pero después de un rato de conversación, le invité a mi casa, que estaba sola, puesto que mis padres estaban de viaje.
Quedamos en una esquina al lado de mi casa, le pregunté como vendría vestido, "con una sudadera roja y vaqueros", me contestó. Entre dudas bajé a esperarle a la esquina pactada, pasaron 5 minutos y pensé que no aparecería, cuando a lo lejos vi una figura que venía hacia la esquina. Efectivamente, era él, era ese hombre que había accedido a cumplir mi fantasía.
Nos saludamos cordialmente, un apretón de manos y empezamos a hablar, le conté que era la primera vez que hacía esto, y que estaba nervioso, el me dijo que no me preocupara que solo pasaría lo que yo quisiera y que estuviera tranquilo, que me sorprendería la cantidad de heteros que hay como yo.
Así que, en esta situación nos presentamos en mi ascensor, me abalancé a besarle y él me metió la lengua hasta la garganta, yo ya estaba muy cachondo, las copas de la noche y la situación me habían hecho perder la cabeza, así que, me dejé llevar y empecé a palparle el paquete, analizando sobre el pantalón su polla ya empalmada.
Al llegar a mi casa, abrí la puerta y le indiqué que fuera al salón, enfrié un poco el momento, le invité a una copa. El se dirigió al salón y yo a la cocina a preparar las copas, he de admitir que las preparé a toda prisa para volver a reunirme allí con mi fantasía.
De vuelta al salón, brindamos y hablamos un rato, sentados en sofás separados, hasta que decidí moverme a su lado.
Me volví a abalanzar sobre él y empecé a sobarle todo el cuerpo. Le quité la camiseta y descubrí un torso con un poco de vello y unos pezones que pedían a gritos que pasara mi lengua, y así fue, comencé a chuparle y mordisquearle los pezones mientras que iba sobando su paquete por encima del pantalón.
A continuación decidí que ya había calentado mucho el ambiente y que era hora de ver esa polla que me iba a comer, le recosté sobre el sofá, me puse de rodillas en el suelo y desabroché el pantalón. Vi a través de sus calzoncillos ceñidos una polla muy empalmada y ligeramente arqueada.
Comencé a pasara la mano y la lengua por sus calzoncillos, hasta que empecé a ver una mancha en el calzoncillo, intuí que sería líquido pre seminal, vamos, que esa polla queria una buena mamada.
Le quité los calzoncillos y efectivamente, su polla brillaba de líquido pre seminal, así que la agarré con la mano, me detuve un momento… Escupí en la polla, la pajeé un poco y me la metí en la boca un poco. Al chaval le debió gustar como empecé ya que soltó un fuerte gemido.
Me empleé a fondo sacando brillo a esa polla, hasta que el chico se cansó de estar tumbado, se quitó los pantalones y los calzoncillos del todo, se puso de pie para que siguiera comiéndosela. Me agarró del pelo y comenzo a mover la pelvis sacando y metiendo la polla en mi boca, con sumo cuidado lo hacía, ya que no me metia ni la mitad de ese trozo de carne en la boca. Así que, le hice parar un momento y le dije que no tuviera miedo, que me la podía meter entera en la boca. Eso le debió excitar mucho porque empezó a agarrarme fuerte del pelo y a follarme la boca, que de vez en cuando se veía interrumpida esa follada, porque debido a mi inexperiencia, me provocaba alguna arcada.
A continuación, y después de estar al menos 15 minutos follandome la boca, se volvió a tumbar y me pidió que le comiera el culo, con la excitación que tenía me fue imposible negarme así que accedí, comence a pasar la lengua por su culo hasta que fui capaz de introducirla, mientras le seguía pajeando.
Después dijo que se la siguiera chupando y que le metiera dos dedos en el culo mientras tanto y eso fue lo que hice, continuamos así un rato más, hasta que me sacó la polla de la boca y comenzó a pajearse. Con cara de lascivia me dijo que le comiera los huevos, así que en esa situación estabamos, él pajeandose, yo comiendole los huevos con esmero y metiéndole dos dedos por el culo.
De repente, echó la cabeza para atrás y exclamó: "Me corro, me corro". A lo que yo respondí cogiendo su polla y metiéndomela en la boca, el chaval me miró con cara de sorpresa y de excitación y de repente tres chorros de lefa caliente inundaban mi inexperta boca. Le miré a los ojos y me lo tragué, y el me respondió con una cara de sorpresa y relajación. Hablamos un par de minutos después, me dijo que no parecia que era la primera vez que la chupaba, que le había encantado, después se fue y no volví a saber nada de él.
Este ha sido mi primer relato y experiencia gay, espero ansioso sus opiniones.
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