Mi primera vez como pasivo 3
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Cuando el operario de la gomería se fue y me quedé solo, sentía como pujaba mi chiquito, había cachado con un hombre, me había entrado en la cola una verga de hombre, nada que ver con la verga de mi hijastro ni con los juguetes que nos metemos con Jeison, había tragado leche de otra verga que no era la verga de mi hijastro, y me sentía bien, me sentía feliz, por decirlo de alguna manera.
Termina mi turno y vuelvo a casa, todo normal, cenamos con mi compañera, nos acostamos e hicimos el amor, ella en cuatro patas esperaba que le penetre el chiquito, y yo pensaba, que me gustaría estar así, esperando que fuera a mi a quien le estén por meter la verga en la cola.
Las relaciones con Jeison seguían siendo normales, pero yo quería una verga grande, como la del empleado de la gomería, hasta que me decidí y salí, con la escusa de que iba a correr, me fui en el coche hasta un parque lejano de casa, empecé a trotar y veía a otros chicos corriendo, hombres de mi edad o mayores, yo miraba desesperado a ver quien me mirara y sonreírme, no estaba haciendo ejercicio, estaba buscando verga, me sentía sudado, no me imaginaba que nadie se fije en una persona sudada y menos que lo quiera cachar, "ufffffff, que calor que hace", me dice un hombre de unos 50 años, lo miré y vi que se conservaba muy bien, "si, tremendo el calor, yo estoy todo sudado", le dije, sin dejar de trotar, "yo también, me voy a sentar un momento", me dijo el hombre, dejando de trotar, "bueno, nos sentamos juntos", le dije, dejando también de trotar, buscamos un lugar y yo vi un lugar que dentro de todo estaba bastante apartado de las miradas indiscretas, nos sentamos en el pasto, "haaaaaa, que fresquito, tengo toda la cola sudada", le dije, tratando de dejar ver que lo que realmente quería es que me cache, "yo tengo todo sudado", me dijo, también sentado en el pasto a mi lado, "como todo sudado?", le dije, mirando el bulto que tenía entre sus piernas, ya que tenía un pantalón super ajustado que le marcaba todo, "estas casado?", le dije, tratando de hablar algo con él, pero no dejaba de mirar su bulto, "si, pero si tengo un buen culete a mano, también lo follo", me dijo, los dos reímos, "y solo los culetes de chicas te gustan?", le dije, ya sin esconder mi verdadero propósito, "no, el tuyo también me gusta", me dijo, dejándome con la boca abierta, "así que el mío también te gusta?", le dije sonriendo, "y donde te lo podría dar?", le dije, ya sin disimulo ninguno, "vamos trotando hasta detrás del cementerio, ahí hay una caseta que esta abandonada", me dijo, y nos pusimos en pie, trotando hasta donde me dijo mi nuevo amigo, entramos, era una caseta que la verdad daba pena, pero para lo que yo quería era un palacio.
Le empecé a acariciar la verga por encima del pantalón, mientras él se lo iba bajando, dejando una verga semi dura, bastante larga y un poco menos gruesa que la del empleado de la gomería, "que hermosa verga", le dije, bajando mi pantalón para que me acaricie la cola y yo metí su verga en mi boca, sintiendo como se iba poniendo dura a medida que se la mamaba, Uffffff, que bien la chupas, como es tu nombre?", me dijo, moviendo su verga en mi boca, "me gusta que me digan mariquita", le dije, volviendo a meter su verga en mi boca, "que bien la chupas mariquita, espero que tu culo este a la altura de tu boca", me dijo ese hombre, pasando sus manos por mis nalgas, buscando mi chiquito con sus dedos, "a ver mariquita, date la vuelta y abre tus nalgas", me dijo, yo deje de mamar su verga y me pongo dándole la espalda, me agacho, me abro las nalgas y siento como acomoda su verga contra mi chiquito, "haaaa, haaaaaa", decía yo cuando ese desconocido me iba metiendo la verga en la cola, sentía como hacía fuerza y su verga se iba metiendo en mi cola, sentía como mi chiquito se abría a medida que su verga entraba y entraba, hasta quedar pegado a su pelvis, "que delicia de verga, me la has metido toda", le dije, moviendo mi cola sin dejar de abrir mis nalgas, sintiendo como me estaba cachando, como la hacía salir y entrar despacio de mi cola, "te gusta mariquita, te gusta como te follo?", me decía mi desconocido amante, haciendo que gima de placer a medida que me cachaba
"si, me vuelve loco tu verga rompiendo mi chiquito", le dije, moviendo mi cola para los costados, disfrutando de su hermosa verga, "ufffffff, que rico culo que tienes mariquita", me dijo, dándome una fuerte palmada en una de mis nalgas, haciendo que gima de placer, "despacio, cacha mi cola despacio, quiero disfrutar tu verga lo mas posible", le dije, sintiendo como me daba otra palmada en la otra nalga, "así que te gusta mi polla mariquita?", me dijo, y la metió hasta lo mas adentro que pudo de mi cola y casi me levanta literalmente en su verga, yo grité de placer al sentir como me clavó su verga hasta el fondo de mi cola, "haaaaaaaaaa, si, así, rompe bien mi chiquito, rompe bien mi cola", le grité con toda su verga ensartada en mi cola, él me agarró de la cintura y me levantaba en su verga, parecía que me quería meter sus huevos en mi cola, yo gritaba de placer al sentir como me cachaba de esa manera, "que rico me cachas, me estas destrozando la cola, pero sigue, no pares, mi cola es toda tuya, destrózala a tu gusto", le gritaba yo sintiendo un tremendo placer al ser cachado de esa manera, "te voy a dejar el culo tan roto que no vas a poder ni sentarte", me dijo, cachando tan fuerte mi cola, que yo solo gritaba de placer, "si, si, no me tengas pena, destroza mi cola, hazme todo tuyo", le gritaba, loco de placer,.
Siento que la saca, deja caer saliva en la cabeza de su verga y me la mete de una sola vez con todas sus fuerza, haciendo que de un grito que espero no haya habido nadie por ahí, ya que lo hubiera escuchado, "así mi amor, así, vuelve a meter tu verga así, hazme gritar como una perra", le pedía, gozando lo que jamás pensé gozar con una verga, la vuelve a sacar y la vuelve a meter con la misma fuerza, pero no se puso saliva, no me importó, ya que tengo el chiquito tan abierto que solo sentía placer al sentir como me clavaba su verga en la cola, "hayyyyyy, que rico, como te cachas a tu puta, a tu perra, que rico como me das verga por la cola, no pares, no pares", le gritaba sintiendo que de la forma en que me estaba cachando sentía que me escurría sin tocar mi verga, "te voy a dar toda la leche en el culo", me dijo, cachando mi cola con mas fuerza y rapidez que antes, "si, si, dale toda la lechita a tu perra, ese lechita es mía", le gritaba, sintiendo como me empezaba a escurrir sin tocar mi verga, y mi desconocido amante, empezó a gritar y a mover su verga en círculos dentro de mi cola, sentía como su verga palpitaba dentro, sabía que me estaba llenando la cola de leche, yo hacía fuerza con mi cola para atrás y él hacía fuerza con su verga para adelante.
Estábamos pegados el uno contra el otro, su verga seguía dentro de mi cola todavía, "yo vengo todos los días a correr en este parque, a la misma hora, así que cuando,quieras que te follen el culo, solo ven a buscarme", me dijo, sacando su verga de mi cola, sentí como me salía leche del chiquito, lo quedé mirando mientras él se arreglaba su pantalón y se iba y me dejaba dentro de esa caseta, con mis pantalones en mis tobillos y mi cola correando leche.
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