Mi Primera Vez Con Eduardo

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por marakmc.
Hace algún tiempo conseguí un trabajo de cobrador de una unión vecinal en una zona rural, eran grandes extensiones y algo agotador, me movilizaba en moto, mis dias fueron pasando sin novedad hasta que llegué a una casa muy solitaria bastante alejada donde vivía un hombre de unos 55 años solo. Al principio me atendió un poco frio y mas cuando le dije a que iba, me respondió que no tenía dinero y que volviera en otro momento.

A la semana siguiente pasé nuevamente por su casa, primero me atendió por la ventana y luego salió al patio con su cabello mojado y en slip, noté un bulto apreciable, algo de panza y unas piernas musculosas y peludas. Nuevamente me dijo no tengo plata, vení otro día. Dado que había quedado un poco impresionado por su cuerpo decidí volver a los dos dias, se notaba el disgusto que le provocaba a él cada vez que me veía. Pero mis ratones comenzaron a tejer fantasías en mi cabeza y decidí que tenía que llegar a algo con ese tipo bien sea cobrarle la cuota, hacerme coger con él o ambas. Esta vez decidí usar otra estrategia, antes de llegar a su casa aprovechando la soledad del campo detrás de unos arbustos cambié mi slip por una bombachita negra muy cavada que no era colaless y mi pantalón por uno de mujer de tela muy fina color beige y bastante ajustado que dejaba notar la forma de mi bombacha,

Al llegar a su casa le dije con voz un tanto afeminada, que solo quería pedirle un vaso de agua porque tenía mucha sed. Con su mala cara de siempre me hizo pasar a una galería y trajo un vaso de agua fresca, se quedó parado sin decir palabras mientras tomaba el agua, yo moría de ansiedad y nervios por su reacción, otra vez con mi voz aflautada le pedí otro vaso y luego le dije si me daba permiso para ordenar mis papeles, accedió y me senté muy delicadamente. Traté de entablar una conversación con él pero era muy introvertido así que no logré mucho, antes de irme me agaché a acariciar un perrito que jugueteaba a mis pies y paré bien mi cola para que él la viera, no noté mucho su reacción pero antes de irme con algo de resignación me dice venite mañana a última hora. Yo le agradecí y descaradamente lo miré de pies a cabeza deteniéndome un poco en su bulto.

Al otro dia decidí llevar todo mi arsenal, me depilé toda la cola y parte de mis piernas y con mucha ansiedad me fuí en mi moto hacia su casa, latía fuerte mi corazón y mi cabeza no paraba de imaginar cosas. Después de un viaje que me pareció interminable antes de llegar a su casa paré y me cambié la ropa igual que la vez anterior, al llegar a su casa, crucé el puente y salieron a recibirme sus perros, en eso el sale y me hace señas que siga con mi moto hasta adentro de la casa. Me pareció un buen signo.

Él estaba con vermuda de jean un tanto rotosa y el torso desnudo, extendí la mano para saludarlo con cierta delicadeza y él me estrujó la mano con sus tremenda tenaza; le pedí disculpas con cierta exageración por la cobranza y aproveché para arreglar mis ropas de modo que resaltaran mis atributos. Me invitó cerveza y nos sentamos a conversar, estaba totalmente cambiado, descaradamente se pasaba la mano por el bulto masajeandoselo mientras conversábamos y yo descaradamente no le quitaba los ojos de encima cuando lo hacía. Me contó que vivía solo porque su mujer lo había abandonado por otro hombre hace muchos años y que por lo tanto no quería saber nada con mujeres, yo me compadecí de él y con ingenuidad le pregunté que siendo un hombre jóven como aguantaba vivir solo, el me dijo que por ahí solía visitar a una vieja amiga suya llamada ¨manuela¨y se sonrió. Se levantó y se metió a la casa y luego me dice vení, voy a su llamado y entré a la habitación tenía un gran desorden de ropas y en una silla varias revistas porno, se sentó en la cama y me dice abrí el ropero que ahí tengo la plata, empiné bien mi cola para que el la viera y al abrir veo en la puerta un poster de una mujer desnuda. me sonrojé al mirarla y al girar para preguntarle donde estaba lo veo con su pija afuera del pantalón masturbandose.

Eso me inhibió un poco y le dije ay que hacés asqueroso. Me dijo acá tengo la plata vení buscala. Su cara era distinta, vení putito no tengas miedo si esto es lo que andas buscando. Ay por qué me decís eso le dije. Porque tengo ganas de culiarte, tenés un culo muy rico, entonces aproveché la ocasión y le dije te parece? y giré para ofrecerselo y él me dio un chirlo que me dejó la cola ardiendo, me dijo bajate el pantalón trolito. Yo desabroché mi pantalón y lo bajé lentamente contoneando mi cola, el se levantó y me bajó la bombacha para cojerme pero le dije esperá papito vamos mas lento.

No, me dice quiero meter la chota en ese orto. Bueno mi amor pero dejame que te la chupe un ratito.

Entonces giré y me agaché a chuparsela, tenia un poco de olor a transpiración pero en ese momento no me molestaba sino que aumentaba mi excitación. Era una pija enorme, gruesa, larga y dura, trataba de meterla a toda en mi boca pero me daban arcadas le chupé los huevos y también recorría con mi lengua alrededor del tronco de su pija en esa mata de bellos olorosos. Estaba fuera de control, subí por su vientre hasta llegar a su pecho sentía su piel salada por la transpiración, busqué sus labios y él sin mediar me dio un beso, con su lengua exploraba mi boca y sentía que me iba a reventar los labios de la fuerza con la que me besaba, me dejaba sin respiración y yo me estaba asustando un poco, notaba mucha desesperación en él, su cara estaba como desencajada y temía que me hiciera doler o algo parecido. luego tomó mis hombros y me dijo ponete que te quiero culiar, ay pero despacito mi amor por que me va a doler, la tenés muy grande le dije. me arrodillé en la cama y sentí su pija apoyada en mi orto luego una fuerte embestida que me hizo cortar la respiración del intenso dolor, le dije ay pará que me duele!!!. y el parecía no escucharme trataba de ponermela de nuevo, entonces me giré y le dije mirá hacelo despacio o me voy. bueno me dijo y la apoyó nuevamente. la tomé con mi mano y la fuí apoyando despacio en mi cola al tiempo que me colocaba un poco de saliva para lubricarla, logré que metiera su glande pero luego vino una embestida que me hizo gritar y me salieron lágrimas, con mi mano traté de contener sus embestidas pero estaba fuera de si. Yo le dije entre sollozos mi amor esperá que me duele pero eso parecía excitarlo mas porque me daba con mas fuerza y me empezó a dar unos chirlos que me dejaban ardiendo las nalgas. Yo traté de tomar alguna posición que no me doliera tanto pero él no paraba y empezó a decirme: querías pija puto rico? acá tenés.

Mi dolor comenzó a transformarse en placer y comencé a acompañar sus movimientos sintiendo como su pija abría camino dentro de mi cola. así estuvimos un rato hasta que acabó abundantemente dentro de mi cola, sentía sus chorros que no paraban y luego al sacarla sentía que se desbordaban de mi culo corriendo por mis piernas, yo pasé mis dedos recogiendo esa leche y los llevaba a mi boca. Mi culo era un manantial de semen, era impresionante la cantidad de leche que me había hechado. Él quedó tirado en la cama con su pija semierecta, yo aproveche para chuparsela y sacarle hasta el último resto de leche y tragarmela.

Luego me dijo que le había gustado y me pidió disculpas por el desenfreno es que hace mucho que no cojo ni me pajeo, me dijo.
Luego de lavarme la cola, salí de su casa ya había anochecido. Pero a la semana siguiente volví porque había olvidado cobrarle la cuota ese día.