Mi Primera vez con mi Ex 40 años Mayor que yo.
Mi primer y único hombre tenia 40 años mas que yo..
Bueno esta historia empezó cuando yo tenia 16 años mas o menos, siempre tuve una atracción hacia los hombres maduros y gorditos pero no me atrevía a experimentar ni nada por el estilo, frecuentaba los chats gay pero nunca concretaba nada hasta que empecé una bonita conversación con un hombre de 57 años llamado Marcelo y que vivía en mi ciudad, llevábamos horas conversando e intercambiamos números para seguir en contacto.
Después de un par de semanas chateando a diario y a todas horas Marcelo me invito a salir, tenia mucho miedo y vergüenza por que nunca había salido con otro hombre en un plan romántico pero como teníamos mucha confianza y era bastante lindo conmigo yo acepte. Yo lo había conocido solo por fotos, me gustaba mucho, cuando llego por mi me quede muy sorprendida ya que era todo lo que yo estaba buscando, bastante varonil, canoso, velludo y gordito.
Nuestra primera cita fue de ensueño, el fue bastante caballeroso, fuimos a pasear y cenar, me trataba como a una damita y yo me empecé a enamorar de el. Después de varios días el me pidió que tuviéramos una relación y yo obviamente encantada acepte, nuestro primer beso fue algo que nunca olvidare ya que estaba muy nerviosa pero al sentir sus labios, su lengua y su abultado bigote todo despareció y se convirtió en algo placentero y que sin lugar a dudas me éxito pero no lo quise hacer notorio.
Pasaron un par de meses y Marcelo me convenció de ir a vivir con el, cabe recalcar que yo vivía con mis tías, ellas sabían sobre mi orientación sexual y me apoyaron en mi decisión. Una de las cualidades de Marcelo que mas me enamoro era que nunca me presiono a que tuviéramos relaciones, el sabia que era virgen y que tenia miedo a empezar mi vida sexual así que fuimos de a poco.
Una de las primeras experiencias que tuvimos cuando ya vivíamos juntos fue el sexo oral, los besos nunca faltaban en nuestra relación y siempre subían un poco mas de nivel hasta el punto en que deje a un lado mi nerviosismo y empecé a acariciar su pene sobre el pantalón, obviamente el estaba muy excitado lo podía sentir en su respiración y en su erección, Marcelo abrió su cremallera y pude contemplar por primera vez su pene, me impresiono mucho su grosor aunque era pequeño, yo procedí a masturbarlo mientras seguíamos besándonos por que no sabia como tomar la iniciativa para empezar con el sexo oral, luego lentamente empezó empujar y acomodar mi cuerpo para colocar mi cara frente a su pene y de la misma sutil manera empezó a acercarlo hacia mi boca, yo empecé a besarlo ya que se me hacia muy grueso como para que entre en mi boca pero luego lo logre!. Su sabor, su olor eran algo tan excitante como el mismo momento que estábamos viviendo, Marcelo me dijo que iba a terminar y por instinto empecé a mamarlo de una manera desenfrenada hasta que sentí como salían chorros de su semen con mucha fuerza en mi boca, no sabia que hacer, tuve varias arcadas y simplemente lo escupí, Marcelo me abrazo, me beso y me dijo que este tranquila por que todo estuvo de maravilla, yo me sentía algo extraña pero satisfecha por mi primer acercamiento al sexo.
Pasaron un par de semanas en donde a veces solo nos besábamos y acariciábamos o volvíamos a practicar el sexo oral, hasta que llego el día cero como yo lo llamo. Era una tarde de domingo común y corriente donde estábamos los dos viendo TV en la sala cuando Marcelo empezó a acariciar mi pierna sutilmente ( cabe mencionar que yo desde que empecé a vivir con Marcelo en casa usaba ropa femenina) ese día llevaba puestos unos shorts de licra y una playera algo ajustada, yo voltee para darle un besito en la boca pero el empezó a besarme muy apasionadamente y yo le correspondí, como era usual yo empecé a tocar su pene y como nunca el metió su mano en mi ropa apretando mis nalgas fuertemente, a mi me gusto y lo permití, luego bajo mis shorts y mi ropa interior, no dejábamos de besarnos pero en mi mente ya me imaginaba que el día en que perdería mi virginidad había llegado, la situación era tan excitante que sin darme cuenta ambos estábamos completamente desnudos, Marcelo me pregunto si estaba lista y con un suspiro le dije que si, me acostó boca abajo en el sofá mientras acariciaba mi espalda, luego bajo a mis nalgas las cuales abrió y después de soltar un Que Delicia! puso su boca directamente en mi ano besándolo y jugueteando con su lengua, yo empecé a gemir por el placer tan grande que estaba sintiendo lo cual excito mas a Marcelo y de inmediato me pregunto si quería que fuera su mujer y sin pensarlo dos veces le dije que si que estaba lista, Marcelo me acomodo, me puso en 4 y corrió a ver un frasco de crema hidratante para lubricarme, yo estaba con una mezcla de sentimientos ya que tenia miedo pero la excitación que había provocado mi hombre en mi era mas fuerte, cuando él regreso procedió a ponerme la crema en mi ano con un movimiento circular y tratando de introducir un poco su dedo lo cual no voy a negar que me empezó a preocupar por que dolía mucho, luego empezó a poner crema en su pene, se acerco a mi y me beso para decirme de una manera muy amorosa que le avise si me dolía o algo a lo que yo solo asenté con la cabeza, yo sentí que había puesto su pene en la entrada de mi ano aun virgen y empezó a empujar despacio, por la lubricación al principio se resbalaba y se iba en otra dirección hasta que la cabeza de ese pene pequeño pero muy grueso entro de golpe provocándome un dolor horrible, mi reacción fue gritar y tratar de moverme pero el me sujetó de la cintura y me dijo que el dolor iba a pasar, solté un par de lagrimas pensando que lo peor había pasado hasta que empezó lentamente a bobear, sentía que me desgarraba y entre lagrimas le dije que por favor pare, de inmediato Marcelo saco su pene de mi ano, yo me voltee boca arriba llorando y él algo asustado me dijo que le perdone ya que no quería lastimarme, lentamente me levante del sofá y me di cuenta que habían unas pequeñas manchas de sangre lo cual me asusto mucho, Marcelo me abrazo y me llevo a la ducha allí me ayudo a ducharme y no dejaba de disculparse, en fin mi primera vez resulto dolorosa y algo traumática.
Pasaron al menos 4 días donde me dolía al momento de sentarme o ir al baño, lo volvimos a intentar luego de una semana con un resultado algo similar, cabe mencionar que al tercer intento las cosas salieron mejores empezando así una vida sexual muy activa con Marcelo, la cual seguiré compartiendo en futuros relatos. Saludos a todos y gracias por leer.
Estoy es la sección GAYS, no de afeminados, deja de tratarte como mujer, que asco