Mi primera vez y con un hombre mayor!
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por davidalbe.
Mi nombre es David, tengo 25 años y no soy nada del otro mundo, mido 1.77, blanco, cabello castaño, ojos claros, bastante delgado puesto que peso 61 Kg, un hombre normal con la curiosidad de experimentar y vivir su lado gay o bisexual. Con esa curiosidad empecé a frecuentar chats gay de mi ciudad al principio las cosas eran aburridas entraba buscaba alguien con quien chatear por lo general no lo encontraba y salía del chat, paso el tiempo y un día entre al chat estaba a punto de desconectarme porque nada bueno pasaba cuando recibo un mensaje que decía “Hola, ¿como estas?” respondí rápidamente porque su Nick me pareció curioso “Loco x los pies” (debo confesar que soy un fetichista empedernido, me encanta jugar con esa parte del cuerpo), empezamos una charla normal en donde nos conocimos un poco, el tenia 47 años, soltero, bisexual, vivía solo, con el gusto por los pies, ese día cambiamos correos, nos agregamos a skype y dejamos la charla en ese punto, la verdad creía que eso no pasaría a mayores así que me desconecte sin mucha expectativa.
Los días pasaron y empezamos a charlar casi siempre, solo era por skype, las charlas cada vez subían mas de tono, yo como un adolecente siempre tembloroso al chatear cada vez me animaba mas a conocer mi lado oculto, pasaron los meses y una noche conecto su web cam para mi, y empezó a hacerse una deliciosa paja mientras yo le escribía, hasta ese momento jamás había mirado otro pene en vivo que no sea el mío, eso me éxito deseaba ser yo el que tenía su pene entre sus manos sobándolo y dándole placer, termine metiéndome una paja deliciosa mientras él hacía lo mismo, me corrí soltando chorros de semen los cuales me imaginaba sobre su vientre, en definitiva fue una noche excitante que me dejo más que animado a continuar con el asunto pero el miedo y la inseguridad siempre me impidió llevar eso hasta un plano personal todo se daba por medio de una pantalla.
Nuestra rutina siguió por ese estilo durante mucho tiempo, hasta que un sábado mientras estábamos chateando me decidí por completo y le dije que quería verlo al día siguiente, así que rápidamente terminamos y cuadramos la forma en que nos miraríamos, el practicaba ciclismo y yo también así que por mi comodidad le dije que nos miremos al día siguiente y salgamos en la bicicleta, sin poner objeción acepto y así fue como acordamos vernos a las 8 am a unos kilómetros de la ciudad, yo muerto de los nervios me acosté y dormí ansioso esperando que amaneciera pronto.
A las 7 de la mañana el despertador sonó, estaba asustado pero decidido, tal vez el se había dado cuenta de eso por eso me llamo y pregunto si asistiría a nuestra “cita”, mi respuesta fue positiva así que rápidamente colgamos, yo desayune algo aliste mi bicicleta y salí a su encuentro, el trayecto se me hizo corto y a las 8 am yo ya estaba ahí como le había prometido, pasaron 5 minutos cuando el llego, jamás me había visto la cara así que como yo era la única persona ahí se acerco y pregunto mi nombre, -Hola, eres David? Fueron sus primeras palabras, temblando de los nervios y con la voz entre cortada respondí, -Si, soy yo, tu eres Frank verdad?, el me dijo que sí, nos saludamos con un apretón de manos y decidimos empezar a pedalear, nos fuimos por un lado montañoso junto a un bosque lugar que casi nadie conoce por ende es muy solitario, hablábamos normal como un par de amigos de todo lo que se nos ocurría mientras continuábamos nuestro trayecto, mientras pedaleábamos me di cuenta que en algunas subidas él se quedaba atrás y cuando me levantaba de mi bicicleta para pedalear miraba mi trasero y mordía sus labios, al notarlo empecé a hacer lo mismo, dejaba que me adelante el se paraba en sus pedales y podía ver su trasero grande, el lo movía de un lado a otro para que yo me excite mas y eso le funciono mi pene rápidamente se puso duro como una piedra, de pronto el freno abruptamente y me dijo que le dio un calambre se tiro al suelo y me pidió que estire su pierna sin pensarlo le ayude, en el suelo levanto su pierna y se la estire mirándonos fijamente, mientras lo hacia él la movió de tal forma que mi pene roso su culo, nos quedamos así por unos instantes mire como su pene empezaba a endurecer no perdí el tiempo y decidí tocarlo por encima de su ropa, no era muy grande, si grueso, bien depilado era una verga deliciosa a mi me encantaba
eso le encanto así que rápidamente tomo mi pene que ya estaba duro y lo acaricio de forma lenta y delicada como si fuera su bien más preciado, nos miramos fijamente y sonreímos, de repente me tomo por la cintura me acostó y ahora era él quien estiraba mi pierna mientras rosaba su pene en mi culo me apretaba con fuerza al suelo y me embestía con más velocidad, me encantaba sentir su verga por mi culo, por unos segundos me perdí en otro mundo, solo escuchaba su respiración mientras miraba al cielo y pensaba, -vaya aquí estas teniendo una experiencia gay con otro hombre mucho mayor que tu- de repente algo me hizo volver en mi, era su boca sobre mi pene chupándolo como si de un dulce se tratara, primero se concentraba en la cabeza después bajaba y se metía mis bolas en su boca, las dejaba limpias y regresaba era increíble, se metía mi verga a la boca y su lengua hacia maravillas, la comía toda y no dejaba ningún espacio sin recorrer, en un momento no aguanto más me tomo de la mano y me llevo hasta un lugar en donde nos escondimos un poco entre los árboles, se puso de espaldas roso un poco su culo en mi pene bajo su licra dejando al descubierto ese par de nalgas que devoraría, saco de sus cosas un poco de lubricante que tenia lo puso en su culo se aferro a un árbol y me dijo metelo!
Sin pensarlo lo hice, saque mi verga me puse un condón y empecé a penetrarlo, al principio costo un poco pero finalmente entro, entre quejidos el pedía que le dé suave, así que empecé a darle muy despacio como quería y poco a poco según sus gemidos iba aumentando la velocidad el gemía de placer y me decía que yo era su macho, me tomaba las nalgas y hacia un movimiento circular que me volvía loco, con algo de habilidad tome su pene mientras le daba y empecé a pajearlo mientras me pedía que lo coja en 4 yo solo estaba para complacerlo, así cuando se puso en esa posición lo embestía con furia mientras el gemía del placer y cada vez pedía más, hasta que soltó un gemido y dijo me vengo, su semen caía a montones él lo tomo con su mano y se lo llevo a su boca y hábilmente esparció un poco de su semen en mis nalgas eso me puso a mil, el se dio cuenta y mirándome a los ojos dijo dame como a tu perra,, mm era delicioso, el gemía del placer a la sombra de un árbol, excitado por tanto placer empecé a sentir que mi semen saldría en cualquier comento cuando estaba a punto de correrme el se dio cuenta así que quito su culo se volteo saco mi condón, y empezó a mamarlo hasta hacerme correr en su cara
le encantaba que le caiga en su boca y cara hice que se tome toda mi leche, y que limpie bien mi verga, al final nos quedamos un rato sobre el pasto, nos miramos y como mi pene nuevamente tuvo una erección lo tomo con fuerza me miro y dijo que si quería seguir, mi respuesta claramente fue un sí, así que me dijo vamos a mi apartamento quiero que mi niño me deje el culo lleno de leche, esta fue mi primera experiencia y fue deliciosa jamás había sentido tanto placer, y por cierto lo que ocurrió en su apartamento será historia de un nuevo relato.
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