Mi primo Gio y su hermanastro Leandro
Como entre al “Club de la masturbación” con mi primo y su hermanastro y como tuve mi primera y eyaculación.
En este relato narrare como tuve mi primera eyaculación a los 12 años masturbándome con mis primos de 24 y 26 años.
Todo comenzó un día cuando estaba en casa de mi abuela, estaba aburrido y decidí salir a caminar a un área verde en común entre todas las casas donde mi abuela vive iba con mis dinosaurios de juguete pues tenía cerca de 12 años, ya que es un fraccionamiento privado y era una especie de parque en colina donde había mucho pasto y arboles de todo tipo, ahí vagueando me encontré con unos primos que eran nietos de una hermana de mi abuela, los vi muy entretenidos y manoseándose la verga entre ellos, cuando me acerque rápidamente se separaron y sonrojados me dijeron que no comentara nada que solo estaban comparando sus vergas, ellos eran mas grandes que yo, tendrían entre 24 y 26 años, yo les dije que no diría nada siempre y cuando me las mostraran, hago un paréntesis aquí ya que aunque soy activo al 99% me gusta y disfruto mamar una buena verga y tocarlas.
Ellos un poco confundidos aceptaron y me las mostraron, el primero de nombre Gio era el de 24 años, tenia una verga normal, yo estimo unos 14 cm, nada espectacular, pero cuando su hermanastro Leandro me mostro la suya quede enamorado de esa verga, era una verga gorda como de 10 cm de diámetro y unos 19 de ancho, imagino que vieron mi cara cuando esa verga llena de pelos me dejo babeando y desosó de mamarla, me invitaron a casa de su abuela para “pajearnos (masturbarnos)” entre primos.
Yo ya caliente acepte pues quería y tenia que tener esa verga de una forma u otra, caminamos un par de metros y llegamos a la casa de su abuela de ellos, nos metimos a una recamara que ella tenia para cuando iban mis primos de visita y el primero en romper el hielo fue Gio diciendo -Pues a lo que venimos no?- y sin mas se bajo los pantalones y los calzones dejando su verga al aire, un poco cohibido le siguió Leandro pero no por que su hermanastro tuviera la verga de fuera y soltando liquido pre seminal sino por mí, eso lo supe después.
Leandro se paro y con un poco de vergüenza se saco la verga y sus trusas ajustadas que llevaba cabe mencionar que Leandro tenía mejor genética que Gio ya que el no era familiar de él, eran como dije hermanastros, y es que Leandro hacia futbol americano y pues a esa edad se imaginaran el cuerpo marcado que tenía así como unas piernas grandotas y unos brazos enormes, siempre me han llamado la atención las personas así, a pesar de estar avergonzado por la situación su verga esta muy dura, con venas marcadas y parecía que estaba orinando por el exceso de liquido pre seminal que emanaba, yo quería en ese instante ponerme de rodillas y sentir esa verga en mi boca, pero no podría dejar que mis primos supieran que era “marica”.
Gio que era el mas morboso fue el que me saco de ese transe en el que estaba y me dio un codazo y me dijo -Te toca a ti, sácate la verga- Yo ya estaba calientísimo, me levante de la cama para bajarme mis trusas y emanaba bastante liquido preseminal, ambos se me quedaron viendo pues no es por presumir, pero tengo una verga de buen tamaño, 18 cm de largo por 10 de ancho y unos huevos grandes que cuelgan bastante. Nuevamente Gio el mas calenturiento de los tres dijo -Pues a lo que venimos chavos, jálenle el pescuezo al ganso (masturbarse en México) y Leandro le comenta -Pero pon una porno para jalárnosla a gusto-, Gio inmediatamente se acerco a la TV y puso un VHS, salía una mujer tetona a la cual le estaban haciendo sexo oral, un chico más joven que ella y Leandro dijo -Que rico como cuando les chupamos la panocha (vagina) a las gemelitas. Yo en ese instante pensé “Serán las primas que son gemelas?” la verdad no le di importancia, yo comencé a disfrutar y ver la película al mismo tiempo que observaba esas vergas, en una escena la chica de la película le hacia sexo oral al joven el cual tenia una verga grande y completamente rasurada, sin querer pensé en voz alta “Esa verga que tiene ese chavo se ve rica”, mis primos dejaron de pajearse y me voltearon a ver, en ese momento me di cuenta de lo que acababa de decir imagine lo peor pues ellos eran super “Machos” y toda la familia muy religiosa y obvio las “joterias” no lo veían bien.
Me quede helado y se me bajo de inmediatamente, comencé a sudar frio y me dijeron, al mismo tiempo los dos – “No nos digas que te gusta la verga”- en coro y parecía que se habían puesto de acuerdo, yo no supe que decir y me comentaron: -Es rico probar de todo- y comenzaron a contarme una historia que me dejo pensativo, y mas caliente de lo que ya estaba…
Comenzó Leandro a platicar: Mira no te preocupes es normal que quieras probar, cuando yo llegue a vivir aquí con Gio me sentía incomodo pero mi mama me hacía bañar con él para llevarnos bien, al inicio me daba pena y le pedía que se volteara cuando me tenia que lavar la verga o el culo pues no estaba acostumbrado a eso jaja, y el me daba arrimones y me hacia bromas que me molestaban, pero poco a poco comencé a perder la vergüenza con el y esperábamos ansiosos el baño para darnos arrimones jaja, -rieron ambos pero ya se veía que comenzaban a excitarse de nuevo- seguíamos sentados con las vergas de fuera mientras Leandro seguía contando: -Llego un momento en el que se nos paraba la verga y nos frotábamos y sentíamos rico, todo esto paso cuando teníamos 15 años y aun no sabíamos nada de pajearnos o masturbarnos y menos de coger-.
Hizo una pausa y trago aire, -Un día visite a mi papa ya que lo veía cada 15 días o a veces cada mes, cesa vez me anime a preguntarle sobre esas coas de hombres, el era un poco seo en ese aspecto, no hablaba conmigo sobre la pubertad ni nada, solo me dijo que a veces un hombre se tiene que pajear y me ilustro con su mano el movimiento que tenia que hacer y se marchó. En la noche intenté imitar el movimiento que hizo mi padre al aire y sentí algo indescriptible, no sabía que tenía que hacerlo constantemente hasta eyacular ya que como te dije no sabia nada de eso- Después de decir esto me alboroto el cabello y Gio continuo la conversación.
-Cuando este cabron regreso de ver a su padre me dijo que me enseñaría algo, pero debía esperar a la noche, yo pensé que sería alguna revista porno para ver tetas y puchas (vaginas), total paso la noche y como compartimos habitación, se paro puso seguro y el muy cabrón me enseño la verga ya dura y le dije “no soy joto wey déjate de mamadas”-. Ambos rieron,pero como esa risa incomoda y morbosa, -Y no dijo nada el cabron y comenzó a masajearse la verga, yo solo lo miraba y me dio morbo la verdad y me dijo, haz lo mismo con tu verga, comencé a imitarlo y no mames sentí riquísimo- Yo escuchaba atento la conversación, pero no pude evitar ver que sus vergas de nuevo estaban erectas y lubricaban demasiado.
Gio siguió contándome que a partir de esa noche esperaban a que sus padres se durmieran para jalarse la verga, empezó a hacerse tanta su adicción a masturbarse que lo hacían en el baño, o se toqueteaban entre ellos para que uno sugierajalársela.
-Nos hicimos adictos a masturbarnos ya no solo en las noches sino también en el baño, cuando comenzamos a eyacular nos echábamos los mocos (semen, mecos) en la espalda del otro o viceversa, hasta que un día este wey me los hecho en la mera verga, y a partir de ahí se nos hizo adicción echarnos los mecos uno al otro, en la verga, en los muslos o en las nalgas- Mientras decía esto vi que Leandro comenzaba a masturbase lentamente, y masajeaba indiscretamente su verga, sentí celos de Gio el cual no es guapo, pues me encantaría a mi estar con Leandro haciendo esos juegos de “hermanastros”.
Gio corto la conversación lo que note un poco incomodo pues parecía que quería que hasta ahí quedara la charla no se si por que había mas que solo jaladas de verga entre ellos y no me querían decir. Ambos se pararon y dejaron sus vergas a pocos centímetros de mi cara, yo estaba caliente y confundido y pude ver mas de cerca esas vergas, sus diferencias en tamaño, grosor, una la de Leandro lubricaba muchísimo lo cual me daba muchísimo morbo y fue el que le dijo a Gio -Lo hacemos parte del club de la jalando al ganso?- Gio quien comenzaba a masturbarse ya le dijo a Leandro -Si quiere ser parte del club debe de recibir nuestra leche jajaja- Leandro rio y dijo -Es verdad si quieres ser parte del club debes de recibir la leche de macho- mientras decían esto yo seguía sentado en la cama con mis pantalones y trusa ya en los tobillos, la verga dura dos machos con las vergas a menos de cinco centímetros de mi cara, con esos machos masturbándose frente a mi viendo cómo se movían sus jueves al ritmo de su moviente, fue algo tan erótico que todavía recordarlo me éxito demasiado.
Solo atine a decir -Si quiero ser parte del club de masturbación- Apenas termine de decirlo, Leandro me vio con una sonrisa malévola, comenzó a masturbarse mas fuerte y pego su verga a mi cachete derecho ya que cerca del izquierdoestaba Gio, dio un fuerte gemido y me lanzo 5 chorros de leche en mi mejilla, a los pocos segundos Gio hizo lo mismo en el lado contrario y también gimió mas leve que su hermanastro, el solo lanzo 2 chorros de leche caliente en mi cara, su leche era menos espesa que la de Leandro parecía agua, mientras que la de Leandro parecía crema por lo espesa que era y por la potencia y cantidad que saco.
Me seguí masturbando pues ellos me animaban con palabras como -Vamos bebe saca tu lechita- eso me decía Leandro, y Gio -Saca los mecos wey, aviéntalos para que seas parte del club de la chaqueta (masturbación). Estaba tan confundido, caliente y gozando el momento como nunca antes en mi vida había tenido cuando salió por primera vez mi primera eyaculación, frente a esos machos con las vergas ya medio flácidas aun frente a mi cara.
Me felicitaron pues salieron disparados 4 chorros de semen con una distancia considerable, y les dije a mis primos con total naturalidad -Es la primera vez que me sale pipi cuando hago esto- (yo era aún muy ingenuo en esto) ambos rieron y me dijeron -Eso es sacar la leche, con eso se hacen los bebes, ahora cada que te masturbes te saldrá leche, a las mujeres les gusta mucho solo cuida no manchar tu ropa-
Leandro le dijo a Gio -Ve por papel al baño para limpiarnos, olvide traerlo- Gio un poco molesto le dijo -No mames wey siempre es lo mismo contigo-, se subió un poco el pantalón con los calzones a media nalga y salió de la habitación. Leandro me miro nuevamente morbosamente y me dijo, -Quieres tocar mi verga? Si quieres tócala rápido en lo que regresa Gio- Tomo mi mano y la puso en su verga la palpe y toque, era una verga perfecta. Me metió con su dedo un poco de su leche de el ya que yo seguía con la leche de ambos machos escurriendo por mis cachetes y me dijo -Abre la boca y saborea mi leche bebe- Le obedecí y sabia algo agria, no me gusto del todo el sabor pero esos momentos eróticos que fueron quizá segundos a mi me parecieron horas, llego Gio con el papel y vio que Leandro seguía con su verga de fuera, nuevamente medio erecta y yo con una sonrisa de oreja a oreja, nos dio papel para limpiarnos, cuando me iba a limpiar yo me dijo Leandro -Espera bebe yo te limpio- Gio se extraño un poco pero supongo no le dio importancia o le preguntaría después la verdad eso no tenia importancia en ese momento.
Ya limpio me subí mis trusas y ellos hicieron lo mismo, nuevamente Leandro me revoloteo el cabello y solo les pregunte -¿Cuándo vengo otra vez al club de las chaquetas?- Ellos solo rieron y me dijeron, pronto estarán los demás y te avisaremos, ahora ve con tu abuela que debe estar preocupada por ti, Leandro me acompaño a casa de mi abuela que era a 3 casas de donde estaba, Gio se quedo pero alcance a ver una mirada extrañada hacia su hermanastros, mientras caminábamos me dijo -No vayas a comentar esto con nadie, ¿Te gusto vernos las vergas verdad?- Yo solo asentí, pues estaba “procesando” todo lo que acababa de pasar, llegamos a casa de mi abuela y salió a recibirme y se notaba su preocupación el muy cabron de Leandro le dijo a mi abuela -Hola señora estábamos jugando con él, le mostraba mi equipo de americano para que cuando crezca también juegue- Eso tranquilizo a mi abuela y el solo agacho su mirada y me guiño el ojo y frente a mi abuela me dijo .Vengo por ti en estos dias para enseñarte mas cosas de americano- me sonrió y se fue.
Espero les guste mi relato ya no había podido escribir por tiempo, estaré tratando de subir mas con mis primos y como después yo hice lo mismo y más con primos más chicos cuando ya estaba más grande. Saludos desde México.
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