Mi primo Gio y su hermanastro Leandro parte 2
Después de esa primera vez con Gio y su hermanastro las cosas siguieron y aumentaron de tono .
La segunda y última vez con Leandro.
Después de esa primera vez y después de entrar al “Club de las chaquetas”, la historia continua.
Las sesiones de “pajas” continuaron entre Gio y Leandro, a veces veíamos porno, a veces entre ellos se daban “Espadazos”, fueron varias tardes calientes que pasaba con ellos, a veces también veía algo de americano, pero la mayoría de las veces eran pajas entre los 3.
Recuerdo muy bien que un día Leandro fue por mi a casa de mi abuela ya que a veces pasaba ahí las tardes, toco Leandro y le abrió mi abuela, yo estaba feliz y corriendo me dirigí a la puerta. Ese día hacia mucho calor y Leandro acudió con un short muy corto, parecía ropa interior y una playera de tirantes que dejaban ver sus brazos fuertes y su piel blanca y sus pectorales marcados por el ejercicio, simplemente me encantaba este hombre, su sonrisa, su forma de tratarme incluso cuando hacia que me comiera su semen sin que Gio se diera cuenta, era siempre dulce.
En fin, ese día me llevo a casa de su abuelastra (abuela por adopción no por sangre) y esa vez me dijo -Esta vez estaremos solo tu y yo nene, Gio mi hermanastro no está, espero la pasemos bien y lo disfrutes por que te voy a enseñarcosas que después les enseñaras tu a tus primos pequeños-.
Yo me puse feliz pero a la vez me quede pensando que me haría, entramos y nos fuimos directo a la recamara que compartía con su hermanastro, vi una crema batida que ocupaba la mama de el para la repostería que vendía en otra colonia, me dijo -Desvístete nene así como yo- cuando el dijo esto estaba completamente desnudo, pude ver ese cuerpo trabajado, sus grandes pectorales (a raíz de esto es mi fetiche en los hombres) sus músculos, su verga gorda y grande moviéndose como si tuviera vida propia esos huevos colgando y esa mata de pelos púbicos que tenía, era el único lugar con pelos en el cuerpo, nunca supe si se depilaba o era lampiño.
Ni tardo ni perezoso me desvestí y me metí a su cama me abrazo tan dulcemente, sentí su cuerpo, sus músculos junto a mi cuerpo de pre adolescente, sentía sus labios besar mi oreja, mi cuello y sentía una gran excitación en ese momento, sentía su verga super mojada en mi cuerpo se sentía riquísimo, jamás me beso o intento besar, solo estábamos fajando, me bajo a sus pezones y me dijo -Lámelos como si fuera una paleta de dulce- comencé a chupar como si fuera un chupetón ya que tenia unos pectorales enormes comenzó a gemir ese hermoso hombre y por el momento me deje llevar y le mordí uno de sus pezones y dio un respingo y me dijo -nene no me muerdas eso no me éxito- atine a disculparme y seguía abrazándome el estaba acostado boca arriba en su cama y y o encima de él, el mediría 1.85 y yo apenas en ese tiempo mediría 1.20, era notable la diferencia de tamaños ya que yo era super delgado y el musculoso parecía su muñeco.
Me dijo -Hoy si tu quieres vas a mamar verga ¿te gustaría? -. Como dije en el anterior relato, no quería quedar como un joto o marica frente a el y a pesar de ser poco experimentado en el sexo deseaba esa verga meterla a mi boca, parecía que se había orinado ya que en verdad lubricaba muchísimo y le dije para no verme tan obvio pues puto, pero no pendejo -Pero ya te hiciste pipi-. Soltó una carcajada y me dijo -No me hice pipi, cuando crezcas y estes mas grande vas a lubricar es para cuando metas tu verga en un culo o vagina y es para lubricar o que no les duela-. Al momento no le puse atención, jamás sabre si cogía también con hombres, pero sus palabras jamáslas olvidare.
Se limpio con su mano el exceso y créanme que cuando digo exceso era muchísimo líquido pre seminal, y lo embarro en la colcha y me dijo -Listo nene, ahora si comerás tu primera verga-.
Agarre ese mástil de carne gordo, mojado, venoso, moreno y largo y lo observe detenidamente, era muy diferente cuando estaba casi flácido que eran pocas las veces que me dejabaagarrarlo así cuando se masturbaban y Gio se iba al baño por papel y el solo me dirigía mi mano a su verga flácida y me alborotaba el cabello.
Estaba muy caliente su verga y me dijo -Que esperas nene chúpala como cuando chupas esas paletas de hielo que comes cuando sales de la escuela-. Sin mas abrí mi boca y me metíesa verga, sabia raro por tanto liquido pre seminal que seguía sacando, en cuanto sintió mi boca en su verga comenzó a jadear y gemir, movía sus piernas y me alborotaba mi cabello, decía cosas como: -Que rico te la comes nene!!-. -Sabia que serias un buen chupa vergas-. -mírame mientras tienes mi vergota en la boca nene putito-. Yo solo tenía mi mirada hacia él, mientras él se movía y me cogía por la boca y yo solo almacenaba esa verga en mí. Nunca intento meter toda, metía poco más de la cabeza, pero parecía que se orinaba en mi boca, ¡¡¡la saque y me dijo -Ven súbete a mi pecho con tus pies a los lados- Me subí hasta dejar mi pene a la altura de su cara y se metió mi verga casi entera en su boca!!! No lo podía creer, ese hombre tan guapo, con ese cuerpo, ¡que presumía a varias chavas de la colonia como sus novias estaban chupando mi verga con una maestría y una manera única! Con el tiempo entendí que no era la primera vez que lo hubiera hecho, jamás sabre si chupo la verga de su hermanastro, o como sabia chuparla tan rico que hoy en día nadie me la ha comido como él.
La verdad me retorcía de tanto placer, estar en el pecho de ese hombre, sentir sus movimientos sentir sus pectorales en mis muslos, sentir su lengua y boca en mi verga y huevos, era sumamente excitante ver como ese hombre tan “macho” disfrutaba también mamar verga, pude ver que gozaba por que no dejaba de masturbarse y no dejaba de gemir. Saco mi verga de su boca y me dijo -Ven nene ya va a salir la lechita que tanto te gusta, pero esta vez abre la boca-. Yo me baje a la altura de su verga mientras el seguía masturbándose frenéticamente, eso provocaba que se movieran deliciosos sus huevos, yo obedecía, tenia mi boca abierta y veía como esa verga era sacudida por su dueño para sacar esa rica leche caliente y esos chorros de semen que era muy abundante al sacar.
Comenzó a decirme guarradas que me excitaron y dejaron marcado desde entonces en el sexo y con las personas que he estado a todos les gusta que les hable, así como el me hablo: -ya viene tu lechita nene, te vas a comer la leche de papi y la verga de él, te gusta el sabor de la verga de tu papi-, -ya viene putito tienes que tragarte la leche de tu macho para que lo tengas feliz- mientras decía todo esto no dejaba de jadear y gemir entre las jaladas que le hacía a su verga. -te gusta la verga verdad putito? -, -Te voy a dar verga las veces que me la pidas-.
Sin mas exploto lanzando 8 disparos de semen de los cuales 4 cayeron en mi boca, por instinto me quite ya que siempre eyaculaban en mi cara, o en mi pecho, pero esta vez era la primera que lo hacia en mi boca además de que no me gusto el sabor que tenia su semen, los otros cuatro disparos cayeronen mi pelo, cara y el ultimo en su abdomen marcadísimo que tenía. Fue una imagen que siempre recuerdo pues se veía como una escultura griega pero llena de morbo, sexo y semen.
Pensé que ahí terminaría todo y me mandaría por papel como lo hacía con Gio, pero me dijo esto: – Ven súbete como hace rato, ahora te toca disfrutar a ti-. No lo pensé y, me subí de inmediato, se volvió a comer mi verga con una maestría que al día de hoy casi puedo decir que también lo he igualado mamando verga, comenzó a tocar mis huevos mientras tenia mi verga en su boca, comenzó a masajear mis nalgas, metía junto con mi verga un dedo suyo a la boca y me lo pasaba por el culo, saco solo dos veces mi verga de su boca, la primera para decirme esto: – Tienes buena verga nene, harás feliz a varias (la chupo brevemente y repitió) o a varios-. Yo no le preste mucha atención yo estaba disfrutando como nunca en mi corta vida, y como vio que tarde algo en eyacular imagino pensó que me vendría o eyacularía rápidamente me dijo -Cuando te vayas a venir o sacar tu leche me avisas-. Apenas y podía articular palabra y alcance a decir -Mjjjmmm- Pues seguía disfrutando ese éxtasis que parecía era de los dioses. Siguió mamando mi verga como por 10 minutos más, cuando le dije -Ya me viene la leche- pensé que se sacaría mi verga de la boca, pero para mi sorpresa se atraganto y se puso muy rojo imagino por la garganta profunda que me estaba haciendo, y al ver esa escena mi cuerpo encima del casi del mismo color de piel blanca su cara roja y mi verga dentro de su boca casi hacen que me desmayara. Me caí dejando mi espalda en sus pies y mi espalda se mojo con su semen que ya comenzaba a endurecerse en su abdomen, no he vuelto a tener otro orgasmo así en mi vida. Después de unos 10 minutos de recuperarnos, me levanto y me acurruco junto a su regazo, me dio apenas unbeso en mis labios sin ser de lengua y se paro y me dijo -Que rico nene, mira quedamos todos pegajosos de tanta leche-. Se paso y fue al baño por papel y por toallas húmedas que su abuelastra ocupaba, ver esas nalgas contonearse, llenas de carne, bien formadas y blancas me daban ganas de morderlas, lamerlas y hacerles de todo, no me di cuenta de que ya teníami verga parada de nuevo, cuando regreso y me comenzó a limpiar me dijo agarrando mi verga -Que dura se te pone, pronto la vamos a estrenar-. Yo solo me reí y comenzó a vestirme y él se vistió con lo que fue por mí, ese short sin ropa interior y su playera de tirantes como las que usan los mamados en el gimnasio.
Justo íbamos saliendo de su casa cuando su abuelastra entro y venia con el padre de la iglesia, olvide comentarles que la posibilidad por la que podíamos estar en su casa de mi tía y abuela de el haciendo eso es porque ella estaba todo el día en la iglesia pues tenia un puesto o cargo y era muy cercana al padre de la colonia. Mi tía hermana de mi abuela me saludo con normalidad y paso a su cocina para prepárale algo al padre, el padre nos saludó pero cuando a el lo abrazo note como le metía la mano por el short entre sus nalgas a mi primo y el no dijo nada, todo esto mientras se abrazaban y por la túnica del padre pasaba desapercibido esto para mi tía, yo no dije nada y el padre que alcanzo a ver que lo vi me guiño un ojo y se despidió, el me llevo con mi abuela y me pidió que no dijera nada, me abrazo y se fue, lo deje de ver muchos años, pues su papá se lo llevo a ensenada, ya que su mamá estaba casada con mi tío y era la madrastra de Gio, lo deje de ver por muchos años, tanto Gio como yo sufrimos su ausencia y quiero pensar que el también, a veces le preguntaba a su mamá por él y solo me decía que estaba con su papá y notaba su mirada triste por su hijo. Lo volví a ver muchos, pero muchos años después, y ya había perdido su encanto, estaba medio calvo, gordo, se veía jorobado, no era nada a como lo recordaba y sol habían pasado 10 años desde esta última vez y cuando me lo volví a encontrar, nos saludamos no me reconoció me abrazo y fue un abrazo raro, estábamos en la calle el estaba con su esposa pero me sentí incomodo pues el abrazo fue muy notorio que había una historia ahí, su esposa solo me veía y yo me sentía incomodo pues no quería que sospechara o algo. Jamás olvidare esta última vez que estuve con él, pasaron más cosas con Gio y me conto el secreto de Leandro y el con las gemelitas, pero eso será en otro relato.
Saludos espero les guste y estoy abierto a sus comentarios, saludos de su príncipe Noriega.
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