Mi primo Raul (Capitulo 3)
Cuando veo a mi tío frente a mí, con esos shorts cortitos, playera de resaque sin mangas y su pecho amplio, completamente peludo y sus tremendas piernas, pero sobre todo con esa erección que casi se salía de sus diminutos shorts, simplemente fue una sensación entre miedo y excitación….
Cuando veo a mi tío frente a mí, con esos shorts cortitos, playera de resaque sin mangas y su pecho amplio, completamente peludo y sus tremendas piernas, pero sobre todo con esa erección que casi se salía de sus diminutos shorts, simplemente fue una sensación entre miedo y excitación que no podía explicarme, el estar ahí solos, ver su mirada lujuriosa mordiéndose el labio de su boca y sus palabras con un tono muy cachondo, me regresaron a mi realidad de inclusive todavía tener toda la leche de Raul adentro de mi…
—Yo— Tío!… Pero, que ocurre… Que es lo que quieres?
—Tío— Mi chiquito, tu sabes muy bien lo que quiero…
—Yo— Pero, es que o sea, eres mi tío!!!
—T— Así es, y Raúl es tu primo, cual es la diferencia? Además, (Se me acerca y me empieza a acariciar el cabello y veo como estoy a cms de su bulto) yo te quiero mucho, es más te quiero más que tu primo, siempre has sido mi favorito (Aquí ya pasaba su mano por mi cara, se agacho y su cara y cuerpo estaban casi pegados a mí, su voz ronca me murmuraba de una forma melosa que hacia estremecerme, acariciaba con sus enormes manos mi mejilla, hasta quedar su cara y sus labios en mi oreja) y te aseguro, que vas a gozar mucho conmigo chiquito… Te voy a coger mucho mejor que Raúl…
Sin duda sabia como seducirme, pues mientras me decía eso, ya me tenía abrazado y susurrándome al oído, con su mano en mi mejilla y la otra en una de mis nalgas, no sé en qué momento y con qué habilidad ya me tenía acorralado y a su merced, en un momento que paso del miedo a la excitación, paso sus labios de mi oreja a mis labios y sentía su barba de candado y sus carnosos labios posarse en los míos, de una forma suave, delicada, sin prisa, me beso suavemente, introduciendo lentamente su lengua a mi boca, y con sus dos manos ya en mi cara, me daba besos cortos, pero tan candentes que yo simplemente se los correspondía dulcemente… Pase mis brazos por su cuello y lo atraje a mi correspondiéndole los besos más ricos que pudiera haber recibido jamás, ahí estábamos los dos abrazados, entre cajas viejas, entrelazados fundidos en un beso interminable mientras yo completamente excitado sentía como sonreía, sabedor que me tenía en sus manos, literalmente y por voluntad propia… En momentos separaba un poco sus labios de los míos y susurraba — Te gustan los besitos de tu tío?— y yo solo jadeaba con un —-Siiiii me encantan…—- y ahora era yo el que lo tenía completamente abrazado y pegado a mi cuerpo…
—Yo— Aaaahh me encantas, siento bien rico como me agarras y me manoseas tío…
—T— Si chiquito, te voy a hacer sentir rico…
Me quita mi playera y me empieza a besar el cuello, mamar los pezones, baja por mi abdomen y se encuentra con mi verga que está a punto de explotar, me la empieza a mamar de manera magistral, sentía que mis ojos se volteaban de la forma en que me hacia el oral a mi verguita que nada tenía que ver con lo descomunal de su miembro, seguía el manoseo y las caricias, me tenía acostado boca arriba y el encima de mi cual depredador sobre su presa, en un momento deja de mamarme y besarme para acostarse por un lado mío, sin dejar de besarme la boca empieza a quitarse la playera mientras su bulto pegado al mío siento como sobresale la mitad de su verga descomunal de los diminutos shorts… Yo se la agarro con mi mano mientras él me tiene de espaldas y yo restregando mi culo sobre su verga mitad adentro del short y la otra mitad sintiendo mi piel, parecíamos dos animales en celo, yo ansioso por que me poseyera y el todo un maestro llevándome poco a poco a al éxtasis, se baja completamente el shorts y queda completamente desnudo, pude apreciar lo grande que es, el en si un señor entrado en los 50s con un físico envidiable y lo más excitante, lleno de bellos por todos lados, agarra mi cara y se la lleva a sus pezones, —Mámamelos, chúpalos fuerte bebe— obedecí y desesperado empecé a mamar sus pezones peludos que poco a poco se le fueron erectando y poniendo rojos, él se retorcía, mientras le mamaba uno el otro el mismo se lo pellizcaba, mientras yo con la otra mano le agarraba su enorme verga cabezona y llena de venas que estaba a punto de estallar, no pude resistir bajar a mamársela y así lo hice me lleve esa verga descomunal a mi pequeña boca, dándome cuenta que efectivamente estaba más grande que la de Raúl, la empecé a saborear, a degustar cual si fuera una paleta de caramelo, un caramelo que ya empezaba a expulsar un rico precum sabor dulce, rico como a piña, y en medio de toda esa excitación mi tío llenándome de besos y caricias en donde podía, por que parecía como si estuviéramos entrelazados y contorsionados como muéganos, no aguante más y tome la iniciativa… tumbe a mi tío boca arriba hacia el suelo, y me monte sobre él..
—Yo— Ya no aguanto más tío, estoy demasiado excitado…
—T— Lo se mi chiquito, ándale empieza a cabalgarme…
Me empecé a introducir ese pedazo enorme de rica carne y que aunque mi culo estaba más que dilatado y además con semen todavía de Raúl, sentí un dolor tremendo, sin embargo por las caricias de mi tío que sus manos volaban por todo mi cuerpo, el me sostenía de la cintura y me animaba a meter más, poco a poco iba a entrando en mí, hasta cuando sentí la mitad de su verga adentro de mi lance un gemido de placer y el me atrae hacia su cara y me da un apasionado beso que lo que provoca es que de golpe me meta el resto de su verga, lanzando yo un grito de placer mismo que el me ahoga con su mano, pero en verdad que la excitación era mucha, que hasta se me olvidaba que estábamos en el garaje de mi casa!!! Y la adrenalina de que gente pudiera entrar más me excitaba, me puse a cabalgar ese enorme trozo de verga, estaba extasiado mientras veía la cara de mi tío jadear de satisfacción, yo me movía y seguía saltando y sintiendo como mis nalgas rebotaban en esos huevotes enormes de mi tío, después de ese jaleo empecé a sentir como se expandía su verga en mi ano, por lo que me detuvo y me volteó poniéndome boca arriba y el encima de mí, me pone las piernas al hombro y empieza a envestirme riquísimo, sabía lo que estaba haciendo por que sus embestidas eran firmes y cadenciosas, lo que me daban placer sin límites, mientras al mismo tiempo seguía besándome como loco y de nuevo sus huevos golpeaban mis nalgas, era una sensación que no sentí con Raúl, y sin duda mi tío me estaba dando una cama riquísima, el seguía moviéndose rico y yo demandaba más verga dentro de mí, él era complaciente y me decía —Toda la que quieras mi rey…— Yo me sentía en el paraíso, era un hombre grande, peludo, definido que me estaba poseyendo como ninguno, simplemente era como un sueño tanta excitación… en un momento me saca su verga y me pone boca abajo, ya mi culo estaba completamente abierto y era prácticamente un batidero de leche que hacía que la verga de mi tio se fuera con facilidad sin dejar de sentir como un mounstro entraba en mi culo, me acerca su cara a mi oído..
—T— Ya tenemos que terminar mi chiquito, por que nos van a extrañar en la casa…
—Yo— Noooo tío, quiero más!!! Coges bien rico!!
—T— Mira bebe, que te parece si al rato inventamos algo y nos perdemos tu y yo nada más, los dos solitos…
—Yo— Aaay si tío, lo que tú quieras, me encantas
—T— Nos vamos a la playa? O te invito a otro lugar para seguir cogiendo rico, como vez chiquito precioso?
—Yo— Siiiiii tioooo, sigue sigue, que rico te mueves!!!
Tener esta conversación mientras me está cogiendo simplemente era más que excitante, y aunque él tenía razón, era obvio que debíamos terminar pues había gente en la casa que seguramente estaban preguntando por nosotros, sin embargo yo en tan poco tiempo me había convertido en un adicto no solo a su verga, a el completo, por cómo me hablaba, por cómo me trataba, por cómo me cogía… Entonces las embestidas empezaron más duras, más fuertes, el me agarraba con fuerzas de los hombros y me mordía mi cuello, —-Así!! Así!!! Assiii!!!— gemía como loco!!! En eso siento como se expande su gran verga y cuando pensé que se iba a venir adentro de mí, en un movimiento brusco se saca la verga, me voltea y me avienta torrentes de leche espesa y caliente sobre mi cara…
—T— Tenla toda bebe!!! Aaaahhhh!!!!
—Yo— Dámela tío!!! AAaaaahhhh que ricaaaa!!! Caliente!!!
Era impresionante la cantidad de leche que descargo sobre mi cara, que me tome un poco y la demás simplemente me la untaba sobre toda mi cara, mi culito palpitaba dejando también salir la leche que antes Raúl me había dejado adentro, era demasiada excitación que no se en que momento yo también me había venido, estaba extasiado, rendido… Mi tío acostado al lado mío, jadeando me da un beso, y me dice
—T— Eres maravilloso, te quiero mucho… Gracias
—Yo— Yo te quiero más tío…
Mi tío, se levanta se pone su shorts y su playera y se marcha, no sin antes voltear y guiñarme un ojo lanzándome un beso
—T—Nos veremos al rato chiquito…
—Yo— Claro que nos veremos….
gran relato como sigue
Hola amigo, sigue leyendo la continuación se pone mucho mejor!!!!