Mi primocuando tenia 13 años me mamo el guevo. Y
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por meridamorbo.
Estábamos varios primos de vacaciones en casa de una tía, y durante el día no la pasamos jodiendo con la pelota jugado básquet y esas cosas.
Llego la hora de dormir y el eligió dormir conmigo junto a dos primas en la misma habitación, ellas en una cama y él y yo en otra.
Nos acostamos a dormir yo sin camisa en short y en bóxer, el igual que yo pero con camisa, me quede dormido rápidamente, en la madrugada siento como están tocando mi bulto me despierto pero sin dejar que el notara era mi primo quien me estaba tocando, mil cosas pasaron por mi cabeza, pues jamás lo había visto de esa manera para mí era solo un niño, y jamás hubiera imaginado que le gustaran los chamos.
Pero el morbo y la excitación me ganaron, mi guevo ya estaba bien duro, así que me deje tocar, mi hice el dormido a ver hasta donde llegaba, me bajo un poco el short, y empezó a pasarla las yemas de los dedos por sobre el bóxer uff, luego mi miro y yo tenía los ojos entrecerrados viendo lo poco que se podía, pues la habitación era algo oscura, y solo un poco de luz entraba por una ventana que estaba detrás de nosotros, susurro mi nombre como comprobando que yo siguiera dormido, como no respondí ni reaccione a su llamado, el solo bajo y sobre el bóxer le dio un beso al tronco de guevo uff que vaina más rica, se quedó allá abajo a la altura de mi guevo, bajo las cobijas, y lentamente me bajo el bóxer, y empezó a darme una paja lenta pero firme, que ricura sentir su manita como bajaba y subía por mi tronco, y me pelaba la cabeza del guevo, ufff.
Así estuvo por varios minutos dándome una deliciosa paja, yo pensé que no iba a pasar de ahí que no se iba a atrevar a mas, pero luego vino la gloria, acerca su boquita le dio unos pequeños besos a mi guevo primero a la cabeza, luego a el tronco, uff que vaina más buena.
Poco a poco se fue metiendo mi guevo en la boca y empezó a mamar con torpeza se veía que estaba aprendiendo así lo que deje hacer lo que quisiera mamaba la cabeza y solo un poquito más, cuando estaba muy excitado agarre su cabeza e hice que se lo tragara lo que más le entrara en la boca (mi guevo no es muy grande 17 cm pero eso si es bastante grueso y cabezón) el se sorprendió e intento zafarse pero no lo deje, lo tuve así un ritmo donde yo marcaba el ritmo y la profundidad de la mamada, cuando sentí que iba a terminar lo solté, le agarre la cabeza y lo subí para darnos un rico y placentero beso que el correspondió con todas las ganas del mundo, nuestros labios y lenguas se unieron, y le pregunte susurrando en su odio:
A: Así que te gusta el guevo?
M: Creo que sí, me respondió.
A: Pues para solo creer ya lo mamas rico, me tienes que explicar todo pero después, (Quería saber desde cuando le gustaba.
Desde cuando se sentía atraído por mí y todo eso) Sigue mamando ya casi voy a acabar.
M: Ok, en la boca no por favor.
Me dijo el y solito se bajo a seguir mamando.
Yo empecé a meterle mano tocar esas nalguitas duras y paraditas, sin un solo bello.
Como 5 minutos después le avise que iba a acabar, el saco mi guevo de su boca, y nos besamos de nuevo mientras él seguía haciéndome la paja, para acabar como 4 chorros de leche salieron de mí, que orgasmo más delicioso me había hecho tener mi primo de 13 años
.
Nos seguimos besando hasta que se bajó mi erección le quite su camisa y limpie mi leche, y seguí durmiendo.
Al otro día ninguno dijo una sola palabra y actuábamos como si anda hubiera pasado.
Pero a los días estando solo paso de nuevo y esta vez aproveche para hacerle preguntas y aclarar todas mis dudas.
¿Le gusto el relato?
¿Quieren saber que me respondió mi primito?
¿Y quieren saber que más paso después?
Espero les guste y espero sus comentarios.
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