MI REGALO DE NAVIDAD….HASTA EL ULTIMO DIA QUE LO VI
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola chicos, todo sucedio hace un año, a finales de diciembre, yo tenia 23 años y trabajaba en una oficina de gobierno y el chico del que les contare ingreso a trabajar en la misma àrea donde yo estaba.
Desde que lo vi me encanto, 25 años, buen cuerpo, unos ojazos cafes y una sonrisa picara. al principio no teniamos trato cercano, pues el se dedicaba a una cosa y yo a otra, pero un buen dia sucede que yo me quede sin auxiliar en la oficina y necesitaba a alguien que me ayudara. mi jefe me asigno al chico nuevo y yo estaba feliz y por eso hacìa lo que fuera para que se sintiera bien, nos hiciemos buenos amigos en tan solo 3 semanas, tanto que decian que tal vez nos conocìamos de antes. cierto dia el no llegò a trabajar, asi que decidi llamarle para saber si le habia pasado algo.
En realidad tenia un problema grave y me ofrecì a ayudarlo, me dijo que si lo requerìa me llamarìa. pasò el dìa y era la media noche, cuando sonò mi telefono, yo estaba medio dormido, era èl y dijo que querìa verme. me dio la direcciòn de un hotel y el nombre con el que se habia registrado que no era el suyo y se me hizo muy raro, pero querìa verlo, asi que decidi ir. lleguè al hotel y pregunte por el nombre que me habia dicho, lleguè a la habitacion y entrè. ¨te estaba esperando¨ me dijo, le pregunte porque me habia citado en ese lugar si el vivia en otro, me dijo que tuvo un problema grave y se estaba escondiendo, en realidad a mi me dio miedo, pues si se escondia no era por algo bueno, pero antes de que pudiera reaccionar se avalanzo contra mi y me quedò encima, me empezo a acariaciar, besar el cuello y a morderme, a lo cual yo me resistia tratando de quitarmelo. el me dijo que se habia dado cuenta de que me gustaba, de como lo veìa en la oficina y que habia llegado el momento de que mi fantasìa con el se hiciera realidad. no lo podia creer, nunca le dije nada, al menos de palabra pero era obvio de que mi forma de tratarlo y de verlo eran claras y el lo percibiò y ahora estaba conmigo en una cama.
Sin darme cuenta se desvistiò y solo se quedò con boxers. tenia un cuerpo fenomenal, atletico que no se apreciaba del todo a menos que estuviera desnudo como en esa ocasion, unos pectorales riquìsimos, unas piernotas, unas nalgas bien torneadas y algo entre las dos piernas que con el boxer apretadito lo hacìan verse wooow.
Sin mas ni mas lo tirè sobre la cama y me lo empeze a comer toditito, le lamia los pezones, le besaba el cuello, lo mordìa y con cada rose de mi cuerpo sentia como su entrepierna crecìa mas y mas, no aguante mas y empeze a bajar por su abdomen hasta llegar a su pene que estaba bien erecto, primero lo acariciè, mordì y bese sobre sus boxers, y cada vez que lo hacia gemia muy rico, escucharlo a mi me prendìa mucho. entonces se quitò los boxers y me guiò con su mano sobre mi cabeza para que se lo mamara. su olor hizo que me la llevara a la boca y tratara de meterla apresuradamente, estaba super caliente y bien erecta, se la empeze a mamar a mas no poder, la mordìa, lo lamia y la chupaba, querìa arrancarle ese pedazote de carne y tragarmelo completo, era que mas habia querido y mi deseo se estaba haciendo realidad. el empezo a acariciar mi cuello con sus manos y me decia que era mi regalo de navidad, que nunca lo iba a olvidar. empezò a acariciar mi culito con su pie, yo me retorcia cada vez que lo subia y bajaba, se incorporò para acariciar mis nalgas con sus manos mientras yo le seguia mamando la verga, sentì como salia unas gotitas de semen que parecia miel.
Yo gemia de placer y el estaba al fulll. de pronto me dijo ¨ha llegado la hora¨ me quitò de su verga y me dio la vuelta, sacò de su mochila una cremita y la untò en mi ano y en la punta de su verga, me sobo el ano muy suavecito de arriba para abajo y la sensacion de su mano me hacia pensar en ese trozo de carne bien parado dentro de mi. tenìa miedo pues era la primera vez que me la iban a meter pero no le querìa decir porque me encantaba lo que me estaba haciendo. de pronto sentì la punta de su verga penetrar mi culito, era el dolor mas insoportablemente rico que hubiera experimentado, una mezcla de ardor y placer nunca conocidos, gritè al sentir como resbalo por completo esa riquìsima verga dentro de mi, entonces el se dio cuenta de que era virgen y me dijo que que bueno que lo habia guardado para el, me dijo que si me dolia la sacarìa pero yo le roguè que no, la empezo a meter y sacar y con cada movimiento sentìa que iba a matar pero me encantaba, empezò despacio y le subio de ritmo mientras me besaba la espalda y me acariciaba el cuello, yo estaba que explotaba de dolor y de placer asì que me vine sin que el dejara de metermela, poco a poco el dolor se fue trasformando en extasis, queria mas, le pedia que me la metiera toda, sentia la cabezita de su verga seguida por un palo que quemaba y que en cada metida sentìa que palpitaba
Fue en esos momentos en los que recuerdo que me dijo que no lo volverìa a ver porque se tenia que ir de la ciudad, pero yo estaba tan caliente que en lo unico que pensaba era que no querìa que eso acabara le pedì que lo prolongara tanto como pudiera y que me dejara probar su leche caliente. me la metio como quiso y yo lo acepte, de pronto empezò a jadear mas fuerte y rapido y me dijo que donde querìa sentir su leche, pero antes de que pudiera decirle senti como aventò un chorro dentro de mi y actos seguido la saco para terminar de venirse alrededor de mi boca, me trague cuanto pude y le apretaba la verga para sacarle hasta la ultima gota de esa deliciosa miel que se me habia escapado las tres semanas anteriores. terminamos exhaustos y me dejò retosar en su pecho mientras se despedia de mi, yo no lograba reaccionar aùn, solo pensaba en que estaba conmigo.
Sin darme cuenta me quedè dormido en su pecho pues casì amanecìa. Al despertar ya no estaba, se habia ido y me habìa dejdo una nota agradeciendome por el trato que le habia dado en el trabajo.
Nunca supe porque se fue pero es lo mejor que me ha pasado y lamento no haberle preguntado si lo volverìa a ver o a donde se iba. Solo espero algun dìa volver a verle y decirle lo mucho que lo extraño.
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