Mi segunda experiencia gay
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Fingí estar dormido y él fingió hasta con los ronquidos, pasaron unos 15 minutos y nada, de pronto pensé, quizá si se durmió, después de un rato, me abrazó, de inmediato comencé a sentir una gran excitación, creí que no podría controlarme. Comenzó a tocarme como la vez anterior, ambos estabamos sin pantalones. Me acariciaba las piernas, después pasó a mi pecho, sus manos temblaban y escuchaba su respiración agitada, fue baando pcoc a poco su mano, llegó a mi cintura y dspués de un rato comenzó a meter sus manos entre mi truza, lo hizo tan despacio y tan rico, que no pude evitar jadear de placer.
Era apenas la segunda ocasión que yo vivía esa experiencia, habían pasados noches y noches en que me lo imaginaba detrás de mi haciendo eso que ahora hacía nuevamente y aunque difícil de creer, a esa edad no tenía claro lo que era la autosatisfacción, así que era la primera vez desde aquella noche que yo tenía ese placer. Al hacer ese ruido, se detuvo un rato pero al ver que no hice nada, siguió, llegó a mi pene que estaba completamente duro, quizá por lo mismo se asombró un poco, no lo sé, el caso es que se detuvo un rato, entonces yo me moví como invitándolo a que siguiera, lo entendió y siguió en lo suyo, tocándome, recuerdo que me subía y bajaba el prepucio, lo que me enloquecía, estaba en completo éxtasis! me movía al ritmo que él e inmediatamente hizo algo que me encantó, me bajó la truza, poco a poco
Cuando llegó a mis pies, simplemete la aventó como pudo, de pronto, no sé por qué, sentí la necesidad de hacer lo mismo con él, bajarle el bóxer, así que me volví hacia él, le acaricié el pecho y bajé mi mano hasta su pene, también duro y rico, se lo acaricié un rato, jugué con él, acaricié sus bolas, aquello era para mi un auténtico placer, recuerdo que me daba mucha pena verlo así que cerré los ojos y seguí en lo mío, jugando con su miembro que me enloquecía. de pronto quitó mi mano de su pene, y me dijo zuzurrando, voltéate, obedecí de inmediato, se chupo el dedo y comenzó a metermelo suavemente, en ese momento obviamente, no sabía por qué lo hacía pero no le di importancia y me repitió al oído, voltéate bien, me acomdé y comencé a sentir como su pene entrando en mi, no lo hacía de manera delicada, por lo que le dije así no, despacio por favor!, y me obedeció lo hizo de manera delicada, los dos lo disfrutabamos tanto. Comenzó a tocarme, jemiamos de placer, yo me pegaba a él y él se aferraba a mi, comenzó a hacerlo más rápido y más rápido, yo sentía que me iba a desmayar hasta que de pronto comencé a sentir mi culito húmedo, y ya no hacía nada, sentí como su pene se iba poniendo flácido dentro de mi, le pedí que me tocara, pero ya no reaccionó.
Apenas después de eso, comencé a sentir una pequeña frustración por no sentir el mismo placer que la vez pasada, pero finalmente comenzó a acariciarme otra vez, de nuevo me prendí pero ya no fue igual, además de inmediato escuchamos ruidos, alguien había regresado a la casa así quetuvimos que ponernos como locos a buscar nuestra ropa interior.
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