Mi soldadito y una visita inesperada.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Aquellos años que estuvo en mi casa Jesús fueron de mucho placer, aprendí lo bueno y lo malo del sexo, malo porque hay cosas que a las personas no les gusta pero siempre terminaba haciendo lo que me placiera. Para unas vacaciones escolares mis padres se encontraban de viaje y yo por su puesto estaba en casa solo con Jesús
Mis padres debían regresar antes de que finalizaran las vacaciones escolares ya que teníamos planeado un viaje al pueblo natal de mi madre. Antes de que llegaran mis padres, aparece un primo hermano con su papá, ellos venían de visita y no sabían que mis padres estaban fuera del país, bueno en fin que mi tío permaneció hasta el lunes desde el sábado que llegaron y se regresó a su pueblo y mi primo Jorge se quedó con nosotros.
En casa se acostumbraba que cuando llegaba visitas, estas se ponían a dormir en el cuarto que estaba ocupando Jesús y él dormía en el cuartel, pero como yo estaba solo al frente de mi casa y no quería a Jesús lejos, le pedí a mi primo Jorge que durmiera en mi cuarto, los primeros días transcurrieron tranquilos, Jorge tenía mi misma edad, un poco más alto y más fuerte, moreno igual que yo, unas nalgas duras pero de tamaño no exagerado, su pene logré verlo una tarde que jugábamos y se puso a orinar frente a nosotros sin ningún pudor. Yo solía esperar a que mi primo se durmiera y salía en busca de Jesús a su habitación, pasaba horas allí, disfrutando del sexo, una noche cuando regresaba a mi cuarto, me doy cuenta que mi primo no estaba en la cama y me acosté pensando que estaría en algún baño de la casa y no en el de mi habitación, al rato lo siento entrar al cuarto y me hago el dormido, con la claridad que se colaba por la ventana, pude observar que estaba en interior y como dormía en mi cama que era matrimonial, lo sentí meterse entre las sábanas.
No le presté mucha atención y me dispuse a dormir, ya casi al amanecer sentía como su respiración estaba muy cerca de mi cuello y su pene duro pegado a mis nalgas, quise alejarme pero me di cuenta que estaba en la orilla de la cama, como pude hice algo de fuerzas para empujarlo y recuperar espacio, cuando hice el movimiento, escuché su voz que me decía tranquilo primo solo quiero llegar y me abrazó fuertemente, yo hice fuerzas y me levanté de la cama, que te pasa, no ves que estas en mi casa, porque me haces eso, él se me quedó mirando y con voz baja me dijo, disculpa es que te sentí tan cerca y me calenté mucho, no volverá a pasar, recordé que no estaba en la cama la noche anterior y le pregunté dónde estaba con cierto susto, a lo que respondió estaba en el cuarto de tus padres viendo tv y tu donde estabas me interrogó, y respondí estaba en la habitación de Jesús ya que él me ayuda con las tareas del colegio, y replicó, y para eso esperas a que me duerma, sin ningún gesto que me delatara le respondí, es que él tiene sus obligaciones con la casa y las cosas de mi padre y por ello tengo que esperar a que termine lo suyo porque papá se molesta.
Llegó la claridad y salimos a desayunar, Jesús ya nos tenía lista la comida. Nos sentamos los tres a la mesa, los temas de conversación giraron en torno a los resultados escolares, de allí supe que mi primo estaba en casa porque había salido mal y sus padres querían internarlo para que cumpliera con el servicio militar pero aún le faltaba un año para cumplir, pero con permiso de sus padres y la aprobación de mi padre, eso era posible.
Después del desayuno, Jesús me indicó que tenía que salir a comprar algunas cosas para la casa, por pena no quise irme con él, que era lo acostumbrado y me quedé con mi primo en casa. Mi primo me hizo un comentario un poco indiscreto, oye primo que culito tan bueno tiene tu cachifo, yo lo corregí, no es un cachifo, es el ayudante de papá, él respondió, no te molestes es que me llamó la atención. Yo me fui a mi cuarto a recoger la cama y llegó mi primo, te voy a contar un secreto pero no debes decirlo a nadie, que será, la razón principal por la que estoy aquí es que mi papá me descubrió en el granero con uno de sus peones fumando marihuana, lo peor es que el peón y yo estábamos desnudos, me sorprendió y pregunté, como así, pues veras primo yo tengo cierta preferencia por los chicos, no me considero gay pues me gusta penetrar, pero cuando lo requiere me dejo penetrar, con lo que venía escuchando ya mi pene estaba a mil y él se dio cuenta y me preguntó, te gustaría que te mamara tu pene, yo muy turbado no supe que responder y cuando reaccioné ya tenía a Jorge de rodillas frente a mí con mi pene entre sus manos, sentía como pasaba la lengua por la boquita de mi pene y absorbía mis líquidos, jugaba con sus labios por mi cabeza, yo solo cerraba mis ojos, estaba recibiendo de mi primo una mamada tremenda, al rato él se levanta y me besa en los labios y me dice que me acueste en la cama, por razón lógica obedecí y allí comenzó a quitarme la ropa, yo quedé totalmente desnudo y él hizo lo mismo rápidamente, se subió a la cama y se apoderó nuevamente de mi verga, mamaba, chupaba, lamía, mi pene y mis bolas, de vez en cuando metía una mano por mi culo y llegaba a mi orificio con sus dedos, no supimos cuando entró Jesús, quien ya parecía tener rato viéndonos porque cuando lo vi estaba totalmente desnudo y empalmado, con su pene a la máxima expresión
Se acercó a nosotros y le comenzó a mamar el culo a mi primo, que cuando lo sintió apretó un poco la boca y casi me hace daño, su excitación era máxima, Jesús se apoderó de aquel culo, lamía, besaba y metía y sacaba su lengua de su interior, mi primo llegó un momento en que abandonó mi pene y le pedía a gritos a Jesús que lo follara, Jesús me indicó que me levantara de la cama, él se acostó y mi primo se sentó sobre su pene, mientras el pene de Jesús le entraba en el culo, mi primo gritaba como desesperado, al quedar bien ensartado, comenzó a cabalgar sobre mi maestro, mientras Jesús me hacía una paja, luego Jesús lo hizo acostarse dejando su culo clavado a mi disposición, ya sabía lo que quería Jesús y me puse detrás y coloqué mi pene en la gruta de mi primo y comencé a empujar, él gritaba pero yo no le hacía caso, de repente empujé y se fue mi pene hasta la base de mis bolas, habíamos clavado doble a mi primo, aquel hombre se agarraba con todas sus fuerzas a Jesús mientras era perforado por ambos, aquella pose me ponía a millón y llegué dentro de mi primo y solté un quejido de placer, cuando Jesús se dio cuenta que había llegado, le sacó la pija a mi primo y lo hizo acostarse en la cama boca arriba y levantó sus piernas y volvió a clavarlo, solo se veía los pocos bellos de Jesús, pues esa posición le permitía meterlo hasta el fondo, mi primo seguía gimiendo y se retorcía con cada embestida que le propinaba Jesús, aquel cuadro me volvió a excitar y me puse delante y metía mi pija en la boca de mi primo, que con las embestidas que yo le daba le producían arcadas y botaba mucha saliva, volví a llegar en su boca y Jesús le llegó en su culo, después que yo llegué le tome su pene un poco más grande que el mío y lo masturbe, no por mucho pues estaba a explotar.
Nos quedamos dormidos los tres en mi cama y nos despertamos casi en la noche, mi primo se levantó al baño y casi no podía caminar por la cogida que le echamos, iba destilando semen y creo que algo de sangre y mierda. Jesús se me quedó viendo y me comentó, ese primo tuyo es una puta completa, procuremos cogerlo todos los días si es posible, le respondí hecho y nos besamos. Los días siguientes lo cogíamos en la mañana al despertar, dormíamos los tres en la cama, él siempre estaba en medio, a veces amanecía con el pene de cualquiera de los dos en el culo, y abrazado al otro, ya teníamos los guevos maltratados de tanto sexo. Cuando mis padres regresaron y pudieron hablar con mi tío, Jorge decidió que no se quedaría en el servicio, que su papá debía aceptar lo que era. Partió a su casa y solo sabíamos lo que comentaban papá y mamá sin que yo los escuchara.
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