Mi sugar daddy y yo a mis 13 años parte 2
Un día lleno de sorpresas, amor y sexo con mi sugar daddy.
A la mañana siguiente me desperté, estaba solo en medio de la cama en el cuarto de Elias. Estaba cobijado hasta el cuello, cuando me levante me di cuenta que seguía totalmente desnudo.
Salí de la habitación buscando a Elias por la gran casa, baje las escaleras y fui hacia donde parecía ser el comedor donde provenían pequeños ruidos.
-sorpresa- Elias alzó la voz con estuciasmo
en la mesa había varias bolsas de réglalos un gran desayuno con variedad de comidas, frutas y bebidas
-Buenos días pequeño- dijo Elias dándome un tierno beso en los labios.
Elias llevaba puesto una bata para dormir, después de la sorpresa y el beso ambos desayunamos y abrimos los regalos entre los que había ropa de marca, in celular gama alta, videojuegos y pulseras Pandora.
-Muchas gracias Elias- dije levantándome y abrazándolo, Elias hizo lo mismo, ambos nos unimos en un pequeño beso tierno que se tornó en un beso más apasionado.
Su lengua jugaba con la mía, sus manos masajeaban mi trasero mientras que las mías buscaban dentro de su bata su pene erecto, al encontrarlo empecé a masturbarlo.
Los labios de Elias habían empezado a bajar por mi piel hasta llegar a mi cuello, sus manos habían empezado a jugar con mi entrada. Dos de sus dedos estaban dentro de mi entrando y saliendo lo que me excitaba y me hacía soltar pequeños gemidos.
-mmmm sii, ahh sii- decía entre gemidos al sentir que los dedos de Elias entraban y salían de mi ano.
Los labios de Elias había empezado a chupas uno de mis pezones cuando una llamada telefónica en uno de sus teléfonos nos separó.
-Que? Se supone que la junta era mañana porque la cambiaron para hoy…. Está bien a las 12 estoy ahí- dijo Elias con una voz eufórica masajeando su frente con dos de sus dedos
-todo bien amor?- pregunte preocupado
-Si solamente que pospondremos nuestra cita para otro día- dijo dándome un pequeño beso
-Esta bien no te preocupes- respondi
ambos subimos a su habitación, yo me senté en el senteo de la cama mientras el buscaba ropa interior en uno de sus cajones.
-Quieres ducharte conmigo? Aún tengo una hora, tal vez podamos hacer algo rápido- dijo guiñándome el ojo.
-Claro- respondí entusiasmado saltando de la cama entrando al baño.
Detrás de mi entro Elias, cerró la puerta con seguro y dejo caer su bata.
Pude volver a ver su cuerpo totalmente desnudo, sus grandes músculos y su torso repleto de vello que lo hacía parecer un oso, tenía una barba perfilada lo que lo hacía verse imponente y guapo.
Elias se acercó a mi y me empezó a besar rápida y apasionadamente. Sus manos apretaban mi trasero fuertemente lo que me excitaba, mis manos masturbaban su pene, poco a poco fui bajando con mi boca recorriendo su pecho y vientre hasta llegar a su pene. Lo tomé y lo metí a mi boca llenándolo de saliba, lo metía y sacaba pasando mis labios rodeando su pene.
Con mi mano acariciaba sus testículos, mientras que mi boca le daba una mamada a su gran miembro.
-Ven hagámoslo rápido que no hay mucho tiempo- tiernamente me levanto y me sentí sobre la taza del baño, levantó mis piernas colocándolas en sus hombros y apuntó su pene a mi entrada.
Con fuerza empezó a empujarlo tratando de meterlo, en un momento se detuvo, tomó saliba y la unto en la punta de su pene para después volver a tratar de introducirla dentro de mi.
-Espera duele, ahhh amor- mi ano no estaba totalmente dilatado para que su pene entrara, pero con un poco de tiempo su cabeza estaba logrando entrar por mi ano.
-Tranquilo pequeño ya está entrando- dijo logrando introducir la mitad de su pene gimiendo fuertemente como macho al preñar a su hembra
-Ahhhhhh- grite y gemí a la vez al sentirla dentro de un tirón.
sus labios me dieron un tierno beso que me calmo, después empezó a embestirme sacando y metiendo su pene de mi.
Sus movimientos me estaba estimulando dejando el dolor por un lado y empezando a darme un hermoso placer
Sus manos acariciaban mis tetitas grandes y las masajeaban.
-Siii, sii, te amo mi amor- decía besándome y penetrándome.
Después sin sacar su pene de mi se dio la vuelta y se sentí sobre la taza dejándome sobre el.
Yo sabiendo que hacer empecé a dar pequeños brinquitos con velocidad
Con cada senton un gemido salía de mi boca al sentir su pene tocar fondo dentro de mi m.
-Mmm sii, ya voy a acabar- dijo después 10 minutos de puras embestidas dejando salir sus chorros de semen dentro de mi.
nos unimos en un beso tierno, después ambos nos dimos una ducha y nos vestimos. El se puso un traje formal, yo ropa de la que me regalo.
-Le dire a mi chofer que te lleve a tu casa- dijo mientras se abrochaba la camisa
-Tranquilo yo también tengo chofer- dije mientras me colocaba la ropa interior.
-como tú desees- dijo dándome un beso.
Minutos después mi chofer me recogió, antes de salir de la casa de alias ambos nos besamos, Elias me dio un pequeño apretón con su mano en mi trasero y salí de su casa, me monte en el carro y fui a mi casa.
El resto de la tarde me pase masturbandome recordando el sexo con Elias.
En la noche mi padre me dijo que lo acompañara a una cena con unos inversionistas de su empresa, cuando llegó la hora me vestí formalmente con un traje y fui junto con mi padre al restaurante.
-Buenas noches les presento a mi hijo Camilo- dijo mi padre presentándome a todos los inversionistas de su empresa.
Mi corazón se paro al ver a Elias sentado en una de las cillas.
Una sonrisa vino de él hacia mi y yo respondí con una sonrisa para todos.
-Buenas noches- respondió y tome asiento.
Durante la cena me levanté al baño, detrás de mi venía Elias.
-Que péquelo es el mundo no?- dijo entrando al baño después de mi cerrando la puerta con seguro.
-Ya veo que si- dije dándole un apasionado beso, sus manos rodearon mi cintura y las mías e posicionaron sobre su pene.
-Quiero chuparlo- dije apresurado
-Es peligroso- dijo mirandome
-No importa- respondi desabrochando el cinturón y desabotonando su pantalón.
Saque de su bóxer su gran pene erecto y lo lleve a mi boca chupandolo.
-Me has tenido toda la cena recordando cuando te hice mío en cuatro penetrando tu pequeño ano rosado- decía Elias mientras me acariciaba mi pelo rubio y empujaba mi cabeza hacia su pene.
Ni Elias ni yo nos habíamos percatado la presencia de alguien en un cubículo dentro del baño.
Un hombre mayor y más alto que Elias que media 1.80, con una gran panza, con pelo rubio y de apariencia imponente.
-Que lindo pequeños tienes, puedo participar?- dijo con una voz gruesa que me dio un escalofrío por todo mi cuerpo
continuara….
Uuufff…. Menudo calentón me provocaste… Que delicia como escribes 🔥🔥 espero ansioso la próxima parte.
Uuff… que rico… Me encanta y me excita mucho como te trata tu sugar… Ojala tener uno así.
Que gran relato, es una delicia la forma que tienes de escribir. Estoy deseando saber mas de esta historia 🤤
Como sigue? Quiero mas…
Excelente relato… Ese final me dejo con la intriga y con todo el calentón… Espero que subas pronto la siguiente parte.
Muy buen relato… como sigue?
Como sigue?
Joder que rico!!! es un gusto correrse leyendo un relato así… Estoy deseoso por leer mas de esta caliente historia.
Gran relato… Me encanta como va trascurriendo esta historia.
Que rico relato, también necesito un suggar jajaj les dejo mi session, masturbarnos juntos puede ser increíble: 05a458f5a3357c452c8014df4661992d8e684a8599ce943d6e5fa3e04541b2f82b
Wow uuufff excelente