Mi tío borracho

Yo estaba en segundo de primaria cuando, conocí por primera vez la gran verga de mi tío el borracho de la familia..
Hola mi nombre es Mateo, de pequeño toda mi infancia viví con mi abuela paterna, ya que mis papas por trabajo viajaban demasiado, y al ser el único hijo decidieron que mi abuela sería la mejor opción para el cuidado mientras ellos no estaban.

La casa era muy grande, yo disfrutaba mucho vivir con ella ya que todo el tiempo podía estar en calzoncillos, y jugar en el gran patio que tenía, o cortar frutas en la huerta sin preocuparme de los demás, en la casa solo vivíamos mi abuela, mi tío y yo.

mi tío era un hombre moreno, de estatura media, fornido, ya que trabajaba en la construcción, con barba de candado, la cual lo hacía ver muy atractivo, cada noche llegaba ebrio después del trabajo, tenía dos años de divorciado por infiel, mi tía decidió dejarlo y no lo dejaba ver seguido a mi primo, el cual se parecía mucho a mi tío.

Todos los sábados mi abuela salia al mercado a hacer las compras y llevar la comida de la semana, ese día desperté más temprano de lo normal, y salí a la sala en calzoncillos a ver la caricaturas, mi tío se encontraba borracho y dormido en el sillón, con solo una truza color blanca, se le marcaban los huevotes y se le salía la cabeza de la verga por un lado ya que tenía tremenda ereccion, era la primera vez que veía semejante belleza ante mí , me acerqué y la acaricie un poco como si se tratara de un tesoro, mis ojos no podían parpadear, y mi boca se llenaba de saliva como si de una gran paleta se tratara, cada que la acariciaba más dura se ponía, un líquido transparente salía de la cabeza de esta gran verga, mis ganas de chuparla eran demasiadas en eso escucho

– te gusta-

yo asustado me levante, conteste que si, él me contestó

-no te asustes, tú también tienes una igual-

no sabia que decir y le pregunté qué era ese líquido,

-es miel, quieres probarla.

con miedo le conteste que si, me acerqué y me dice

-sácala para que la acaricies bien

al sacarla no cabía en mis manos era demasiado gruesa, media aproximadamente 18cm con mis dos manos pequeñas la acaricie, estaba llena de venas y muy peluda, tenía tremendo huevos, olía un poco a orines pero aún así me acerque a probar lo que salía, pase la lengua para saborear, intento que me la metiera en la boca más no cabía, ya que era muy gruesa y topaba con mis dientes, me pidió que moviera mis manos hacia arriba y hacia abajo y siguiera lamiendo, cuando de repente sentí como se inchaban más y se ponía más dura, me dijo que abriera la boca,  me empujó con fuerza hasta que entrara lo más posible y se vino, sentí cada palpitación y cada gota que caía en mi boca era algo realmente amargo y con un extraño sabor, él no podía dejar de restregar mi cara en su verga hasta que salió la última gota, cuando terminó solo me empujó, subió su calzon y se volvió a dormir, yo no sabía que había pasado. Me senté nuevamente en el sillón a ver caricaturas, estaba muy confundido pero quería volver a intentarlo.

mas tarde que mi abuela llego del mercado preparo el almuerzo, a lo cual me pidió que le avisara a mi tío para que comiera, yo con miedo llegue y lo desperté, el aún desorientado me pregunto qué hora eran, como si nada hubiera pasado, le dije que era la 1 de la tarde, me pidió que le pasara un pantalón de su cuarto, al entregárselo él estaba de pie aun con una ereccion yo no podía quitar la vista pues aún quería probar más , el solo sonrió y se sentó a comer.

En la noche salió como cada sábado de parranda, no sin antes decirme que teníamos algo pendiente por concluir, yo solo sonreí.