Mi tio el profesor hetero, decima parte, en el taller con Andres.

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por joe0497.
Porfin llego el Lunes de nuevo, era dia de clase y yo estaba muy feliz.
Habia sido un fin de semana muy divertido ya que disfrute de las vergas de Roberto y mi papa.
La nueva semana de clases traeria nuevas aventuras y por su puesto deliciosas cojidas.

Me levante muy temprano y despues de haber desayunado me dirigi al colegio.
El dia empecaria muy aburido y asi hasta llegar a mi clase favorita, de matematicas con mi delicioso tio Raul.
Al comenzar la clase se presento mi tio, tan guapo como siempre.
Su uniforme lo hacia ver aun mas guapo y esa hermosa sonrisa coqueta para con las chicas y secretamente conmigo me deritia.

Habia una chica llamada Geraldine en mi clase, era rubia, alta y muy linda.
Note que le ponia una atencion excepcional a mi tio.
Ella se le sonrojaba a todo momento, solicitaba su ayuda para los trabajos muy frecuentemente y se acomodaba el pelo coquetamente cuando mi tio estaba cerca.

Yo conocia a mi tio Raul perfectamente y sabia que a la primera oportunidad se cojeria a la chava.
El le seguia el juego durante toda la clase.
Note que la miraba mucho y cuando cruzaban miradas se sonreian.
Yo me senti un poco molesto ya que queria la atencion total de mi tio.
Porfin sono la chicharra, era la hora del almuerzo.

Al terminar la clase el le pidio a la chica que se quedara un momento.
Yo me retire del salon a esperar a que mi tio se quedara completamente solo.
Me sente cerca debajo de un arbol donde habia una mesa para picnic.

Despues de un momento vi a Geraldine salir del salon con una gran sonrisa.
Entonces yo me dirigi de nuevo al salon y al entrar dije a mi tio:

– No sabes cuantas ganas tengo de cojer contigo de nuevo.

– Ah si? Y cuantas, el me respondio.

– Muchas, mi culo esta que se moja de imaginar tu vergota dentro de mi.

Mi tio se sonrio y tomo sus libros del escritorio.
Yo me acerce a el y el me miro y me dijo:

– Lo siento, hoy no puedo voy a estar ocupado.

– No sera con la zorrita Geraldine?

– Pues si, carne fresca.
La invite a la sala de maestros esta tarde.

El tenia una sonrisa picara en el rostro.

– Y porque no me cojes a mi, no que te encantaba mi culo?

– Claro que si Marco, pero esta es la unica oportunidad que tengo para probar a Geraldine.
Ella se va al extranjero la proxima semana y no tendre otra oportunidad.

Me guiño un ojo y se retiro.
Yo estaba un poco enojado asi que decidi tomar cartas en el asunto.
Sabia que mi tio tendria clase en ese momento asi que decidi entretenerme en el momento mientras terminaba de dar clases.
Yo ya estaba muy caliente asi que fui a la sala de maestros.

Primero pregunte por el profesor Ivan quien estaba ocupado en una junta directiva y luego pregunte por el profesor Andres, quien estaba desocupado en ese momento.
Yo le pedi que me ‘ayudara con una tarea’ en privado.
Le di una sonrisa picara y me moje los labios.
Andres sabia perfectamente que era lo que yo buscaba, el se sonrio y asi que nos dirigimos a el taller de matematicas.
Era un salon no muy grande y lleno de libros y computadoras de mate.

Habian unos cuantos chicos alli pero el les ordeno que salieran, les mintio que me habia castigado y que ahora iba a limpiar el taller, ya que el era quien administraba el taller como profesor de matematicas.

Cuando nos quedamos solos, Andres cerro las puertas, las ventanas estaban cubiertas con cortinas oscuras y asi no nos podia ver nadie.

Yo me empece a desnudar completamente.
Andres se desabotono el uniforme azul y yo me acerce a ayudarlo con los pantalones.
Le desabroche el cinturon y le baje los pantalones.
Pude ver sus boxers negros ajustados.
El termino de de quitarse el uniforme y pude ver su hermoso cuerpo formado delante de mi.

– No sabes cuanto deseaba tu verga de nuevo Andres, me encanta.

– Si? Entonces comela toda que es tuya, disfrutala.

Yo tome su verga con mis dos manos, estaba muy dura y caliente, sentia como palpitaba, y entones yo me la meti en la boca.
Empece a sucionarla toda, tenia un sabor muy delicioso.
Un sabor a macho, como el olor de un hombre que habia trabajado todo el dia, me volvia loco.

Andres tomaba mi cabeza y metia su verga mas adentro de mi boca.
yo la chupaba con muchas ganas, la tragaba hasta el fondo de mi garganta.
Su vello pubico me rozaba la cara y olia muy rico.

– Aaaaaaahhhhhh Marco, no sabes como extrañe tu mamada, mi mujer me la mamo este fin de semana y no lo hace tan rico como tu mmmmmmmmm.

Yo segui la mamada, su verga llenaba mi boca y entraba y salia muy rapidamente.
Yo lo tome de las piernas y las acariciaba, podia sentir los cuantos pelos que tenia, y como se movian con las fuertes embestidas que me daba Andres.

Yo logre que me soltara la cabeza y saque su verga de mi boca.
Fui directamente a sus bolas y las sucione una por una.

– Mmmmm Andres que rica leche tienes dentro de estas bolotas, quiero que me des toda, llename el culo con ella.

– Aaaahhhh si te voy a inundar el culo con mi leche, pero mama mi verga un poco mas con esa delicosa bocita de zorra.

Inmediatamente yo le lami la cabeza de su verga.
Estaba bien hinchada y roja.
Lo la lamia y la disfrutaba con mi lengua.
Lamia su glande y sucionaba su precum y me la tragaba toda.
Me meti su verga en la boca nuevamente y la meti hasta el fondo.
Andres gemia muy fuerte, con su voz varonil, me exitacion estaba hasta el tope.

Me puse de pie y empece a besar el cuerpo de Andres.
Le mordi los pezones y recoria con mi lengua todo su abdomen.
Andres tenia un ombigo que me parecia muy sexy y la lami con mi lengia.
Su cuerpo tenia un olor sensacional, una mezcla de perfume y el olor de trabajo, me llenaba toda la nariz.
Yo lo segui lamiendo y fui a sus fuertes brazos y finalmente le di un beso muy apasionado.

De pronto Andres me toma del suelo y me lleva a una mesa.
El me deja y me dice que me ponga de perrito.
Andres se fue detras de mi y partio mis nalgas.
El obserbava mi anito y le escupio.

– No creo que tenga que peparar tu culo por mucho tiempo, la ultima vez mi verga entro sin problema.

– Si Andres, es la talla perfecta para acomodar vergotas como la tuya.

Esto lo calento mucho y empeco a comerme el culo.
Su lengua recoria todo mi ano y yo sentia un placer inmenso.
Una electricidad recoria todo mi cuerpo y empece a gemir muy fuerte.
Andres era un maestro dotado en lamer culos.

– Que rico me el culo Andres, ahhhhhhhhh

– Jajaja me encanta comer culos y coñitos, y la tuya esta bien jugosa.
Mira nadamas come de dura me dejas la verga.

Yo disfrutaba de la rica lengua de andres, el me metia un poco de su lengua y sucionaba mi culo muy rico.
Andres se aparto de mi culo y le deramo un poco de su saliva.
Estaba preparandome el culo para su rica verga.

– Ahora si zorrita, te voy a dar tu recompensa por esa rica mamada que me diste.

– Andres dame tu vergota, cojeme bien duro y rico, llename el culo con tu troncote.

Andres empeco a meter su pola en mi culo.
Mi culo se abria con el paso de su verga.
La cabeza entro y Andres dio un gemido de placer.
El empujo mas su verga y lentamente la metia a su aposento.
Yo estaba en la gloria, con lo mucho que me gustaba la verga, era un placer inmenso.
Sentia mi culo estiraro y lleno.
Su verga se sentia caliente y pulsaba de vez en cuando.
Las paredes de mi recto alojaban su verga perfectamente.

Andres empeco a embestirme lentamente.
Y gemia muy rico, yo gemia como niña para excitarlo aun mas.
Podia sentir sus manos tomando por la cadera.
El calor que su cuerpo transmitia era intenso, y mas sabiendo que estabamos en la escuela y en nustra relacion, lo prohibido era lo mas rico.

Yo ya tenia ganas de sentir toda la potencia que sabia que Andres tenia asi que le dije:

– Cojeme rico papi, dame duro con tu vergota, dame tu poder de macho ahhhhh
Andres se excito mas con esto y empeco a embestir mas fuerte.
Sus gemidos eran mas fuertes.
El me apretaba las caderas y me daba su verga con toda su potencia.
Sus pelotas que colgaban me pegaban las nalgas, nuestra cojida producia un sonido muy fuerte, de dos cuerpos chocando muy fuertemente.

Yo ya sentia la habitacion muy caliente y Andres disfrutaba mucho de la cojida, notaba que se mordia los labios.

– Aaaahhh que rico culito, apretadito y mojadito como me gusta, eres unica bebe.

– Si papi este culito es para que lo tengas cuando quieras.

Andres me tomo y se sento en una silla que quedaba cerca.
Yo tenia su verga aun dentro de mi.
Yo empece a montarselo mientras el me mordia la espalda y me acariciaba todo el cuerpo.
Yo envolvi uno de mis brazos alrededor de su cuello y brincaba su polla con fuerza y mucho placer.

Andres lo gozaba mucho.
Gemia muy fuerte y me miraba con una mirada seria y mucho placer y deseo

– Que rico me das papi, no cabe duda que las nenas se mueren por este pollon, la tienes enorme.

– Pues claro, por algo tus tios y yo somos los maestros mas deseados por las nenas, aunque solo Raul se las coja como yo mmmmmmmmm aaaaahhhhh

Yo saltaba contra su verga muy fuerte.
Sentia como su rica barra entraba y salia de mi culo, cada centimetro se sentia tan rico yo apretaba mi culo, y el se retorcia de placer, ceraba los ojos y su cuerpo estremecia con gran exitacion.
Yo definitivamente ya era un adicto a la verga, y mas de hombres casados….
Que rico!

Su cuerpo estaba muy caliente, me encantaba su cabello ondulado asi que recoria mis manos sobre el.
Su respiracion estaba muy acelerada y aunque no sudaba mucho como m papa y tios, su rostro tenia unas cuantas gotas de sudor.
Nuedtra cojida era tan deliciosa que habia oerdido la nocion del tiempo, solo deseaba que ese macho me rompiera el culo bien rico.

Me di cuenta de el reloj que estaba en la pared que solo faltaban unos cuantos minutos para wue se terminara la hora del almuerzo.

Yo empece a brincar en la verga de Andres aun mas rapido para que se viniera pronto ya que el taller se ocuparia en la proxima sesion.

– Aaaahhhh papi dame tu leche dentro mi culo, llenamelo con tu rica crema.

Andres me beso mientras tomaba mi verga y me la masturbaba, yo estaba bien excitado y en un minuto me vine bien rico.
Andres al ver esto se excito y empeco a gemir como bestia.

Yo gemia junto con el y le apretaba la polla con el culo para que sintiera mas rico.
Andres estaba perdido en el placer y de pronto entre gemidos grito:

– Me vengo aaaaaaaaahhhhhhh, ten tu leche zorrita aaaaaaaahhhhhhh carajoooooo

Su verga se hincho mas dentro mi culo y se vino dentro de mi, pude sentir su leche caliente dentro de mi.
Me dio como siete chorros de su delicosa leche, el gemia muy fuerte y solo me miraba.
Yo me retorcia de gusto, ese hombre me habia hecho su putita una vez mas y de la manera mas rica posible.

Descansamos un pequeño instante en la silla y luego me separe de su verga.
Sentia cono salia su rica leche de mi culo, era una delicia.

Andres y yo nos vestimos de nuevo rapidamente y limpiamos todo rapidament para que no hubiera evidencia de nuestra felacion.

Yo me despedi de el y me dirigi a mi siguiente clase, todavia tenia algo de leche dentro mi culo y me encantaba saber que era la de Andres.
Ahora era turno de tener a Raul solo para mi y alejar a la perra de Geraldine.
Al terminar la clase de paso me encontre a la profesora Torres, quien me dijo que a su esposo Roberto le habia parecido un buen chico, y que podia ir a su casa o bufete a recibir ayuda en cualquier tema que quisiera.
De Roberto claro solo me interesaba recibir ayuda en el tema de Educacion Sexual.

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