Mi tío Jaime me hace suyo desde los 11 a los 15 años, me come el culo como nadie
Después de la primera cogida luego de varios intentos, y la primera mamada, que le encantó, me hace suyo cada que puede.
Regresé luego de un rato sin escribir la continuación de esta historia, que vuelvo a decir, es 100% real, gracias a los que me escriben por telegram. Después de la primera cogida que me dio mi Tío Jaime, luego de varios intentos, y la primera mamada, que le encantó, me hace suyo cada que puede.
En ese punto ya habíamos entendido que ya era una cosa sin presiones, sin miedo a que yo dijera algo, estaba claro que no iba a acusarlo de nada, y que él tenía carta libre para hacerme lo que quisiera.
Debo decir que cuando no estábamos juntos en realidad convivíamos poco, él a lo suyo, y yo jugando con mis primos o amigos, no tocábamos el tema, nunca lo hablamos como tal. Yo entendía que el juego era, estar disponible y dispuesto cada que él quisiera, pues no propicié yo nada.
Esas vacaciones donde se dio la primera cogida y la mamada, fue épica, porque de verdad comprobé que yo la mamaba rico, me encantaba sentir su verga en mi boca, olía delicioso, sudada sí, pero no desagradable, era morena, grande, unos 18 centímetros. A veces me decía «ven, ya me la lavé, mámamela».
En su casa había un baño dentro de la casa, uno por fuera en un cuarto de lavado, donde normalmente sólo él entraba, porque a los demás nos daba miedo. Y había uno más en el fondo, en un intento de cuartos que habían construido para rentar, pero que nunca fueron terminados.
Mi tía tenía un negocio y solía salir a comprar algunas tardes lo que necesitaba, él no la acompañaba, y no le gustaba a ella llevarse a mis primos, porque le quitaban tiempo. En esos momentos aprovechaba para sonsacarme. Todas las tardes salíamos a jugar mis primos y yo, entonces ellos siempre andaban en la calle.
Una de esas tardes mi tío me hizo señas, mis primos ni en cuenta en realidad, dije voy al baño rápido. Y me llamó al baño de atrás. Me dijo que se la mamara, yo me hinqué como solía hacerlo, y se sacaba su verga a media erección. Sentía tan rico cómo crecía toda dentro de mi boca, como respiraba agitadamente del placer que sentía, pero que contenía para que no se escuchara.
La rutina era sencilla, yo se la mamaba y luego me volteaba para que me ensartara. Yo sabía que no tenía forma de decir que no, aunque sí preguntaba «¿Quieres que te la meta?», yo siempre dije que sí. No pensaba en cosas que pienso ahora, como que si está limpio al cien o si tendré algún accidente.
Escupía un poco en su dedo y me lo ponía en el culo, y luego sobres, normalmente era sin decir «agua va», y uff, sentir cómo se abría mi culo es una sensación que aún ahora disfruto. Duele, pero se siente rico. Metía y sacaba, siempre tenía que bajarse un poco porque él era muy alto, como 1.80, yo apenas llegaba yo creo al 1.55 a mis 11 años.
Así pasó varias veces, contar todas puede ser aburrido. En otra ocasión había reunión en su casa, estaban dos de sus hermanos, mi papá, mis primos, mi tía, amistades. Todos estaban tomando cerveza, los niños pues entrábamos y salíamos, la verdad es que en ese tipo de reuniones, los adultos se olvidaban un poco de nosotros.
Yo entré al cuarto, como solía hacerlo a recostarme y poner el ventilador. Esa vez entró mi tío Jaime, ya estaba «entonado», como decimos en México cuando alguien está bebiendo, pero no está borracho, pero tampoco sobrio. Comenzó a acariciarme las piernas como solía hacerlo, esta vez me dijo al oído «quiero metértela», y me besó el cuello y manoseó como no lo había hecho antes.
Le dije que cómo le hacíamos, si había mucha gente. Me dijo «vete al baño de hasta atrás, allá no va nadie», la verdad me daba miedo, luego había ratas y les tengo pavor, pero como les dije antes, no podía decir que no. Como pude hice como que salía de la casa, pero en realidad me fui por un callejón hasta el fondo del patio.
Lo esperé como unos 5 minutos, llegó, su aliento alcohólico me excitaba mucho, su respiración también. Esa vez si le olía la verga a sudor, pero me encantaba su olor. Se la chupé como nunca, esa vez sí me la comía toda, a mi ritmo, esa vez no me apresuró, y la realidad es que no alcanzó a metérmela porque se vino antes de lo excitado que estaba.
Nadie notó nada, yo me crucé la barda y me salí sin que se dieran cuenta, solo por si acaso me veían. Así pasaron varias vacaciones, hasta que cumplí 15, hubo una última vez que la recuerdo perfecto. Ya sucedía menos veces, tengo claro que era porque yo ya no era un niño, a los 15 ya hay pelos en todos lados, y aunque no lo dije, estaba un poco claro que yo era gay, ya no era una cosa de curiosidad, ya me gustaba la verga.
Sin embargo, en ese periodo se notaba que no estaba bien con mi tía, ya no los veíamos darse cariños, y supongo que en esa última noche él tenía ganas. Mi papá estaba tomando con ellos, yo me fui a dormir. Mi tío entró a acostarse, dijo que ya estaba cansado, mi tía y mi papá siguieron bebiendo y conversando.
Yo deseaba que me lo pidiera y así fue, comenzó a agarrarme el culo, me metió el dedo. Yo le dije «méteme tu pito», y él se hincó (yo dormía en el piso) y se lo sacó. Yo me puse a chupárselo como siempre, esta vez sí gemía más fuerte. Me volteó y me la metió, a los dos nos valía que afuera estuvieran mi papá y mi tía. De pronto se escucharon pasos…como pudo se subió el short y se acostó. Yo me puse una sábana, no alcancé a ponerme el mío.
Era mi tía que entró por un dinero, no se dio cuenta, los dos nos hicimos los dormidos, era normal que no sospechara porque mis primos estaban en el cuarto también, pero bien dormidos. Salió mi tía, y mi tío Jaime siguió. La verga la tenía súper lubricada y ya solo me la metió para venirse. Así me dormí, con los mecos en el culo. Y no, no sabía que esa iba a ser la última.
Después de eso, yo ya estaba en la prepa, ya no iba tan seguido al pueblo, porque las vacaciones normales, no eran las que yo tenía, simplemente dejó de suceder. Nunca volvió a pasar, y la verdad es que a nivel familiar hubo algunos distanciamientos y así quedó, como una de mis experiencias más placenteras, pero ¿qué creen?, que después de eso la vida me pondría a otro primo…con quien me tocó ser el maestro…esperen esa historia.
Pueden escribirme a telegram: @York85n
que ganas de leer esa historia por faovr
Qué ricas experiencias.
Yo me inicio a los 12 años ahora tengo 50 mil mamá 68 ella me inicio y empiezo a tocar y enseñar. Ella tenía problemas con el alcohol y se acuesta borrosa
Así empieza todo por primera vez bote semen
Practicamos la zoo con perro y caballos somos como pareja
Yo soltero y una hija de 19
Yo me inicio a los 12 años ahora tengo 50 mil mamá 68 ella me inicio y empiezo a tocar y enseñar. Ella tenía problemas con el alcohol y se acuesta borrosa
Así empieza todo por primera vez bote semen
Practicamos la zoo con perro y caballos somos como pareja
Yo soltero y una hija de 19 igual culiabamos al lado de ella 8año es muy difícil salir de eso es una calentura única que hay que vivirla para sentir