Mi tío me coge en su patio

El día en que mi tío me cogió en la madrugada después de unos tragos .
Les contaré la historia de cuando mi tío Marco me cogió después de unos tragos en su casa.

Mi tío Marco siempre fue unido a mi, una persona divertida, gracioso y le gustaba mucho beber en cualquier ocasión.

Un día salimos con el su esposa y algunos primos a un karaoke, la noche paso de lo mejor y fue muy divertido, sin embargo, El alcohol me hace sentir caliente y excitado, entonces cuando se acabó la noche yo estaba caliente y con ganas de seguir tomando. Mis primos se fueron a sus casas y mi tío me preguntó si quería tomarme unos tragos en la suya, su esposa, mi tía, no estaba de acuerdo pero mi tío Marco me dijo que vayamos de todas formas, y yo, insolente, acepté.

Tengo que decirles que en el fondo acepté porque quería seguir tomando y porque mi tío me daba mucho morbo. El es hombre de mediana edad, unos 50 años, bajito y un poco gordo pero no tanto, piernas grandes, apuesto y muy masculino.

Cuando llegamos a la casa, mi tía se quedó con nosotros un tiempo más, ella también se bebió unos tragos y después nos dejó solos porque dijo que se iba a dormir, me invitó a quedarme a dormir en la casa en la habitación de huéspedes que tenían.

Me quedé solo con mi tío y hablamos de todo un poco, el ya estaba muy ebrio y me preguntó sobre mi homosexualidad (mi familia entera sabía que yo era gay) hablamos de eso como cualquier conversación, hasta que me preguntó si a mí me daban por detrás o yo daba. Me quedé frío pero la pregunta me excitó, sentía que mi verga se ponía ligeramente dura y le dije:

– me gusta ambos, depende del hombre con quién esté

– y te duele cuando te dan por atrás. Me preguntó el.

Yo no sabía cómo responderle sin sonar vulgar pero le dije:

– no te puedo decir eso, es algo privado pero si me gusta.

Mi tío se rió, se levantó y se fue al baño. Yo me quedé solo y me tope mi verga y estaba dura debajo de los pantalones, comencé a frotar el bulto con mi mano por la excitación. Hasta que salió mi tío del baño y tomo una botella más. Cuando se sentó me dijo:

– estoy con unas ganas de hacerle el amor a tu tía.

Me quedé frío, y me calenté muchísimo más, no supe que responder ya que estábamos atravesando una línea que nunca antes habíamos llegado. No respondí nada, a lo que el me dice:

– solo te quiero decir hijo que te quiero muchísimo y no voy a dejar que nadie te haga nada, si?

Marco se sento alado mío y me abrazo fuerte, pegó mi cabeza a su pecho y yo tambien lo abracé, pero sentí que el abrazo estaba durando más tiempo del normal. Tome la iniciativa y comencé a acariciar su espalda ya que estábamos abrazados. El hizo lo mismo y sentí que el lo hacía por la situación que estábamos de sentimentalismo. Cuando nos separamos regresé a ver si bulto de reojo (que siempre lo tiene voluminoso) y estaba más grande de lo normal. Mi tío Marco tenía una erección.

Al estar separados el me miraba a los ojos pero no decía nada y yo igual. Hubo un silencio de algunos segundos y con su mano izquierda se tocó su bulto. Y me dijo ya en un tono muy ebrio:

– mijo lindo me puede dar un besito, moviendo su mejilla para que le dé un beso (mi tío usualmente hacia esto)

Le di un beso, pero se lo di muy lentamente, sentía que lo que hacía era prohibido y mi verga estaba durísima. Puse mi mano derecha en su pecho y el me dijo:

– deme otro mijo. Y con sus manos abrió dos botones de su camisa.

Volví a poner mi mano en su pecho y esta vez toque su piel ya que se abrió la camisa. Me estaba sintiendo muy excitado y me asusté en un momento a lo que le dije:

– salgamos a fumar un cigarrillo

– vamos mijo. Me respondió

Salimos a su patio a fumar y le dije que tenía ganas de orinar y me dijo que orine en las plantas del jardín, fui en dirección a las plantas y me saque la verga para orinar, mi verga estaba semierecta y el chorro salía en varias direcciones. Mi tío se acercó porque decía que también quería orinar, saco su verga y la tenía dura como un palo. No orinaba nada, lo que me hizo pensar que solo quería sacarse la verga cerca mío. Mi verga empezó a ponerse dura de nuevo al punto que estaba parada hacia arriba en su totalidad. Mi tío vio y me dijo:

– estamos con las vergas paradas mijo

Mi respiración fue más fuerte y me puse nervioso, ya no tenía nada que orinar y ambos estábamos uno alado del otro con las vergas al aire y paradas. Comencé a mover mis manos como cuando te masturbas pero muy muy lento sin decir ninguna palabra. El me siguió e hizo lo mismo. Entonces entendí que ya no había marcha atrás, cruzamos la línea de la familia y entramos a algo desconocido, excitante y prohibido.

El comenzó a pajearse alado mío sin descaro, cerró los ojos y gemia muy bajito. Yo igual me comencé a pajear y a mirarlo y me invadió el morbo. Me acerqué a él y con mi mano derecha le apreté el pezón derecho. El abrió los ojos e hizo un gemido de dolor y me miró a los ojos con cara de enojado, se detuvo y me dijo en tono de orden:

– mamamé la verga

Me tomo la cabeza con su mano y me hizo bajar al nivel de su verga parada. Le desabroché el pantalón y se los baje junto con su boxer hasta las rodillas. Y comencé a mamarle. El gemia y decía:

– que rico mijo, métela toda a la boca. Mientras me presionaba con su mano a meter toda su verga en mi boca.

Tuve unas arcadas pero no pare y con mi mano izquierda me estaba pajeando mientras le mamaba la verga a mi tío. Con sus dos manos en mi nuca comenzó a follarme la boca. Nunca antes había visto a mi tío en esa actitud, el morbo era demasiado y no podía creer aún lo que estaba haciendo o siquiera pensar en las consecuencias de eso, solo pensaba en seguir mandándole la verga a mi tío.

Después de unos minutos me levanto y me dijo:

– te voy a hacer el amor, date la vuelta.

Me obligó a darme la vuelta y me bajo los pantalones con mis calzoncillos hasta la rodilla, Mi verga estaba al aire en el patio de la casa de mis tíos, estaba erecto a mil. Mi tío escupió en sus dedos y me los paso por mi ano, mojándome todo el culo. Se escupió en su verga erecta y colocó la punta del pene en mi culo, se frotaba en la raya de mi culo y me llenaba de su precum.

Puso su verga en mi ano y empezó a meterla lento, el gemía y decía:

– que rico culo mijo, que rico. Mientras la metía lentamente.

Sentía que mi culo no estaba tan abierto así que con mis manos me abrí las nalgas y eso lo volvió loco.

– ábrete ese culo, que rico. Me dijo y me la metió toda de un solo.

Yo grite un gemido de dolor y el me tapo la boca con su mano y me dijo:

– no grites, te voy a hacer el amor mijo, siente mi verga adentro tuyo, te gusta mijo?

Asentí con la cabeza y comenzó a meterla y sacarla lento, me solto la boca y yo solo comencé a gemir muy bajo con cada metida que me daba.

Con sus dos manos me agarró la cadera y comenzó a dame embestidas más rápidas fuertes. El gemia y decía:

– eso, eso que rico carajo

Yo sentia esa verga dura entrar y salir de mi culo, el morbo me invadía y ni pensaba en mi tía que estaba arriba, no me importaba, solo quería que mi tío Marco me siga dando verga en el patio de su casa frente a las plantas de su jardín, ambos con los pantalones a las rodillas y yo con su verga tan dura dentro mío.

Mi tío Marco me apretó con sus dedos y comenzó a darme con violencia. Sus bolas golpeaban con mi culo y sonaba delicioso. Me estaba cogiéndo con tanta fuerza que me daba ganas de gritar, imagino que mi tío no había cogido así en mucho tiempo. Me insultaba mientras me daba verga y gemia.

Después de estarme dando duro unos 3 o 5 minutos saco su verga con fuerza de mi y me dolió muchísimo. Pero estaba tan excitado que le tome la verga con mi mano y le pedí que no la sacará que me la siga metiendo.

– ponte en cuatro. Me dijo

Me arrodille en el césped y me quite por completo los pantalones, estaba con el culo y mi verga al aire, en la noche, en el patio de mis tíos, con el morbo a mil y con ganas de recibir verga de mi tío. Nunca pensé tan solo que hubiera pasado si me tía bajaba y nos veía así, su esposo dándole verga a su sobrino.

Mi tío volvió a escupir en su pene y está vez la metió sin dudar. Con sus manos me tenía de la cintura y volvió a darme con violencia. Me estaba rompiendo el culo, el gemia muchísimo y yo estaba sumiso ante él.

Me estuvo dando así unos 5 o 7 o no se cuántos minutos hasta cuándo me dio una embestida potente y se quedó ahí, tenía toda su verga erecta dentro mío. Y me dijo:

– te voy a embarazar mijo.

Saco toda su verga y me la metió toda de nueva y así algunas veces hasta que comenzó a darme otra vez fuerte con dureza. Mi tío Marco de retorcía del placer. Unos minutos después su respiración aumento, la velocidad de sus embestidas también y dio un grito mientras me la metió una vez más por completo, sabía que se acababa de venir adentro de mi culo. Tenía el semen de mi tío adentro mío. Sacaba y metía su verga lentamente mientras se retorcía y tenía un orgasmo. Luego paró, aún me tenía en cuatro y su verga aún estaba dentro mío.

Pasaron unos segundos y me saco su verga, se levantó y yo me di la vuelta sentándome en el césped, aún Tena mi verga parada, mi tío me vio con cara de enojo y me dijo:

– sacate la leche tu también.

Me comencé a pajear para venirme mientras mi tío de subía los pantalones y se abotonaba el pantalón, esa imagen me daba tanto morbo que no pasaron muchos segundos que termine lanzando chorros de semen en mi camiseta.

Cuando me vine, fue como si la realidad volviera a mi y me di cuenta lo que acabamos de hacer. Ahora sí me sentía desnudo tirado en el césped de mi tío y con mi culo lleno de su semen. Tome mis pantalones y me los puse rápidamente. Mi tío me dijo:

– ya vamos a dormir

Me levante y sentía mi culo detonado, palpitando por la cogida que había tenido y entré junto con el a la casa. No decíamos una sola palabra y me dijo duerme en el cuarto de huéspedes y el se encerró en el suyo donde mi tía dormía. Yo entré a la habitación de huéspedes y cuando me acosté me volví a pajear acordandome lo que acababa de pasar.

A la mañana siguiente me levanté con un fuerte de dolor de cabeza y resaca, baje y mi tía había hecho el desayuno. Me dijo que mi tío aún está a durmiendo, me sentía mal por ver lo bien que me trataba y ni se imaginaba que su esposo me había cogido con violencia en la noche. Desayuné y me fui a mi casa, no volví a hablar con mi tío hasta una reunión familiar en donde ambos hicimos como si nunca hubiera pasado nada. Si embargo con el cogimos una vez más pero eso será otra historia.